ATRAPADOS

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Eufórica y a los gritos una chica que había salido del vestuario, volvía anunciando para algarabía de todas: "¡No queda mas nadie en el gimnasio, se han marchado ya todos y me dejaron las llaves para que cerremos cuando nos vallamos!!!"

Al oír éso los muchachos ahí ya amarrados y desnudos sobre las camas y completamente en las manos de las muchachas, sienten escalofríos. Ellas, haciéndoles socarronas morisquetas y grotescamente bailando con los brazos bien en alto,comenzaban aquella desenfrenada orgía de neta dominación femenina en la cual tendrían para su más entera diversión a varios muy hermosos y viriles chicos adolescentes sí, pero que no escaparían a esa loca suerte de haber caído en las manos de todas ellas.

Las más locas desesperaciones explotan en aquellos viriles varones que ya gritan y se retuercen amarrados viendo cómo aquellas mujeres los enloquecen deslizándoles los dedos torturantemente por todas sus desnudeces haciéndoles cosquillas monstruosamente atroces, tomándose todas ellas todo el tiempo deseado para hacer con ellos cuanto hacerles quisieran. Y besos y caricias y toqueteos y masturbaciones y fellatios y toda una caravana de lujuriosas prácticas aquellos muchachos ahí comienzan a soportar sin ninguna otra opción que la de tener que soportar y seguir soportando. Las muchachas, jugaban entre ellas para ver a cuál le hacían saltar más semen. En ellos se desataba una interna lucha atróz que consistía en no querer permitir que aquel placer paroxísmico que inconteniblemente estaban ahí sintiendo, no diera paso al deseo de a ellas entregarse en gozoso deleite cómplice y a todas ellas servil.

Las mujeres…lo advirtieron. Entonces…doblegaron sus esfuerzos para también en ese campo doblegarlos, y en ese campo…las mujeres también los vencieron . Con todos ellos ahí bramando de placer como animales exacerbadamente en celo bestial y gozosos de estar experimentando en sus cuerpos las cosa que de ellas aguantaban, con ellos ahí así, otra vez ellas volvían a bailar brazos bien en alto, haciéndoles morisquetas, y sacándoles la lengua.

Ellos, eran un portento largando leche a chorros por sus pijas. Poseídos ya por una increíble fertilidad como propia de monstruos más que de humanos, aquellos dominados varones habían todos caído en esa anormal característica de no tener jamás fin sus potencialidades carnales, siendo las muchachas aquellas el combustible seguro que los hacía así funcionar. Entonces ellas los desatan, y…la dominación continúa sin cambiar un ápice el carácter de la misma.

A la cancha del gimnasio los llevan, y allí…en ellos desnudos ellas pasean. Era, pues , todo aquello, recién el comienzo. De ahí en más, ellas…harían lo que querrían siempre, con todos ellos;pues, ahora, ahora sí, estaban ya todos ellos…por todas ellas…ATRAPADOS.