El papá de mi hermano 3: me estrenan el culo

“Bien, ahora te la voy a meter putita” me dice mientras su mano agarra mi mandíbula, echándome para arriba con fuerza para que me ponga de pie “No, yo nunca e tenido sexo por ahí” le dije “No te creo, la chupas como una prostituta, claro que te han clavado ya”.

Hace unos meses relaté sobre mi ex padrastro, y de como pasamos un buen rato en común, quise contar algo que me paso con carlos mas reciente, pero me percaté de que había dejado la historia inconclusa, así que voy a escribir la continuación a la parte anterior y enseguida subo la historia que quería; esta vez voy a relatar toda la historia en uno solo como me sugirieron en la parte 2; si gustan leerlo les dejo el link

https://sexosintabues30.com/relatos-eroticos/gays/el-papa-de-mi-hermano-2/

Si no lo quieren leer tampoco se pierden de mucho, y les puedo describir brevemente a todos para que simplemente lean el relato; yo en este entonces tenia 19, delgado y marcado por el gym, de piernas y nalgas algo gruesas, me gustan los gordos y maduros (y los gordos maduros claro esta)

Carlos es la actual pareja de mi ex madrastra; (ella es la madre de mi hermano y tiempo después se caso con carlos y tuvieron otro hijo) de 1.75, gordo y peludo, borracho y un poco amargado, de cabello negro y corto y rasurado; y con una verga gruesa de unos 20 cm mas o menos y con mucho vello.

En la parte 1 hablo de como me gustaba oler su ropa interior y en la parte 2 cuento como llega borracho y le mame la verga en un momento de intimidad entre ambos.

Esta historia sucede días después, pude sentir que Carlos me estaba evitando, casi nunca estaba en casa si yo estaba, y si daba la casualidad de que estuviéramos los dos, hacia todo lo posible por salir e irse, supongo que la conciencia no le dejaba tranquilo luego de venirse en mi boca y probablemente disfrutarlo, yo por mi parte no quise presionar mucho las cosas, actuaba como si no hubiera pasado nada y simplemente seguía el día con normalidad; como comenté antes, Carlos trabaja en un taller de autos, es el dueño del local mas no un mecánico en si, aunque si que conoce una cosa o dos sobre autos, y como ya relaté antes, se la pasa metido en el taller y luego se va y se emborracha, gracias a esto su esposa no quiere tener sexo con el y casi siempre lo deja durmiendo en el sofá.

Sorpresivamente luego de esa noche Carlos cambió su forma de comportarse, ya no bebía tanto y cada que podia intentaba salir nuevamente con su esposa e hijos, aunque claro, si todos en casa salían me llevaban a mi también y a veces solo salían ellos dos y yo me quedaba en casa cuidando a mis hermanos; ya luego de un tiempo mi padre había conseguido un apartamento y de vez en cuando iba y dormía con él, pero al no tener una habitación propia eventualmente volvía con Carlos y su familia. Recuerdo que una de estas veces yo estaba durmiendo en casa de mi padre que estaba de viaje y me había dejado su cuarto, a eso de las 11 de la mañana recibí una llamada de parte de Carolina (mi ex madrastra) pidiéndome que le acompañara a hacer unos recados, pues hacer vueltas solamente ella y los 2 niños se vuelve algo trabajoso, yo le dije que si y ese día me fui con ella a comprar unas cosas y dimos varias vueltas por la ciudad

A eso de las 3 de la tarde ya habíamos terminado y fuimos al taller de Carlos, queda algo retirado de su casa y es por esto que en parte se queda mas tiempo allí, pues el viaje hasta casa es de hora y media mas o menos, ese día solo estaba Carlos, estuvimos un rato con el y al momento de irnos pude escuchar como Carlos y su esposa se encerraron en la bodega; el taller tiene 2 pisos, de los cuales mis hermanos estaban en el primero y yo estaba en el segundo piso en la oficina de carlos ayudándole con unos papeles; algo con lo que no contaban era que en el escritorio donde yo estaba, el pc tenia acceso a las cámaras de seguridad, por lo que aburrido me quede viendo estas por unos minutos, las cámaras daban a la calle, los puestos de trabajo y por supuesto, la bodega.

