El chico violador
Conozco al chico que satisface mis placeres … y algo más .
Holiiii soy Verónica o Verito, una maestra de primaria que ama el sexo sucio y soy muy criada a la antigua, estoy acostumbrada a que mi hombre me golpee cuando quiera y yo siempre debo obedecerle, bueno, me separé de mi esposo con quien tuve 3 hijos, 2 niños y 1 niña, y pues desde hace años que solo me meto los dedos en mi sapo para satisfacerme ya que soy una hambrienta de sexo y amo todo lo asqueroso y pues bueno para ser una chica de 29 años, delgada morenita y con unas tetas que ya cuelgan por la edad, soy una chica muy al día con el mundo, entonces siempre trato de buscar citas en internet pero siempre que pido foto de sus porongas la tienen súper pequeña.
Yo necesito por lo menos una polla de 30 centímetros para que mi zapallo esté en paz, nunca los encuentro, entonces una noche donde yo estaba muy aburrida, una colega de la primaria me dijo que querían ir a tomar unos tragos y bueno yo muy aburrida acepté, no sin antes meter mis dedos a mi papaya para venirme y andar más relajada. Me duché y me puse unos tacones altos que dejaban ver mis pies, una tanga de hilo, una mini falda roja y una blusa blanca sin sostén para que se vean mis tetas caídas, ay es que si pudiera me pondría un cartel de “violame” en mi pecho y culo para que todos me vean pero bueno, no se puede.
Salí y me vi con mis amigas que solo hablaban de sus esposos, si supieran que yo solita puedo beberme el semen de sus esposos juntos, y bueno después de tomar unos tragos fuimos a una discoteca donde había música fuerte, y mucho alcohol, me subi a una mesa y empecé a mover el poto para que todos me vean y bueno lo hicieron pero ninguno me convencía, tanto que me cansé y me senté para descansar y fumar algo, entonces lo vi, era un joven moreno alto y delgado, que estaba pidiendo un trago, tenía un short, una camisa y unas sandalias deportivas, cuando lo vi fui tras él y le invité tiernamente a bailar, en cuanto aceptó pegue mi culo a su entrepierna y lo empecé a mover para excitarlo y bueno, creo que lo logré, empezamos a charlar y besarnos un poco pero yo ya no podía, le dije al oído que vayamos al baño y él tiernamente aceptó, era muy tierno y parecía ocultar algo pero lo ignoré.
Fuimos al baño y luego de unos besos le bajé el short, y dios mío, joder era una puta verga negra de 34 centímetros o más, era un pito de burro que colgaba junto a sus bolas que le colgaban prácticamente jalando su escroto de lo grandes que eran, lo debí chupar por unos 30 minutos sin parar hasta que sentí un líquido en mi boca, supuse que se vino hasta que dijo “si puta traga mi orina”’y dije wow este si es un hombre y obviamente me bebí toda, cuando la música paró y la discoteca acabó, salí de la mano con el, con mi maquillaje corrido y mi aliento a meo, el pidió un taxi y yo le dije “para aún quiero quedarme” él respondió con un puñete en mi cara que me hizo caer de espaldas y me dijo “aquí se hace lo que yo digo carajo” y yo dije wow, amo este chico y fui a lamer su pie, humillándome ante todos mientras llegaba nuestro taxi.
Cuando llego, nos subimos y nos dirigimos a mi casa, al llegar se bajó del taxi y se sacó sus sandalias, me las lanzó y dijo “lámelas y dame una cerveza o te mato” lo hice con gusto, le di su cerveza y se bajó el pantalón, yo me metí su platanote a mi boca y así hasta que me lanzó a un sillón y me la encajó directo al ano, mi falda arriba y mi tanga a un lado y me estaban destrozando, me cogio por unas 2 horas, me vine a chorros más de 10 veces y el aún nada, así que decidió, mearme dentro mi culo, y quede destrozada.
Quede tirada en el sofá llena de meo y él se fue a la habitación, cuando recupere las fuerzas fui a la habitación, y wow, él se masturbaba aún, me dijo “perra si no aguantas te muelo a puños” yo solo obedecí, y él salió corriendo de la habitación y entre gritos y chillidos llegó con mis dos hijos de 3 años en sus brazos ambos tomados de sus piernas de cabeza y me dijo “estos niños ahora van a crecer como unos gays maricones porque me los voy a coger cada que no aguantes” yo era su amigo esclava así que solo vi como los desnudaba y metía a toda costa su penesote en sus culitos vírgenes que ya estaban sangrando hasta que mientras uno le chupaba el culo el se cogia otro y ya no aguante más, entonces me paré y dije “puedo masturbarme?” Y él me escupió en la cara y me dijo “si y trae a tu hija”
Continuara
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