cuando algo es rico, se vuelve vicioso
Ese apenas podía caminar .
Luego volví a clases y solo lo veía los sábados que él podía(yo podía todos los sábados en la noche) bueno me recibía yo me preparaba y me follaba, me golpeaba con puño en la parte superior de la espalda y más abajo con la palma de la mano abierta, cuando me lamía el culo me mordía las nalgas con mucha fuerza, me abría las nalgas y en el ano me mordía y también me golpeaba, cuando me follaba mirándonos cara a cara me ahorcaba, me arañaba la espalda completa, me pegaba con la palma de la mano en el abdomen, si me follaba en cuatro me agarra del cuello muy fuerte y con la mano en la cadera me enterraba las uñas. Le gustaba hacerlo mismo en los brazos y piernas. Y me pagaba dependía de qué tan agresivo fuese. Mis papás nunca sospechaban nada porque con lo que estudio es normal los golpes en el cuerpo.
Así estuvimos un par de meses, hasta que me pregunto si podía invitar a unos amigos en total cuatro con el cinco. Yo le dije:
-no tengo problema, me dejaba hacer todo menos golpes en la cara y que me pagaran luego de cada encuentro.
-si ellos tienen entendido todo eso y aceptaron, nos juntaríamos todos aquí los sábados a las 22:00 como todos los sábados anteriores.
-ya me parece.
Llego el sábado y me escribo para saber si podía llegar a la hora de las 19:00 y que me pagarían extra, acepté y ese día hice todo más temprano para llegar a la hora que acordamos.
Llegue a su casa y estaban los cinco en el comedor hablando, todos eran parecidos físicamente y sabía que tenían mucha plata por la forma que hablan los ricos.
Como de costumbre me servía algo para tomar me iba al cuarto a dejar mis cosas y luego salía hacer lo que tenía que hacer. Ya que eran más y el comedor que tenía era grande, me puse arriba de la mesa de centro y me puse a bailar en bóxers, veía cómo se acomodaban y se les marcaba las vergas en sus pantalones. Baile dos minutos en la mesa y luego les fui hacer un baile personalmente a cada uno, les quitaba alguna prenda de la ropa, les susurraba algo al oído, les pasaba la cara por su verga y les mordía suavemente la verga por encima del pantalón.
El dueño de casa jaja, fue el primero en follarme (me hizo lo que siempre me hacía como comentaba anteriormente) mientras los otros se iban sacando la ropa. Dos me follaron al mismo tiempo, los que me hicieron doble penetración uno lo tenía más grande que el otro entonces el que lo tenía un poco más chico 15 cm me lo metió primero y luego el que la tenía un poco más grande 17 cm era el que metía y sacaba su verga de mí el otro la mantenía dentro de mi, sentir el calor de esas dos vergas y cómo expandían mi culo por dentro era de los más placentero, estábamos tipo sándwich me tenían muy presionados los dos, su sudor bañaba mi cuerpo y ambos me daban nalgadas, parecía perro en celo porque lo único que quería era que me follaran fuerte, mientras me daban por el culo entre gemidos decía: más… ay… fuerte… más fuerte… por favor. Mi culo pedía a gritos ser follado duro. El otro mientras me follaba la boca me hacía garganta profunda me hacía lagrimear y dar arcadas me la metía y sacaba rápido llegaba hacer ruido de cómo me follaba la boca ahí parecía cordero desesperado de lo ansioso que le chupaba la verga me dejó todo el olor de su verga en mi boca hasta que se corrieron, los dos que me penetraron antes de correrse empezaron los dos a penetrarme fuerte me agarraron de la cadera y me follaban con mucha agresividad y el del oral para callar los gemidos me metió su verga en mi garganta y antes de correrse apretó toda mi cara contra su verga y podía sentir como su semen sin mi ayuda pasaba por garganta. Luego el quinto me metió su verga en la entrada de mi boca, estaba apoyado mis labios hizo un sonido: pis, pis, pis, pis. Y empezó orinar y me hizo tragar todo su orina que estaba muy caliente y tenía un sabor raro ( no era desagradable) estaba bueno, me dijo que me sentara en el suelo y el estaba parado arriba de mi cabeza con su verga en mi cara y yo debajo en su entre pierna. Agarro mi cabeza y me metió su verga con sus manos empezó a empujar mi cabeza contra su verga, primero suave y luego empezó a taladrar mi garganta no le baja a su velocidad cada vez era más fuerte. Después me apretó toda mi cara contra su abdomen y me dejo la verga ahí está muy caliente y gruesa su verga, parecía bebé cuando no quiere soltar la mama de la mamá, (me excitaba poder tener tantas vergas en tan solo un día) mientras tiraba una cantidad de chorros de su semen impresionante, me la dejo tanto tiempo en la boca que me estaba quedando sin aire y yo le pedía que la sacara pero me dijo que él iba a decidir cuando la iba a sacar, la saco cuando me dio una arcada. Así estuvimos hasta las dos de las mañana, lo hicimos en la ducha, cocina y balcón. Ese día me fui con harta leche dentro de mi y apenas podía caminar, todo eso valió la pena.
Wooow