Bere, prima precoz – parte tres
Finalmente follo a Bere, mi primita 5 anios menor que yo.
Bere ya era mi becerrita, todos los días le daba lechita en la cara y en su boquita, a ella le encantaba como toda una golfita
Un día, como de costumbre, llegué a casa después de la prepa, pero no la vi en casa, resulta que se había quedado esperando en su escuela, como estaba a unos escasos metros de mi casa, avisé a mis tíos que yo podía pasar por ella
Yo – hola, hermosa. Cómo estás?
Bere – holiiii. Estoy bien! Qué bueno que viniste tú por mi. Aunque ando muy sudadita porque vengo saliendo de educación física
Yo no paraba de verle sus piernas hinchaditas en esa licra corta y ajustada. No dije nada, sólo la tomé del brazo y la llevé conmigo a casa
Ya en casa, me dijo que se metía a bañar de rápido, pero yo andaba muy caliente
Yo – ahorita te bañas, primero sácame la lechita, que me duelen los huevos de verte así de rica
Bere – sabía que te iba a gustar verme así, pero ahorita me cambio y sé que te va a gustar más
Yo – está bien, ve a bañarte, anda
Fueron unos escasos, pero muy lentos 15 minutos, en los cuales, estuve masturbándome un poco sin acabar, para juntar más leche para mi primita
Bere – ya estoy listo, primoooo
En cuanto voy a verla, tiene su minifalda que tanto me gusta, pero ya no es igual a la guarrilla de hace un año. No, ahora es una guarrilla un poco más desarrollada y le queda más corta que nunca, se le remarcan las piernitas gorditas, su caderita se ve ligeramente ancha, y su culito se ve gordito y con ansias de nalgadas
De inmediato comienzo a besarla y a tocarla de todo su cuerpo, en especial de su bello culito
Bere – te amo, primo
Yo – yo también te amo, primita. Quiero que seas siempre mía
Bere – sí quiero ser tuya, primo. Te amooo
La cargué hasta mi cama, la recosté boca abajo y comencé a masturbarla así
Bere – me gusta mucho, me gusta mucho que me toques y sentirme así
Bere paró más el culito y comencé a acelerar la dedeada
Yo – córrete, Bere. Puta guarrilla, te amo. Amo mucho tu culo, tus piernas, tu cinturita y tus caderitas, y esa carita preciosa que tienes
Bere – sí, me estoy viniendo mucho. Haaaaaaa
Bere gritaba mucho, así que le cubrí su boca con un beso mientras sentía cómo sus juguitos inundaban mi mano
Bere – me gusta mucho sentirme así
Yo – es porque eres una putita infeliz. Maldita puta, voy a follarte ya. POR PUTA!
Bere – ay siiiiiií, soy tu puta en la camaaaaaaaa
Se retorcía tirada en la cama con otro orgasmo mientras yo me quitaba el pantalón y bajaba mi boxer
Yo – ponte de perrito, ya te llegó la hora
Bere – con cuidado, por favor. Recuerda que tengo 5 años menos que tú
Acosté a bere boca abajo con su cintura sobre una almohada, le apunté mi gruesa verga de 18cm de largo a esa belleza. A mis 16 años, estaba a punto de desvirgar a mi primita hermosa
Lentamente comencé a meterle la verga a esa preciosura. En cada centímetro, sentía como su conchita me apretaba fuertemente
Bere – ay, estás bien grande para mí!! Me llenas todaaaaaa
Decía Bere mientras se venía como una perra enferma
En cuanto mi verga cubrió su interior, comencé a darle lentamente durante unos 10 minutos, después comencé a acelerar mi ritmo hasta que le estaba dando una buena cogida, ella bufaba y hablaba apenas y bien
Bere – soy puta, soy puta, soy puta
Yo – sí, puta, puta, puta, puta (mientras la clavaba en cada «puta»)
Su conchita era tan apretadita que no pude más y comencé a vaciarme a chorros dentro de ella mientras admiraba su bello culo
En esas fechas, yo comenzaba a salir con mi primera novia (Monse), así que tuve que parar de ver tan seguido a Bere, pero aún así a ella nunca le molestó y la continué follando durante años
Monse era de mi edad, tenía un cuerpo similar al de Bere, pero ligeramente más altita, más anchita de las piernas, con más caderitas y un culito gordito y durito que amé durante muchos años, aunque luego les cuento eso
Espero que hayan disfrutado. Luego les cuento más historias con mi prima favorita
Cuenta más historias, ya quisiera una prima así!