Si bien no había audio, se podia ver claramente lo que estaban haciendo, Carlos y su esposa se besaban apasionadamente mientras ella sentada sobre unas cajas le quitaba la ropa a él y viceversa, en la cámara se podia ver poco de ella, pues mayormente se veía la espalda de Carlos, totalmente descamisada y con sus hermosos vellos al aire, de un momento a otro, se desabrocha su pantalón y este cae al suelo, dejándome la hermosa vista de sus nalgas, siendo sincero, Carlos no tiene el cuerpo de un súper modelo ni mucho menos, su cuerpo es el de una persona gorda, sin nada de ejercicio o sin estar marcado por nada, su barriga y pechos son bastante gordos, pero tampoco le cuelga la piel como si habláramos de obesidad intensa, sus nalgas no eran para nada grandes, mas que por gordura, es decir eran anchas pero no redondas y provenientes; claro que a mi esto me pone demasiado, verle la espalda gorda y esas nalgas rebotando conforme daba embestidas en su esposa me ponían a mil.

La situación lamentablemente no tardó mucho, mientras yo me deleitaba con su gran cuerpo, hubo un momento en el que ambos se detuvieron, rápidamente se separaron y comenzaron a vestirse y volvieron a la puerta del taller; yo me había quedado en la oficina y sólo baje cuando vi que su esposa y mis hermanos se estaban yendo del lugar, ya había bajado mi erección y baje preguntándome que había ocurrido. “¿Que pasó Carlos? Porque se fueron Caro y los niños?” Le pregunté “es que ya se fue el trabajador que estaba aquí,  por lo que voy a estar cuidando todo el local” me respondió “tu te regresas conmigo ya cuando vaya a cerrar, te parece?” Me preguntó “Si claro, no hay problema, igual no e terminado arriba de organizar todo” le respondí; de todas formas el local se cierra a las 6 y ya eran las 4 aproximadamente.

Yo volví a subir y organizar todo y al parecer me concentré tanto que el tiempo se fue volando, Carlos entró por la puerta de su oficina y me dijo “Listo Daniel, ya cerré todo, deja termino unas cosas y nos vamos” yo asentí y le comenté un poco sobre como había organizado su oficina, en medio de todo se me había olvidado volver a poner las cámaras cómo estaban, y Carlos se dio cuenta de que en la pantalla estaba en grande la cámara de la bodega “¿Que estabas viendo?” Me dice mientras se ríe y señala la pantalla; yo volteo a ver la pantalla y podría jurar que me sonrojé de la pena, me había pillado completamente y no es la primera vez que nos pasa algo así “a si, este…” intenté excusarme “No te preocupes mijo, si yo se que a tu edad andas bien caliente” me interrumpió “jeje si estoy caliente yo, no me imagino un chico como tu” añadió “aunque veo que te interrumpieron la faena” le dije ya un poco mas en confianza “si hombre, quizás que le habrá pasado al pobre que tuvo que salir corriendo a casa de esa forma” me dijo.

Luego de esto hubo un silencio un tanto incómodo, como sin saber como continuar la conversación, yo volví a recoger mis cosas y Carlos también “Listo, nos podemos ir” me dice “aunque oye, antes de irnos…” añade y luego hace una breve pausa, pensando lo que me iba a decir y como “Quería hablarte de ese día, desde entonces no hablamos” me dijo “No te preocupes, no fue nada al fin y al cabo” le respondí intentando disminuir la tensión “no pero si pasó, te falté el respeto y se lo falte a mi mujer también” dice “A mi no me faltaste el respeto, además, no fue nada, estabas algo estresado y yo te ayudé” le dije mientras le sonreía “Es que estuve pensando mucho en eso, desde ese día ando muy caliente” me dice “y aveces no me aguanto y mira hoy, estábamos en esas y nos interrumpen, ahora me toca esperar quien sabe hasta cuando para tener otra oportunidad a solas con Carolina” añade “Bueno después de 2 hijos es difícil tener privacidad jeje” le respondo “aunque si quieres te puedo ayudar con eso y lo sabes” añadí mirándolo de arriba a abajo.

