CONTROL MENTAL II
Continúan las aventuras de Vicente haciendo uso del don transferido, la celebración con compañeros de equipo traerá más aventuras a nuestro protagonista..
En Vicente se generó un cambio radical, lo más importante que cambió en él fue su autoestima ahora se sentía más seguro de sí mismo, se había inscrito en el gimnasio de la universidad y su cuerpo había mejorado notablemente, usando su don sus calificaciones habían mejorado así como su vida sexual y social, ya estas altura se había acostado con los chicos más guapos de la universidad, era muy fácil hacerlo solo bastaba con estrechar la mano de la víctima y dar la orden, no importaba si era gay o no sólo obedecían, se sentía realmente poderoso.
Se metió en el equipo de futbol americano de la universidad, se había dado cuenta que allí se encontraban los hombres más guapos de la universidad y los más populares, debía ingresar al equipo eso le garantizaría popularidad y notoriedad y así fue, no tenía las grandes condiciones atléticas pero ingresar fue fácil sólo tuvo que ordenárselo al entrenador, en los partidos una simple orden a un jugador del equipo contrario mediante contacto físico lo llevó a hacer anotaciones y convertirse en poco tiempo en el capitán del equipo con todo el estatus que eso significaba, se acostó con casi todos los del equipos, salvo dos o tres que no le gustaban, a todos los poseyó y por un gran número se dejó poseer, ya estaba experto en las mieles de la versatilidad y disfrutó al máximo de cada uno de ellos.
Se había dado la final del campeonato interuniversitario y como es de esperarse su equipo resultó ganador, la celebración no se hizo esperar se fueron a casa de Paolo uno de los compañeros del equipo que vivía en una casa enorme con piscina, caney y áreas verdes, la propiedad tenía una casa a un lado más pequeña pero igual cómoda. La tarde transcurrió entre bebida, risas bromas y una suculenta y abundante parrilla que hizo que todos comieran hasta saciar las ganas y el licor fluyó a cantaros, Vicente siempre estuvo rodeado de gente que querían estar cerca de él, era como un imán que atraía personas, eso había desarrollado gracias al don.
En un momento de distracción Vicente miró al caney y hubo algo que le llamó la atención, conocía a casi todas las personas presentes, en la actualidad era de los populares que conocía a todos y todos lo conocían, en el caney había dos personas que no sabía quién eran, eran dos hombres maduros, debían tener sobre los 50 años, robustos de buen cuerpo, se notaba que habían hecho mucho ejercicio en el paso del tiempo y les quedaba un cuerpo hermoso y grande a cada uno, ambos iban de jean ajustado marcando paquete, culo y pierna, en camisa sin manga asomando pectoral y brazos fuertes, le gusto de inmediato ese par de maduros, no era su predilección los hombres mayores pero es que éstos eran dos ejemplares de macho de antología, se les notaba lo heterosexual a kilómetros ya que no le quitaban los ojos a las hermosas chicas que había en el lugar dándole vueltas a los del equipo como moscas, se notaba que estaban calientes de tenerlos allí a disposición.
Vicente se acercó con paso seguro al par de maduros a modo de presentarse y ver qué sucedía con ese par de sementales, llegó a ellos y se presentó:
V: buenas tardes un placer soy Vicente el capitán del equipo
Maduro 1: hola mucho gusto soy Giacomo el papá de Paolo, sí ya sé que eres el capitán del equipo te he visto jugar varias veces
Maduro 2: hola mucho gusto soy Mauro padrino de Paolo un placer
V: un placer, no los había visto antes, muchas gracias señor Giacomo por recibirnos en su casa. Y usted dónde vive, cerca de aquí? –dijo Vicente dirigiéndose a Mauro.
M: jajaja sí hijo vivo cerca –dijo señalando la casa más pequeña que se encontraba en la propiedad.
V: ah ok bonita casa si ya la había visto
M: sí vivo allí desde hace unos meses que me divorcié, mi compadre me apoyó dejándome quedar en esa casa, la perra de mi mujer me dejó en la calle me lo quitó todo, bueno se lo ganó, bastante que le di por el culo durante año jajajajajaja
G: compadre es lo menos que podía hacer por usted, no se preocupe, esa casa estaba desocupada después que mi suegra murió.
