Gracia a que me emborraché y fumé mucha marihuana mis amigos me comieron el culo y ahora tengo fama de maricón en la urbanización.
Un joven se va con un par de amigo de camping, se ponen a fumar marihuana, se emborrachan y observan a una pareja teniendo sexo, ellos se masturban, pero luego a uno le comen el culo y lo ponen a mamar, y tras sus amigos retirarse un perro se lo clava. .
Gracia a que me emborraché y fumé mucha marihuana mis amigos me comieron el culo y ahora tengo fama de maricón en la urbanización.
Todo comenzó cuando mis amigos y yo, nos fuimos a pasar el fin de semana al rio, por lo general lo hacíamos en un bosque cercano, pero en esa ocasión nos dio por ir más lejos.
Casi de inmediato los tres nos pusimos a pescar, y posteriormente nos metimos al agua, y así pasamos un buen rato, hasta que comenzó a oscurecer.
Ya estábamos sentados alrededor de la fogata, cuando comenzamos a escuchar a lo lejos, lo que nos pareció una pareja teniendo sexo.
Por lo que llenos de curiosidad, y tal como nos encontrábamos, es decir únicamente con los trajes de baño puestos, sin dejar de beber ron, ni de fumar marihuana, los tres nos dirigimos poco a poco en medio de la noche, en la dirección de donde salían aquellos gemidos.
Si nos dimos cuenta de que nos estábamos acercando a la casa que habíamos visto, cuando escondidos tras una arboleda, nos dimos cuenta de que, en el patio trasero de esa casa, se encontraba una pareja, completamente desnuda.
La mujer tenía unas enormes tetas, algo fornida, sin llegar a ser gorda, mientras que su pareja era un tipo algo mayor, calvo y flaco como un fideo.
En ese momento uno de mis acompañantes, nos dijo en voz baja, que ella era la esposa del dueño del supermercado, y que el tipo definitivamente era uno de sus empleados.
Para nuestra sorpresa, se encontraban recostados en una tumbona, ella con sus piernas bien abiertas, mientras que su amante de manera desesperada le daba una tremenda mamada de coño.
A medida que los seguimos observando, seguimos bebiendo, y seguimos fumando de la buena, la pareja seguía manteniendo sexo oral, cuando él colocó su verga frente a la boca de ella, y entre los dos siguieron haciendo un 69.
De momento uno de mis amigos, se bajó su traje de baño, y comenzó a hacerse la paja viendo como la mujer, le montaba los cuernos, a su marido con uno de los empleados.
Casi de inmediato, por comodidad me quité mi el traje de baño, y comencé también a hacerme la paja a medida que seguía viendo a la pareja tener sexo oral.
Pero en ese momento el tipo dejo de mamarle el coño a la mujer, y separado las piernas de ella, le fue enterrando toda su verga por el culo, o por lo menos eso me pareció a mí.
Lo siguiente que sucedió no me lo esperaba, ya que, de momento al tiempo que yo seguía de los más concentrado haciéndome la paja, viendo a la pareja.
Mi amigo que fue el primero en hacerse la paja, mientras se seguía masturbando con una mano, con la otra mano comenzó a agarrar mis nalgas.
Y no se si sería lo mucho que ya habíamos fumado y bebido, o que, pero en ese momento no le di importancia a eso, por lo que él continuó agarrando mis nalgas, sin que yo me opusiera, ya que en el fondo eso comenzó a gustarme.
Al tiempo que lentamente, seguía masturbándome, observando como la pareja seguía teniendo sexo, mi amigo ya se había colocado tras de mí, y en lugar de estar acariciando mis nalgas con una de sus manos, comenzó a pasar su duro y caliente miembro por entre mis nalgas.
En esos momentos, nuestro otro amigo que nos estaba acompañando, y al igual que yo seguía masturbándose, viendo a la pareja.
Así que mientras el primero comenzó a pasar sus dedos llenos de saliva por mí el culo, de inmediato comencé a sentir como su verga se fue presionando y abriendo mi apretado esfínter.
Sin que yo me opusiera la más mínima resistencia ya que estaba tan concentrado en lo que estaba viendo, que me hice que el que ni cuenta me di cuando me penetró.
Hasta que en cierto momento sentí todo su cuerpo sobre el mío, y sus bolas chocaron con las mías.
