Fui BULEADO

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por mogwligdl.
Esto me sucedió cuando andaba entrando a mis dulces quince y probablemente es una de las razones por la cuales mi sexualidad y mi vida cambio de manera inevitable. Yo me crie con mi mama y con mi papa. No tuve ningún hermano lo cual tenia sus ventajas y desventajas. Una de ellas es que fui algo sobreprotegido. Mis papas me cuidaban demasiado y aunque podría decirse que yo era un chico normal digamos que en ciertos momentos fui algo débil de personalidad. Tenia una familia grande compuesta de tios y tias de ambos lados de mi familia pero todos vivian lejos de nosotros. Habia ciertas ocasiones en que nos reuníamos y la verdad es que cuando eso sucedia yo me la pasaba muy bien en medio de tanta gente que me veía con buenos ojos y que siempre tenia comentarios agradables hacia mi persona.

Como nunca falta un prietito en el arroz, la mayoría de mis primos me caian muy bien y puedo decir que hasta los quería a excepción de uno. SI, Joshua no era precisamente un pan de dios en lo que se refería a su relación conmigo y fue alguien a quien no me gustaba ver frecuentemente aunque era el primo mas cercano a mi edad y eso hacia que compartiéramos intereses comunes. Para colmo de males, de toda la familia el y su familia era justamente la mas “cercana” pues vivian en un estado vecino de donde radicaba en aquel tiempo. Cuando su familia nos visitaba venia Joshua junto con Amanda y en términos generales a pesar del “higadito” de Joshua podría decirse que nos la pasábamos bien. Amanda era muy diferente a Joshua. Amanda era autentica y siempre era gentil conmigo. Joshua por otra parte entraba a la casa con sus aires de campeón saludando como si de un diputado se tratara. Siempre decía cosas agradables que a los adultos les agradaba y le festejaban pero tan pronto como nos subíamos y nos quedábamos solos cambiaba inmediatamente. Nada mas dar la vuelta a la escalera al llegar a mi cuarto inmediatamente me golpeaba en el hombro fuertemente y me decía: Como te ha ido putito? AL hacerlo me miraba de una manera odiosa y la mueca de su cara mostraba un absoluto desprecio. Ese era mi tormento. Cuando había gente alrededor Joshua era adorable incluso conmigo. EN cuanto nos quedábamos solos era un pretensioso y creo poder decir que se sobrepasaba conmigo de tal manera que diría que me buleaba.

Lo peor de todo es que yo era mayor que el. No por mucho pero si me consideraba mayor. Yo tendría en aquel tiempo 15 y Joshua andaba alrededor de los 13 tirandole a los 14. A pesar de eso, Josh era mas alto que yo. Tenia la pinta de un dios. Aparte de su altura, el era delgado fibroso pero con un cuerpo muy bien formado por todo el deporte que practicaba. Mucho futbol habían marcado unas piernas y muslos de fabula aparte de todos los años que llevaba practicando artes marciales. A pesar de ser muy wero (blanco) su piel siempre lucia ese delicioso dorado producto de las horas que pasaba en el campo practicando futbol. Siempre traia su pelo bien recortado casi estilo militar lo que le daba un aire de machito acaba pleitos con su andar desenfadado. Yo por otra parte como dije anteriormente a pesar de ser mayor de edad que el físicamente era mucho mas bajo en altura. Todavia conservaba esa famosa gordura de bebe. No era yo gordo exactamente pero mis cachetes eran prominentes y al ponerme shorts mis muslos se veian algo redonditos a pesar de casi no tener panza debido a la falta de ejercicio digamos que estaba algo blandito. Todo esto hacia que yo en cierta forma admirara a Joshua y al mismo tiempo le aguantara todas sus impertinencias.

