Cuando sentí el borde del glande con mi ano
Despertar sexual que el pene de mi papá empezó .
No he contado esto pero acá puede ser ficción o realidad quien sabe.
Cuando tenía como 9 años no me preocupaba mi apariencia ni tenía complejos si creía que tal vez mi pene era pequeño, pero fuera de eso todo bien, a esa edad empecé a fijarme en mis compañeras de curso, iba en 4 básico, buscaba ver sus calzones o me fijaba si se marcaba su vulva en sus calzas los días deportivos y así, no sabía sobre la masturbación así que lo más placentero que me hacía era moverme y sobar mi pene con la cama o lo que fuera, sabía que el acto amatorio consistía en meter el pene dentro de la vagina así que eso era lo que buscaba.
Un día falté al colegio y mi papá estaba en casa porque estaba cesante, me levanté con pijama y tomamos desayuno, mi papá estaba con bata y se le veía su pene mientras comíamos, era inevitable mirarlo, se dió cuenta y abrió sus piernas para mostrarlo mejor, cuando empezó a crecer se corrió el cuero hacia atrás y dejo su glande al descubierto, no sabía que pensar en ese momento solo era algo que pasaba y ya, como que de cierta forma lo admiraba, el pene de mi papá.
Terminamos de comer y me levanté de la mesa mi papá tomó el diario y empezó a buscar avisos de trabajo yo me fui a la pieza, mientras jugaba con mis juguetes y peluches mi pene se empezó a parar pensando en el glande de mi papá, empeze a rozarlo con un peluche movimiendome como si lo estuviera penetrando lo que me hacía sentir cada vez más caliente, ese día estuve yendo y viniendo a ver el pene de mi papá y despues a descargar la calentura con mis peluches, en un momento mi papá me vio en eso y solo se rió, se dió unas corridas de cuero hacia atrás y se entro a bañar.
Mientras se bañaba lo ví por el cerrojo mientras se masturbaba fue la primera vez que ví la masturbación, el pene de mi papá siendo estrangulado por su mano cada vez más rápido, debió ser la sensación que da cuando alguien te mira pero mi papá abrió la puerta del baño de golpe y Vi todo su pene erecto hinchado de venas con espuma blanca por toda su cabeza me miró y cerró la puerta.
En la noche cuando llegó mi mamá mi papá estaba más lascivo de lo normal, la estaba esperando con un short deportivo sin ropa interior, cenamos, ellos con vino yo con jugo de piña, se fueron al dormitorio muy rápido y pusieron la tele alto yo más o menos sabía lo que pasaría, lo que no esperaba era que mi papá sabría que estaría mirando.
Esperé unos momentos sentado en la mesa tocandome el pene sobre el pantalón, hasta que empiezo a escuchar algo además de la tele, me asomo a mirar por el cerrojo y mi papá estaba metiéndole los dedos a mi mamá que estaba acostada en la cama, mientras le metía los dedos miraba al cerrojo como sabiendo que yo estaba ahí, terminó de hacerlo y fue a la ventana y abrio la cortina, yo entendí el mensaje y fui a mirar por la ventana, mi mamá se puso en cuatro y mi papá empezó a metérsela en diferentes velocidades mientras le pegaba palmazos y mi mamá gemía aguantandose para no meter bulla, ella no se había dado cuenta que yo estaba mirando, veía como su vagina se trabaja todo el pene de mi papá y como este la embestía como si quisiera entrar más profundo, solo podía pensar que lo que veía era algo increíble que tenia que probar lo antes posible.
Para mí suerte tenía claro que algo así no podía ofrecerselo a alguna mujer adulta así que obligadamente tendría que ocupar el otro rol y acudir al papá de mi buen amigo que por suerte era mi vecino, era un caballero joven de unos 35 años delgado y bien arreglado, lo único que necesitaba era la ocasión.
Un día llegando del colegio en el furgón, en mi casa no había nadie, pero el padre de mi vecino estaba en su casa ya que estaba cuidando a su hija que estaba enferma.
Entre a su casa, Nicol estaba recostada viendo películas con un desayuno a la cama el padre de mi vecino estaba en su pijama que era un shorts sin ropa interior, su pene se marcaba y era más grande que el de mi papá, su hija estaba semi desnuda viendo tele así que su papá cerró la puerta de la pieza, me invitó a tomar un te, mientras me tomaba el te solo podía mirar su entrepierna, el caballero se dió cuenta y me dijo si quería hacer algo con él, yo entendí rápido y le dije que si, fuimos al baño de su casa y el se sentó en wc con la tapa cerrada por un lado de las piernas del shorts asomó su pene que ya estaba medio erecto y lo dejo al descubierto, aunque estaba nervioso sabía que tenía que hacer así que comencé a masturbarlo de a poco, mientras mis manos subían y bajaban por el tronco de pene podía sentir sus venas y el palpitar, su cabeza estaba cada vez más pegajosa de tanta lubricación así que quise probar con la lengua su sabor, lami su pene completo como si fuera el chocolate de una fresa estaba muy caliente en mi desesperación por la lujuria que sentía a mi corta edad pase mis manos por su pene y las metí en mi poto para lubricar mi ano, no aguantaba más.
Empecé a hacerle sexo oral mientras tocaba mi ano, cuando me dijo que parara de chuparsela me pidió que fuéramos a la pieza de invitados, estando ahí se acostó y me puso encima de su pene, la gravedad hizo lo suyo y mi ano se deslizó por su glande lubricado con semen y saliva podía sentir cuando su glande entraba por completo dentro de mi, sus comisuras gruesas y sobresalientes por el borde de mi ano palpitando casi el ritmo del pene hinchado de mi vecino, empecé a saltar despacito para meterselo más hasta que me dilate y me moví hasta que ese pene se desinfló dentro de mi recto podia sentir el glande subiendo y bajando por las paredes de mi hoyito antes de empujarme todo el semen para arriba y dejarme lleno de mocos, hice caca dos días con semen y un poquito de sangre pero ha sido la culiada más rica que he tenido el placer de sentir, extraño esa cabeza entrando y saliendo por mi ano.
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