El Cabron de mi Esposo II
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por ricurasw.
Hola, como les conté en mi
  anterior relato EL CABRÓN DE MI ESPOSO, quede muy satisfecha y me gustó mucho
  el haber hecho que mi esposo me limpiara.
  Lo volví a hacer, pero esta vez a
  solas.
  Les pasare a contar desde el
  principio, como ya saben mi esposo a quien llamare Leo es muy, muy, muy cabron
  conmigo, su hobby es verme gozar o que me tire a sus amigos.
  El tiene un amigo al que
  llamaremos José, este chico tiene un comercio cerca de nuestra casa y cada vez
  que mi esposo paraba allí para saludar o comprar algo, ambos nos dábamos cuenta
  que José buscaba desvestirme con la mirada y que le costaba mucho disimularlo…
  siempre nos reíamos de eso y en más de una ocasión el muy cabron de mi esposo
  me decía que me pusiera muy sexi porque haríamos un alto en el local de José y quería
  verlo nervioso, a pesar de todo esto nunca hablamos Leo y yo sobre tirármelo,
  hasta un día en que regresaba sola y caminando a casa y justamente cuando iba
  frente al local de José comenzó a llover, él estaba en la puerta y muy
  amablemente me invito a pasar, ya al estar dentro del local, me llevo a su oficina
  donde conocí a su mujer y donde me
  brindaron un café, como la lluvia no paraba llame a Leo para que pasara buscándome
  pero estaba bastante lejos de allí; 
  José al verme lamentarme, muy
  caballerosamente se ofreció a llevarme en su carro a lo cual yo me negué y ante
  su insistencia accedí, así pues que subí al auto y no más al arrancar lo vi
  temblar e iba más pendiente de mis piernas que de la vía, también me di cuenta
  que iba más despacio de lo normal, pero la situación me gustaba y no hice ningún
  comentario al respecto, hasta que me dijo: envidio a Leo, siempre me has
  parecido una mujer muy linda y sensual y dicho comentario me sonrojo y José al
  darse cuenta me dijo que no era para que me sonrojara
  Llegamos a la puerta de mi casa y
  al despedirnos le di un beso en la mejilla donde casi rozaron nuestros labios,
  ya había abierto la puerta del carro cuando él me toma de la mano y me pregunta
  si no es mucho atrevimiento que yo le de mi PIN y le dije que no y se lo di,
  apenas estaba abriendo la puerta de mi casa me llego la invitación del PIN con
  el siguiente mensaje: Me encanto pasar ese instante maravilloso a solas
  contigo, no le digas nada a Leo porque es mi amigo y no quiero piense mal de ti
  y de mí.
  Obviamente al llegar mi esposo a
  casa le conté todo, incluida la maldad de rozarle los labios, el cabron de mi esposo me dijo: ya verás que terminaras
  cogiendo con él, esa noche Leo y yo jugamos un rato y termine masturbándome imaginando
  que era José quien me hacia el amor, así se lo dije a Leo y le dije que quería portarme
  mal con José,pero sin que el supiera
  que mi esposo sabia.
  Al día siguiente le escribí dándole
  los buenos días y el me contesto que gracias por acordarme de él, así paso algo
  más de una semana mandándonos mensajes y chateando sobre cualquier cosa… Un día
  le dije que Leo llegaría tarde porque estaría lejos de nuestra ciudad (era
  mentira, solo queríamos saber cómo reaccionaría a la insinuación) e
  inmediatamente se ofreció a darme la cola hasta mi casa a lo cual acepte,
  cuadramos en vernos un poco más adelante de mi trabajo, eso fue como a las 2pm
  y yo salgo a las 5.30pm, fueros 3 horas donde me imagine de todo, tanto así que
  ya comenzaba a sentir la humedad entre mis piernas.
  Llegada la hora del encuentro, él
  fue muy puntual y como vivimos en un pueblo donde casi todos nos conocemos, me
  dijo que quería invitarme a tomarnos algo pero en el carro para que no nos
  vieran y que ya había comprado los tragos y se pararía a orillas de la playa para
  conversar un rato, llegamos a un lugar bastante solo, me sirvió un whisky y
  conversamos de muchas trivialidades, ambos sabíamos que estábamos nerviosos, no
  sé cómo ni cuándo pero llego un momento donde ya nos estábamos besando, de allí
  no paso… besos y metedera de mano, él me dijo que si yo quería estar con él, le
  avisara para conseguir un Motel discreto y yo haciéndome la que no rompo un
  plato le dije que para el día siguiente le diría…. Al día siguiente le escribí pidiéndole
  consiguiera un sitio fuera del pueblo.
  Recuerdo que eso fue en la víspera
  del día de San Valentín del 2014, fuimos a un Hotel muy bonito donde José no me
  cogió como la puta que soy, sino que me hizo el amor como si fuera su novia,
  esto no quiere decir que realmente no lo haya disfrutado, sí que lo disfrute…
  estas historias de sexo con José se las contare otro día.
Ahora el porqué de este relato.
  Ya tengo varios meses cogiendo
  con José y el piensa que Leo no lo sabe. Este viernes pasado me vi con José y
  me cogió como una verdadera Puta, me tenía una sorpresa, me había comprado un
  conjunto de mesera el cual hizo que me pusiera y yo ya llevaba puestas mis
  bolas chinas en el ano (me las puso Leo antes de salir de casa) la pasamos de
  mil maravillas, cada vez que José me coge llego a casa y le cuento a Leo como
  me lo hizo, unas veces me folla y la gran mayoría de las veces se masturba
  mientras le relato lo sucedido, pero este viernes lo humille, llegue a casa y
  le dije espera afuera, cuando le ordene que entrara tenia puesto el traje de
  mesonera y las bolas chinas, me senté en la orilla de un mesón que hay en mi casa
  y le dije: mira como tu amigo me dejo la cuca inflamada y llena de leche,
  quiero le des besitos des inflamatorios y que al mismo tiempo la limpies y te
  tragues toda la leche que me dejo José.
  Jajajaja el muy cabron y sumiso de mi esposo, todavía me preguntaba
  porque le hacía eso, y la verdad que verlo allí de rodillas ante mi vulva
  hinchada y aun chorreante de leche me éxito más y solo le decía: lo hago porque
  te amo y amo que seas mi cabron, me gusta humillar a mi cabron y verte comer
  las sobras que dejan otros machos que si me saben coger divino en mí, A ti e
  gusta que tu mujer sea muy puta y a mí me gusta humillarte y que seas mi
  cabron, dicho esto Leo hundió su cara en mi cuca y me dio una mamada que me
  hizo acabar y cuando ya él estaba por acabar me agache y le dije, acabale a la
  puta de tu mujer en la boca, m
Esa noche hicimos el amor salvajemente


 Cargando...
Cargando...
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!