Joshua llegaba a mi cuarto y sin pedir permiso, sin mas ni mas se apoderaba de el sin tomarme en cuenta. El dia en cuestión asi lo hizo asi que como siempre no le di la mayor importancia lo deje hacer lo que quisiera y me puse a jugar un video juego. Despues de un rato Josh se echo literalmente en mi cama y empezamos a platicar como lo habíamos hecho infinidad de veces a pesar de nuestras diferencias. Luego de cierto rato en el que obviamente se burlo de mi por mi falta de pericia en el juego, Josh me pregunto si ya tenia novia y me recordó como el verano pasado yo le había contado que a mis 14 años todavía no tenia ninguna. Obviamente mi respuesta fue negativa nuevamente ante su gran algarabía. Disfruto como nunca y se burlo de mi socarronamente restregándomelo en la cara mil veces presumiéndome que ese año el ya había tenido no se cuantas novias. Empezo a deleitarse el mismo en sus relatos contándome sus hazañas y de cómo algunas niñas se rehusaban a caer en sus redes mientras que muchas otras lo dejaban hacer cuanto querían. Hasta me presumió como ya les había metido mano a varias y a pesar de admitir que todavía no se había cojido a ninguna, aunque estuvo a punto de hacerlo, ya había debutado con una tal Marcia que le había mamado la verga como el dijo. La verdad es que nada de eso hacia mella en mi. Ya estaba acostumbrado a ello pues era la misma platicaba que escuchaba de mis compañeros de clase. Claro, ante ellos me había redimido y les había echado una mentirilla de que en alguna vacacion le había yo metido mano a una niña en la playa y aunque mis compañeros me consideraban algo de ñoño aquella mentira había salvado mi reputación hasta ese momento.

Llego la hora de la cena y bajamos a cenar por lo cual Joshua volvió a modo de angel inmaculado nuevamente. Asi con esa tónica pasaron los días hasta que fue una noche antes de que se regresaran a su casa que mis papas y los suyos quisieron salir a cenar sin nuestra acostumbrada compañía. Amanda se había hecho amiga de una de nuestras vecinitas por lo cual había hecho planes de quedarse a dormir con ella por lo cual en la casa solo quedamos Joshua y yo. Se despidieron de nosotros prometiendo que solo irían a cenar y que no se tardarían y haciéndonos prometer que pronto nos iríamos a la cama sin hacer tonterias.

A pesar de ser yo el mayor de edad, al salir y por el supuesto angel de Joshua le dijeron que me cuidara. Vimos desde la ventana como se alejaba la camioneta y Joshua inmediatamente me recordó que el estaba a cargo con un aire de superioridad desmedido.
Sin hacerle caso y como buen niño subi a mi habitación sintiendo como Joshua me seguía. Joshua se sento frente a mi televisión y empezó a jugar un juego mientras que yo tome mis cosas y me fui a bañar como buen niño antes de acostarme. Me meti en la ducha y al estar limpiando mi cabeza con el shampo cerre mis ojos para después enjuagarme. Al momento de abrirlos mientras el agua ya limpia corria por mi cuerpo casi di un brinco al darme cuenta de que enfrente de mi se encontraba Joshua. Ahí estaba fuera de la regadera mirándome con una manera muy especial mientras sostenía la cortina de la regadera metiendo toda su cabeza en la misma.

-¿Qué haces?- le replique de manera instintiva.
-¿Necesitas usar el baño?-agregue de manera inocente.

EL no me respondió de inmediato sino solamente se quedo ahí mirándome por completo con una boba sonrisa que le abarcaba toda su angelical cara.

Viendo que no me contestaba me apure a acabar de enjuagar mi cuerpo y me di la vuelta muy a pesar mio y a sabiendas de que el continuaba ahí mirándome para cerrar la llave de la regadera. Al darme la vuelta para salir y agarrar mi toalla Joshua finalmente pronuncio palabra.
– Jaja! –empezo a hablar burlonamente- ¡Ya se porque no tienes novia todavía!- exclamo.
-TIENES UN … ¡¡¡MINIPITO!!!! –termino casi gritando a pulmon abierto y siguiendo con estruendosas carcajadas mientras que con su mano acusadora señalando con el dedo mis acongojados genitales que por la ducha y la sorpresa se mostraban especialmente retraidos en ese aciago momento. A pesar de todo sus burlas no hicieron mella en mi mas que molestarme un poco pues ya había visto yo los genitales de mis compañeros en alguna ocasión y no sentía yo en ese momento estar en desventaja significativa. Si bien es cierto que no habíamos hecho competencia alguna al respecto, tan solo con lo que veía me sentía comodo conmigo mismo y una discusión al respecto no tendría caso alguno. Lo único que me molestaba sobremanera era la manera aniñada de actuar de Joshua pero bueno ya me tenia acostumbrado a sus tonterías.

Trate de salir de la ducha cuando Joshua me dijo directamente y con una cara sorprendente para mi.

