Mi primera vez con Santiago (Parte 3)
Ya nuestro penes como nuestra respiración estaba al máximo, me tire encima de él besándonos con la mayor pasión, y haciendo movimientos como los que había hecho Santiago, no pude espera más y de una baje a saciar mis ganas de chupar su pene era rico lamí su liquido seminal que ya había empezado a br.
Habíamos quedado con Santiago a medias pues no pudimos penetrarnos y yo lo deseaba a mil, creo que Santiago también ya quería experimentar que se sentía. Pero nuestra ultima vez logramos meter nuestros dedos en el culo, y quedamos muy arrechos(excitados), sabíamos que debíamos hacerlo.
Como era viernes ya no nos veríamos sino hasta el da lunes día de clases, además mi madre no trabajaba el sábado, ni domingo, días que dedicábamos a ir a visitar a mi sobrino y mi hermana, salíamos a comer algún restaurante, a veces cuando era quincena mi madre me llevaba a cine, o íbamos algún sitio de recreación a nadar. Mi hermana vivía en un conjunto residencial ahí había piscina, de cuando en vez íbamos, conocía algunos chicos y chicas.
Ese fin de semana fuimos a visitar mi hermana, cuando iba había una niña muy linda de mi edad, nos escapábamos detrás de los baños y nos besábamos, yo acariciaba su vagina por encima del vestido ya que no dejaba que metiera su mano, si me dejaba chupar sus pequeños senos que apenas empezaban a tomar forma, su pezón era rosadito, yo la acercaba y le hacia sentir mi pene erecto, cuando quería me cogía el pene y lo apretaba con fuerza, eso debía ser muy rápido, ya que los días domingos había mucha gente disfrutando de un día soleado y de la piscina, en el lugar que vivo es un clima templado por lo que el calor es intenso.
No veía la hora que llegara el lunes para ir a clases, y encontrarme con Santiago, no le había escrito pues anduve todo el fin de semana de paseo con mi madre. Cuando llegue a casa el día domingo decidí escribirle un mensaje, pero no respondió, creí que de pronto estaba arrepentido por lo que habíamos hecho, yo en cambio estaba decido que debía penetrar a Santiago y dejar que el me penetrara, deseaba sentir su pene entrar y salir una y otra vez de mi hoyito.
Para que no me doliera había tomado aceite y metía mis dedos en mi culito mientras me hacia la paja, eso lo hice sábado y domingo antes de irme a dormir, quería que Santiago no tuviera motivo para no meter su rico pene, tanto como quisiera.
Llego el lunes me levante con mucho ánimo quería ya ver a Santiago para ir al colegio, solo deseaba que pasara el día rápido, como siempre pase por su casa que quedaba a dos cuadras de la mía para ir al colegio, el ya me estaba esperando en la puerta, apenas me vio se sonrió de una manera picara yo hice igual y le pique el ojo mientras que mi mano cogía mi pene, que al ver a Santiago había sufrido una pequeña erección. Nos saludamos como siempre, un abrazo, me despedí de su madre que había salido a despedir a Santiago. Conversamos de que habíamos hecho el fin de semana, pues le conté lo que había pasado en piscina con la niña que vivía en la unidad de mi hermana, el había a visitar sus abuelos, el era hijo único, al igual que yo no conocía su padre.
Santi: me dijo que bien que la pasaste con esa chica, ya es hora que te la comas.
Yo: es difícil amigo, no tengo donde y las duchas mantienen entrando y saliendo gente.
Además, quiero aprender más, para hacerle rico cuando ella quiera, y creo que eso lo voy aprender contigo y tu conmigo, jajajjaa
Santi: jajajaja, creo que sí, estoy ganoso de comerme tu culito.
Yo: igual me pajie pensando en tu culito amigo.
Chocamos el puño. Le dije, por cierto, ¿iras a mi casa hoy verdad? No hemos terminado lo que empezamos.
Santi: No sé, no creo, mamá esta molesta porque llegue tarde el viernes. No creo que me deje ir.
Yo: dile que tenemos mucha tarea de y que yo te estoy ayudando para que recuperes.
Santi: le voy a preguntar, y te aviso.
