El conejito blanco (parte 3) (7) y (18)
Cuando entré al departamento de Clarisa oí risas en su cuarto y fuí a ver, al abrír la puerta de la habitación de mi conejito lo ví ahí en la cáma tirándose al hermanito de Karen.
Un joven de poco más de dos décadas de vida, casi un reprimido sexual, tuve unas pocas experiencias sexuales de pequeño y crecí para ser un morboso secreto. Si me conoces en persona tal vez ni se te ocurra que escribo historias aquí, soy un alumno estrella, Buen Amigo, bonachón, parezco santurrón, y rara vez digo maldiciones si no es una charla con amigos. sin embargo soy un fan de los niños, bi de closet, fumador de hierba y lector del maestro "Marqués de Sade"
No le digan a nadie shhh.
Cuando entré al departamento de Clarisa oí risas en su cuarto y fuí a ver, al abrír la puerta de la habitación de mi conejito lo ví ahí en la cáma tirándose al hermanito de Karen.
Al mirar asia su lectura noté que sólo tenía el gran libro de aritmética como fachada, lo que en realidad leía era un pequeño ejemplar de «filosofía de tocador» un libro bastante erótico..
«¿Que es lo que tiene planeado hoy señor lobo?» Me quedé perplejo, no esperaba que un niño fuera así de atrevido..
vi a mi nuevo vecinito un niño de 7 años, era un albino, su piel blanca como la nieve, ojos rojisos como un par de cervezas, su cabello blanco y rizado, apesar del aspecto de sus padres el pequeño tenía un aspecto bastante limpio..
Está historia ocurrió cuando yo tenía 7 años y visitaba la granja de mi abuela. Con mi abuela vivían algunos tíos y primos, en ese tiempo mi tío tenía 18 años y su amigo 19..