-¿Quieres ver un pito de verdad?-me dijo socarronamente al momento bajo su mirada y seguida por la mia pude ver como bajaba sus shorts con una mano mientras que la otra se hundía en su intimidad para sacarse el pene y dejarlo colgando como asomandose justo por arriba de sus shorts. La verdad me dejo bastante sorprendido. A pesar de lo que mencione antes NUNCA en mi vida había tenido la oportunidad de tener un acercamiento de tal magnitud y debo de admitirlo francamente su pene se veía espectacular frente a mi supongo que por la distancia corta. Creo que no era especialmente largo aunque creo que se salía de lo normal. Le calcularía alrededor de 17-18 cms pero se veía agresivamente gruesa. Aquel monstruo se coronaba con una esponjosa cabeza que brillaba por encima, símbolo de su virginidad aun no perdida, y erecta como estaba al manipularla para sacarla parecía una lanza derecha que me apuntaba amenazadoramente. A pesar de mi “admiración” oculta pude reponerme y pretendiendo una fingida y aparente indiferencia deje de voltear a ver su serpiente para tratar de salir de ahí mas que inmediatamente. Trate de sacudirme el agua que aun cubria mi cuerpo para poder salir sin encharcar el piso.

-¿A poco no te gusta?-me fusilo mientras claramente pude apreciar como dirigía su mano y tomandola con fuerza alrededor empezó a resbalársela una y otra vez haciendo que aquel monstruo cobrara mas vida y cambiara la rosada cabeza a un color rojizo casi violáceo en cuestión de segundos.

Me encogi de hombros tratando de restarle importancia. Sin embargo mi aplomo quedo en entredicho pues se me salió decirle:

-No se. –respondi lacónicamente y con una completa falta de seguridad en mis propias palabras.

-Apuesto a que si.-respondio Joshua mirándome fijamente y con esa gran seguridad que le caracterizaba cuando hablaba.
– Apuesto a que..NO te gusta… – me dijo con una mirada que se me clavaba en el alma.
-Apuesto a… que… TE.. ¡¡¡ENCANTA!!- agrego con un tono de voz que jamas le habia escuchado en mi vida.

Debilmente como era mi costumbre agite mi cabeza tratando de convencerme a mi mismo de mi respuesta y sintiendo por dentro de mi una angustia al sentirme atrapado en mi propio cuarto. Trate de moverme con gran dificultad pues mi cuerpo empezaba a pesarme enormemente. Intente nuevamente de correr la cortina para salir de ahí cuando Joshua haciendo gala de su precision de movimientos me tomo con fuerza de las manos y con una agilidad impresionante me avento hacia la pared quedando yo completamente bloqueado sintiendo la fría baldosa en mi espalda y completamente inmovilizado por su cuerpo sobre el mio.

-¿Quieres tocarlo, verdad?-me dijo en un tono de voz que autoritariamente sonaba mas a orden que a pregunta.

Aun asi no se de donde alcanze a responderle:

-No, gracias-con dejo de sarcasmo que ni yo mismo me crei capaz de producir.
-No te estaba preguntando.-me contesto con un tono amenazador.
-Tocalo y te dejo ir-agrego.

Me sentía especialmente angustiado por la situación y su propuesta. Nunca me imagine vivir aquel predicamento. Recordaba las fotos en que Joshua aparecia en exhibiciones de karate y sabia muy bien que tenia todo para hacerme pasar un mal momento. Me sentía atrapado pero muy adentro de mi estaba aun mi virilidad que se imponía de antemano ayudándome a sortear aquel peligro por lo cual me quede quieto y callado esperando que se cansara y rogándole a dios me dejara en paz.

-Tengo TOOOOODA LA NOCHE- agrego Joshua con aire de suficiencia.

EL frio de la pared de la ducha empezaba a calarme hasta los huesos. La verdad no se que paso y hasta el momento me pregunto como fue que sucedió. La verdad no lo pensé. Lo único que quería era escapar de ese momento incomodo. Automaticamente alargue mi mano y de repente senti aquella masa calida envuelta por mi.

Al sentir mi mano abrazando su grueso falo Joshua se sonrio burlonamente con una mirada que me hizo sentir como un miserable gusano.

-Jalamela- agrego sin reparo y como si fuera la obvia consecuencia de mi acción.
Obedeciendole se la jale un par de veces lentamente y dándome cuenta de lo que estaba haciendo lo solte casi con la intención de aventarlo al piso si hubiese podido.

-Ya lo hice. ¡Sueltame!-agregue con cierta determinacion.

Jo shua se separo de mi y subiendo su ropa acomodo su ereccion en su lugar mirandome de una manera extremadamente lasciva y salio del baño. Cuando lo hizo respire aliviado pensando que solo había sido una de sus muchas tonterías a las que me tenia acostumbrado y que de aquí no pasaría mas. Finalmente pude secarme por completo y vistiéndome me dirigi a mi cuarto. Encontre a Josh sentado en mi cama revisando mi colección de discos. Afortunadamente estaba en una esquina asi que me hice el desentendido y como si no hubiera pasado nada empeze a acomodar mis cosas para acostarme a dormir. Josh se levanto y a pesar de estar solos cerro la puerta y le puso seguro. Despues se dio la vuelta y se me quedo mirando nuevamente con aquella mirada avasalladora que ya antes había usado sobre mi.

