JUGADOR DE FUTBOL 14 AÑOS (CAP II)
Continuación de la historia con el jugador de futbol de 14 años..
Pablo se fue. Yo me quedé enamorado y no podía creer lo que había pasado…
En la noche Pablo me mandó un whatsapp.
Pablo: hola, no le digas a nadie te lo ruego.
Yo: no te preocupes, no le diré a nadie. Te gustó?
Pablo: sí, se siente rico metértela, estás apretado y tienes bonito culo.
Yo: gracias jajaja. Lo volverías a hacer?
Pablo: no lo sé, creo que sí pero nadie tiene que saber.
Yo: no te preocupes no le diré a nadie, tú puedes cogerme cuando tú quieras.
Pablo ya no contesto y varios días pasaron. De pronto un mensaje de Pablo me llegó…
Pablo: hola, que haces?
Yo: en la escuela pero ya casi llego a casa por qué?
Pablo: ando un poco caliente.
Yo me sorprendí y me emocioné.
Yo: quieres repetir lo del otro día?
Pablo: no lo sé, creo que sí.
Yo: te espero a las 3 pm en el depa.
Pablo: no lo sé, no soy gay. Tengo que pensarlo.
Yo: está bien, si no quieres no.
Pablo dejó de contestar un rato. Pensé que no vendría pero a las 2 pm me mandó un mensaje.
Pablo: ya voy para allá pero porfa no le digas a nadie de esto.
Yo: no te preocupes, aquí te espero.
Yo estaba emocionado y excitado a la vez.
A las 3 Pablo ya estaba en el depa. Entró y se veía un poco nervioso.
Yo: quieres ir a la recámara?
Pablo: si está bien.
En la recámara dejé que se recostara, se veía bastante nervioso.
Comencé por quitarle los tenis, después la playera mientras lamía su pecho, lo tocaba por encima del pants y ya tenía una erección, le quité el pants.
Pablo solo gemía de placer. Le quité las calcetas y comencé a lamerle los pies, dedo por dedo y también la planta del pie. Aún estaba en boxer y de pronto me detuve.
Yo: es tu turno.
Pablo se sorprendió pero entendió lo que debía hacer. Poco a poco fue acariciándome, me quitó la playera, me bajó el short. Me basaba las piernas y cuando me quito las calcetas también comenzó a lamerme los pies, no lo esperaba pero sentí muy rico.
Volví a acostarlo boca arriba y me gustaba ver que la punta del boxer estaba mojado. Comencé a darle besos en el pene por encima del boxer, saboreando el precum que ya le había salido.
Le bajé el boxer y ahí estaba su pene blanco apuntando hacia arriba, brillaba de tanto lubricando que había sacado.
Comencé a acariciarle la punta con el dedo y Pablo rápidamente soltó un gemido. Sin duda le gustaba ser tocado. Hacía círculos en su cabecita con el dedo índice esparciendo todo el líquido preseminal que salía de su pene.
Yo: te gusta?
Pablo: sí, porfa chúpamela.
Comencé dándole besos en la punta y en el tronco, poco a poco me fui metiendo sus 13 cm a la boca. Comencé a darle una mamada.
Pablo agarró confianza y empezó a apretar mi cabeza contra su pene. Me agarraba del cabello mientras yo tenía su pene adolescente completo en la boca.
Por momentos me sacaba su pene de la boca para darles besos en la cabecita rosada que me volvía loco y para lamer todo su tronco como si fuera una paleta.
Pablo solo gemía de placer.
Después de unos 5 min chupándole el pene a Pablo me dijo que se iba a venir.
Pablo: espera ya va a salir.
Yo: hazlo en mi boca, está bien.
Pablo: no porque te quiero coger.
Yo: tenemos tiempo, vente en mi boca.
Continué chupando como 1 min más.
Pablo: hmmm, ya, ya viene.
3 chorros delgados cayeron en mi boca. La verdad es que no le salía mucho semen pero era el suficiente y sabía dulce.
Pablo se acostó cansado pero su pene aún tenía una erección.
