Joao con 12 años VII parte: “Se consuma la traición”

Nuestro niño prueba otro hombre..
Ahí estaba Joao en shock con el rostro rojo de rabia y dolor, con los ojos llenos de lagrimas y con el cuerpo congelado después de ver como su hermano se cogía a otro chico con más amor que a él, solo sintió una mano en su hombro y al voltear era Fabricio el amigo de su hermano Exe, reacciono tomándolo de la mano y salir con Fabricio de la fiesta y de su casa.

Fabricio lo llevo a su apartamento donde vivía solo y cerca de casa de Joao, no sabia que decirle y solo lo invito a pasar, el niño se quedó en el sofá viendo a la nada y Fabricio fue por unas cervezas y un refresco para Joao.

En ese punto la situación era rara, no hablaban, Joao solo veía a la pared y Fabricio estaba sentado frente a él, le decía cosas para animarlo pero el niño no reaccionaba ni lo escuchaba, la reacción del niño fue levantarse y besarlo, Fabricio no dudo en responderle el beso, lo alzo y de nuevo fue al sofá con el niño encima suyo, se siguieron besando, Joao le quito la playera y Fabricio solo le tocaba todo el cuerpo, también le quito la playera y empezó a besar esos pequeños pezones, le quito su short y empezó a manosear esas suaves nalgas, Joao estaba en un éxtasis elevado, se levanto y se arrodillo sacando la gran verga de Fabricio y empezar a mamarlo como si no hubiera mañana, claramente esos 21 cm representaba mucho esfuerzo para él, su hermano tenia algo similar, la diferencia es que Fabricio tenia una verga más gruesa, aun así Joao trataba de meterla toda a su boca pero no era posible, en ese punto Fabricio tomo el control, se levanto y dejando el niño de rodillas, lo tomo de la cabeza y marco el ritmo, era un ritmo veloz, Joao trataba de respirar en cada embestida de Fabricio, lo sacaba y de nuevo trataba de entrar en lo mas profundo de la boca del niño, la sacaba de nuevo llena de saliva, se agachaba y besaba a Joao, era una verga recta y uniforme, gruesa y rasurada, Joao estaba rojo esta vez del esfuerzo pero seguía ahí, con la boca llena de saliva recibiendo embestidas y besos.

En ese momento Fabricio levanto al niño y lo llevo al sofá dejándolo de rodillas pero dándole la espalda y el culito a su antojo, se pego a darle lamidas a ese culito suave y lampiño, le decía que era el culo más lindo que había visto, Joao aun no reaccionaba por completo, aun así estaba entregado al placer, Fabricio aunque era igual de brusco que su hermano también le demostraba interés, lo besaba, lo acariciaba y le decía cosas que el entendía como cumplidos, le abría el culo y metía su lengua haciendo que el niño arqueara la espalda de placer, Fabricio estaba extasiado de placer y ya quería penetrar a su nuevo niño.

Imaginen esa escena, Joao solo tenía 12 años y aunque crecía rápido media un poco menos de 1.50 era delgado y muy joven aun, Fabricio media 1.82, corpulento a comparación del niño y a punto de clavar esos 21 cm en ese culito infantil, y eso era lo que seguía, Fabricio aprovechando esa posición lleno de saliva su verga y empezó a entrar y pujar en ese culito, Joao solo apretaba con sus manos el espaldar del sofá, sentía como entraba ese pedazo de carne, Fabricio en un tono gentil le pregunto si paraba y se sorprendió cuando Joao empujaba su culito en señal de que siguiera, eso fue una señal para satisfacer su deseo, siguió empujando hasta que pudo entrar por completo, para un poco y empezó a acariciar el rostro de Joao y su pecho, también bajo al pene del niño y estaba tan duro como esperaba, lo halo del pelo y lo beso empezando el bombeo suavemente, Joao solo daba gemidos suaves lo que prendió mas a Fabricio y empezó a aumentar el ritmo y la fuerza de las embestidas.

Con cada embestida Joao sentía placer diferente, aunque tenía mucho sexo con su hermano esta vez era con otro hombre que también era gentil con él, empezó a gemir más fuerte y mas femenino haciendo que Fabricio siguiera aun más fuerte, Joao sentía su culito muy abierto y caliente, de pronto Fabricio saco la verga de su culo, lo volteo y empezó de nuevo a besarlo, se sentó y le señalo a Joao para que se sentara en él, así lo hizo el niño, tomo saliva de su boca, empapo el pene de Fabricio, empezó a sentarse y sentir como esa verga entraba en él, paraba respiraba y seguía sentándose, hasta que sintió la base de esa verga en sus nalgas y empezó a mover de arriba abajo, cuando estuvo más cómodo se movía aun mas rápido, de arriba abajo y de atrás hacia adelante, Fabricio se sentía en el cielo, ese niño se movía mejor que cualquier mujer o niña con la que había estado, ambos gemían, Joao era prácticamente una niña ensartada y gimiendo, Fabricio sentía que estaba ya por estallar, fue así como se levanto con el niño en sus brazos, fue hacia el piso poniendo al niño en el suelo encima de una alfombra, puso las piernas del niño en sus antebrazos abriendo mas ese pequeño culito y empezó a embestir con furia, Joao se sentía dominado y de nuevo con placer, solo gemía y sintió como de su pene empezó a salir pequeños chorros de semen, Fabricio lo noto y siguió con las embestidas, hasta que también descargo toda su leche en ese culito, empujando como si quisiera llegar a lo mas profundo, besando al niño finalizando con los últimos chorros, Joao estaba ahí, con el culito muy abierto, preñado, lleno de sudor pero se sentía satisfecho y casi feliz, sentía que era una venganza por lo que hizo su hermano aunque el no lo haya visto gozar con otro hombre.

Fabricio se acostó al lado del niño y su instinto o quizás su dañada cabeza lo incito a abrazarlo y decirle que era lo mejor que había pasado en su vida, ese acto y esas palabras dejaron a Joao en una sorpresa, estaba acostumbrado a que su hermano lo cogiera y lo desechara cuando eyaculaba dentro de él y eso también era nuevo para él.

Ahora Joao probo otro hombre, y un hombre que le llamaba la atención, vendrán mas cosas con ese grupo…. Continuara