CONFESION 5: ALEXANDER K. SAAS (Q.E.P.D.) – Part 3

Recordando momentos singulares. .
EN COLOMBIA AÑOS 2021 a 2022

Mi padre y su pareja “El peñita”, habían tenido ciertas diferencias, recuerdo que ya no era aquel muchachito al cual solían follar casi todo el tiempo, tenia 21 a 22 años de edad, un hombre que comprendía y definía sus gustos, manteniendo relaciones sexuales con mi hermanastro Anuar, ya que éramos muy confidentes. Pese a que Kevin discutía mucho con mi padre, ya que en ese momento mi padre tenia dinero para invertir en diferentes negocios. Desafortunadamente, la relacion se estaba volviendo tensa, y solía escuchar estas palabras de Kevin: – Te arrepentirás si me dejas.

Pese a todo, mi padre jamás desconfió de Kevin, ya que al final ellos tendrían sexo con nosotros, Anuar y yo, al cual solíamos armar una orgía de placer. Recuerdo antes del ultimo incidente, cuando mi hermanastro Anuar y yo estábamos en nuestra habitación encerrados, Anuar tenía alrededor de 17 a 18 años, y se veía demasiado guapo. Recuerdo que estaba demasiado caliente por ver demasiada porno, mientras el se dedicaba a estudiar para un examen, el me reclamaba de que no hiciera tanto ruido, pero ni siquiera lo molestaba y ya me empezaba a decir de cosas, eso me hizo molestar un poco. A lo cual me acerqué y le dije: – ¿Cuál era su problema?

Anuar solo quedo mirándome: – Estoy estudiando, no era para que te enfades, disculpa.

A lo cual le respondí: – Siempre es lo mismo contigo, te quedas callado cuando te miro a los ojos, aun cuando sabes que no me molesto por tanto tiempo con nadie, porque no soy rencoroso.

El apenado conmigo se quedo quito, pero de castigo lo empecé a desnudar mientras tiraba sus cuadernos en el suelo. Le dije: – Me has provocado de verdad.

El miro que me estaba bajando el pantalón mientras intentaba forcejear, aun así, fue en vano, ya que agarré su mano y lo puse sobre mi verga. Haciendo que me pajeara, luego tome con mis manos su cabeza y le forcé a chupar mi pene, moviendo mis caderas para que se metiera en lo profundo de su garganta, él estaba sonrojado, aunque sabía que no estaba en disposición de hacerlo, a mi no me importaba. Su pene empezó a erectarse, lo cual sabia que su subconsciente lo había traicionado.

Por lo que procedí a moverme con más ahínco mis caderas mientras toda mi verga se apoderaba de su boca, casi por poco hago que mi hermanastro se ahogase con su vomito, ya que sin querer lo induje a ello. Vomito y el piso se lleno de vomito, cosa que no me importo despues de todo estaba demasiado caliente como para fijarme en detalles random. Deje que descansara mientras lo miraba agitado, me incline a chuparle la verga a Anuar, mientras el descansaba y trataba de recuperar el aliento. Chupaba un rato su pene y ya estaba lubricando con su liquido preseminal. Increíblemente note que el mas se sonrojaba y recuperaba energías.

Al ver que el recupero fuerza, me acerque y lo coloque abierto de piernas, listo para penetrarlo, Anuar intento forcejear nuevamente, pero lo coloque boca abajo para someterlo más, no me importo que se incomodase un poco, cuando finalmente su cuerpo tuvo mejor posición para penetrarlo, procedí no solo a lubricarlo con un poco de saliva que me había colocado justo en mis manos, sino que al momento de masajearlo, dilate un poquito su culito, y de ahí, mi pene de 19 cm, entro haciendo en una sola embestida que entrase completamente. Solo escuche el: “ahhh ahhh hgg ahhhh”, de mi hermanastro Anuar siendo sometido por mis deseos carnales. Mientras mantuvimos relaciones sexuales, llegaron nuestros padres.

Escuche la conversación de un “supuesto robo”, no sabíamos la cantidad que habían robado de las cuentas bancarias, no se si realmente a mi padre Will le hicieron una suplantación. Pero recuerdo que Kevin y mi padre, despues de un viaje a Medellín, no se sabia que era lo que hacían.  El caso es que había algo extraño, no quería interrumpir mis deseos sexuales por lo que no preste más atención. Anuar y yo desnudos continuábamos con ese rico encuentro sexual, entonces cambie de posición colocando a Anuar arriba mío siendo embestido como toda una colla, mientras que Anuar solo decía: – ¡Basta!, tiempo fuera…. ¡Detente!… Me detuve un poco y me voltee boca abajo junto con él, dejando a Anuar debajo de mí, mientras seguía embistiéndolo sosteniendo con mis manos su cabello, embestía su culo de la forma mas brusca, diciendo: – Esto se siente bien.