Mis ánimos quedaron por el piso, ya tenía preparado todo en mi mente como haría que Santiago me penetrara y como hacerle a él.
Llegamos al colegio me sentía aburrido, todo lo planeado se había desboronado en un momento, mis planes habían quedados solo en mi mente y no podría llevarlos a cabo, solo planeaba algo para que la madre de Santiago lo dejara ir a mi casa. No logre planear nada, no se me ocurría nada, ese día no nos tocaba matemáticas y no sabia como decir para que Santiago fuera mi casa.
Bueno paso así, llegue a mi casa Santiago no puedo ir, llegue almorcé me duche y me acosté a dormir un rato, como a las 4 pm me levante me puse a ver porno en mi laptop quería saber mas cosas, debía estar preparado para el momento, me imaginaba que esos dos chicos éramos Santiago y yo. Mi pene se puso duro y por supuesto me tire una gran paja pensando en Santi. Ya eran las 6pm y me puse a realizar la comida para cuando llegará mi mamá de trabajar, hice pollo sudado, calenté el arroz, prepare el jugo y frite tostadas. Cuando mamá llego le serví y pedí permiso para salir a jugar un rato con los chicos de la cuadra, así fue, Sali un rato estaban los chicos platicando en la casa de mi vecino, estaban sentados todos en el antejardín, hablaban de futbol, de los equipos de la ciudad, unos éramos hinchas del Huila (Mi Ciudad), otros del Quindio discutíamos cual era mejor, pronto dieron las 9pm
Mamá: Kamilo hora de entrarse mañana hay que madrugar.
Yo: Si señora, me pare como un resorte me entre y a dormir.
Santiago estuvo castigado hasta el día jueves, en esos días solo pensaba en su pene y su culito rosado, seguía metiéndome los dedos para que Santiago no tuviera obstáculo para metérmela toda. Llego el día jueves, ese día íbamos en ropa de diario, pantalón de tela, camisa de maga corta de botones y zapatos de cuero con cordones.
Estábamos ansiosos de la hora de salida, Santiago ya había pedido permiso para ir almorzar a mí casa, su madre trabajaba, pero el a pesar que era hijo único no mantenía solo, vivía con su tía, solo tenía permiso hasta las 5pm, nosotros salíamos a la 1pm por lo que teníamos que hacerlo muy rápido. No arrimamos a su casa veníamos por el camino a mil, estábamos ansiosos por llegar a seguir con nuestros deseos de continuar lo que no habíamos terminado, en el camino yo solo hablaba de como había extrañado su pene y culito. A lo que contesto que esos días se había pajeado pensado en mí, que extrañaba mis besos.
Llegamos a casa, pero ¡oh sorpresa!, cuando abro la puerta y veo a mi madre, de una dejamos los maletines en el sofá, me saludo con un cálido abrazo y beso, saludo a Santiago, nos sirvió el almuerzo y me dijo que llegaría un poco tarde por que tenía una reunión y había venido a cambiarse. Se despidió y se fue. Almorzamos rápido, y de una nos metimos a la pieza, empezamos a besarnos como siempre apasionadamente, nos tiramos a la cama y las caricias empezaron a recorrer todo nuestros cuerpos nuestros penes ya erectos, Santiago encima mío besándome como si fuera la primera vez que lo hacíamos, rastrillaba su pene con el mío hacia movimientos circulares y se movía arriba y abajo, lo retire un poco y comencé a desabotonar su camisa mientras el hacia lo mismo, quedamos con nuestros pechos descubiertos por lo que se volvió a tirar encima mío y me besaba, acariciaba mi pecho, chupaba mi cuello, los lóbulos de mis orejas, mientras seguía con sus movimientos encima mío estábamos ya bien erectos, lo empuje y ahora el que estaba encima era yo, ya quería lamer su pene, así que de una empecé a desabrochar su correa, después el pantalón ya nos habíamos quitado los zapatos sin haber soltado los cordones, le quite su pantalón y su bóxer que ya estaba mojado por su liquido presiminal, no espere que me los quitara me desabroche y de una quite mis pantalones y bóxer.