-¿Ahora que?- espete con gran enfado presintiendo que algo tramaba.

Como siempre me ignoro por completo y caminado se dirigió hacia una silla en la esquina mas alejada del cuarto. Se sento y sin descaro alguno se empezó a sobar la verga por encima del delgado short hasta que su erección era notoria aun de lejos.

-Ven-me dijo señalando con su dedo el espacio entre sus piernas abiertas.
-Ven AQUÍ-añadio con un mayor énfasis en el AQUÍ.
-¿Para que?-le pregunte ingenuamente después de que descaradamente se tocara casi masturbándose enfrente de mi.
-Quiero que me lo toques de nuevo-me dijo burlonamente.
-¡NO!-conteste con inusitada decisión y me voltee para jalar la colcha de mi cama y echarme a dormir esperando que eso lo ahuyentara de mi cuarto y de mi vida.
Estaba a punto de acostarme cuando me dijo:
-¡MMMmmmm! Bueno. Creo que entonces quieres perder tu valiosa tarjeta, ¿no?

Instantaneamente supe de lo que hablaba. Un par de años atrás mi papa me había conseguido un autógrafo de mi jugador favorito y me había regalado esa tarjeta en mi cumpleaños. En ese momento era lo mas valioso que poseía y solo pude ver como Joshua la blandia en su mano ondeándola descaradamente frente a mi.
Como un resorte me puse de pie y en un segundo estaba frente a Joshua tratando de recuperarla. Por mas intentos que hice no pude tomarla y Josh se sento sobre de ella. Me vi perdido. Sabia por experiencias previas que no podría mover a Josh por mas que quisiera. La desazon me invadió y con cara de puchero me le quede viendo mientras dos pequeñas lagrimas se me escapaban cayendo lentamente por mis mejillas.

Joshua me veía con aire de satisfacción garantizada. Con la mirada dirigió mi atención hacia su centro y nuevamente frente a mi se bajo su short y saco su pito completamente duro y erecto frente a mi.

-¡HINCATE!-me ordeno sabiendose por complete dueño de la situación.

Completamente derrotado me hinque ante el donde justamente me lo señalaba su gran dedo quedando acomodado en medio de sus musculosas piernas.

-Hazme una B-U-E-N-A chaqueta-me dijo acentuando cada una de las palabras.

Aun con mis mejillas ardientes y perdiendo control de mi mismo como si fuera un sueño dirigi mi mano hacia su enhiesta verga. Justo como lo había hecho minutos antes pude ver como mi mano se cerraba atrapando su quemante pájaro sintiendo aquella tersa piel y lentamente empeze a deslizar mi mano de arriba abajo sintiendo como me acompañaba su suave piel mientras su cara cambiaba su respiración se hacia mas pesada e inmediatamente el cuarto se lleno con sus tremulso y suaves gemidos al sentir mi movimiento sobre su intimidad expuesta.

Unas pequeñas gotas traslucidas y brillantes empezaron a asomarse al momento en que mi deslizante mano subia hacia su voluminoso hongo. Poco a poco aquellas gotas se dispersaron esparciendo un suave aroma y abrillantando mas aquella amenazadora cereza roja que mi mano estrechaba sintiéndola palpitar de vez en vez hipnotizándome con su movimiento.

-¿Quieres probarla?-me pregunto.

Sacandome de mi ensueño agite mi cabeza de lado a lado en respuesta negativa mas que asombrado asustado ante su iniciativa.

-ANDALE- me dijo alargando su mano y poniéndola atrás de mi nuca para firmemente sin dejarme salida alguna acercar mi cara inexorablemente hacia la punta de su candente fierro.

-Abrela-agrego cuando ya la punta de su brillante polla se acercaba peligrosamente a milímetros de mis labios. Aun lo siento. Siento aquella incipiente quemadura en mis suaves labios que me obligo a abrirlos para recibirla en mi boca tocándola por primera vez con mi lengua y acomodándose en mi virginal boquita mientras Joshua la empujaba en una sola dirección.

-¡PUTA MADRE!-gimio con locura inaudita.

Pude sentir como aquel pedazo caliente vibraba al contacto que mi boca le ofrecia.