M: sí desde entonces vivo aquí, esto está muy animado estábamos recordando los tiempos en que éramos del equipo de futbol de la universidad hay cosas que no cambian así eran nuestras fiestas jajajajaja
V: en serio jugaron futbol
G: sí claro cuando estábamos en la universidad, de hecho mi compadre guarda muchos recuerdos de esa época, verdad compadre?
M: sí claro lo conservo todo, quieres venir a ver?
En ese momento Vicente sonrió con malicia, como que iba a tener la oportunidad de disfrutar de ese par de ejemplares y no iba a dejar pasar la oportunidad. Se dirigieron entre conversaciones a la casa más pequeña, entraron y de verdad era una casa hermosa y cómoda de tres habitaciones y dos baños, una de ellas era el estudio de mauro y allí se dirigieron, al entrar la estancia estaba decorada con estantes y un gran escritorio de madera así como un sofá de tres plazas de cuero, Mauro procedió a enseñar fotos y trofeos, medallas y otros reconocimientos, Vicente se dio cuenta que el momento había llegado así que se paró de frente con cada mano tomó el brazo de cada uno de los maduros y dijo:
V: quiero que se cojan uno al otro…
Después de esas palabras los hombres se enfrentaron y sin pensar se fundieron en un beso pasional, ambos se comían la boca con desespero de alguna forma Vicente logró percibir que había un deseo oculto en lo que ambos estaban haciendo, mientras se besaban y transaban sus lenguas poco a poco se iban desnudando y cada prenda iba cayendo al piso dando paso a la desnudez absoluta en los dos, por otra parte Vicente se fue quitando poco a poco cada prenda hasta quedar desnudo en el sofá masturbándose lentamente ante el espectáculo que estaba presenciando, prendió un cigarrillo y se sirvió un trago y volvió al sofá, a estas alturas ya ambos maduros estaban completamente en pelotas y se continuaban besando y acariciando todo el cuerpo.
De verdad que era una delicia la escena, ambos hombres eran de la misma contextura y tamaño, por su parte Giacomo era un hombre de piel canela bronceado pero lampiño tenía buen pene gordo pero no tan largo quizás unos 18 cts, su piel era lisa y tensa piernas gruesas pero lo más magnífico era ese par de nalgas que desafiaban la gravedad, eran realmente grandes y redondas provocaba perderse en ellas, por otro lado Mauro era un hombre blanco y tapizado de vellos, era igual de piernas y nalgas gruesas, no tenía el culo tan pomposo como Giacomo pero sí tenía buen culo pero lo que sí era destacable era el pene magnífico que tenía, era largo y grueso con bolas pesadas y grandes, ya a estas alturas del faje entre ambos se encontraban en total erección y era masajeado por Giacomo mientras lo besaba y mauro acariciaba sus nalgas y ya metía dentro de ellas un dedo dando círculos sobre el ano del maduro.
Vicente se puso de pie y se acercó a la pareja tocó el hombro de Giacomo y ordenó:
V: mámalos
De inmediato Giacomo se puso de rodillas ante los dos machos y tomó el pene de ambos totalmente erectos y se los llevó a la boca, comenzó a alternar entre un pene y otro, ambos hombres echaron la cabeza atrás disfrutando la caricia bucal, se abandonaron al placer se miraron fijamente y se fundieron en un beso mordelón hundiendo la lengua en la boca del otro, Mauro mientras besaba a Vicente acarició su espalda y bajó por ella hasta las nalgas protuberantes del muchacho, después de tanto ejercicio Vicente se gastaba un culazo de infarto, el maduro acarició ese culo mientras el muchacho gemía en su boca disfrutando el tocamiento, el maduro experto metió su dedo entre las nalgas y llegó al arrugado y rosado botón y con su falange hizo círculos sobre el ano de Vicente el cual palpitaba de placer, en otro tanto Giacomo trabaja sin éxito meterse enteros ambos penes con desesperación, Vicente bajó la vista y la imagen de Giacomo en 4 patas mamando con desespero lo volvió loco, se zafó del beso y abrazo de Mauro y se colocó detrás del maduro mamón tomó sus nalgas con ambas manos y las abrió y empezó a mamar ese gran culo gula metiendo su lengua lo más adentro que podía, Giacomo pegaba gritos ahogados mientras recibía ese beso negro y mamaba ese guevo grande y gordo de su compadre el cual botaba ríos de precum en su lengua la cual comía como la mejor de las ambrosías.