Lo coloqué en cuatro sujetando su trasero, y nuevamente metí toda mi verga dentro del culo de Anuar, teniendo su cuerpo controlado en mi poder, mientras Anuar gemía del dolor y placer: – Haaahh ahhh ahhh ohhh ahhh…… Mientras lo seguía penetrando, me derrame dentro de él, y al sacar mi verga del culo, hice que limpiara mi miembro con su boca, lo cual mi hermano como una perra sumisa lo hizo chupando el resto de semen que derrame.

Mi hermano Anuar quedo cansado y lo deje desmayado, mientras me coloque una ropa sencilla y fui a ver que era lo que pasaba, me sorprendió ver despues una visita poco esperada, y era la llegada de Giselle, la madre de Anuar. Me quede sorprendido, apenado e incluso un poco mal porque yo había follado a Anuar, y ella pues, Kevin a veces tenía comunicación con ella, mas no con Anuar, quien era su hijo.

Recuerdo en ese mismo momento, las palabras más inquietantes: – ¿Cómo está todo aquí organizado?

Le pregunte: – ¿Quiere saber de Anuar?

Ella me respondió: – Solo veo que esta todo bien.

Me quede sorprendido como ella miraba nuestra casa, y que Kevin “El peñita”, estuviese muy junto a ella. Algo no andaba bien, lo que supe fue que mi padre Will iría con ellos a un viaje en Cali, pero en ese viaje Anuar y yo no iríamos. Mi padre había comprado nueva casa en el Barrio Lucero en 2.020, no sabría bien si realmente era para Kevin y esa “ARPIA” que quería acercarse a nosotros para sacar provecho o lo usaría para algún tipo de negocios, mas que todo colocarlo en arriendo.

En todo caso, sentí que la visita de Giselle era algo incomodo, ya que Kevin no nos había mencionado que “volvería con esa mujer”, sabia que mi padre tenia una relacion Swinger o abierta, no lo sé, pero no me daba buena espina. Mi padre invirtió en esa casa en el Barrio Lucero, buena cantidad de dinero, coloco techo nuevo, piso nuevo, arreglo de cuartos, además que solía compartir cervezas con muchas personas, incluso con el hijo de Giovanni, Juan Carlos, en ese momento ya tenía 15 años, además que, fue noble de su parte de ofrecerse a ayudar en la remodelación de las propiedades de mi padre.

Recuerdo que Juan Carlos era buenísimo jugando dominó con mi padre y si era de apostar plata más, y pues, no pensé que estaría con Juan Carlos, hasta que sonó una llamada telefónica y efectivamente era Juan Carlos, al contestar me dijo: – Hey, Will te he estado ayudando en la remodelación de tus dos propiedades en el Barrio Conidec, pa’ ver si te gusta como esta quedando las obras.

Yo solo respondí: – Hablas con Alex, no soy mi padre.

Juan Carlos apenado se rio y me dijo: – Anda que pena, pero dile la razón a tu padre y pues si quieres tu venir esta bien, échanos una mano.

Solo conteste con un ¡OK!… Pero, esa voz me cautivo, lo cual me dirigí a mi padre para darle la razón de Juan Carlos, y de ahí le dije a mi padre: – Padre, ¿puedo ayudarte con Anuar en los trabajos de remodelación que hace Juan Carlos?

Mi padre Will, se sorprendió cuando mencione a Juan Carlos, a lo que me pregunto: – ¿Te interesa ir porque vas a trabajar o a conocer a Juan Carlos?

Sería mentiroso de mi parte decir que solo iría para trabajar, cuando realmente deseaba a conocer a Juan Carlos, el hijo de la expareja de mi padre, ese hombre al cual con quien perdí mi virginidad de niño. Infortunadamente, mi padre no me permitió ir, ya que creía que no seria bueno para trabajar a lo que me toco aguantarme en no conocer a Juan Carlos, por el momento.

Por lo que mi meta en ese momento fue que ¡Algún día conocere a ese Juan Ca!…. Aunque me tocase esperar un buen tiempo para ello.