Ya nuestro penes como nuestra respiración estaba al máximo, me tire encima de él besándonos con la mayor pasión, y haciendo movimientos como los que había hecho Santiago, no pude espera más y de una baje a saciar mis ganas de chupar su pene era rico lamí su liquido seminal que ya había empezado a brotar por esa hermosa cabecita redonda y rosada lamia sus huevos, y acariciaba su culo, el de inmediato levanto sus pies para que yo chupara su culito cerrado, me sumergí en ese anito metiendo si lengua y tocando con mi dedo su culito, Santiago gemía de placer ah ah aah, solo decía Kamilo papi así así no pares, chupa mi culito, mámalo como lo haces de rico, al ver que mis dedos no entraban abrió mas sus piernas dejando ese culito mas abierto ya pude ingresar un dedo, cuando lo sintió gimió de placer, subí chupes sus huevitos y fui subiendo mi lengua para meterme su verga en mi boca, mientras la chupaba aproveche para meterle el otro dedo, yo ya estaba al límite y no quería esperar más para sentir su pene en mi culito, subí y le dije en el oído Sow (amigo) métamela métamela toda quiero sentirte adentro mío, yo ya tenía listo todo, tenía el aceite de mi sobrino, me acosté boca arriba Santiago bajo y empezó a chuparme el pene mis huevos y me daba lengua en mi anito, al que decía que lo tenia muy rico, rosadito y muy cerrado, me chupo el culo por un rato luego unto su mano de aceite y empezó a forzar su entrada en mi ano sin dejar de chupar mi pene, yo solo atinaba a decirle así papi así no pares quiero que des con duro amor, me metió su primer dedo entro un poco forzado seguía mamándomela mientras metía su otro dedo, yo estaba al borde de venir mi poco liquido seminal, con dos dedos adentro de mi culo Santiago vio como estaba dilatado pero nuestra excitación era tanta que Santi se paro y puso su pene en mi hoyito ya dilatado, empezó a empujar para metérmela apenas estaba entrando su cabecita y se vino, sentí su liquido caliente en mi hoyito era especial, Santiago al ver que no me había venido aún, chupo mi verga y trago mi poco líquido que derrame en su boca. Me levante y lave mi culito, no estaba dispuesto a que Santiago se fuera sin haber metido su pene en mi ano. Ahora lo haríamos de otra manera.
Ya habían transcurrido un largo tiempo de estar acariciando nuestros cuerpos cuando vimos ya eran las 3 de la tarde, yo chupe su pene y tome el semen que había quedado en su cabeza y sus huevitos lo lamí todo no deje nada sobre su hermoso cuerpo.
Sali del baño y note que Santiago se había acostado boca abajo exhausto, muy exhausto, tenía sus piernas abiertas podía ver su hoyito, me excite de nuevo, pero sabia que mi pene no se iba a parar tan rápido, debíamos esperar un rato para que nuestros cuerpos reaccionaran para comenzar de nuevo la acción, así que me acosté a su lado y acerca mi pene para que rosara su rico hoyo, subí mi pierna sobre su cuerpo. Nos dormimos como media hora, despertamos, Santiago estaba boca arriba yo seguía con su pierna encima ahora de su pene. Desperté y de inmediato comencé acariciar su pene empecé a besarlo, abrió sus ojos y me miro ya su pene estaba sufriendo una nueva erección, le dije esta vez si me tienes que penetrar, me miro y respondió tenlo por seguro, no me iré hasta comerme ese rico culito rosado, bajé y empecé a chupar su pene sus huevos y a meter mis dedos en su culo. Su erección fue inmediata, esta vez no habría tanta mamada, me acosté boca arriba y abrí mis piernas, Santiago mojo su pene con el aceite, esta vez fue más fácil pues mi culo ya había recibido su cabeza, yo tome el aceite y unte mi culo, estaba dispuesto a recibir su pene, Santi acomodo mis pies sobre sus hombros y comenzó su labor, pronto había entrado su cabeza, yo gemía de placer y un poco de dolor, siguió y cuando menos lo pensé ya llevaba medio de su pene en mi culo, yo jadeaba de placer, siguió empujando y metió sus 14cms, sentía