-MIRAME- me ordeno Joshua.

Obedeciendole, ahí hincado entre sus piernas y con su gruesa verga adentro de mi boca dirigi mi mirada hacia arriba para verle su cara de satisfacción absoluta.

Con una voz ahogada y entrecortada por su pesada respiración agrego:

-¡¡MAMALA!! … ¡¡CHUPAME EL PITO PRIMO!!

Sin ninguna objeción de mi parte obedeci e inmediatamente como si la vida me fuera en ello empeze a mover mi cabeza de arriba hacia abajo dejando que aquella masa me invadiera y cerrando con mis labios su alrededor para no dejarla ir fuera de mi.
-¡UFFFFFFFF!-exclamo satisfecho y sin recato alguno. – Eres bueno-agrego.

Por unos momentos se hizo el silencio mientras yo continuaba en mi tarea asignada.
-Se siente mejor que como me lo hace Marcela- agrego con una voz ahogada irreconocible para mi.

Mis brazos tembeleques faltos de ejercicio temblaban por la posición impuesta al estar hincado y sosteniéndome por ellos para poder accesar a su verga frente a mi.

-SI, chúpame el pito primito- empezó a decir repetidamente invitándome a seguirle satisfaciendo.
-¿Te gusta?- me pregunto gimiendo.
-Dije que si te gusta-volvio a repetir con cierto enfado al no escuchar respuesta de mi parte.
Con mucha dificultad al tener la boca literalmente llena de su caliente carne apenas si pude mascullar con gran dificultad un débil “Shi”.

Me tomo fuertemente del pelo y separándome de su pubis se puso de pie enfrente de mi quedando parado por encima de mi mirada lastimera.

-Abre la jeta- ordeno.

Apenas si pude empezar a abrir mi boca cuando ya deslizaba la punta de su verga junto con toda la carga de su cuerpo hacia adentro y empezó a encajar con decisión mi boca mientras me sostenía mi cabeza con ambas manos.

-Voy a cojerte por la boca.- me dijo mientras me acometía con fuerza inusitada una y otra vez . Creo que si no fuera porque me sostenía la cabeza, esta hubiera sido separada de mi cuerpo ante sus fuertes empellones.

El único sonido que se escuchaba era su gemido de satisfacción acompasado por el sonido del sorbeteo de mi saliva deslizándose por la comisura de mis labios y salpicando todo mientras su pene entraba y salía de mi cavidad bucal.

-¡LEVANTATE!- me ordeno casi gritándome.

Inmediatamente lo hize con gran dificultad pues me dolían las rodillas y mis brazos estaban todos temblorosos por el esfuerzo realizado. Mientras lo hacia, el observaba con una mueca en su cara como su pito se quedo chorreando mi saliva hacia el piso. Con un fuerte jalones haciendo que la tela tronara me quito mi camisa de pijama y se agacho para arrebatarme mis shorts junto con mis calzones. Fue tan rápido y tan fuerte que hasta me hizo algo de daño dejándome marcadas mis piernas y muslos por sus dedos y el elástico de la ropa.

MI pene se vio liberado también y justo como el suyo se mostraba completamente erecto apuntándole a la cara. Repare en el hecho de que NUNCA en mi vida la había sentido tan dura como en ese momento y con horror pude observar como también tenia la punta humeda por el precum que se me había salido sin yo notarlo.

-Sabia que te gustaba- dijo mientras que con una mano tomaba mi pieza erecta haciéndome sentir lo que nunca antes había sentido pues solamente yo me había tocado ahí.

Con cara de incredulidad total pude ver como de repente la totalidad de mi pene desaparecia al momento en que Joshua abria su boca y literalmente devoraba mi polla en su boca. Aquella increíble sensación me abarco por completo y solo pude suspirar gimiendo de una manera sorprendente al sentir la calidez de su boca rodeando mi intimidad mientras que aquella humedad me cubria mi miembro por primera y única vez. Aquello solo duro unos segundos pero para mi es inolvidable a pesar de los años aquella sensación única que hizo que mis piernas literalmente se doblaran no pudiendo sostenerme pues hasta tuve que recargarme con mis brazos en la cama para no caer.

Tal como empezó asi termino y Joshua se puso de pie inmediatamente mirando mi reacción con una cara de escarnio total. De un manazo me hizo voltear y tomandome fuertemente por la nuca me hizo caminar enfrente de el dirigiéndome hacia mi cama donde me posiciono al lado de ella y empujándome hacia abajo quede empinado con los codos sosteniéndome y mi trasero expuesto hacia afuera.