Vicente se incorporó estaba casi tirado en el piso mamando el culo del maduro, se puso de rodillas detrás de ese culo abierto y palpitante tomó su pene duro a más no poder y dirigió su erección a ese ano, hizo contacto y presionó un poco, Giacomo abrió mucho los ojos ante el contacto y dejó de mamar sin sacarse el pene de la boca y sintió como ese muchacho lo invadía poco a poco al principio dolió pero después sintió un calor dentro de sí jamás experimentado que fue llenándolo de placer y empezó a mover el culo buscando más de ese pene que lo llenaba, Vicente empezó a bombear con fuerza y ritmo era demasiado lo apretado y caliente ese culo y bombeó duro y la leche llegó a la punta de su pene y regó la próstata hinchada de Giacomo ese calor en su sensible glándula le hizo eyacular con abundancia sobre el piso del estudio. Cuando perdió erección su pene salió solo dejando el culo chorreante del maduro. Vicente se incorporó se acercó a Mauro y le dijo:
V: ahora cógelo tú
Mauro se movió de donde estaba y mandó a Giacomo a arrodillarse en el sofá, este lo hizo sin resistencia con las piernas muy abiertas y levantando el culo a la espera, Mauro se puso detrás apuntó su pene orientado por su mano apoyó y entró, lo hizo suavemente la dilatación y lubricación de la penetración anterior sirvieron para que pronto hiciera tope y empezara a ir y venir, lo gemidos de ambos no se hicieron esperar.
M: compadre que rico culo tienes, que vaina tan buena siempre te quise coger al fin se dio, disculpa la confesión pero tu culo siempre me ha vuelto loco
G: siempre quise probar tu guevo grande me pajee muchas veces fantaseando con él
Mientras se daba este dialogo, Mauro no dejaba de penetrar a su compadre con buen ritmo, entraba y salía de ese culo grande y gordo con facilidad sin embargo lo apretaba rico, Giacomo lo que hacía era gemir y decir sin descanso:
G: más, más, más duro.
El orgasmo de ambos llegó finalmente, Giacomo no soltaba su pene masturbándose mientras su compadre estaba dentro de él, Mauro anunció que se corría:
M: compadre me corro, allí te va la leche, eres mi perra te voy preñar
G: sí compadre deme la leche la quiero dentro de mi yo también voy a acabar
Dicho esto ambos gimieron y derramaron su simiente, uno en el culo del otro y el otro en el sofá, fue realmente excitante ver a ese par de machotes enredados en sexo crudo. Vicente se acercó y los abrazó a ambos se besaron y tocaron los cuerpos con cariño teniéndolo abrazados en cerrado contacto físico les dijo:
V: quiero que esto lo hagan siempre
Y así fue, la orden estaba dada, de allí en adelante se convirtieron no sólo en amigos, compadre y cómplices sino en amantes, entre ambos se desató una pasión jamás sentida, tenían sexo a diario y de todas las formas posibles exploraron más allá de su imaginación, llegaron incluso a compartir con otros amigos maduros como ellos, lograron convencerlos de los beneficios del sexo homoerótico. Vicente se vistió y se incorporó a la fiesta dejando a ese par de maduros en un beso intenso con legua.
FIN
PD: Y hasta aquí la entrega de esta capítulo de la hora saga sobre las aventuras de Vicente y su control mental. Igual como siempre valora, comenta y sugiere sobre qué quieres que escriba.
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