Por un momento sentí la duda en la mente de carlos, y no pude evitar pensar en lo puta que estaba siendo al ofrecerme así, ni supe porqué lo hice, solo lo dije; Carlos suelta todo lo que tenia en la mano y se sienta en la silla frente a su escritorio “Ven” me dice, con el seño fruncido y echándose para atrás “No pensé que volveríamos a hacer nada, pero ya veo que eres todo un maricon que le gusta la verga” me dice mientras se desabrocha el cinturón, yo rápidamente me arrodillo frente a él con una sonrisa de oreja a oreja “y yo veo que eres tan caliente que no te importa si es mujer u hombre” le digo mientras quito sus manos y comienzo a quitarle su pantalón yo “Con lo rico que la mamas difícil decir que no” me responde; su verga seguía flácida, pero aun así se le marcaba un gran bulto en su ropa interior, yo comencé a besar y oler su entrepierna, el olor era fantástico, sabía a sudor y olía a colonia, toda una verga de macho; conforme iba acariciando su bulto, mis manos le subían la camisa a Carlos, dejándome sobarle su peluda barriga mientras sentía como su verga crecía en mi otra mano

“Mira, quien diría que hasta sobrio te pondrías caliente conmigo” le digo mientras mi mano le va sacando la verga semi erecta de sus calzoncillos “Cállate puta” me dice mientras agarra su verga con una mano y con la otra sujeta mi cabeza, lleva su verga a mi boca y me empuja hacía ella; yo comencé a chupar su pene con mucho entusiasmo, me prendía que un hombre hecho y derecho me traté mal y como una perra, podía sentir como su miembro crecía dentro de mi boca, llegando hasta mi garganta, sabia salado y mi nariz estaba en medio de una mata de pelos que olían a macho “mmm, mira como te la tragas bebé” me decía “Te gusta mi verga preciosa?” Me preguntaba, yo no podia decir nada así que solo asentía y gemía “tómala, es toda tuya” me decía mientras comenzaba a aumentar el ritmo, su verga llegaba hasta el fondo de mi garganta, y luego la sacaba hasta la mitad para luego volver a meterla de golpe, todo cada vez más y más rápido, llegó un punto donde yo solo podia quedarme quieto, mis manos sostenían sus rodillas dándome equilibrio mientras que con ambas manos sujetaba mi cabeza para follarse mi boca.

Mi cara golpeaba contra su pelvis y hacia mucho ruido como si de cogerse un culo se tratara, finalmente luego de unos minutos me empujó por completo hacía él, y me sujetaba fuertemente por unos segundos, ahogándome con su verga y haciéndome luchar por un poco de aire, mis ojos se voltearon poniéndose blancos y mis manos intentaban alejarme de él, con mucha saliva saliendo de mi boca y escurriéndose hacia el piso, luego de un momento me soltó y mi cabeza salió disparada hacia atrás, mis cachetes volvían a ponerse de su color y mi boca estaba abierta intentando tomar aire, mientras mis ojos llorosos le miraban desde abajo con total sumisión

“Bien, ahora te la voy a meter putita” me dice mientras su mano agarra mi mandíbula, echándome para arriba con fuerza para que me ponga de pie “No, yo nunca e tenido sexo por ahí” le dije “No te creo, la chupas como una prostituta, claro que te han clavado ya”

Rápidamente me salí de personaje, quitando su mano de mi cara y con un tono firme diciendo “Es verdad, pero si es contigo me gustaría hacerlo” mis ojos miraban directamente a los suyos y pude ver como su cara cambió de estar enojada a una sonrisa lupina, mirándome como si fuera su presa, esperando a ser devorada por esa gran fiera “Esta bien, voltéate y ponte sobre la mesa” me dice señalando el escritorio con lo cual yo obedecí, mi cuerpo se abalanzó sobre la mesa dejando mis piernas hacia él, con ambas manos me comenzó a bajar mi pantalón junto con mis bóxers, dejando mis nalgas redonditas y rosaditas en el aire, acto seguido comenzó a morder mis nalgas y darles chupones por todos lados “Que nalgas de puta que tienes” me decía “Te voy a comer el culo y luego te lo voy a partir perra” decía mientras me mordisqueaba mis nalgas “vas a quedar pidiéndome verga a diario con el cogidón que te voy a dar” añade mientras su lengua pasa por toda mi raja, de arriba a abajo y luego se enfoca en mi ano, yo solo podía gemir y disfrutar de como su lengua hacía círculos en mi ano y de vez en cuando la introducía un poco.