sus huevos como tocaban mi culo estaba adentro, empezó a meterla y sacarla despacio no éramos duchos en los movimientos, pero yo sentía que estaba en la estrellas en el mismo cielo, dolía un poco pero aguantaba, ya mi hoyito dilatado fue más fácil, Santiago empezó a embestir mas rápido, yo gemía mientras el se agachaba para besarme intensamente sin dejar de sacarla y meterla, ya estaba extasiado, yo le decía so(amigo) dame con duro métela toda no me las saques que rico me la metes, lo motivaba y el lo hacia mas rápido, que rico culo siento que me desvirgue me arde mi cabecita, creo que ya desvirgue mientras hacía gestos de satisfacción, cambiamos de posición ahora me puse en cuatro mi culito y su pene echaban sangre a mi por haber recibido ese pene y Santiago por haber perdido su virginidad. Me cogía de la cintura y arremetía con todo, yo sentía como estaba de excitado gemíamos a la vez mientras disfrutábamos de nuestra primera experiencia sexual, apretaba mis nalgas con fuerza me daba besos en mi cuello y yo giraba mi cabeza para que me besara, me introducía su lengua y yo volvía al cielo. A veces paraba para dejarme todo su pene en mi culito, la sacaba muy despacio para volverla a meter de una sola vez, hasta que sentí que se movía muy rápido supe que ya iba a terminar, cuando arremetió con fuerza y lo metió todo se quedo así mientras su pene dejaba su semen en mi culo, solo decía que rico so, no quiero parar, gracias tu me desvirgaste, lo saco y se acostó boca arriba, yo lamí el semen que había quedado untado sobre todo su pene, su cabecita ya salía toda del prepucio y lamí su cabeza, aunque el se encogió el ardor que sentía de perder su virginidad.
Creí que iba a terminar todo en ese momento, pero él se dirigió a mi pene y me lo chupo yo ya estaba muy excitado, por lo que lo separe y espere unos minutos no quería venirme quería penetrarlo, ya se estaba haciendo tarde y el tenia que irse, así que levante sus pies y le di lengua en su culo, unte aceite, me puse sobre él y empecé a empujar mi pene, mi pene era más pequeño pero un poco más gruesa, así que metí mis dedos y lubrique su hoyito, empecé hacer mi labor y metí mi cabeza la sacaba y metía suave, Santiago ya estaba gimiendo de dolor y placer mientras yo mordía mis labios de la emoción de penetrar a mi amigo, fue entrando poco a poco, hice lo mismo que Santiago, de pronto cuando entro a la mitad sentí un ardor al igual que Santiago me había desvirgado, la deje un rato adentro mientras dilataba y soportaba mi ardor, y empecé arremeter mi pene en su culo, la metía y sacaba, había visto como en las películas lo hacían rápido y a ratos muy lento, además estaba disfrutando ese momento y no me quería venirme muy rápido, lo hice como 15 minutos ya mi excitación estaba al 100, además no aguante más mi ardor así que me vine en su culito, la sensación no sé cómo explicarla, sentí que había salido más semen de lo normal, creo que había tenido mi primera eyaculación de semen estaba super feliz, me había desvirgado y además ya había echado mi primer chorro de semen.
Nuestros culitos dolían, nuestros penes ardían nuestras cabezas estaban rojas de la larga faena de sexo. Descansamos acostados unos 5 minutos nos dimos un beso y nos dirigimos a la ducha a lavarnos, la primera sensación que sentimos al ingresar al agua fue el ardor de nuestros penes, ya no estaban escondidos ahora nuestras cabezas salían por encima del prepucio, pero el ardor era insoportable, nos enjabonamos, yo mi culo para quitar mi sangre y Santiago el semen que había echado por primera vez en su culo.
Nos vestimos, no aguantábamos el roce de nuestro pene con el bóxer, nuestro culo dolía como nunca, pero aguantábamos de saber que ya no éramos vírgenes. Ya eran casi las 5pm, acompañe a Santi a la puerta, nos despedimos con un pico.
saludos amigo y sigue contando mas buen relato… 🙂 😉 🙂 😉
muchas gracias ya publique amigo