Follando a mis hermanitas p1

Así empezó la vida sexual de mis pequeñas hermanas .
Soy un joven de tan solo 17 años, hace unos meses nació mi pequeña hermana Naomi, en mi hogar solo somos yo, mi madre y mis dos hermanitas, una de 3 años y la pequeña de 6 meses.

Hace un tiempo mi madre empezó a trabajar de nuevo, por lo cual a mí me tocaba cuidar de mis hermanas por la tarde hasta media noche. Todo comenzó una tarde en la que estaba muy cachondo traía muchas ganas, las que pensaba quitarme las haciéndome una paja, pero no podía al estar cuidando a mis hermanitas, en ese momento estaba jugando con ellas con algunos de sus juguetes, la más pequeña estaba jugando con una de mis manos, de un momento a otro sentí como se llevaba uno de mis dedos a la boca y empezaba a mamarlo como si fuera su biberón, al sentir esas succiones en mi dedo y sentir su pequeña boquita me fue inevitablemente pensar en como se sentiría si en lugar de mi dedo estuviera mi verga, y ser mamada de esa manera, como lo dije antes me encontraba muy cachondo en ese momento así que no lo pensé dos veces y quise experimentar, agarre a mi hermana bebé y la lleve conmigo a mi habitación, la puse sobre mi casa, la bebé se movió y quedó recostada de lado yo me desabroché el pantalón y saque mi verga, estaba bien dotado con una verga de 20 cm. Me posicione a lado de mi hermanita dónde su cara quedará en frente de mi pito, le acerque la punta y le moje los labios con mi pre semen la acerque un poco más, hizo que su boquita se abriera un poco, aproveche y me empuje más hacia su boca provocando que la punta de mi verga quedara dentro, empeze a sentir como movía su boquita y también sentía ese movimiento que hacía con su pequeña lengua, dios, se sentía exquisito, así que me empeze a mover, sacado y metiendo la punta de mi verga a su boca, tratando de que entrara un poco más que la punta, no me lo creía, me estaba follando la boquita de mi hermanita de 6 meses, pero no podía negarlo se sentía como la gloria, estuve así por unos minutos más hasta que ya no pudo más mi me vine soltando grandes chorros de mi semen en su boca, aunque ya me había corrido, no pude evitar calentarme de nuevo al ver como mi hermanita se tragaba mis mecos, lo que se salio de su boca lo recogí con dos de mis dedos y de lo regrese a la boca, la bebé los acepto y chupo el semen que quedaba en ellos, después de tremenda corrida seguía teniendo la verga bien parada así que me desnude por completo, agarre a la bebé y también la empecé a desnudar, después de quitarle su pañal, acaricie esa hermosa y diminuta vaginita que tenía, pase mis dedos por esta, hasta su anito que de igual manera lo acaricie, no aguante las ganas y acerque mi cara y sacando mi lengua lamí cada pequeño rincón de este riquísimo coñito, intenté meter mi lengua por si culito pero solo entro la puntita, solo sentía como mi bebé sacaba pequeños balbuceos y agarraba mi cabello con sus diminutas manitas, me levanté de mi cama y fui en busca de el aceite de bebé de mi hermanita, no me quedaría con las ganas de penetrar aún que sea con un dedo su culito, en busca de el pase por la sala y vi a mi hermanita de 3 añitos, dormida, tal vez y en otro momento también pueda tocarla y hacerla mía, como lo iba hacer con la bebé, lo que si tenía en claro es que las iba a convertir en mis pequeñas putitas que me complacerían cuando yo quiera, nunca pensé que me podía exitar tanto en quitarles la pureza e inocencia a mis hermanitas.

Al ya haber encontrado el aceite de bebé, regrese a la habitación, puse que mi bebé boca abajo, unte en aceite en uno de mis dedos y un poco en su colita, empeze acariciando su anito de bebé, hasta que empeze a hacer un poco de presión en el para que mi dedo entrara, pude escuchar los gimoteos que empezaba a soltar mi bebé pero no me importo al contrario me exito aún más y poniendo un poco de fuerza pude meter la mitad de mi dedo, con ayuda de el aceite empecé a meterlo y sacarlo hasta que pude meter el dedo completo, a este punto mi hermanita era un mar de lágrimas, lloraba a todo pulmón, claro meterle un dedo por el culo le había dolido aún que intente disminuir el dolor usando el aceite, dealguna manera su llanto me parecía sumamente exitante en ese momento, mientras más lloraba y se quejaba más me exitaba, con más aceite pero otro dedo en ella, puta madre si que estaba apretada, así segui y a la fuerza metí el tercer dedo, estuve un rato así penetrando la con mis dedos, pude ver un rastro de sangre y popo en mis dedos pero no me importo, a este punto tenía la verga pero bien dura así que saque mis dedos y los reemplace con mi verga, solo pude meterle la punta pero para mí esto era más que suficiente, me exitaba aún más ver como mi verga entraba y salía de mi pequeña hermana bebé, empujaba más para que mi verga llevará más adentro, y al segur escuchando sus llantos ya no aguante más y me descargue todos en dentro de su culito, chorros de semen la llenaron por dentro, le saque la verga y vi como grandes cantidades de semen salía de ella, agarre mi celular y le tome foto para guardar el gran momento, después de limpiarla me recosté con ella y aprecie lo bonita que era mi nueva putita.

No podía esperar en estrenar a mi otra hermanita también, y lo delicioso que sería hacer un trío con ellas.

Pero eso ya lo contaré en el siguiente parte