Disfrutando a un putito y a su mamá
Quién diría que me podría atraer el hijo de mi cacera.
Mi historia comienza hace un año que me fui a vivir solo, me llamo David y tengo 23 años, me acabo de recibir de la universidad como enfermero, se que podría ser una carrera más común entre mujeres pero eso fue ventaja, solo habíamos 5 hombres en mi salón de 40 así que había para escoger, total, decidí irme a vivir solo pues quería expandir mis horizontes y no depender más de mis padres, me fui a vivir a una pequeña vecindad cerca del hospital, al cual podia irme caminando así no gastaría, la encargada era una señora de 44 años, la señora Sara, era morena, cabello castaño largo u lacio, siempre lo llevaba con una cola, era rellenita pero tenía algo sensual en su caminar, tenía unas tetas de campeonato y un culote, supongo que por su peso, era madre soltera de un muchacho de 15 años que iba en preparatoria.
A las semanas de mudarme estaba en mi servicio de urgencias cuando llegó un paciente, masculino de 15 años con objeto extraño en el recto, corrí la cortina y vi a la señora Sara y a su hijo
David: Señora Sara, que paso?
Sara: fue un accidente, verdad Adrián?
Adrián: si mamá, un accidente
Era obvio que el hijo de Sara era gay, era delgado, cuerpo estético, su cara de veía muy femenina, le ayude al doctor a extraer el cuerpo extraño, era un pepino cubierto con un condón, era claro que había estado masturbándose y metiéndose el pepino en el culo, una ves fuera, tomaron sus cosas y se retiraron, Sara se veía avergonzada y molesta.
A la mañana siguiente Sara fue a hacer unos pagos de la vecindad, yo estaba en el techo de mi departamento acomodando la antena para que se viera la tele, vi que en el patio de servicio de al lado ( que era donde vivía Sara) estaba su hijo, cual es mi sorpresa al verlo vestido de mujer con peluca y tacones, lo vi metiéndose de nuevo algo en el culo, hasta ese momento solo me habían atraído las mujeres pero por alguna razón este muchachito me llamaba la atención, me quedé viéndolo y empecé a sobarme la verga, cuando volteo y me vio, lo vi meterse rápido a la casa, una ves arreglada la antena baje a verificar que la tele se viera, en eso tocaron la puerta, salí y solo vi una nota debajo de la puerta, supuestamente era una nota de Sara que decía que fuera a su depa, que había dejado un regalo para mi por no decir nada de su hijo
Entre al depa y unas manos me taparon los ojos
Adrián: adivina quién soy?
Le quite las manos y voltee, lo vi vestido aún de mujer
Adrián: quería darte las gracias de no decir nada, se que a mí mamá le avergüenza que sea así
Se agachó, bajo mi short, saco mi verga y me empezó a dar una mamada, me quedé pasmado, nunca me había dado una mamada un hombre y menos menor de edad, pero lo hacía tan bien que en ese momento no me importo, sujetaba su cabeza, aún traía la peluca y empecé a embestir su boca, el se atragantaba y yo sentía mucho placer, siguió mamando hasta que me vine en su boca, el se lo comió todo y se levanto
Adrián: espero te gustara ni agradecimiento
Yo sería muy caliente, lo vi darse vuelta y un demonio se apoderó de mi, un demonio de lujuria
Lo tome del cuello y lo puse contra el sillón
David: a dónde vas putito, aún no acabo contigo, quieres ser mujer? Pues ahora serás mi perra
Levanté su vestido y le baje la tanga que se había puesto, acomodé mi verga en su culito y lo ensarte
David: ahora eres Adriana y eres mi perra entendido?
Adrián: ahhhhhh siiiii! Soy tu perra, dame toda tu verga
Empecé una brutal embestida, lo tomaba de la cadera y me daba nalgadas, el gemia de dolor y placer, chillaba como puta en celo
David: dime perra, quieres mi leche en tu culo
Adrián: si quiero toda tu leche en mi culito
David: que eres dime!