Por un corto instante se quedó sin moverse, para luego continuar metiendo y sacando su verga, divinamente, mientras que yo no sé porque movía mis caderas, y restregaba mis nalgas contra su cuerpo, al tiempo que él me mordisqueaba el cuello y las orejas.
Arrancándome profundos gemidos de placer, cada vez que me metía más y más adentro de mi culo, todo su duro miembro.
El segundo de mis amigos, al darse cuenta, de lo que estábamos haciendo, sin pensarlo mucho dirigió su verga a mi cara, luego me tomó por la barbilla, por lo que no me quedó más remedio que voluntaria y sumisamente abrir mi boca, y ponerme a mamar su verga.
Así que mientras uno seguía enterrándome una y otra vez toda su verga por mi culo, al otro yo gustosamente le mamaba su verga.
En esos momentos mentalmente visualicé como ellos dos me tenían, me encontraba casi en cuatro patas, y lo único que se me vino a la mente fue que me veía como un pollo asado a la vara, lo que en medio de la nota o la borrachera que cargaba me causó bastante gracia.
Esa noche, ambos me estuvieron dando sabrosa y sabrosamente por el culo, y a los dos también les mamé sus vergas, en repetidas ocasiones.
Después de que finalmente se vinieron ya fuera dentro, y fuera de mi culo como de mi cara y mi boca, se retiraron dirigiéndose a nuestro campamento, mientras que yo me quede tirado sobre la tierra oculto entre los matorrales, desnudo, lleno de leche por todas partes.
Eventualmente, me quedé dormido por el cansancio, por la borrachera, o por la mucha marihuana que había fumado.
Me olvidé de la mujer y su amante, pero me encontraba tan agotado que ni atención le puse y hasta me quedé dormitando acostado boca abajo, y con mi culo al aire.
Repentinamente me desperté, al sentir que alguien me estaba lamiendo las nalgas y en especial el ojete de mi culo, al medio voltear la cabeza, que me encuentro con un enorme perro que se encontraba sobre mí, lamiendo mi culo.
Casi de inmediato el condenado perro se montó tras de mí, por lo que por miedo a que me llegase a morder, comencé a levantar mis nalgas, por lo que aquel perro se trepó sobre mí, y casi de inmediato comencé a sentir como su verga comenzó a penetrar mi culo.
Aunque me dolió algo, la verdad es que a medida que me iba penetrando, en medio de mi borrachera, yo volví a mover mis nalgas como si fuera una puta, al mismo tiempo que me fui recriminando lo maricón que yo era.
Preguntándome a mí mismo, como era posible que me hubiera dejado dar por el culo por mis dos amigos, y para colmo en ese momento ese enorme perro, también me tenía bien clavado por el culo.
Yo estaba de lo más concentrado sintiendo aquella enorme verga, cuando me pareció como que se fue poniendo más grande.
Pero a todas estas, yo no dejaba de mover mis nalgas, y el condenado perro de seguir penetrándome una y otra vez, hasta que después de un rato creo que sentí que se vino dentro de mí.
El animal se detuvo, y a los pocos segundos se bajó, pero su verga no salía de mi culo, trate de sacármela separándome de él, pero un seco gruñido hizo que me quedase paralizado nuevamente, por lo que quedamos como dicen abotonados.
Su verga dentro de mi culo, y mis nalgas frente a su rabo, pegado tal y como si yo fuera su perra.
Creo que ya fue en la madrugada, cuando después de haberme quedado dormido, me desperté al sentir la gruesa lengua del perro, nuevamente lamiendo mi abierto esfínter.
Al poco rato aquel enorme perro se retiró, dejándome con mi culo bien abierto, y todo mi cuerpo hediondo a perro.
Ya estaba amaneciendo, cuando mis dos amigos me vieron regresar al campamento, completamente desnudo, no me dijeron nada, ni yo tampoco les dije lo que me había sucedido con ese perro.
Ya que, a la semana siguiente, me volvieron a invitar a pasar el fin de semana juntos, pero en la casa de uno de ellos, ya que sus padres habían salido de viaje.
En esa ocasión como en otras posteriormente, no hizo falta ni que me emborrachara tanto, ni que fumara mucha marihuana, para que gustosamente les diera el culo y me pusiera a mamar sus vergas.
De más está decir que, gracia a la indiscreción de uno de ellos, ahora tengo fama de maricón en toda la urbanización.
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