El pequeño Teo se va de vacaciones con su tío (2)

Durante las vacaciones en la capital, teo va con su tío a una fiesta distinta.
Esa mañana me desperté por el ruido de los colectivos que entra desde la ventana que esta abierta por completo, me refriego los ojos, busco a Pablo, pero no está, lo llamo y no responde. Me levanto y lo busco por la casa y tampoco. Al ver que estoy solo, me sirvo un vaso con jugo y me voy a ver la tele en el sillón. No habrán pasado unos quince minutos que lo escucho entrar hablando con alguien, lo miro, me saluda y levanta el celular como señal.

Pablo. Si, claro que tengo ganas de ir, pero no se, estoy con mi sobrino… si, justamente veo que ya se levantó. bueno, dale, le pregunto y te escribo… un abrazo.

Pone a cargar el celular, se acerca y frota la cabeza batiendome el pelo.

Pablo. Buenos días… ¿cómo dormiste?

Teo. Hola tío. Bien ¿vos?

Pablo. Muy bien, fui a buscar unas facturas para desayunar.

Durante el desayuno me cuenta que nos invitaron a una fiesta donde iban algunos amigos con su familia.

Pablo. ¿Queres venir?

Teo. Si, pero traje ropa para salir.

Pablo. Si, igualmente no se usa mucha ropa, es más, todo lo contrario.

Teo. No te entiendo.

Pablo. Mira la cosa es así, es una fiesta o reunión nudista que hacemos una vez al mes, se hace una quinta a las afueras de la ciudad. También además de estar desnudos, charlar y tomar algo, podemos jugar un ratito con otras personas.

Teo. Así como nosotros.

Pablo. Claro, tal cual…

Teo. ¿Y quienes van?

Pablo. Son solo amigos míos del trabajo, nadie puede saberlo.

Teo. Si, entiendo.

Pablo. Como yo no pregunto ni cuento, la idea sería que vos tampoco

Teo. Sería nuestro gran secreto

Pablo. Exactamente, ahora te propongo esto. Vamos, y si no te gusta o estás incómodo, nos volvemos. ¿Si?

Teo. Bueno, dale.

Pablo. Entonces a bañarse así arrancamos.

Yo me bañe primero y lo esperé acostado jugando con el celular. Pablo cuando termina, entra a la habitación envuelto en una toalla.

Pablo. Me voy a cambiar, tu ropa esta en el tender, pero si queres podes usar algo de sofi. A donde vamos, nadie se va a burlar, es más, todo lo contrario

Ssber que otra vez me podía poner ropa de sofi, dio alegría. Asique sin dudarlo, empecé a revolver el ropero hasts que encontré un conjunto de pollera y camisa de varios colores que me dieron ganas de probarme.
Cuando me pare frente al espejo, me dije, es este.

Pablo. Wow! Te queda precioso.

Teo. Gracias

Pablo. Vamos así llegamos temprano.

Estuve bastante ansioso todo el viaje, igualmente se me hizo rápido. Cuando llegamos, Pablo se anuncia por el portero, se abren las dos hojas del portón y entramos. Estaciona y nos recibe un guardia que está desnudo

Guarida. Vengan por acá.

Pablo. Vení, bájate.

Guardia. ¿Es su primera vez?

Pablo. Si, pero está al tanto de la temática…

Guardia. ¿Cómo te llamas hermosa?

Teo. Soy niño, me llamo teo.

Guardia. Perdón guapo.. espero no haberte incomodado

Teo. Esta bien.

Ambos ríen.
Mientras nos estamos sacando la ropa, el guardia no dejamos de mirarnos, luego nos asignan una casillero donde ponemos la ropa y vamos para la casa principal.
Mientras vamos llegando, veo a unos cuantos niños correteando, son todos de diferentes edades, mientras que más adelante están los adultos. Nunc había visto tanta gente desnuda en un mismo lugar.
Pablo saluda a un hombre que seguro tenía unos 70 años o más, sus pelos blancos hacen contraste con su piel excesivamente bronceada

Señor. Bienvenidos.. que bueno que pudieron venir.

Pablo abraza al señor y se pone a conversar, sin antes presentarme.

Señor. Bueno teo, allá esta la barra, podes tomar lo que quieras, ir a la pileta o hacer lo que quieras. Nosotros vamos a estar por acá.

En eso llega una nena me tomó de la mano

Nena. Hola, soy nati Vení, vamos a jugar.

Pablo. Anda teo, divertite. Cualquier cosa estoy por acá.

La niña me lleva de un tirón y yo voy por inercia.

Nena. Vamos a la pile.

Es una pileta gigante y está llena de gente. Nati me suelta y se tira al agua.

Señor. ¿Sabes nadar?

Teo. Hola, sisi.

Señor. Bueno, métete que esta hermosa

Hago un par de pasos y me tiro de clavado. El agua está super transparente. Podía ver todo, incluso como algunos adultos masturban a los niños y niñas de manera disimulada.
Salgo a tomar aire, me refriego los ojos y me paro junto al borde. El agua me llega al ombligo.

Neati. Que buen salto, ¿hace mucho sabes madar?

Teo. En casa tenemos una pileta grande

Nena. Nosotros también, y a mi me enseñó a nadar mi papá.

