Hay días que encuentras lo que buscas.
Dios, cuando lo vi el estómago se me estremeció, era como un revoloteo de mariposas que tenía por todo el abdomen, los huevos me hacían cosquillas y hasta el culito me palpitaba..
Me gusta el sexo, he mantenido relaciones tanto con hombres como con mujeres, aunque soy versatil, me gusta más el sexo gay y ser pasivo, vamos que me gusta que otros lleven la iniciativa. Desde joven me acostumbre a dejarme follar por viejos y maduros, mis lugares favoritos son los aseos públicos y lugares donde poder realizar cruising. Empecé a escribir relatos sobre mis aventuras sexuales, primero lo hice bajo el seudóninmo de, Chichos91 y chicho91 y luego como, danisampedro91.
Dios, cuando lo vi el estómago se me estremeció, era como un revoloteo de mariposas que tenía por todo el abdomen, los huevos me hacían cosquillas y hasta el culito me palpitaba..
¿Te gusta? Me preguntaba acariciando mis pelotas y abdomen con sus manos, haciendo que me fuese calentando y animando. Contesté que sí, moviendo la cabeza en señal afirmativa, mientras miraba con lascivia aquel órgano sexual que acariciaba con mi mano. Iba descapullando aquella verga, viendo c.
todas aquellas personas no me quitaban la vista de encima, y como veían como aquel milico me agarraba por mis partes, hablándome de aquella manera. Todos estaban pendientes de mi reacción, viendo que yo callaba y no decía nada, solo veían mi enrojecimiento, y como mi paquete empezaba a reaccionar .
Aquella noche, al estar durmiendo como de costumbre, desperté al notar como mi tío había metido su mano por dentro de mi slip, acariciaba mi culo e iba bajándome muy lentamente el mismo..
Al principio quedé algo asustado y sin saber que hacer. No sabía donde meterme, así que quedé frente a los lavabos, mirando como entraba y cerraba la puerta de salida. Estaba paralizado mirando para él, viendo como entraba y después de cerrar la puerta, se acercaba a mí..
¡Dios! Apenas me cabía en la boca, eso que yo tenía unas buenas tragaderas. Abría la boca todo lo que podía, pero no era capaz de chuparle más que la cabeza de esta. .
Dios que morbo me dio ver aquello. Si ya iba caliente y excitado, el ver cómo le entraba la verga por el culo al chaval aquel, hizo que mi polla se pusiera tiesa al momento, recorriéndome por todo el cuerpo una sensación extraña de placer, excitándome aun más de lo que ya estaba..
En este relato, cuento la vez que tuve sexo por primera vez con otro hombre. Yo siempre había tenido sexo con mujeres y nunca había tenido en mente tenerlo con hombres. .
Me sujeté a su cabeza enredando mis manos sobre su pelo, mientras quedaba mirando exhorto como le colgaba bamboleándose, aquella enorme pija, de la cual colgaban 2 enormes cojones al viejo y perverso de nuestro vecino tino. Dios, como podía entrar aquella cosa por el agujero de nuestro culo. .
Dios que hijo de puta, el muy cabrón solo llevaba puesta aquella ridícula bata, y por encima había dejado que se abriera, mostrándose la larga polla que tenía. Se le veía enorme, y eso que se veía flácida. Yo no podía quitar la vista de aquella verga, ¡ufff! Aquella visión me estaba empezando .