Bienvenida al paraíso….
En cáda país, tenémos una idéa errónea de los demás, y se débe a que no hemos salido del nuéstro….
En las priméras etápas de mi vída, escuché que México éra el país azteca, llegué a los 14 y mí sueño éra conocérlos, veía las películas de charros a caballo, escuchába sus canciónes de la época, luégo al cumplír los 18, la música de rock and roll….
Un día escuché a mi padre que iría a México, le platiqué de mí deséo, y me díjo: ‘puédes viajár conmígo, pero débes sabér que ése país que tánto vés, es sólo lo que fué, la génte tiéne mejór cultúra hoy en día… Aquí todo lléga años después, es 1998 ‘
Querér pisár el suélo que tánto deseába, me hízo no sentír las 12 horas de vuélo, pero éso sí… al llegár, tenía tánta hámbre, y mi padre encontró un puésto de comída en la calle, recuérdo comér quesadíllas, y buscámos el hostál que no estába léjos de ahí, désde la ventána mirába a la calle, observába a la génte… Éra iguál que en mi suélo, pero aún deseába conocér a ésos charros con caballos..Jajaja.
Conocí vários lugáres, y pasába preguntándo por los charros, la génte me mirába ráro, y mejór dejé de hacérlo…
Regresámos 15 días después, y la verdád que me enamoré de ése México ahoy, luégo decidí volvér y vivír por un tiémpo.. Entré a los 26 años cuándo mi deséo se cumplió, me fué hárto difícil encontrár viviénda, y más que núnca faltába la mosca de la majáda, al vérme sola, algún «acomedído» se plantába para cuidár de mí, y así cargué por 2 años andár desconfiáda.
En 2006 cumplía 28, estába laborándo como asisténte de la geréncia generál de una márca conocída de lencería fína, y mí jéfe dirécto me cuidába y dába un respéto de mujer..Tenía que agradecérle éso, núnca le llamó sabér de mi aspécto o medídas, pasába espantándo a quién fuéra, su chofer también hacía más servícios en su casa, y éra de su álta confiánza, cási diário me llevába a casa, hásta que una ocasión me confesó lo mucho que yo le gustába, me quedé calláda, porqué sentía lo mísmo por él, ése día le pasé a mi casa, charlámos acérca de lo que nos pasába, y dímos a pasárla júntos como paréja.. Déntro de los 10 años en que le pasámos así, tuvímos muchos moméntos locos, me gustó la fórma que éra de exhibicionísta exaltába también mís deséos y sentía placér al mostrárme.. Cosas que se fuéron dándo de póco a póco, una ocasión, cási al amanecér, fué a la cocína por un café, preguntába de léjos de cáda una de las cosas, que la cuchára, que el café, la azúcar, y me levanté molésta diciéndo, «quítate, mejór lo prepáro y será para mí.» Lo preparé y me fuí a la mesa, y él túvo que hacér el suyo, me mirába sonriéndo, y me confesó que en ése mísmo moménto, estábamos haciéndo felices a una paréja también… Lo miré extrañada y me hízo las señas con los ojos, las cortínas estában abiértas, y con mucho cuidádo, busqué hacía arríba en la azotéa y sí, una paréja nos veía agazapádos éntre la rópa de los cordéles, terminé mi café y caminé apresuráda hacía mi cuárto, en bréve entró él apagándo las lúces, y voló a la cama… Déntro de nuéstra intimidád él me hacía deseár un sinfín de cosas, me díjo quién éra la paréja de la azotéa y me púso al frénte situaciónes de lo más rícas y posíbles por llevár a la realidád, y terminábamos con un sexo muy inténso en cama en ése moménto…
Pasó cási un mes de ésto, y un día al salír a laborár, me topé a la vecína Eva, saludó haciéndo una cara muy cachónda, y bajó a mi ládo las escaléras, íba con los ojos pegádos a mí cuérpo, díjo de mi rópa que éra de muy buéna calidád, respondí que éra por la labór que hacía, preguntó de mis medídas, y sólo sonreí, la chárla fué álgo insúlsa, y al llegár al bus, ella íba hacía el ládo contrário, Víctor salía más tempráno pués pasába a casa de nuéstro jéfe.. Y ése mísmo día al regresár, topé con Raúl, esposo de Éva, caminó aprísa y alcanzárme, saludó sonriénte, y charlámos de cosas comúnes, al subír, sentía su miráda sóbre mí, díjo que sería buéno podér reunírnos los 4 y conocérnos mejór, me sonreí y respondí que tál véz estaría buéno, y quedó de buscár en ésos días a Víctor. Más tárde, lo comenté con Víc, se emocionó bastánte, lo miré y pregunté el porqué.. Díjo que le gustaría vérme con ótro, que su fantasía lo traía de cabéza, díje que él «tendría» qué estár con ella, y sólo se sonrió.. Fuímos a la cama, y sus palábras lleváron mi líbido al planeta más lejáno, en mi cabéza pasában algúnas situaciónes que me lleváron a deseár estár con Raúl…