Teo. Que bueno, ¿y ahora está acá?

Nena. Si allá, con mi hermanita. Le está enseñando a ella ahora

Por la cara de la nena, es obvio que la estaba masturbando. El señor me saluda a lo lejos, a lo cual le respondo de la misma manera.
Es hay cuando siento que siento las manos de la nati en mi pito y empiezaa masturbarme.

Teo. No, ¿qué hace? Nos va a ver tu papá.

Nena. No pasa nada, cuando te vimos llegar él me pidió que vaya a buscarte… ¿Puedo seguir?

Asiento con la cabeza mientras que nati vuelve a agarrar mi pito. cierro los ojos y me dejo llevar. Sentir sus pequeñas acariciando mi pito y música huevitos, me hace perder en el tiempo y no podía disimular mis gemidos. En eso, siento que alguien aprieta mis nalgas, abro los ojos de golpe y es el papá de la nati.

Papá. Despacio hija, si es su primera vez le puede doler.

No digo nada, solo le sonrío. El sostiene a subotra hija que debe tener unos 3 o 4 años, la abraza de la panza mientras que la penetra con su enorme verga

Nena. Papi, ¿Después vas a jugar conmigo?

Papá. Si Nena, yo juego con todos…

Uno de sus dedos llega a mi hoyito entrando fácilmente, lo que me hace mirar al cielo y suspirar.

Papá. Me parece que este culito es re juguetón

Mis gemidos se mezclan con los de otra nena. Quiero aguantar pero no puedo, de golpe llego al orgasmo y se me aflojan las piernas. El señor me sostiene y me acuesta sobre él. La nena no deja de masturbarme, incluso cuando mi pito ya volvió a su tamaño inicial.

Papá. Listo mi amor. Déjalo que lo llevamos afuera con tu hermanita y sigo con vos.

El papá me recuesta al costado de la pileta junto a la nena más chiquita y se lleva a nati. No puedo dejar de verlo como la penetra, nati se retuerce sobre la verga de su papá mientras lo abraza.
Dos chicos que parecí ser más grandes me se me acercan y me piden que los acompañe. Voy sin dudarlo

Niño1. Hola soy pedro y el es Manuel.

Teo. Soy teo.

Manuel. Vimos cómo jugabas con el señor y te queremos invitar a que juegues con nosotros.

Teo. Bueno.

Pedro. Mira, toma esto que te va a gustar.

El me da un cuarto de una pastilla, no estoy seguro que era pero no me negué. Entramos a una cabaña y nos acostamos. Ellos se empezaron a besar mientras se masturban.

Manuel. Vení teo.

Sin pensarlo me sumo a ellos, mi pito está tan duro que siento que va a explotar. Pedro baja y me la empieza a chupar como con mucha hambre. Mientras que Manuel me cuenta el odio que me habían dado viagra y me explica para qué es, igualmente no le di mucha importancia ya que estaba en las nubes. Después de eso me rodea y empieza a penetrarme.
Realmente no podía hablar, sólo me retórica y gemía. Pedro deja de chuparmela y se pone de espaldas. Por instinto, lo tomo de la cintura, busco su hoyito y meto mi pito hasta el fondo.

Pedro. Aaahhh si..

Aumento la velocidad. Casi sin respirar, siento que está por llegar otro orgasmo. Intento aguantar, pero me es imposible. Luego de un par de bombazos más, doy el último golpe y suelto un suspiro lleno de gozo. A Manuel parece calentarlo y aumenta la velocidad hasta que me llena el culito de leche. Mientras que Pedro lleva su verga a mi boca y se la empiezo a chupar. No tarda mucho en acabar y soltar varios disparos que gustosamente trato.
Los tres nos quedamos tirados en la cama completamente transpirados hasta dormirnos.

De un momento a otro me despierta Pablo y me sonríe.

Pablo. Veo que la estas pasando bien.

Teo. Si, ¿dónde estabas?

Pablo. Te estaba buscando y me dijeron que estabas acá.

Pablo se acuesta y nos empezamos a besar y a acariciar. Poco a poco baja y me chupa el pito que ya estaba duro. Yo ya no tenía fuerza, igualmente no quería que pare.

Teo. Ahhh si, así aahh

Mientras me la chupa mete sus dedos en mi culito y me lleva a otro orgasmo. Estoy extasiado, a punto del desmayo. Pablo me levanta las piernas poniéndolas en sus hombros y me empieza a penetrar. Cierro los ojos y con mis manos aprieto las sábanas.

Señor. Abrí la boquita bebé.

No era la voz de Pablo, pero no pude negarme. Cuando siento algo entra, abro los ojos y veo como el señor mayor de la entrada me está dando su verga. Intenté negarme pero fue imposible.

Señor. Dale que te gusta nene.

Es hermosa la sensación que tengo. Me están cogiendo por la boca y por el culo dos pijudos. Sus gemidos parecen unirse hasta que en un momento siento varios chorros de leche en mi interior. No estoy seguro quien acabó primero pero fue espectacular.

Pablo. Gracias hermoso, ahora descansa un ratito.

Los escucho conversar pero no les entiendo nada, tengo ganas de orinar pero no puedo moverme y tampoco aguantar así que me orino encima. En esa misma situación me duermo.

Continuará