La Educacion de William
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Cuando William J.Felix, hijo conocio a la que habria de ser su señora, no se imagino el rumbo que habria de tomar su vida. A sus cortos 23 años, poca experiencia tenia con mujeres, educado bajo el amparo protector de su padre y de su muy sobre protectora madre, los cuales lo habian acostumbrado a toda clase de lujos y caprichos, haciendole la vida facil , pero educandolo sin defensas naturales ante las vicisitudes de la vida.
Le llamo la atencion en ella, su feminidad, la seguridad que siempre demostraba en si misma, su completa adaptacion a toda clase de circunstancias y se acostumbro durante sus años de noviazgo, a depositar en ella toda su confianza y a verla como una persona muy especial, determinada y segura, un respaldo para su insegura personalidad.
Maria Clara Estevez, tercera hija de Ricardo y Maria Victoria Estevez, era, a sus 21 añitos recien cumplidos ,toda una damita con personalidad y belleza envidiables.
Galanes tuvo por montones, jugaba con ellos y desde muy chiquilla, gracias a la educacion matriarcal que habia en su familia, consideraba algo natural que los varones estuvieran subordinados a sus deseos y eso hizo siempre.
Muchos de sus enamorados huyeron despavoridos luego de conocer profundamente sus verdaderos alcances, su verdadera personalidad de chiquilla dominante y caprichosa que siempre debia ser complacida.
¿Por que escogio a William J,Felix hijo?. Porque vio en el un perfil de varon dispuesto a ser cuidadosamente entrenado y subordinado a sus caprichos.
Porque la poca experiencia de William con las mujeres, la sobre proteccion que sus padres le brindaron, le conferian una excepcional capacidad de adaptacion a sus dominantes deseos, y ella, luego de una larga y cuidadosa evaluacion, de un minucioso estudio entre sus muchos pretendientes, supo que William seria el juguete de su vida.
Para William fue algo asi como un premio mayor de la loteria. No se imagino nunca que una belleza morena, alta, delgada y con el pelo hasta el final de la espalda, pudiera enamorarse de el y practicamente pedirlo a sus padres en matrimonio, que paradoja. Fue Maria Clara desde el comienzo quien tomo la iniciativa y William solo supo condescender a todo.
Poco a poco se vio envuelto en la voragine de las decisiones de su novia, siempre aconsejada por su familia a la que nunca conocio, y siempre acepto lo que fue considerando como algo logico y natural: que su novia deberia llevar las riendas de la relacion y que el deberia hacer hasta lo imposible por complacerla.
De tal manera que luego de dos años de noviazgo, de un feliz enamoramiento por su parte, iria al altar con la unica mujer que habia conocido y con la unica mujer que le permitio saborear las mieles de un sexo a su manera, la manera dominante y ferrea que Maria Clara puso en practica probandolo, permitiendole algunas pequeñas libertades, manoseandolo discretamente, midiendo su miembro con estudiada dedicacion, al fin y al cabo seria esa su propiedad y debia estar segura de su mejor funcionamiento.
En cuanto a sus propias satisfacciones, William aprendio que su linda novia tenia gustos muy especiales. No tuvo ninguna objecion en irse adaptando a chuparle y rechuparle su bella y humeda gruta cada vez que ella lo exigia… en acariciarle sus senos aun en restaurants donde, discretamente, ella escogia mesas esquineras con la unica intencion de pasar con su novio momentos excitantes, provocandolo, haciendole sonrojar al agarrarle el miembro debajo de la mesa y obligandolo a meterse debajo del mantel, mientras ella, con las piernas abiertas, sin nada mas encima, disfrutaba de la entrenada lengua de su novio, saludando efusivamente a sus amistades y contestando el celular, que previamente habia encendido para llamar a su madre y contarle los detalles escabrosos de sus atrevidas escaramuzas.
