No soy como la mami, papi – III.-
—¡Ay, Mauricio! … estaba tan caliente que no quería que su coño se despegara del mío … acomodé nuestras tetas y la abracé muy estrecha para que no se separaran nuestros chochos.
Este autor aún no ha escrito su biografía.
But we are proud to say that Juan Alberto contributed 346 entries already.
—¡Ay, Mauricio! … estaba tan caliente que no quería que su coño se despegara del mío … acomodé nuestras tetas y la abracé muy estrecha para que no se separaran nuestros chochos.
—¡No te detengas, papi! … ¡Fóllame! … ¡Fóllame fuerte y córrete dentro de mí! ….
Cuando terminó. Se levantó, pero casi no podía caminar; su coño estaba obscenamente abierto, hinchado y le dolía, más que dolor era un ardor caliente, todavía salían chorros de semen de su coño. .
—¡Oye, papi! … ¿De verdad que harías conmigo todo lo que no has podido hacer con mamá? ….
—¡Uhmmmmm! … Sí este era tu regalo navideño para mí … sin duda es el mejor regalo que haya tenido en mi vida … Te quiero mucho chico, ¿lo sabes? ….
—¡Ven, Andrés! … ¡Tómame! … ¡Dame tu polla! ….
—¡Oh, mira! … ¡Me dijo que sí! … ¡Me dijo que sí! ….
—Acomódate, tesoro … ahora es mi turno … déjame gozar a mi … quiero limpiarte el culo y la panocha … no debo dejar rastros de ese maldito que acaba de follarte ….
—¿Y todavía follan con otras personas? … ¿Cómo es eso? … ¿Cuándo? ….
—¡Santo cielos, cariño! … son años que no pruebo un delicioso agujerito como esos que tienes tú … es lo que más deseo, nenita ….