Muchas caricias y lamidas después, siento un corrientazo por todo mi cuerpo cuando su lengua comienza a entrar y salir de mi orificio, sus manos sujetaban mis nalgas para separarlas y su boca no se despegaba de mi culo, finalmente su mano derecha comienza a jugar con mi ano, introduciendo un dedo lleno de saliva y luego dos; mi cuerpo se volvió súper sensible, podia sentir el viendo por todas mis nalgas y su saliva por todo mi culo, conforme sus dedos jugaban con mi ano yo solo podia gemir y suspirar, mi respiración se volvió muy fuerte y mi cuerpo pedía mas; de un momento a otro puedo sentir como solamente me metía los dedos, pues su boca ya no me daba lamidas, en la sombra pude ver como Carlos se había puesto de pie nuevamente, solo usando sus manos para jugar con mi ano y abrir una de mis nalgas, en un momento escucho como suelta un escupitajo hacia mi culo y de un momento a otro saca sus dedos.

“Que rico culito” me dice, mientras siento como la cabeza de su verga comienza a jugar con mi orificio y empieza a entrar un poco y con facilidad gracias a todo el juego previo, mis manos se agarran firmemente de la mesa y mi culo lo puse en pompa para que pudiera meter su verga, estaba listo para ella y la quería ya “Méteme la verga papito, pero despacio” le dije mientras volteaba a verle “Si mi reina, luego vas a ver que te va a gustar” me responde mientras lentamente su verga empieza a entrar, la sensación era algo extraña, sentía que estaba haciendo del baño pero al mismo tiempo unas cosquillas provenientes de mi ano me tenían con la boca abierta soltando pequeños gemidos que parecían mas bien un gemido largo; Carlos introdujo la mitad de la verga y luego se quedó quieto con ella dentro, yo solté un gran gemido en reacción a esto y mis manos apretaban el borde de la mesa “Ves como te gusta mi amor” me decía acercándose a mi oreja mientras sus manos se colocaban una a cada lado de mi cintura.

Estuvimos así unos segundos hasta que yo sentí que podíamos comenzar, mi cuerpo se recostó sobre la mesa y mis brazos se cruzaron haciéndome de almohada para mi frente, mi cuerpo se echó para atrás dándole la señal de que podía continuar; Carlos agarró su barriga y de un movimiento la acomodó sobre mi, dejándola sobre mi espalda baja para así poder seguir metiéndome su verga, de manera suave y delicada comenzó a meter el resto hasta llegar al fondo de su miembro, en cuanto mis nalgas tocaron su pelvis no pude evitar soltar un “Ay” muy grande en forma de suspiro, al llegar a introducir toda su verga, Carlos comienza a sacarla y meterla lentamente haciendo movimientos suaves para comenzar a coger mi culo “Eso preciosa, ¿Te gusta?” Me susurraba en la oreja mientras todo su cuerpo estaba sobre mi, sus manos agarraban mi cintura acomodándome fuera de la mesa, con mi verga colgando y chorreando preseminal y con toda su barriga cobre mi espalda.

Así estuvimos unos minutos en los que poco a poco iba subiendo el ritmo, no tarde mucho en acostumbrarme cuando siento que comienza a embestirme con facilidad, su gruesa verga entraba y salía de mi ano rápidamente y alcanzaba a meterme sus 20 centímetros completamente, la sacaba hasta la mitad y luego volvía a meterla de un golpe, yo no hacia mas que gemir y gritar “más papi más” con cada estocada yo me sentía cada vez mas cerca de la gloria “Si mijo, ya la aguantaste, ahora si” me dijo mientras su cuerpo se levantaba nuevamente, sus manos agarraban mi cintura con firmeza y seguía cogiendo mi culo; de un momento a otro comienzo a sentir como los movimientos eran mas rápidos que antes, su cadera golpeaba mis nalgas y toda la oficina aplaudía, me estaba follando muy rápido y embestía mi culo con fuerza.