Nunca se sobrepaso William…para el fue algo natural desde el inicio de la relacion, que sus deseos no serian tenidos en cuenta. Nunca penetro a su novia, aunque ardia en deseos de experimentar con ella lo que algunos de sus amigos definian como la culminacion de todos los extasis imaginables. Sabia que algun dia ella lo permitiria y la respetaba demasiado para tratar de llegar mas lejos cuando ella jugaba con su miembro, cuando ella lo volteaba y con unos guantes de latex en sus manos, exploraba cada milimetro de sus nalgas, las profundidad permitida de su culo y el peso y forma de sus pelotas.
Se acostumbro a que su semen no le pertenecia, que ella debia autorizar cada eyaculacion, por lo que, meticulosa y cuidadosamente anotaba en una libreta valiendose de una medida en centimetros cubicos… de tal manera que al cabo de un año, ella mas que nadie conocia al detalle las reacciones de este miembro, la cantidad de leche que debia producir y solo sus manitos suaves podian extraerla cuando "lo ordeñaba", segun sus propias palabras. A menos que le diera permiso de masturbarse.
El hecho es que al llegar al final de su noviazgo, William fue poco a poco llevado por Maria Clara a una situacion de obediencia absoluta a sus designios, y se sentia feliz y preparado para unirse a ella en matrimonio.
Se sentia un hombre muy afortunado y sabia que si tenia que conquistar una chica como ella, nunca lo lograria…ademas de que no sentia el menor deseo de hacerlo porque aun dependiente y sumiso, era feliz.
No puso ninguna objecion cuando Maria Clara se nego rotundamente a llevar a sus suegros al matrimonio …con su familia era suficiente, al decir de ella y a William este sacrificio, uno mas de tantos, no lo amilano.
Un dia antes de la boda, se presento la madre de Maria Clara, una morena madura y sensual rayana en los cincuenta, de pelo negro azabache, senos prominentes, mirada cautivadora, piernas largas y redondas, culo aun duro y levantado, vistiendo una falda corta, zapatos de tacon, sueter ajustado , boca carnosa, con un lunar sobre el labio que la hacia mas excitante , y fue presentada de esta manera al novio que sufrio un shock al verla y sentir su arrolladora presencia. Hablo con los padres de William y los convencio de entregarles su hijo asegurandoles su futuro bienestar y una vida llena de satisfacciones en compañia de la familia Estevez.
Los padres de William, aun sin entender porque no podrian estar con su hijo en el momento mas importante de su vida, consintieron a regañadientes, llevados tal vez por el encanto femenino de Maria Victoria y por el aura de prosperidad que demostraba.
Asi, los tres emprendieron viaje hacia la mansion de los Estevez y un nuevo capitulo empezo en la vida de William J.Felix, que el nunca sospecho ni en sus mas oscuros sueños.
Acudieron a recibirlos las hermanas de Maria Clara, una mayor y una menor que ella y que su hermano Victor. Este y su padre, aun no le fueron presentados.
Tan pronto llegaron, y una vez hechas las presentaciones de rigor, William fue llevado por las damas hacia un salon privado contiguo a la enorme sala de recibo y alli vislumbro cual era su futuro. La madre se sento cruzando sus fabulosas piernas frente a todos, observando cada movimiento. William fue tomado abruptamente por las dos hermanas mayores, con el divertido consentimiento de Maria Clara, y desvestido por ellas rapidamente mientras su novia observaba sentada a los pies de su madre.
Sus ropas, en una bolsa, fueron entregadas para incinerarlas. Angelica, la mayor, blanca a diferencia de la madre y de Maria Clara, de unos 27 años, ojos profundos, nariz respingona, vestia unos cortos pantaloncitos oscuros que al moverse, lanzaban sus encantos a la vista.
Se movia con mucha seguridad, caracteristica de todas las de esta familia, y su voz, tranquila y sin entonacion sacudio los oidos del avergonzado William que , rojo hasta la medula de los huesos, procuraba taparse el pequeño miembro con las manos ocultando una ereccion que lo mortificaba mas aun.
