ABANDONADO (parte 2)
Soy Martin, sigo contándoles mi pasado, cuando siendo un chico de 10 años, tuve relaciones con Samuel, el adolescente que me llevó a la homosexualidad.
ABANDONADO (parte 2)
El domingo desperté tarde, había dormido profundamente por el cansancio de lo ocurrido el sábado, me quede largo rato en la cama y mi mente solo estaba en recordar a Samuel y todo lo que me había hecho con su pene. Me levanté y fui a la cocina totalmente desnudo, con esa inocencia propia de mi corta edad. Al no estar mi abuela, prepare mi desayuno, busque el cartón de leche y no había, así que preparé té y freí un huevo en una sartén para comerlo con pan, como la sartén tenía unas gotas de agua me saltaron dos gotitas de aceite caliente, me quejé bajito, entonces tomé mi delantal del perchero y me lo puse. Siempre me gustó cocinar y lo aprendí con mi abuela y con la tia Tula cuando nos visitaba, mi tía me regaló ese delantal a mi medida, que era de una de mis primas cuando tenia mi edad.
Me senté en el banco de madera en la mesa y consumí el desayuno, Samuel no se había levantado, así que terminando de desayunar y comencé a prepararle el suyo. Al poco rato le oí levantarse y venir, lo sentí llegar a la cocina, voltee y vi a Samuel entrar totalmente desnudo. ¡Ohhhh! me quedé conmovido como el día anterior, algo me pasaba contemplando su cuerpo de adolescente. Moreno, delgado, de músculos firmes y más que nada su enorme pene oscuro, un trozo de manguera negra que yo no dejaba de mirar. Todavía yo no era consciente, que era la homosexualidad despertando mi, con deseos que crecerían con el tiempo, como el caudal de agua de un arroyo creciendo hasta convertirse en un torrente incontenible.
Mi vista seguia fijada en su pene, hasta que su voz me sacó del trance hipnótico
– ¿Te gusta mi verga no, marica? -¿Ya está mi desayuno?
– Si Samuel- respondí y voltee a la cocina para terminar de preparárselo
El verme desnudo con solo el delantal lo excitó mucho y me dijo:
– ¡Mmmmmhh!… estas hecha una niña con ese delantal, ya te compraré una faldita para que la uses y seas mi putita-
Le llevé el desayuno, y él, antes de sentarse, se desperezó, levantando sus brazos estirándose , se froto los cabellos, se acomodó los testículos con su mano y se sentó en la banca. Yo avancé a su costado, y mientras ponía sobre la mesa su desayuno sentí su mano en mis nalgas, masajeándolas apretándolas y diciéndome cerca a mi oído -¡Que rico culito tienes Martin!- yo sentí el placer creciendo y me quede quieto. Su dedo medio entraba entre ellas, yo empezaba a gustar mas y mas el manoseo.
-Tu culito es mío puto y hoy en la tarde te lo estreno- ….
No dejó de acariciarme con una mano mientras con la otra tomaba el desayuno, yo parado a su costado, mi sumisión era extrema y esperaba la orden para que me retire.
Termino de desayunar sin dejar de tocarme las nalgas, luego giró hacia mi y me dijo con decisión
– ¡Voltéate!- le di la espalda, ¡Agachate! lo hice y quede en posición escuadra, estando así agachado, Samuel con ambas manos abrio mis nalgas para ver mi orificio anal
– ¡Mhhhhh que riiiiico hoyito, y esta cerradito! -Sujeta con tus manos tus nalgas y ábrelas-
Obediente, lo hice, abriéndolas con mis dos manitos, otra vez exclamo ¡Que ricoooooo…! Abri las piernas un poco para tener equilibrio, y me comenzó a acariciar mas, a pasar su dedo por mi hoyito, nadie me había hecho eso, si bien en la escuela y el barrio los chicos me tocaban el culo todos los días , nadie habían llegado a tanto…Las cosquillas que sentía se transformaron en caricias excitantes y sentía que mi hoyito se abría y cerraba y pedía mas, pero no sabia que pedía , hasta que tuve la respuesta cuando le escuche decir
– Tu anito esta que pide pinga a gritos Martincito, está hambriento de pene y yo se lo voy a dar-
Dejo de acariciarme la cola me volteo hacia el, me quito el delantal y me pregunto ¿Ya tomaste tu leche? Le dije
– Solo té con pan , no había leche, Samuel-
-Entonces te falta completar tu desayuno con rica leche-
-Si, pero no hay, la abuela se olvidó de comprar- le volví a decir
-No importa, hoy vas a tomar la leche de mi pinga, la leche de macho-
Me hizo arrodillar, su pedazo de manguera cerca a mi cara estaba palpitando semi erecto, era como un animal con vida propia despertándose para buscar su presa. Abrí mi boca y se la comencé a mamar despacio cada vez más adentro y sentía como crecía dentro de mi boca, cuando me la sacó, después de un buen rato, ya estaba totalmente dura, erecta, el animal había despertado y buscaba hueco. Samuel se puso de pie, con su mano sujeto su pene pegándolo a su abdomen ofreciéndome así sus testículos, yo seguia arrodillado.
