El Sadico de mi hermano

No sabia que mi hermano deseaba mi culito ni lo sadico que era.
Yo no sabia que mi hermano era tan sádico, ni que mi culo le ponía tanto, soy Lucas tengo 20 años, tenia mucho excito con las chicas, habia follado desde mis 15 montones de veces, pero nunca habia estado con un hombre, mi hermano tenia 23 años, y nunca lo vi como objetivo sexual ni nada por el estilo, era mi hermano, aveces le incistia para salir con chicas pero el se negaba, me parecía extraño la verdad, pero no le daba importancia.

Una tarde estábamos solos en casa, y me propone beber un whisky y charlar, alli me confiesa que es gay, que por eso nunca le apetecía salir en busca de tías.

-Mateo ahora lo entiendo todo-dije- me lo hubieras contado antes, un amigo mio gay, esta que babea por ti.

-En serio Lucas jaajaja- se rie Mateo- Es el Ricar verdad, dice porque se le nota. Y …

-Te lo has follado verdad-afirme- con razón aquella tarde desaparecieron los dos en la barbacoa.

-Bueno algo así -dijo Mateo- realmente solo nos la chupamos mutuamente.

-Dicen que tiene un culo delicioso-dije- pero ni puta idea.

-Se le veía-dijo Mateo- pero hay un culito que deseo mas hace años, y se ve mas delicioso que el de Ricar.

-Asi cual?- pregunte.

-Uno que no puedo tener-respondio- asi que no vale la pena hablar de ello.

Los tragos siguieron y decidi poner una peli porno, mi hermano se deleitaba con las pollotas de los actores y yo con las Tias y sus pechos.

-Mi polla es tan graande como la de esos tios- dijo Mateo.

-Lo dudo-dije.

-Preguntale a tu amigo Ricar-dijo

-No me lo diría-dije- al final nunca me ha contado que te la chupo.

-Entonces te la puedo mostrar-dijo Mateo- si tu me dejas ve tu culo sin pantalones.

Estaba tan borracho y cachondo con el videon, que no lo pense y me baje el pantalón y los bóxer.

-Alli esta Mateo-dije

Mateo se acerco a mi y toco mi culo sin previo aviso y lo comenzo a masajear y a apretar, y separo mis mejillas viendo mi anito.

-Mejor de lo que imaginabaa hermanito-dijo Mateo- lo prometido es deudas.

Mateo se separo de mi y se bajo el pantalón y sus bóxer, y revelo un pollon de 24 cm, y gruesa, casi casi como el de los actores porno.

-Ahora me la tienes que chupar hermanito-dijo Mateo.

-Estas loco-dije- no te la voy a chupar.

-Lo se-dijo Mateo.

Nos sentamos los dos sin ropa de la cintura para bajo a seguir viendo la pelicula, cada vez mas cachondos.

-Me dejas volverte a tocar ese culito?-pregunto Mateo.

-Ya esta bien -dije

Me pare y me puse frente a el el comenzo a masajear mi culo de nuevo, y en eso separo mis nalgas, y acerco su nariz a mi culo.

-Que rico huele-dijo

-Callate ya es suficinete- dije

El no dijo nada y laso su lengua sobre mi ano, varias veces, y soplaba sobre el, y bufaba, a mi se me escapo un gemido.

-Que rico sabes hermanito-dijo Mateo- y te gusta.

-Callate y ya deja sentarme-dije

El siguió con sus lamidas un rato mas, y metiendo su lengua dentro de mi ano, eso me hacia sentir algo que nunca había sentido.

-Ya para-dije.

El me dejo ir, pero saco un paquete con cocaína, y me dijo que un pase entre hermanos, yo aspire el hilo de cocaína y el hizo lo propio, de repente salio, y regreso con unas cuerdas y unas esposas.

-Para que es eso -pregunte con un susto que recorría todo mi cuerpo.

-Para divertirnos-respondió con una cara de sadismo.

Yo estaba ya con los efectos de la coca a tope, y mas cachondo que nunca en mi vida cuando el se acerco y me quito la camiseta y empezó a chupar mis pezones, y dentro de mi estado intente apartarlo pero se me fue imposible, sin darme cuenta ya me había puesto la esposas en una de mis muñecas, y el que era mas fuerte que yo logro voltearme y ponerme las manos esposadas a mi espalda.

-Que haces suéltame- exigí.

-Jugando hermanito- dijo Mateo.

E eso con las cuerdas ato mis piernas uno a cada lado del sillón dejándolas bien abiertas, no se de donde mi hermano saco una vela, y la encendió con un mechero.

-Ahora empieza el verdadero juego hermanito-dijo Mateo.

La cera comenzó a caer sobre mi espalda y yo gritaba de dolor, mi hermano disfrutaba de mis gritos, cada gota era sentir que me quemaba que me ardía la piel, y el cada vez estaba mas cachondo, cuando ya tenia toda la espalda quemada y llena de leche, saco un látigo, y comenzó a darme latigazos una y otra vez, mi piel se ponía roja y dolía como demonios, el cada vez mas cachondo con mis gritos, mis nalgas ya estaba rojas totalmnete, ahora me mostro un dildo, mounstruoso o eso me parecio, lo empezo a pasar por mis nalgas y en medio de mi raja.

-Hermano por favor no sigas-dije como un sollozo.

-Por que no seguir, si me estoy divirtiendo-dijo

De una me enterró los 21 cm del dildo, sin lubricante, ni haberme preparado, así en seco, y pegue tremendo grito del dolor tan intenso que me causaba, y el reía, y disfumaba de mi dolor, era sadismo, en toda su expresión, nunca me habia sentido tan desprotegido, y menos que todo este dolor me lo causara mi propio hermano.

Con el dildo enterrado mi hermano se coloco delate mio, y me miro, me dio dos bofetones, su polla dura estaba frente de mi.

-Te dije que tenias que chupármela-dijo con una sonrisa sádica

Yo lo mire con odio, pero medio dos bofetones mas, y me la metio completa, su polla media facil 22 cm, y me la enterró en mi boca hasta sus huevos, y me dio arcadas, casi devuelvo todo lo que tenia en el estomago, el se rio la saco un poco para que respirara y la volvió a enterrar y comenzó a follarme la boca a un ritmo bestial.

-Ahora si hermanito viene lo mejor-dijo.

Salio de mi boca saco el dildo de mi culo, y metió su polla de un solo vuelo, sentí un dolor indescriptible otra vez, pegue gritos, mis ojos botaban lagrimas, pero eso a el le daba mas placer, fueron varios minutos de sufrimiento, pero de repente algo cambio de mi boca comenzaron a salir gemido.

-Eso es putita-dijo Mateo-eso eres ahora mi putita.

Las embestidas cada vez mas fuerte y mis gemidos y sus gruñidos inundaban la habitacion, hasta que sin tocarme me corrí y el se corrió dentro de mi, minutos mas tardes cuando se recupero desato y me quito las esposas.

-Putita eres el culo mas delicioso que me he comido-dijo Mateo antes de salir de la habitación.

Esta experiencia me marco, nunca mas tuve algo con mi hermano y con ningún otro hombre, pero no volví a sentir placer con mis novias, no al nivel que sentia antes.