Cabinas 69 de Ciudad Juárez, aventuras de sexo con varios hombres

Borracho y con ganas de sexo me metí a unas cabinas.
Hola a todos, un sábado normal, de esos donde me ponía a fantasear viendo porno gay en mi casa tomándome unas cervezas,  me comencé a cachondear cada vez más sobre todo con los videos de los glory holes,  es decir esas cabinas donde hay un agujero por donde alguien mete su verga y del otro lado se la chupan o le ponen un culo para que lo penetre, pero sin saber quienes son.

Mi fetiche son las vergas, es decir no me cachondea el físico de un hombre, pero ver una verga me pone muy caliente, por eso estas cabinas para mi son lo ideal para cumplir mis deseos mas oscuros. Yo estaba obsesionado con sentir una verga caliente en mi culo y ya llevaba reprimiendo mucho ese deseo pues estoy casado con una mujer.

Ya me sentía tomado y caliente ese día y me metí a bañar para masturbarme con mi dildo, generalmente lo hago hasta venirme, y se para el deseo, pero ese día llego mi calentura a un nivel que nunca antes había experimentado pues el dildo no fue suficiente pues durante media hora lo use y no podía venirme y no sentía que fuera suficiente, así que no me importó y tome la decisión de ir a saciar mis deseos a unas cabinas en donde yo sabía que eran de encuentros gay y generalmente tienen glory hole, sin importar mis miedos de ser descubierta mi bisexualidad, entonces me vestí con ropa deportiva para que fuera fácil de quitar yo ya me imaginaba una verga caliente dentro de mi culo y no podía con ese deseo.

Llegue por primera vez a las cabinas 69 de la avenida de las torres en Ciudad Juárez, me empezó a calentar aún mas esta experiencia desconocida, yo iba con el propósito de poner mi culo en uno de esos agujeros para que el que quisiera lo penetrara , entonces entre y era un pasillo oscuro con varias puertas, eso me cachondeo aún mas y ver que había tipos prácticamente en fila viendo quien entraba sin decir nada, yo al no saber como era el movimiento ahí, ubique la primer cabina que encontré abierta y me metí en ella, era un cuartito sin luz, de 1 metro por 1 metro solo con un banco de madera, mi corazón seguía al mil, esa cabina no tenia glory hole para mi decepción, sabía que si quería lo que tanto deseaba (verga) me iba a tocar un encuentro cara a cara , me empecé a tocar , poner lubricante en mi culito y metía 2 dedos y saque condones y papel que traía, de pronto empezaron a tocar la puerta del cuartito y no sabía si abrir, pero la calentura me segó y abrí de apoco y se asomo un muchacho gordito y me dijo en voz baja «déjame entrar»  yo estaba ya solo con la camiseta y debajo nada así que le mostré mis nalgas y me metí los dedos en mi culito mientras el miraba por la puerta entre abierta , pude notar que detrás de el había un par mas mirando y pues lo deje entrar, al entrar yo inmediatamente le dí un condón y le toque su verga , no era muy grande, el tomo la mía y nos masturbamos mutuamente, se empezaron a acelerar las respiraciones y  me voltea de cara a la pared, se pone el condón y hace mi sueño realidad, me penetra, la verdad no me dolío porque ya estaba bien lubricado  y dilatado, fue puro placer, me tomaba de mis caderas por cierto estoy caderón alto y delgado y eso les gusta mucho, solo sentía la delicia caliente del mete y saca de su pene pequeño, lamentablemente duro solo 5 minutos , sentí el palpitar de su pene y se salío de repente sin decir nada del cuarto, justo cuando me estaba cachondeando mas,  mi fantasía era tener un buen miembro dentro de mí y una cogida donde me viniera y se me quitaran las ganas y no lo había logrado, entonces pues me desespere y esperaba a que tocarán nuevamente la puerta para el siguiente, y pasaron los minutos y nadie tocaba, asi que me asome a fuera para ver si seguían los tipos en fila afuera, entonces les hacia señas con mis manos, y tardaron en acercarse pero la mayoría buscaba lo mismo que yo, así que no había forma de escoger, hasta que acepto otro tipo a entrar , este ya un poco mas maduro, igual chaparrito y gordito de bigote y casi calvo, este  al entrar me subió mi camisa y empezó a lamer mis pezones y a masajear mis  nalgas, yo solo cerré mis ojos y empecé a disfrutar y sin importar quien me estuviera agasajando, concentrándome en el placer,  mientras se la puñetiaba, le puse el condón , me puso en cuatro sobre el banquito y empezó a bombearme mientras me nalgueaba y me apretaba fuerte la cadera, duro un poco mas  que el anterior  y termino de repente , le dije ¿ya? y dijo si apenado y se salío del cuarto, yo quería mas,  en cuanto salío se acerco un señor alto con la cabeza afeitada y de barba de candado, su apariencia era afeminada y pensé no  va entrar y entró para mi sorpresa , este contrario a los otros fue muy dominante, me puso la mano en el pecho y me recargo en la pared y empezó a besarme en la boca apasionadamente, para mi la sensación de un beso de alguien con bigote y barba era nuevo y me calentó al mil, me manoseaba mi verga y las nalgas bien rico,  y yo  le agarre su verga esta si estaba cabezona y gruesa, se la puse bien dura y  me volteo de espaldas y parados me la dejo ir, esta por su grosor la sentí caliente y carnosa , este señor super caliente me domino como su perra durante 10 minutos, me puso en varias posiciones y me jalaba mi verga mientras me penetraba, de repente tocaron la puerta y se salío, yo pense que alguien mas entraría e hice intentos nuevamente para que los demás se acercaran pero ya no se acerco nadie, opte por irme, sentí que con la última cogida, se había cumplido a medias mi fantasía, hasta el día de hoy sigo teniendo la idea de encontrar un lugar con glory hole y poner mi culo durante horas para sentir el mayor número de vergas en mi culo, sin saber quien me la metío, y sentir una cogida que me quite las ganas, o encontrar un cómplice que solo me coja y guarde mi secreto, lamentablemente no he podido, pues no confío en nadie. Seguiré intentando hasta cumplir esos deseos.

Si saben de alguna persona o lugares para cumplir mis fantasías de coger sin mostrar la identidad, aquí en Ciudad Juárez Chihuahua, avísenme y quizás pasemos un momento muy rico.