Comparto con ustedes una historia que me contó otra persona, aunque me dio tan sólo dos pinceladas a mí me pareció realmente morbosa, se trata de un primo y una prima de trece años..
Cuando me desperté atado a una silla, miré alrededor y reconocí el lugar. Era el cuarto de Clara, a donde había acudido para hacer un trabajo de clase en grupo con ella y con Yéssica..