-Anda puto, lame y chúpame los huevos, los tengo cargados de leche para ti-…
Así lo hice, lami sus juveniles testículos, me metí uno en la boca y despues pasé al otro, repeti varias veces, sentía estar sometido y que su poder de macho dominante venia de allí , de sus testiculos. Segui subiendo con mi lengua a lo largo del pene hasta el glande , Samuel, con su pulgar bajo su pene hacia mi boca y comencé a mamarlo con muchas ganas, como ternerito hambriento de leche , mamaba y mamaba mas y mas…
Segui mi labor de “chupapinga” hasta que le escuche jadear y decir -¡Ahhhh, Ahhhh ahí te va mi leche..Ahhh!!!!- y entonces me descargó todo el semen de sus jóvenes testículos en la boca tres o cuatro descargas que fui tragando con muchas ganas…terminó pero yo segui prendido a su verga….asi un largo rato….hasta que me separó, yo me senté sobre en mis talones y levante la cara para mirarlo, nunca olvidé verlo desnudo con esa sonrisa dominate….
-Bien, ya tomaste tu leche y asi crecerás fuerte y sano-….Se levanto y se fue al dormitorio. Yo sin limpiarme el semen que tenia en los labios , me ocupé en limpiar la mesa, lavar las tazas y y barrer la cocina.
A media mañana me dijo que saldría al barrio y regresaría a las tres de la tarde y que no saliera de la casa, además que preparara tallarines para almorzar….
Así lo hice, disfrute preparar los tallarines con salsa roja de tomate, almorcé solo, ya vestia con mi permanente shorcito, Pasaba la tarde y Samuel no regresaba a casa, a las 3 de la tarde oí bullicio afuera, eran los niños del vecindario jugando en la calle. Olvidando la orden de Samuel de no salir, sali a jugar y como siempre me junte con las niñas que saltaban soga, los niños incansables jugaban futbol corrían o peleaban, los que pasaban junto a mi me tocaban las nalgas; en eso, a la media hora apareció Samuel, se acerco a mi me tomo del brazo y me llevo a la casa molesto por haberle desobedecido, -Te dije que no salieras pendejo- -Perdón Samuel, lo olvidé- le dije. Uno de los chicos grandes nos vio y burlandose dijo:
– Pégale y métele la pinga al maricón-
Samuel no se molesto al escucharlo me dijo -¿Todos saben que eres marica no?-….
Al entrar cerro la puerta y me llevo al dormitorio de la abuela que tenia una cama grande de dos plazas, se desnudo completamente se sento en la cama, y me ordenó que me quite el short, así lo hice, parado frente a él me incline para darle la mamada que seguramente quería, pero me detuvo de los pelos volviéndome a mi posición,
-Sin mamada puto, no quiero que me saques la leche, hoy le toca a tu culito gozar-
Entonces, de pronto, inesperadamente, me abrazo y me beso la boca con mucha pasión, su abrazo constrictor me saco un poco de aire, mientras su lengua se movía dentro de mi cavidad bucal, Se tumbó hacia atrás y yo quede sobre él, Su profundo beso continuaba, su lengua se movía dentro de mi boca, sus manos bajaron a mis nalgas, para masajearlas y apretarlas fuerte, una mano en cada nalga, las estrujaba, el placer despertaba en mi sacándome suspiros, pues ya me daba placer eso. Giramos en la cama, revolcándonos, Samuel entre sus besos y abrazos…me decía -Eres mi mujer puta, eres mi mujer-
De pronto se detuvo se puso de pie al costado de la cama y me dijo:
-Ponte en cuatro patas, como perrito- yo me puse en cuatro, me agarro las nalgas las abrió y senti su boca que me besaba y lamia el hoyito, eso me dió cosquillas y me contorsione un poco, luego me dio dos palmazos que me arrancaron dos quejas ¡Ayyyyyy! ¡Ayyyyyy!…Luego sentí su pene, pasar a lo largo de mi surco , luego senti su pene agudo presionando mi orificio para penetrarlo…-Esta cerradito pero se como abrirlo, traeré la crema de la abuela-, se fue al tocador, en ese momento pase mi vista por las cosas de la habitación, Samuel volvió con un frasco con crema de manos.
Esa lejana tarde, teniendo solo como testigos las viejas cortinas y los muebles de la abuela, fui sodomizado por Samuel, el adolescente que me encaminó a la homosexualidad.
CONTINUARA
Como sigue?
Excelente relato… como sigue?
Ufff… que rico relato… menuda excitacion me ha provocado.
Como sigue?
Gran relato… como continua? Necesito mas…
Me encanta esta historia… ojala la continúes y nos sigas contando mas de ella.
como sigue?¿
Excelente relato… me encanta esta historia y como se va desarrollando. Espero con ansias la próxima parte.
Que gran relato… me encanta tu forma de escribir y de narrar lo que esta pasando.
Uuuff menudo morbo… Me has dejado con ganas de más… Ojala pronto subas la continuación 🔥🔥💦
Uff muy rico relato, supongo eres de Pucallpa, si tienes tlgm pásamelo, para contar más anécdotas.