Senti claramente como se paro detrás mio para enseguida sentir como sus manos me empezaron a recorrer el trasero. Coloco sus dos manos completamente abiertas en mis nalgas abarcándolas por completo y empezó a exprimirlas como queriéndoles sacar jugo. Luego las extendió y me empezó a toquetear alrededor como quien amasa un pan. AL estarlo haciendo sentía como la punta de su candente tolete se bamboleaba y con movimiento de sus caderas lo empezó a deslizar por encima de mi raja.

-¿Quieres que te coja?-me cuestiono casi murmurando en mi oído.

Al no obtener respuesta pues mi cerebro se encontraba entumecido ante tal experiencia, Joshua lo hizo despertar cuando una sonora y fuerte nalgada me fue aplicada en salva sea la parte haciéndome saltar tanto por el dolor como por la sorpresiva agresión.

-¿Quieres que te coja?-volvio a interrogarme mas agresivamente como si de verdad le interesara mi respuesta.

Quise responder pero no pude. Algo pasaba en mi interior que parecía que todo fuera irreal. Era como si aquello no estuviera sucediendo. Trate de decir o de gritar que no pero mi boca solo emitió un sonido ininteligible. Al sentir que mi primo se separaba y caminaba voltee asi casi recostado como me encontraba y lo vi como tomo una crema del baño y mientras regresaba la abrió y generosamente se echaba en la palma de su mano para después aplicársela a todo lo largo de su grueso miembro. Nuevamente retomo su posición anterior detrás de mi y empezó a restregar aquella ardiente punta a todo lo largo de mi raja acortando en cada vez la distancia hasta posicionarla en el punto justo de la entrada de mi cerrado ano. Mis manos solo pudieron posicionarse y agarrándome fuertemente de las sabanas al sentir una gran presión detrás de mi que me empujaba hasta no poder ya moverme y entonces de repente un agudo, muy agudo, dolor invadió mi espina dorsal haciendo que mi cuerpo tratara de saltar y liberarse cuando tan solo la punta de su lanza se deslizo sin obstruccion alguna adentro de mi por primera vez.

Solo pude enterrar mi cara en el colchon y lanzar un sonoro grito ahogado por la tela de mi cama tratando desesperadamente de encontrar una posición que me pudiera ayudar a aliviar tan misero momento y con la falsa esperanza de liberarme y escapar. Pero no fue asi sino que lenta pero inexorablemente aquel ardoroso apéndice se inflamaba y se hundía milímetro a milímetro en mi hasta entonces tapiado interior.

-¡¡¡MMMmmmmmm!!! – gemia Joshua. Y sus gemidos contrastaban con mis lloriqueos ahogados.

-¡Que culito tan cerradito! …. ¡Shhhhhhhh!-le oi exclamar cuando al haber llegado al tope mi resistencia empezó a deslizarse aun mas adentro de mi.

-¿Te gusta? ¿Te gusta primito?-gruñio como bestia mientras empezaba a retirarse de mi para luego volver a insertarse hasta el fondo de mi atormentada alma. No se porque. No me lo explico pero cuando me lo pregunto mi cabeza se movio de manera afirmativa dándole todo el poder sobre mi.

-¡SI! ¡¡ LO SABIA!!- exclamo con un desde de triunfo absoluto.
-ENTONCES AQUÍ TE VOY. TOMALO-me dijo gimiendo mientras que sus manos me tomaban fuertemente por las caderas sosteniéndome en mi lugar para empotrarme por completo y sentir como me jodia fuertemente a su entera satisfacción y gusto.

En cada una de sus acometidas podia sentir como mi interior se estiraba mientras me cojia con fuerza inaudita. Lo hacia de tal manera que hasta la cama se movia con cada embestida sacando de adentro de mi lloriqueos y gemidos de dolor. Asi duramos no se cuanto tiempo pero repentinamente me di cuenta sorprendido que mis gemidos habían cambiado. Una ola de calor me invadía y aunque su terrible bicho me seguía acometiendo y el ardor era insoportable, yo empeze a sentir algo en mi interior difícil de describir. No se si Joshua lo noto.

-¡¡¡AAAAAAYYYYYYYYYY!!!!-salio de mi garganta cuando de un solo tiron Joshua se retiro de mi dejando mi sensible culito expuesto sin nada adentro. Senti que los intestinos se me saldrían inmediatamente pero no me dio tiempo ni de reaccionar ni de decir nada porque inmediatamente Joshua con un fuerte manazo y un jalon me tiro en la cama y me hizo voltear para quedar boca arriba. De igual manera, ¡PAZ! ¡PAZ! Dandome en mis chonchos muslos me hizo abrir las piernas y se posiciono en medio de ellas y tomandolas fuertemente me hizo retraerlas hacia atrás y en su posición de macho alfa se volvió a enterrar en toda su extensión adentro de mi adolorido ano.

