DESCUBRIR EL EXCITANTE CUERPO DE MI MADRE ME ENLOQUECIO
ella continuo hablando, y estando al alcance mi mano sus hermosas piernas, no lo pensé dos veces y mis deseos me impulsaron a acariciar su muslo, cuando ella se dio cuenta del roce de mi mano en su muslo me dijo… No te imaginas cuantos deseos reprimi.