Los gemidos de ambos llenaban la habitación y se mezclaban con los aplausos que hacían nuestros cuerpos, su mano se postraba sobre mi espalda empujándome hacia abajo mientras su verga seguía llenando lo mas profundo de mi ser, luego esa misma mano se mueve hacia mi cabeza, agarrando firmemente mi cabello, y jalando hacia arriba mi cuerpo, con su mano sujetando mi cabeza y el resto de su cuerpo partiéndome en dos, los gemidos y suspiros eran cada vez mas fuertes, ya podia sentir como estaba a punto de eyacular de tanto tiempo embistiendo mi culo “Ah, me voy a venir” le digo casi que sílaba por sílaba por tanto gemir y suspirar, ambas manos sujetaron mis hombros y su verga entraba cada vez más, esta vez no la sacaba a la mitad, mas bien la metía un 90% y luego toda, con movimientos bruscos y fuertes; mis piernas temblaban y mi cuerpo ya no podía mas, con un fuerte gemido comencé a eyacular por todo el piso.

No se si alguna vez se han masturbado y al momento de eyacular siguen con la misma velocidad, sienten como todo su cuerpo se estremece y se siente súper sensible, pues lo mismo me pasó en ese momento, pues a pesar de que ya me había corrido, Carlos no había bajado el ritmo nunca, mi cuerpo temblaba e intentaba safarse, pero Carlos no me dejaba, su cuerpo aprisionaba el mio completamente y no dejaba de embestirme, yo solo podia gemir, casi no podia respirar por estarme quedando sin aire por tanto; eventualmente el cuerpo de Carlos comenzó a temblar, su verga se introdujo completamente en mi ano y Carlos me respiraba fuerte en mi oído, dejándose caer sobre mi aplastándome con su gigantesco cuerpo sobre la mesa, podia sentir como su verga temblaba en mi interior y me llenaba de su caliente y espeso semen, sin dejar de disparar por unos segundos, soltando unos 10 o mas chorros en mi interior.

Con su cuerpo sobre el mio y ambos respirando fuertemente intentando recuperarse, Carlos me daba besos en el cuello y me chupaba las orejas, estuvimos así un rato conforme su verga perdía tamaño, Carlos se volvió a poner de pie y se echó para tras sacando la verga de mi culo, se sentó en la silla observando como de mi culo salían cantidades inmensas de su leche, escurriéndose por mis piernas y manchando todo el suelo “Mira como te dejé, chorreando todo” me dice Carlos mientras se ríe “no había soltado tanta lecha nunca” añade; yo no podia responder ni decir nada, seguía sobre la mesa respirando fuerte y cogiendo aire “Me dejaste bien satisfecho mijo, que rico culo tienes” me dice mientras me da una nalgada muy fuerte y luego vuelve a poner su mano para abrirme las nalgas, viendo como seguía saliendo semen de mi ano

“Me dejaste bien lleno” le dije mientras me recuperaba, volteo a donde Carlos y le comienzo a comer la boca, con un beso tan largo y profundo que estaba esperando desde hace mucho, recién me doy cuenta de que era la primera vez que nos besábamos, luego de ya haber dejado mi boca y ahora mi culo llenos de leche; Carlos me indicó donde estaba el baño, en el cual había una ducha que yo estaba usando mientras Carlos limpiaba todo el piso y el escritorio de nuestra pequeña actividad, nos subimos en su auto y nos fuimos a casa, como ya les dije el trayecto era bastante largo, y al ser de noche mas los vidrios oscuros, me aseguré de darle otra deslechada con mi boca camino a casa, me dejó en casa de mi padre y luego se fue a la suya mas que contento.

FIN.

Bueno hasta aquí el relato, como les comentaba también tengo más anécdotas que contar, de hecho esta historia es de hace 2 años, actualmente Carlos y su familia se mudaron a Estados Unidos, y yo me estoy quedando con ellos, han sido unos cuantos meses mas que interesantes y llenos de aventuras para contar 😉 recuerden mi twitter es @LDGhost28, les doy RT a muchos gordos que me parecen atractivos por si gustan mirar, y si son gordos y/o maduros no duden en mandarme DM y mostrarme sus bellos cuerpos.