"Has llegado a esta casa y seras el marido de nuestra querida hermanita… la pequeña Maria Clara, adoracion de nuestra familia, y una de las menores…, desde este momento debes saber que nuestra madre, aqui presente, es la jefe absoluta y que los hombres que la componen son nuestros siervos sumisos.
Si crees que no podras someterte a nuestro femenino yugo, estas a tiempo de salir por esa puerta y olvidarte de nuestra hermana. Pero si no lo haces, conoceras la servidumbre, la humillacion y el trato fuerte que te tendremos que administrar hasta llevarte a ser el mas dedicado, fiel, humilde y sumiso de los esclavos.
No llevaras mas ropa que un delantal que te daremos, y seras el siervo de cada una de nosotras… nos atenderas, obedeceras y seras el juguete que nos hace falta para nuestra diversion. Mi padre, desde el momento en que se unio a nuestra bella madre, supo que ese seria su destino y aun despues de tantos años, es entrenado por mi madre para nuestra satisfaccion.
Nuestro hermano, igualmente lleva su esclavitud con algo de reticencia, pero aun es joven a sus 18 años y puede ser entrenado con mucha autoridad por cualquiera de nosotras… disfrutaremos mucho haciendolo
Necesitabamos alguien fuera de la familia para tantas cosas… y miro a su hermanita Dulce Maria, la siguiente, quien a sus 19 años era una picara jovencita llena de ideas extravagantes y atrevidas… (mas pequeña, de pelo claro, pecosa y muy diferente en el fisico a su madre)
Mas que nada, seras nuestro juguete… aprenderas a complacernos y en ello veras la dura mano de nuestra madre, quien no ve la hora de desvirgarte y enseñarte a comportarte con las damas. Maria Clara la tenia al tanto de los jueguitos y las situaciones que ella propicio, siempre aconsejada por mi madre".
Mientras hablaba, Angelica se paseaba con sus nalgas apretadas en el cortisimo pantaloncito delante de William, con sus preciosas tetas a punto de salirse de la camiseta sin brasier, moviendose alternativamente junto a su respiracion y observandolo de arriba abajo.-
Este solo atinaba a bajar la cabeza avergonzado ante las cuatro determinadas damas, pensando que no daria un paso atras porque aun en la peor de las esclavitudes, la belleza sus dueñas, compensaria cualquier sacrificio a que fuera sometido.
Nunca penso que este fuera su destino… creyo que Maria Clara seria su unica dueña, pero en el fondo de su subconsciente, agradecio haberla conocido porque una extraña excitacion recorria su medula dorsal al compas de las palabras de la provocadora Angelica.
Dulce Maria se estaba excitando ante la posibilidad de conocer un miembro erecto diferente al de su padre y de su hermanito, a quien le hacia toda clase de travesuras, lo martirizaba, lo golpeaba, lo azotaba con la palma de las manos, le agarraba las bolas y las apretaba hasta que veia salir lagrimas en los ojos de Victor, le golpeaba las nalgas solo por el placer de verselas enrojecidas y era apoyada incondicionalmente por su madre, ante la mirada indefensa de su padre.
Con sus 19 añitos recien cumplidos, queria experimentar multiples sensaciones… habia jugado con sus compañeros de instituto, los habia utilizado a todos a su antojo para que le hicieran los deberes, para que le compraran refrescos, comida y muchas golosinas, y claro esta, conocia al dedillo sus miembros, algunos mas grandes que otros, pero este seria el primero de un adulto de verdad diferente al de su padre.
Cuando Angelica termino de hablar, la miro con complicidad y una sonrisa aparecio en su lindo rostro… miro igualmente a su madre y su hermana, la novia del pobre William quien no podia contener su vergüenza, por una parte y que se estaba excitando enormemente por la otra. Parecio pedirles aprobacion y con ese lenguaje sobreentendido de las mujeres, supo que no habia objeciones ante lo que se propusiera.
