El día que cambie de amo

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Dante.sumiso.
El día que cambie de amo.

Hola estimada gente de SST, tengo meses leyendo relatos de esta página y hoy finalmente me anime a escribir una de las experiencias más agradables que he tenido recientemente.

Para comenzar empezaré diciendo que me llamo Dante, tengo 26 años, vivo en la conocida ciudad de Guadalajara, mido 165, peso 90 kilos, peludo, moreno y mis atributos que más resaltan son un trasero amplio y unos senos grandes.
En particular gracias a mis pechos fueron los causantes de los que les contaré a continuación.

Era sábado por la tarde, tenía un aburrimiento total, estaba navegando por las redes sociales en búsqueda de un poco de accion, cuando finalmente un conocido con el cual he tenido relaciones previamente y compartimos gustos similares por la dominación se conectó.

Dante (D): Hola Amo

Amo (A): Hola putito, como estas?

D: bien, con ganas de servir a mi amo

A: sabes que me encanta ese culo que te cargas.

D: es tuyo, usalo!

A: sólo recuerda que ese culo es para usarlo con poppers y reventartelo.

D: hoy tengo disponible y me coges como me gusta.

A: pinchi puto, pues vamos al vapor y de paso te veo coger con otros.

D: va, llego en unos 30 minutos.

Nos citamos en un vapor del centro, y me dispuse a desvestirme, algo que disfruto mucho es desnudarme en público, ver las miradas lascivas de los hombres al ver mi culo y mis senos.

A: ahorita te veo, déjame desvestirme.

D: Esta bien.

Fui caminando por el lugar, había gente fumando y platicando, eran alrededor de las 3 de la tarde.
Posteriormente me percaté que me seguia un señor blanco  de unos 40 años, se notaba que hacía ejercicio, bastante atractivo, camino hasta la zona de los cubículos donde hay una luz tenue y se me acerca más a mi y me dice al odio, Que ricas Chichis tienes, me dejas mamarias, me excito sólo escuchar que me las quería chupar, sin embargo mi amo me estaría esperando, pero el señor que le pondré por nombre Enrique me toma fuerte un seno y se lo mete a la boca, succionando lentamente haciendo que suelte pequeños gemidos de placer, entre gemidos le hago entender que estoy esperando a alguien y el sigue en su labor de trabajar mi pecho, uso un poco de fuerza y le dijo que espere que regresare con mi amo.

Me encuentro con mi amo en la zona de la entrada del lugar, algo que tengo que resaltar es que mi amo es un señor de unos 45 años, chaparrito, Moreno pero muy dominante, con una verga de unos 16 centímetros pero que me ha hecho gemir de placer en varias ocasiones.
Lo veo y me comenta que si ya andaba cogiendo, le dijo que estaba con alguien que me estaba succionando los senos y que si vamos y estamos los tres, a lo que acepta y entro en el cubículo donde se encuentra Enrique.

E: papi pensé que no regresarias.

D: claro que regresó, y traje a mi amo para que disfrutemos los tres.

En eso empieza Enrique a seguir con su labor de darme placer mediante chupar mis senos, gimo un poco fuerte, en lo que mi amo esta besando mi espalda, hasta que siento el dedo de mi amo perforando mi recto, ese acto me hace gemir a un más y veo que Enrique me empieza a morder mi pezón.
Estoy en la gloria, dos machos brindandome placer y peleándose por quien me hace gemir o más bien gritar de placer.

Siento el ligero olor a Popper, me retiro de Enrique y le pido a mi amo que me brinde un poco, deseo estar excitado totalmente con ellos, inhalo, siento un poco dolor de cabeza, la vista se me nubla, no pienso en más que ser penetrado por esos dos machos.

Levanto a Enrique y nos fundimos en un beso los tres, finalmente toco el miembro de Enrique.
Es un daño grueso de unos 18 cm, circunsidado, con unos testículos deliciosos, llenos de bellos, se ve imponente su verga, está lubricando y también está la de mi amo, 16 cm, gruesa y unos huevos más pequeños a los de Enrique.

Me meto ambas a la boca, el sabor y las texturas contrastan pero me gusta.
El olor de verga un poco sudada es el aroma que puede que un hombre se convierta en un animal en celo.
Y ahí estaba yo, sentado probando y brindando sexo oral a dos hombres, los dos bufaban como toros en busca de un hoyo en donde saciar su deseo.

Mi amo retira su falo de mi boca, me incorporo y me brinda un poco más de sus poppers.
Siento más deseo, quiero ser poseído por mi amo, sólo me acerco a su odio y le susurró un "cogeme".

Escucho el sonido de un condón abriéndose pero es silenciado por el sonido de las secciones de Enrique.
Estoy tan concentrado en mis pechos que no noto cuando mi amo me clava, esta dentro de mi, siento como mi esfínter sede a sus estocadas, Enrique me besa, juega con mi barba, estoy gritando de placer, escucho a mi amo elogiar mi culo.
Me empieza a penetrar más recio, en eso siento como lo saca dejándome un vacío que rápidamente es ocupado por un pito más largo y grueso.

