El castigo de mi esposo

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
empesare por decir que los dos trabajamos y no siempre en el mismo turno, en cierta ocacion en que el tenia el turno de la noche y descansaba en el dia

tube que regresar ala casa por un informe que olvide y al regresar ala casa sin ser esperada me Primero empezare por decir que los dos trabajamos y no siempre en el mismo turno, en cierta ocasión en que el tenia el turno de la noche y descansaba en el día Tuve que regresar a la casa por un informe que olvide y al regresar a la casa sin ser esperada me lleve una gran sorpresa.

Estaba Javier en mi cama con Mónica la empleada del servicio, el estaba desnudo en cuatro mientras Mónica le azotaba el culo y el olía las bragas de Mónica me quede inmóvil mientras veía como Mónica castigaba a mi esposo y como el disfrutaba de su castigo se escuchaba en sus gemidos. No sé cómo logre salir sin que se dieran cuenta, estaba furiosa pero la verdad no se qué era lo que más me molestaba sí que me estuvieran montando los cachos o que me había excitado mucho ver como castigaban a Javier.

Al regreso al trabajo no podía pensar en otra cosa, tenía en mi mente la imagen de Javier y Mónica y eso me ponía a mil mis bragas estaban empapadas y yo ya no podía mas , ha si que me dirigí al baño y saque, de mi bolso mi consolador baje mis bragas y comencé a trabajar mi conchita que estaba toda empapada no paso mucho tiempo antes de que hubiera tenido un orgasmo impresionante.

En ese momento decidí que Javier merecía un castigo y que sería yo quien tendría que dárselo. Esa misma tarde prepare todo para su castigo compre algo de lencería un estrapon unas esposas y prepare todo. Javier llego como alas 11 le di un café con unas góticas de un somnífero no tardo en quedarse dormido lo desnude y lo espose prepare será para depilarlo lo amordace para que no pudiera gritar le aplique la será en sus testículos y en su lindo culo lo quería bien depiladito esa la primera parte cuando le retire la primera parte de la cera se despertó de inmediato por el dolor no entendía que pasaba estaba amordazado, esposado y desnudo le dije que no se quejara que no fuera cobarde que porque mientras Mónica lo azotaba no se quejaba al decir esto el entendió que yo lo sabía todo y que esto era mi venganza y que apenas estaba empezando, termine de depilarlo y unas lagrimas rodaron por su rostro le dije que le daría su castigo y que dependía de su comportamiento que tan largo e intenso fuera el castigo .

Le pregunte que si se portaría bien el asintió con la cabeza, que tendría que hacer todo lo que yo le ordenara sin cuestionar y volvió a asentir entones si te gusta tanto oler la bragas de la empleada empieza por ponértelas, se puso unas bragas negras que resaltaban mucho su lindo culo, unas medias de maya y el vestidito que no le bajaba sino hasta medio culo era toda una putita le tome unas fotos para enseñárselas y que fuera mayor su humillación empecé a darle con un látigo en su culito que ya estaba tan rojo como podía “a caso no te gusta ,te voy a romper es culito para que sientas lo que es bueno “el ya no sabía ni que pensar lo espose a una mesa un pie a cada pata y las manos a las otras. podía verse su culito l acaricie e introduje uno de mis dedos dentro de su culito virgen el amordazado solo podía gemir luego le busque el estrapon que había comprado horas antes y me lo puse frente a el para que pudiera saber que le esperaba lubrique bien su ano le puse la cabeza de mi pija plástica justo en su ano y el se movía intentando resistirse lo cogí del cabello llevando su cabeza hacia atrás y recordándole que entre más se resista es peor fui empujando hasta que entro hasta el fondo comencé a trabajar su culito sin piedad hasta que vi salir un espeso chorro de semen había pasado sin tocar su pija si que lo había disfrutado.