Senti como todo mi interior se estiraba nuevamente pero en esta posición cada milímetro de su ancho cuerpo me hacia vibrar junto con el. Senti claramente todo su cuerpo dentro de mi con cada embestida que daba haciéndolo tan fuerte que hasta la cama se movia al compas de nuestros sus alaridos. Al igual que la primera vez, en esta segunda vez solo sentía yo un dolor intenso al principio que solo me hacia quejarme ya sin pena alguna. Tiempo después, ya acostumbrado mi interior a sus embestidas, me sorprendi al sentir algo que puedo calificar de sabroso. Empeze con pequeños gemidos que fueron en crescendo para terminar dándome gran vergüenza al oírme a mi mismo como en alguna película porno que había visto algún dia.

Nuevamente de un tiron podría decir Joshua saco su verga de adentro mio mientras yo yacia como muñeco roto todo desparratado pues no tenia fuerza para sostener mis piernas. Vi a Joshua descansar un minuto mientras jadeaba jalando aire para después con gran determinación tomar mis piernas y volverlas a subir de tal manera que las empujo aun mas atrás haciéndome perder la respiración y volver de nueva cuenta a chingarme en un solo movimiento hasta lo mas profundo que podía.

Volvi a sentir de nueva cuenta a aquel intruso dentro de mi entrando y saliendo constantemente inmisericorde. El acabose fue cuando la mano de Joshua tomo mi pene que si al principio se retrajo por el dolor nuevamente estaba apuntándole acusadoramente. Empezo a jalármela al compas del movimiento de nuestros cuerpos y mi mente exploto al sentir ese doble placer por mi ano y por mi frente.

-Ohhhhhh!!! Ssssssssiiiiiii!!!- exclamaba mas fuerte y mas fuerte conforme seguia en su faena destrozando mi interior maltrecho.

-Joshh…Joshh…me…. Me… me vengo…-murmure muy quedamente mientras aquellas ajenas sensaciones se incrementaban en mi ser. Todo sucedió en un segundo o al menos eso me pareció. En un extraño concierto de sensaciones pude ver como de mi pequeño pitito, como si de una fuente se tratase, gruesos chorritos de caldo calientito blanco y espeso se disparaban y desparramaban por todo mi cuerpo llegando a pringar también el cuerpo de Joshua.

Joshua lo disfruto pues su mirada no perdia detalle al respecto demostrándomelo con una extraña mueca que se dibujaba en su cara como si hubiera logrado una gran hazaña. Solto mi pene haciendo que parte del caldo se derramara a su alrededor cubriéndolo como un helado. Me tomo muy fuertemente poniendo sus manos en mis caderas y con gran fuerza casi me levanto de la cama dejándome en el aire. Parecia yo un muñeco sin vida a su merced. Con un ímpetu increíble Joshua redoblo esfuerzos y haciendo que todo mi cuerpo temblara como gelatina empezó a acometerme desmedidamente tanto en fuerza como en rapidez haciendo que los dos jadearamos por el esfuerzo realizado.

-¿Quieres mis mecos?- me pregunto nuevamente con una voz ahogada por el esfuerzo pero que inundo la habitación.
-¿Quieres mis mecos primito?-volvio a preguntar.

Yo no podía hablar. Apenas si pude afirmar con un ligero movimiento de cabeza que se movia como queriendo soltarse de mi cuerpo al ser movido al vaivén de su cojida.

-¡Ayyyyyyy!-exclame cuando se retiro tan abruptamente de mi como había entrado en un principio.

Inmediatamente sentí como me jalo del cabello y bajándome de la cama de esa manera me puso de rodillas ante el. Las rodillas me dolieron y mi cara quedo justo enfrente de su redonda verga cuya piel se acercaba y alejaba con el movimiento de la mano de Joshua que se la jalaba como un poseso enfrente de mi para rugir guturalmente diciendo:

-¡¡¡PUUUUTAAAAAA!!!!- al decirlo gruesos grumos de su espeso semen empezaron a reventar de la punta de su cabeza golpeándome la cara y esparciéndose por mis ojos, pelo, nariz y boca.

Josh no se detuvo y siguió apretándose hasta que aquellos borbotones no dejaron de salir y el lanzo un suspiro de alivio.

