A mi novia le encanta, penetrarme..
Una chica descubre que su novio es gay, pero eso la impresiona de tal manera que después de eso es ella quien lo penetra..
A mi novia le encanta, penetrarme..
Desde hace más de un par de años, a mi novia siempre le llamó la atención que, cuando salía con mis amigos, terminaba emborrachándome.
Hasta que, debido a la indiscreción de uno de mis amigos, supo que, a mí, cuando me emborrachó, termino dejando que, entre otras cosas, me den por el culo.
Al principio, me dijo que ella pensó que tan solo se trataba de una broma, de mal gusto por supuesto.
Pero después de que pasaron varias semanas, y cuando sus padres me conocieron, me enteré de que lo primero que le preguntó su padre, fue “¿que si yo era maricón?”.
Desde luego que le dijo que no, en mi defensa les dijo a sus padres, que yo había sido hijo único, y que mi padre había fallecido cuando yo tenía, apenas dos años de edad, por lo que mi madre me crio, quizás de manera muy sobre protectora, y fina.
Pero eso bastó, para que temporalmente, las dudas la asaltaran, así que quiso salir de dudas, y se dedicó a tratar de aclarar todas esas tontas ideas que acosaban su mente.
En esos momentos, mi novia no logró descubrir nada, raro, además, ella me ama tanto, que en ese momento no podía creer que yo fuera gay.
Ya habían pasado un par de meses, cuando leyendo un artículo sobre los chicos, metrosexuales, me propuso que me dejase depilar por ella, para ver que tal quedaba.
Ella quizás pensó que yo le diría que no, pero al acepté diciéndole, que siempre y cuando yo le ayudase a depilar su vulva, aceptaba.
Esa tarde, aprovechando que sus padres se encontraban de viaje, no tan solo me depiló las cejas, sino que también el resto de mi cuerpo, de la misma manera que yo ayudé a mí novia a depilar el suyo.
La cosa es que, entre agarrones, caricias, masajes, y besos, ella y yo aparte de que terminamos con nuestros cuerpos completamente depilados, disfrutamos de un salvaje sexo.
El ver todo mi miembro sin un solo pelito, como se iba deslizando dentro de su coño, que también se encontraba completamente depilado, fue algo sin igual.
Como se imaginarán, en esos momentos no llegó a pensar que yo fuera gay, máxime, cuando yo mismo aprovechaba a la menor oportunidad, que ella me daba, para que nos acostásemos.
Lo que, si le extraño en una ocasión, fue que, al terminar de tener sexo con ella, al momento de irnos a vestir, por equivocación agarré su falda, en lugar de mis pantalones.
De la misma rápida forma que me la puse, tras verme en el espejo, y darme cuenta de mi error, me la quité.
Pero se fueron dando una que otra situación, que la hizo reevaluar, su manera de pensar con respecto mí.
Así que una noche que salimos, mi novia procuró que yo bebiera más de lo debido, y zas… que tantas veces va el cántaro al rio hasta que se rompe.
No sé, qué tiene que ver eso conmigo, pero suena interesante, ya me encontraba bien borracho, cuando ella me pidió que nos retirásemos, fue cuando le dije, que él deseaba quedarme con mis amigos, y que ella agarrase un taxi hasta su casa.
La verdad, es que mi manera de hablar le pareció bien rara, por lo que para que yo no sospechase ni entrar en una discusión innecesaria, me dijo que sí.
En realidad, mi novia hizo como que se iba a marchar, aunque en realidad se escondió en el baño de las chicas.
Y al salir más tarde, vio cómo yo, y un muy amigo de mío, nos dirigíamos al estacionamiento.
En ese instante se dijo a sí misma. “Mira que mal pensada eres. Seguramente, su amigo lo va a llevar a hasta su casa.”
Pero de momento vio que mi amigo, y yo, en lugar de ir hacia los autos, tras darle un billete a uno de los guardias de seguridad, nos dirigimos a una casucha de vigilancia, que usan los guardias.
Eso a ella, le pareció eso sumamente raro, por lo que sin hacer el menor ruido nos siguió, por suerte para ella, estábamos tan ebrios que no nos dimos cuenta de que la puerta se quedó abierta.
Fue cuando mi novia me vio a mí, quitándome toda la ropa, y sin decir nada, arrodillarme frente a mi amigo, que también se había quitado toda su ropa, y agarrando la verga del, me la introduje en la boca, dedicándome a mamársela por un buen rato, de la misma manera que en muchas ocasiones le he mamado el coño a ella.
Mi novia me dijo que, en ese momento, no lo podía creer, pero cargaba su teléfono Inteligente, y aprovechando la ocasión de la manera más discreta que pudo, se dedicó a tomarnos fotos.
A pesar de que lo estaba viendo, como ya les dije, ella me dijo no lo podía creer, al tiempo que nos tomaba las fotos, yo movía mis nalgas de manera impetuosa, y no dejaba de pedirle a mi amante, que me diera más, y más duro.
Luego me dijo, que en cierta manera le produje algo de envidia, ver como ambos nos divertíamos y disfrutábamos de todo lo que estábamos haciendo.
Cuando terminamos, antes de que saliéramos de ese lugar, ella se retiró a su casa, al siguiente día, cuando hablamos me dijo que deseaba por una parte terminar conmigo, pero por otra, no sabía qué le sucedía, que al verme teniendo sexo con otro hombre, y de manera pasiva, como que la acercó más a mí.
Cuando la fui a recoger a su casa, estando los dos completamente solos, me dijo que me había visto teniendo sexo anal con mi amigo, y antes de que se lo fuera a negar todo, me mostró las fotos.
Me quedé callado, y de golpe me puse a llorar, diciéndole, que eso era algo que yo, aunque quisiera no podía controlar.
Mi novia me abrazó, me besó, y esa tarde volvimos a tener sexo, solo que, en esa ocasión, mi novia había adquirido un consolador, y sujetándoselo con unas correas, ella me penetró a mí, cosa que, tanto a ella como a mí, nos encanta.
Uff la verdad que rico… Me encantaría que me pasara a mi