D: no mames sigue así.

Es la verga de Enrique y es un experto me hace gritar, la saca y mete pausado luego rápidamente, siento sus huevos chocar en mis nalgas, es inevitable, estoy siendo cogido por un hombre que sabe como llenar el deseo de un pasivo.
En eso me la saca y vuelve a entrar mi amo, mientras Enrique ve como me está cogiendo, empieza a chupar el pecho de mi amo y lo muerde.

Mi amo se enoja y me saca la verga de mi culo, no puedo con esto y se sale del cubículo, le pido disculpa a Enrique y voy a buscarlo, no encuentro a mi amo, aún siento el pensamiento nublado ocasionado por los poppers, se que lo correcto es retirarme del lugar pero recuerdo como me estaba cogiendo Enrique y pienso que no sería mala idea seguir con el.

Regreso al cubículo, sigue ahí tomando una cerveza, entre la poca luz del lugar alcanzó a distinguir una sonrisa.

E: pensé que irías atrás de tu novio.

D: no es mi novio, es un amo que tengo

E: no te apures, pero que poco aguanta a ti te estaba mordiendo más rico.

D: bueno es que a mi me gusta el dolor.

Me ofrece un poco de cerveza, le doy un sorbo y el quiere seguir mamando mis chichis, estoy gimiendo nuevamente, en eso siento algo helado en mi pecho.
Enrique está tachando cerveza en mi pecho y chupando, mordiendo, empiezo a sentir dolor pero me gusta.
Estoy siendo entrenado en un nuevo nivel de dolor.
Soy sumiso, lo admito y la manera en que me domina Enrique es deliciosa.
Me sigue mordiendo y veo esa tranca alzada, con sabla dispuesta a romperme y lo deseo me volteó y siento como su pito busca entrar en mi culo, en una siento como entra y grito de dolor, estoy totalmente ensartado por él.
Lo hace recio, duro, esta convertido en un animal en celo, eso es lo que me gusta de coger con un macho.
No es tierno, es deseo, lujuria, dominar al otro, la saca y la vuelve a meter.
No notamos que la puerta está entre abierta y hay un gordito viendo como me está cogiendo, se la está tocando, pero hoy no quiero otra verga.
Hoy sólo quiero la verga de Enrique en mi, toma conciencia y cierra la puerta privando al gordito del espectáculo.

E: gordo me voy a venir.

D: Dame tus mecos

E: en donde los quieres

D: en mi barba

Me saca la verga y me pongo en posición de recibir leche de mi nuevo amo.
Los que tienen barba saben lo delicioso que es que se vengan en ella.
Sentir los chorros de leche inundando tu barba.
Le salen 5 chorros que recibo gustoso, me lleno de mecos la cara, un poco me quedo en los labios, sólo lo pruebo y es un sabor dulce, se nota un aroma agradable, estoy sudando y el también.
Siento mi culito abierto y me doy cuenta que me he venido sin percatarme.
Estoy seguro que fue durante la penetración.
Me siento en la banca, estoy sudoroso, Enrique me besa mientras derrama cerveza en nuestras bocas, su pene está flacido, me comenta que no es la primera cerveza que toma que había salido a comprar otra cuando me vio y no pudo evitar verme.
Me está besando, baja a mis chichis y las muerde y chupa, pasando la excitación noto mis pechos pesados, duros y calientes, me duelen al tocarlos.

Enrique me comenta que irá al baño, desea orinar y le comento que me orine, que no importa, se sorprende y me pregunta que si en serio, le respondo que si que me orine los pechos, entonces vuelvo a ponerme en posición y empieza a recibir su lluvia dorada,  es delicioso sentir la orina de un hombre, le sale mucha está dejando un olor impregnado en todo el cubículo.

Finalmente termina y me besa, salimos del cibiculo y yo voy a buscar una toalla para bañarme, veo el reloj de mi celular, son las 7 de la tarde, han pasado 4 horas desde que ingrese al vapor, 4 horas de placer y sumisión ante un nuevo amo, volteó a ver mis pechos, están morados, con marcas de mordidas, me duelen horrible pero valio la pena.

Me dispongo a ducharme, Enrique está haciendo lo mismo, nos vestimos y antes de irse nos intercambiamos números con la promesa de otra sesión como la que acabamos de vivir.

Nos despedimos y veo el mensaje de mi amo, esta molesto porque no fui atrás de el, le comento que lo busque y al no encontrarlo me retiré del lugar.
No sabrá que pase una tarde entregado a otro amo.

Disculpen lo largo del relato, les comento que es 100% real, cambie los nombres por motivo de discreción, espero que les guste y seguire contando mis historias.

Si eres de Guadalajara y quieres mantener contacto conmigo puedes enviar correo a dantesumiso@gmail.
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