Alli estábamos los dos. El de pie triunfante ante mi y yo hincado derrotado frente a el. Joshua se quedo viendo su gran obra. Empezo a sonreir burlonamente y acercándose tomo su tiempo para cachetearme y pasar por toda mi cara su todavía erecto y chorreante pene esparciendo su liquido pegajoso por todos lados.

Despues de hacerlo se me quedo viendo nuevamente y acerco su punta a mi boca. Yo instintivamente me retirey entonces tomandome fuertemente por el pelo me dijo:

-¡LIMPIAMELA!
Asi que no tuve mas remedio que volver a abrir mi boca y sentir con repulsión como nuevamente me la metia y tallaba en mi lengua haciendo que todo aquel remanente se me quedara ahí adentro. Una y otra vez se tallo adentro de mi hasta que todo su tolete salió reluciente y brillante. Dio un paso atrás y como si nada se subió sus shorts y camino como si nada para sentarse nuevamente en la silla donde todo había empezado. Antes de sentarse tomo la dichosa tarjeta y sin mas ni mas me la avento quedando tirada a un lado de la silla.

Yo me quede ahi estupefacto. Todo parecía un sueño. No podía creer lo que había pasado. Finalmente me puse de pie con muchos trabajos y note como todo mi cuerpo me dolia como si hubiera corrido un maratón.
Busque mi ropa que se encontraba toda tirada por todos lados y me costo trabajo desbaratar los nudos que se hicieron cuando a jalones Joshua me la había quitado. Mientras caminaba hacia el baño podía sentir con cada paso como mi culito me reclamaba y un ardor y unas punzadas me despertaban de mi pesadilla recordándome que todo aquello había sido realidad.
AL meterme al baño me acerque al espejo y la imagen que vi nunca la olvidare pues ahí estaba yo con toda mi cara llena de churretones semisecos que se esparcían por toda mi cara mientras que por mi culo podía sentir un hilito saliéndome del hoyito masacrado mientras que aquellas punzaditas me acometían una y otra vez sin cesar.
Me volvi a meter a bañar limpiándome escrupulosamente y tratando de eliminar huella de todo lo que había pasado.
Esta vez sali del baño solo para encontrarme con Joshua muy a gusto sentado jugando uno de mis juegos favoritos al cual nunca le habia hecho caso. Aun no se porque pero solo me fui a mi cama y me recosté como esperando a que el me ordenara algo.
Despues de un largo rato Joshua me dijo:

-¿Te gusto?

Con una triste mueca en mi cara movi mi cabeza afirmativamente pues sabia que esa era la respuesta que el esperaba.

Joshua se carcajeo con gran algarabía.
-Me gusta oir eso.- me dijo.
-Lo tendre en cuenta de ahora en adelante.-agrego amenazadoramente usando su típico tono condescendiente que usaba cuando pretendía agradar a los adultos.

Esa misma noche mas tarde cuando yo dormía por fin plácidamente me despertó un repentino toque en mi boca. Puedes adivinarlo, si, era Josh tratando de volver a meter su pene en mi boca nuevamente. Tan solo lo deje hacer y dócilmente abri mi boca para que el se deleitara usándola nuevamente y terminara otra vez desnudándome y jodiendome el culo esa noche. Todavia en la mañana siguiente al despertar podía sentir el gusto en mi boca y aquella sensación extraña en mi trasero recordándome la presencia de Josh en mi vida.

Como dije al principio esa noche cambio mi vida totalmente pues Josh se apodero de ella. Despues de esa noche un sentimiento de vacio se apodero de mi y debo confesar que yo fui el primero que estúpidamente tome el teléfono para hablar con Josh después de que este se había marchado. Poco a poco y maliciosamente Josh tomo control. Me ordeneba por el teléfono primero y después tenia sesiones conmigo por la compu. Para beneplácito de ambas familias nos hicimos muy “unidos”. Josh busco la manera ya sea de que yo fuera a su casa a pasarme temporadas alla o de que el me “visitara” ya te podras imaginar como me iba en ese tiempo que pasábamos juntos. La historia no termina ahí pues con el paso de los años Josh adquirió mas malicia y me hizo -aprovechándose de mi- hacer cosas que me avergüenza contar. Tomo control de mi vida a tal grado que literalmente el planeo mi vida universitaria y escogió la escuela a la cual asistiría para estar sirviéndole a el.
Sigo a su merced pues trabajo en su empresa a sus ordenes donde me tiene en sus manos totalmente igual que como aquella noche cuando mi preciada tarjeta estaba en sus manos.