Una ocasión por la noche, veía el televisor sentáda en mi sillón con los piés arríba, Víc aún no llegába, pensába en lo que díjo de estár con ótro y lo que había provocádo en mí, me llené de un ríco calorcito y acaricié mí concha sóbre el short, qué yá tenía una máncha húmeda, fué subiéndo más y más mí deséo, y terminé safándolo, abrí mís piérnas subiéndolas a los ládos, y mís dedos hiciéron el résto… Terminé más que mojáda, túve un sinfín de orgásmos, y quedé adormiláda con las piérnas tán abiértas sín importárme, sentí el áire frío que entrába, miré y la ventána estába abiérta, se veía con claridád hacía afuéra como adéntro, así descubrí que ellos mirában lo que hacía, pensé en cerrár todo, cuándo llegó Víctor y me vió así, se hincó en médio y riéndo le díje que priméro su café..Respondió que ése podría esperár, túve que ahorcárlo con mis piérnas para que estuviéra en páz, me levanté y cenámos, le comenté que éra su culpa de lo que hacía yo, y sólo sonreía… Al día siguiénte éra sábado, ése día Víc túvo que laborár y salió tempráno, le dí su desayúno y yá no me volví a acostár, seguí haciéndo mi casa, tenia puésta una playéra lárga, llegába a mís piérnas, estába limpiándo cérca de la puérta, cuándo tocáron, inconciéntemente abrí más que náda por refléjo, olvidándo que sólo traía mi playéra, éra Éva, se sonrió mirándo mí rópa, y pasó cerrándo la puérta… me cogió por la sórpresa y no le pude yo evitár pasárse… «Manita, tiénes piérnas muy bonitas y carnósas, mmhh adivíno que apretarás al esposo con gánas »
La miré fingiéndo una sonrísa léve, se levantó la fálda y dió un páso girándo mostrándo las de ella, «Míra mís hilítos manita..» me reí conservándo mí cálma, «Y hásta estás tetona, no como yo, con mís barritos.. » •No me caía mal, de hécho hásta tenía un tóno de vóz fibróso, rónco y éra gráto en su persóna, la miré y le pregunté dirécto, que sí le gustában las mujeres, se rió tán fuérte, y díjo; «cómo creés mí güera, jamás, yo cómo bolillo y mortadéla.. Sólo que la verdád estás diferénte al prodúcto de aquí…» Y buéno, la sentí sincéra le ofrecí un café y se pasó a la cocína conmígo, hablába sín pínchos en la léngua, llamába al perro; perro, y al gato; gato… éra muy dirécta, y así fué como la tiró.. «Cómo vés güereja, a mi Rúli y a mí nos gustaría podér conocérlos mejór en una noche muy íntima..» •la miré aténta a los ojos, y pregunté; ‘qué tánto íntima..’ ~»depénde de como se dé la noche güera…» •abrí más mís ojos, y ella acercó su cara a la mía bastánte, «güera, tiénes ojos azúles, no es ciérto.. Éres todo un biscocho devéras… » . •Estallé de rísa, les interesába más mi cuérpo que perdiéron el detálle de mis ojos…
Más tárde llegó Víc, charlé de la visíta de Éva, y se mostró hárto emocionádo, cenamos y luégo quería follárme ahí mísmo del comedór a la sála, me cabrié y a zápes le tundí al cuárto, que pa’éso tenía mi cama.. Terminé muerta de rísa al castigárle y no tocárme..Llamáron a la puérta..
Éran las 22 horas, se enfundó en su pants, y fué a atendér me gritó que saliéra «con ellos», asomé la naríz, y estában ahí Éva y Raúl, pasé a saludárles, y Víc cerró la ventána, hacía un friégo de frío, les ofrecí álgo de tomár, quisiéron café, buéno, la verdád éra mejór estár en juício conciénte, pasámos charlándo una hora hásta de marciános, y a Víc se le ocurrió mudárse de playéra y dejó a la vísta un pár de tatuájes, uno en cáda brázo, Raúl gustó de los mísmos, y le díjo a Víc que podría hacérle los siguiéntes, se interesó y se acomodó en su lugár, charláron del téma un buén ráto, Raúl díjo que Éva tenía vários no áptos a la vísta, Víc díjo que si se podría vér algúno al ménos, y ella tán prónto se levantó, dejó a vér su Lola al levantárse la blúsa, tenía una serpiénte enrrolláda en un sol azteca, que cubría su areóla y el tamáño de su lola éra muy generóso, tenía 2 dragónes que se entrelazában y continuában bájo su viéntre, sólo que no se veía el final por su pantalón que les cubría, pensé que mejór nos hubiéra mostrádo ése aúnque no viésemos el final, en véz de su Lola, sólo que el cáso éra el enseñár póco a póco… Éva se acomodó su blúsa, y se quitó el abrígo, su generóso escóte nos anunciába la próxima salída de sus lolas, y fué a la cocína para ponér más agua para café, díjo que no le atinába al quemadór de la hornílla, y Víc como todo hombre valiénte, se apresuró a ír en su ayúda, se quedáron ahí charlándo en lo que estába el agua miéntras Raúl me hacía la chárla Habló de mís ojos y el acénto que le gustáron mucho, me reí nerviósa y le hablé del amor a su pátria que sentía, se levantó y díjo: «Por ciérto, te obsequiaré un llavérito que téngo de háce 10 años..» su pantalón blánco le ajustába al cuérpo, marcándo terríblemente su polla, metió su mano, y al movérla para cogér el llavéro, empujába su polla a notárse hásta los pliégues, túve que pasár salíva, no éra para ménos, el llavéro decía la fráse: Am💗 México… Y me dió iguál un béso en la mejílla, sentí todo el cuérpo desnúdo al moménto, y le díje; ‘tío, que en España se dán 2 bésos eh..’ •y de rápido se devolvió a dármelos.. De dónde salió mi instínto? No lo súpe, y le cogí del cuéllo de la camísa y le jalé hací mí, besé inténso sus lábios, me cogió por las nalgas levantándo mí cuérpo, escuché entrár a Éva y a Víc, nos pilláron así, en seguída ellos hacían lo suyo, Éva quedó desnúda en un trís, le siguió Víctor, y éntre Rúli y yo, parecía que el follár no éra lo escenciál, el univérso tenía el grán enígma para nosótros…
Al cábo de 1 hora cási, nuéstras rópas estában bájo nosótros, lo único que yo traía puésto éra la panty, por la exitación reunída en mí, mi blánca piél yá estába como colorína roja, mís lolas se habían hinchádo más y veía los pezónes a un maximo crecídos, él se hincó éntre mis piérnas y metió su léngua adéntro de mí conchita, jalé su cuérpo hacía arríba del sillón, quería devolvér el chupár su polla como si fuéra un chupéte de caramelo…..
Nos reacomodámos, él quedó arríba, abría mí concha con sus dedos chupándo y con suáves mordidítas transtornába cáda 1 de mís sentídos, movía ligéra su cadéra miéntras yo chupába su polla, y al moménto que la engullí más, empujó su cuérpo para pasárle cási toda, y se fué bombeándo muy suáve, como no queriéndo lastimárme, miré a Víc y a Éva, se hacían la pája uno al ótro observándonos, Rúli se púso ténso, y tiró una gránde descárga déntro de mí…
La tragué totálmente, y premié con una multiorgásmia que a la véz succionó, nos quedámos quietos un moménto más, y al tiémpo nos sentámos, Víc y Éva dijéron; ‘éso es todo?, de cogér o follár como díces.. nada ? ‘
‘Ohh, ústedes en lo suyo…’ •dijo Rúli..
Pasámos la mayór párte de la madrugáda éntre charlándo, así como desbocándonos éntre las carícias más deliciósas sín que por fuérza follándo cáda véz…. Nos quedámos dormídos en un abrázo, Víc y Éva no parában de pasárla follándo, y así los volví a vér después de 2 horas que dormí, fuí al baño y púse agua para un café, desayunámos los 4, comentándo como a cáda 1 lo veía, dícen acá que «los pólos opuéstos se atráen», entónces, cómo éra que éntre los cuatro cáda quién estába con su iguál, quizá éra la novedád, o no sé, el cáso éra que cáda «ovina con su paréja», luégo Víc y Éva que se ducháron, Rúli y yo pasámos a mi cuárto, éntre bésos, llegó el » click» del deséo, estábamos de pié a 2 pásos de la ventána, me fué llevándo a recargárme en ella, levantó mí piérna … Y frotó su polla en la entráda de mi coño, temblába y tragué un póco de salíva, al contácto con ella, me corrí con un orgásmo tán fuérte y abundánte, le cogí fírme con mís brázos al cuéllo, e impulsé mí cuérpo a montárlo así.. Sentí la gloria mísma tán prónto se deslizó al fóndo de un sólo empellón hásta la báse, afirmé mí espálda sólo, y moví mís cadéras en círculos, no me importó que nos viéran désde afuéra, gemí con derecho a mí placér, lo tenía cogído abrazádo con las piérnas, besába, mordía mís lolas, apretába y abría mis nalgas dándo placér con sus dedos a mí culo, estábamos en un baño de sudór, mezcládo con nuéstros júgos anterióres, no había palábras, sólo podía el sonído del chasquído al frotár nuéstras pártes, las maníllas de el tiémpo avanzáron y se perdió la noción del mísmo, cuándo al fín llegó que se corrió de fórma inténsa y abundánte, y salió de mí también una descárga en la mejór multiorgásmia que jamás túve, nuéstros líquidos bajában a lo lárgo de nuéstras piérnas…
Fué un béso inténso para dárle las gracias. Nos quedárnos así por lárgo ráto…luégo me bajé, y lo llevé a la cama, púde vér que algúnos vecínos nos pilláron en pléna faéna, Víc y Éva pusiéron caras sérias.. Terminó la tárde y ellos se despidiéron, no quedó en ótra visíta por el moménto.. Víc túvo una chárla de celos, y le híce vér que éra por lo que él quíso tenér, pása que cáda uno lo háce a su módo sín contról de autoridád, y no buéno, tomó las cosas tranquílo después..
Y hacía plánes para la siguiénte ocasión… Que duró 6 años de pasárle así intercambiándo las parejas…toda una delícia.
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