El hijo de mi mejor amigo – Parte 2

Después de que mi mejor amigo me diera permiso tome a su hijo como mio .. si no te agrada el contenido con nenes fuerte no lo leas.
Antes se iniciar este relato te invito a que pases a leer la primera parte en mi perfil, no olviden dar estrellas si les agrada.

Al abrir la puerta de la habitación y ver a Alberto ahí asustado y llorando, mi pene no pudo evitar ponerse al cien por ciento, sentía la sangre correr por lo largo de mi verga, caliente y bien dura.

Aun con mi amigo al teléfono, me acerco a Alberto, todo tembloroso por la adrenalina que corría por mi cuerpo, me siento a un lado de él, y el nene se me queda viendo con sus ojitos todos llorosos, no me aguanto y le doy un abrazo, el niño se hecho a llorar y me dijo que le había dado mucho miedo por que pensó que se iba a ahogar.

Solo lo abrase hasta que se tranquilizó, de pronto recordé que Cristian, el padre de Alberto seguía en el teléfono, y sus palabras donde me autorizaba y casi exigía que violada a su hijo, solo acomode el celular en el mueble de enfrente prendí la cámara, y ahi estaba mi amigo, con la verga de fuera tocándose.

Me acerque a Alberto, y le dí una sola indicación, con la voz de mando, “desnúdate” y al mismo tiempo yo me quite toda la ropa, mientras Alberto se desnudaba yo fui al cajón de mi roba y saque el lubricante y consoladores.

Yo estaba como poseído algo me decia que me detuviera pero el lado salvaje de mi me incitaba a seguir, Alberto ya desnudo me dijo:

A: ¿Qué me vas hacer?
J: Te voy a convertir en mi puta.

A: Tengo miedo, empezaban algunas lagrimas a salir de sus ojos, pero se mantenia tranquilo.

J: No tengas miedo, tu solo intenta disfrutar, desde mi celular solo se escucho la risa de Cristian.

Agarre de los hombros a Alberto y lo volte en la cama, le puse un par de almohadas en la cintura para que su hermoso culito quedara en alto, y le puse otra almohada en la cara.

Empece a ponerle lubricante en el culo, y comencé a explicarle lo que iba a pasar:

J; Alberto ahorita te voy a coger, lo que significa que te voy a meter la verga en el culo, te aviso que te va a doler, si quieres llorar o gritar, puedes hacerlo pero en la almohada que tienes frente, te aviso que una ves que inicie no me voy a detener.

A: Me va a dolor, con lagrimas en los ojos

J: Claro y mucho, pero te aguantas ¿Quedo claro?

A: Pero no quiero dijo empezando a poner cara de que iba a llorar fuerte. Lo interrumpí con una fuerte cachetada.

J: Eres un hombresito y tienes que aguantar, no puedes andar llorando como maricon.

Desde el celular escuche a Cristian decir “Eso, que le quede claro quien manda”

Coloque la verga en la entrada del ano de Alberto y empece a poner presión, el pendejo empezó a apretar el ano y a chillar, como le había dicho coloco su cara en la almohada, una vez que mi cabeza entro en el ano, no me contuve y le deje ir la verga todo hasta el fondo.

Alberto empezó a gritar y moverse como loco, solo deje caer mi cuerpo en él para que no se saliera mi verga, se sentía tan apretado y calientito, con mi mano empujaba su cabeza al fondo se la almohada para que sus gritos no se escucharan.

Pero al mismo tiempo sus gritos fueron como una droga para mi, sentía que la verga se me ponía tan dura como nunca antes, intente iniciar el bombeo pero Alberto empujo y se me salió.

Eso me hizo molestar y le di un par de cachetadas, lo agarre de las greñas y le grite, que te calles puta, el solo me vio, tome mi verga y se la deje ir al fondo, vas a aguantar dije.

Empece a bombearlo sin piedad, Alberto solo lloraba con la cabeza bien hundida en la almohada, después de un rato ya no gritaba y solo seguía llorando, aproveché para voltearlo y ponerlo patitas al hombro.

Al voltearlo, note que te tenia sangre en el culo y un poco de eses, pero no me importo, de cierta manera me exito, y se la deje ir al fondo, tome un consolador que tenia a un lado y se lo empece a meter en la boca, y sin importarme se lo metí hasta la garganta, Albertito solo tenia arcadas.

Después de un rato se bombearlo sentí que me iba a venir y le empece a dar duro, se la metia hasta el fondo, sentía que topaba en algo, pero yo solo quería llegar lo mas adentro que podia, y Alberto solo gruñía de dolor, pero no me importaba, yo solo quería llenarlo de leche, y empece a darle cacheteadas, pues me prendía.

Cinco envestidas bien fuerte y cinco cachetadas me hicieron venir, siete chorros de espesa leche le llenaron el culito a Alberto, pero ese no fue el final, le deje la verga adentro.

Con una mano lo acariciaba, para tranquilizarlo, seguía bombeando pero muy lentamente, y me dijo Cristian desde el teléfono, “uy wey me hiciste terminar bien rico”.

Yo solo levante el meñique, me levante aun con Alberto ensartado y me dirijo a la regadera,  el seguía sollozando yo lo comencé a bañar, pero en todo momento con la verga adentro.

J: ¿Como estas?

A: Me duele mucho

J: Es normal, las putas como tu deben sufrir

A: tengo sed

Eso me dio una idea le saque la verga, le empece a lavar el ano, que le salía sangre, con mi leche, le puse una pomada una vez que mi verga se durmió me acerque a su cara, le levante el rostro y le dije, te lo vas a tomar todo, le abrí la boca puse mi verga dentro y solté el chorro de miados, pobre se ti que lo tires, le dije levantando el puño y procedió a tomarme toda mi pipi.

Lo cargue hasta la cama me recosté con él y nos quedamos dormidos.

…

Espero les haya gustado, ya saben que pueden escribirme y no olviden dar estrellas ..