Yo: te gustó?
Pablo: la chupas bien rico. Te tragaste mi leche?
Yo: jaja gracias. Sí, sabe rica.
Pablo: te gusta mi pene?
Yo: si, está bonito por?
Pablo: nada más, está bien que te guste.
Descansamos un rato, vimos una película. Pablo fue al baño y cuando regresó aún traía el pene parado.
Pablo: mira sigue duro.
Yo: quieres cogerme?
Pablo: sí, tengo muchas ganas.
Pablo se sentó a la orilla de la cama y yo estaba de rodillas frente a él.
Comencé a tocarle el pene, su pene era muy bonito, blanco, suave y la cabeza rosada. Ya tenía algo de precum por lo que ya estaba algo lubricado.
Pablo: chúpamela porfa
Yo comencé dándole besos en la cabecita y poco a poco fui metiendo su pene entero a mi boca
Después de 2 min Pablo me interrumpió.
Pablo: ya quiero cogerte, ponte de perrito.
Yo obedecí porque me gustaba la iniciativa y la confianza que Pablo estaba tomando
Me puse en 4 en la orilla de la cama Pablo se colocó atrás de mí de pie, le di el lubricante, me puso en la entrada, se puso en el pene y comenzó a meterlo.
Pablo: ya te entró la cabeza.
Yo: hmmm, sigue.
Poco a poco Pablo me iba empalando, cuando ya me tenía bien ensartado me dio una nalgada.
Pablo: ya está toda.
Yo: hmmm, cógeme.
Pablo comenzó con el mete y saca poco a poco.
Pablo: estás apretado.
Yo: hmmm, hmmm.
Yo solo podía gemir, me excitaba saber que un niño de 14 me estaba cogiendo
Pablo aumentó la velocidad, de pronto se detuvo, me dio la vuelta, tomó mis pies, los puso en sus hombros y volvió a empalarme
Me estaba cogiendo fuerte, me tomaba de los muslos y aumentaba la velocidad, de vez en cuando me tocaba los pezones.
Yo no aguanté mucho tiempo y me vine en mi estómago. Pablo se dio cuenta y continuó cogiendome mas fuerte.
Pablo: date la vuelta.
Pablo tomó mis piernas, me dio la vuelta, me puso de perrito, colocó su pene en mi entrada y volvió a empalarme.
Pablo: te gusta?
Yo: hmmm, hmmm.
Yo no podía ni hablar por lo rico que estaba sintiendo. Me gustaba pensar que un niño de 14 me estaba cogiendo y eso me excitaba.
Sus bolitas chocaban contra mis nalgas, por lo que se escuchaba el típico ruido. Pablo estuvo como unos 5 min cogiendome hasta que me advirtió que se iba a venir
Pablo: ya casi me vengo, te los voy a dejar adentro.
Yo: hmmm, sí, adentro.
Pablo me agarró con fuerza y comenzó a venirse dentro de mi.
Pablo: hmmm, que rico estuvo. Te gustó?
Yo: sí, mucho.
Pablo: oye y dejarías que otro amigo te cogiera?
Yo: por qué preguntas? Le dijiste a alguien?
Pablo: le dije a un amigo del futbol y no ha tenido su primera vez y quiere coger.
Yo: no sé, cuantos años tiene?
Pablo: 14, igual que yo.
Yo: pues no se, no me gustaría tener problemas después.
Pablo: pues no dirá nada tampoco, no queremos que piensen que somos gays.
Yo: está bien, a la próxima tráelo.
Pablo: va, entonces le digo que dijiste que sí.
Yo: bueno, nada más no le digan a nadie.
Después de esa charla, el pene de Pablo aún seguía dentro de mi. Lo sacó poco a poco.
Pablo: tú culo se siente rico, está apretado.
Yo: gracias, tu pene también se siente bien.
Fuimos al baño a lavarnos, nos cambiamos y Pablo se fue completamente satisfecho.
Pasaron varios días y de pronto me llegó un mensaje de Pablo…
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