Adrián: soy tu putita, tu perra
Cogí su culo más fuerte y sentí ni leche llenarlo por completo, me subí los pantalones y me regresé a mi depa, en cuanto iba entrando por mi puerta vi a la señora Sara entrar en la vecindad, su hijo sería vestido de mujer y ahora tenía mi leche en su culo, solo escuché que le gritó varias cosas, me fui a bañar y luego a descansar
Cuando tenía un mes salí una mañana que no trabajaba a los lavaderos comunitarios de la vecindad, estaba solo y entonces llego la señora Sara, fue a lavar su ropa, era domingo de flojera así que supongo que por eso llevaba solamente un camisón blanco que le llegaba arriba de las rodillas
David: buenos días señora Sara
Sara: buenos días mi enfermerito, dime solo Sara, no me digas señora que me siento vieja
Yo lavaba mis uniformes y ella sacó su ropa, me sorprendió cuando vi que saco sus tangas y sus brassieres, ella estaba justo frente a mi, cada ves que se agachaba a tallar la ropa su camisón deja ver sus enormes tetas, no llevaba nada debajo, el agua al mojarla trasparentaba su ropa haciendo que se vieran sus tetas y sus pezones redonditos, a mí ya se me estaba parando, pop llevaba un pantalón de pijama y una camiseta de resaque, así que si me quitaba de ahí notaría mi erección.
Termine de lavar y ya me iba cuando me detuvo
Sara: oye David me podrías ayudar con algo, es que se cayó mi tendedero y quería ver si podrías ponerlo de nuevo
David: am si claro Sara, déjame meter mi ropa y voy a tu departamento
Así lo hice y enseguida fui a su depa, entre y la vi aún vestida igual, pase a su pequeño patio de servicio, arrime una silla para subirme y amarrar los tendederos y cuando me subí pide sentir que alguien manoseaba mi verga, era Sara quien ahora tenía toda mi verga metida en su boca, yo no hice nada, solo disfrutaba de su boca, me baje y empecé a besarla, le quite el camisón y estaba totalmente desnuda debajo, me quite la ropa y la subi a unas cajas que tenía ahí, le abrí las piernas y la penetre
Sara: ahhhh espera no estoy bien lubricada todavía! Ahhhhh que verga tan grande tienes!
La empecé a bombear rico y tuvo su primer orgasmo, cuando la vi que le salían chorros de la vagina me la llevé adentro, me senté en el sillón y me monto, empezó a brincar sobre mi verga y yo le comía sus enormes tetas, que aunque ya algo caídas por la edad seguían delisiosas, la puse en 4 y se la volví a meter, la cogía con la misma brutalidad que me cogí al putito de su hijo, cuando acabe la dejé llena de leche
Sara: vamos al cuarto, quiero descansar tantito pero después quiero seguro cogiendo
Nos fuimos al cuarto y nos acostamos, a la media hora estaba dormida y salí por agua, con mi verga ya abajo, fui a la cocina y vi a Adrián en la sala, acababa de llegar, me vio desnudó y y eso basto para que ni verga volviera a pararse
David: que bueno que llegaste me acaban de dar ganas de coger otra ves, pero quiero que te vistas como mi putita de nuevo
Adrián: déjame que me arregle para ti
Entro a su cuarto y en 5 minutos salió, vestido con una minifalda, tanga, un top y brasier con relleno, peluca y con los labios pintados, rápido lo jale al sillón y lo abrí de piernas, le ensarte mi verga
David: por ser mi putita buena te daré un premio
Mientras me lo cogía tomé su pequeña verga y le di una paja, empezó a gemir fuerte, el rápido se vino, llenando mi mano con su leche, la lleve a su boca y lo hice que se la tragara, luego seguí cogiéndolo, lo vi con la cara pálida, voltee para ver qué lo había asustado y era su mamá parada en la puerta del cuarto, desnuda aún con mi leche chorreando
Sara: David que estás haciendo
David: cállate puta y ven que también te voy a coger
Le saque la verga a Adrián y agaché a Sara para que me la mamara, ella se resistió al principio pero sentir ni verga era irresistible para ella, la jale hasta el sillón y la abrí de piernas también, entonces se la metí, tenía a madre e hijo de piernas abiertas frente a mi, le metía los dedos en el culo a Adrián y a Sara le metía la verga, los dos no pararan de gemir, puse en 4 a Sara y arriba de ella a Adrián, la verga de Adrián ya están otra ves arriba, lo hice que se la metiera a su madre por el culo y yo le metí la mía por la su conchita, Sara gemía como puta entonces le metí los dedos a Adrián para que se viniera pronto, sentí mi leche llevar la concha de Sara y Adrián le llenó el culo, los dos cayeron rendidos, esa tarde cogimos más veces, los dos acabaron con leche por todos lados, al final nos fuimos todos a la cama, ahora podría disfrutar de mis dos putas calientes cuando quisiera
No manches jajajaja buen relato… 🙂 😉 🙂 😉
Jajajaja… Tremendo relato y una gran sorpresa! Excelente!