Se acerco lentamente a William observandolo de arriba abajo cuidadosamente, dandole la vuela, apretandole la duras nalgas con sus cuidadas manecitas, les dio de repente a cada una un fuerte golpe que saco de su ensimismamiento al nuevo siervo, le metio la mano debajo de las bolas, desde atras mientras sus hermanas y su madre la miraban con una sonrisa complice.
Se planto delante de el y agarrandolo por el pelo, le levanto la cara con la mano izquierda, obligandolo a mirarla directamente, aunque su estatura era inferior, mientras con la mano derecha le solto una tremenda bofetada que resono en todo el salon.
William se tambaleo y por reflejo, sus manos, que cubrian su pequeño miembro, subieron a la cara adolorida y mas enrojecida aun… Se tambaleo y estuvo a punto de caer, pero la pequeña Dulce vino en su ayuda agarrandolo del erecto miembro, ahora si a la vista, goteante y rojizo, y asi sostenido entre sus dedos pintados, pequeños y fragiles, le asesto la segunda en la otra mejilla con mayor fuerza que la primera, lo cual vino a provocar sollozos contenidos del cautivo Willliam, prisionero su miembro en las manitas de Dulce Maria que le pasaba los deditos de arriba abajo, lo movia alternativamente para los lados, le movia las bolas hacia los costados, adelante y atras, sopesandolas y admirandolas y luego volvia a apretar con mayor fuerza el miembro, desde la raiz, haciendo una tortura para William su ereccion… con las manitas de Dulce Maria empapadas de un liquido viscoso que a ella le parecio excitante y mayor en cantidad que los que habia conocido.
Estuvo un largo en esta somera inspeccion, se arrodillo a pesar de su corta faldita, quitandose de la cara los mechones de pelo que la impedian una completa vista del juguete de sus sueños, apreto sus piernas, una a una, comprobando la dureza de sus musculos, y termino diciendole :
"Nunca tendras el miembro tapado para nosotras. Es nuestro, nos pertenece y haremos con el cualquier cosa que queramos, ¿entendido, animal?
Si, linda.
"¿Como dijiste? Otra cachetada trono en la habitacion seguida de dos mas con lo cual el estupefacto William tuvo que volver a gimotear.
"Te dirigiras a mis hermanas y a mi con el prefijo: Mi Señorita y luego nuestro nombre, sin omitir ninguno de los dos nombres… yo para ti soy: Mi señorita Dulce Maria" ¿entendiste, estupido animal?
Si, Mi señorita Dulce Maria.
¡Mas fuerte! Una cachetada mas completo la pequeña golpiza en la cara de William e inicio su rigurosa educacion.
Si, mi señorita Dulce Maria.
La chiquilla no cabia en si de la excitacion… nunca habia sentido tan vivido el placer de tener un hombre adulto a su merced… queria en ese momento suplicarle a su madre que se lo dejara por unas horas, para saciar sus ansias de locuras, pero penso que ya habria tiempo de sobra, toda una vida o hasta que se cansara, y que su madre seria la primera en gozar de ese caliente y duro miembro entre sus piernas, un poco pequeño, pero bello para ella y para sus designios.
Asi, que una vez que se hubo presentado ante William, miro a su madre quien se levanto seguida de Maria Clara y ordeno:
"Pongannlo en esa silla con el culo levantado. Cada una de Uds. podra tener la satisfaccion de darle veinte correazos en las nalgas… Eso sera William querido, para que de una vez por todas sientas nuestro poder, lo haremos solo por diversion y porque desde hoy te acostumbraras a ser azotado por tus faltas o por nuestro capricho. Debes tratar de adivinar nuestras ordenes, pero aun completamente satisfechas, podremos castigarte. Asi que nunca sabras lo impredecibles que somos y te esmeraras por aprender cada cosa que nos excita, cada deseo nuestro para complacerlo a costa de lo que sea. ¿Entiendes, burro inutil?
Si, Mi señora Maria Victoria…
Muy bien, algo te enseño Dulce maria…tu primera leccion de hoy.
Luego de lo cual, acostaron a William sobre el regazo de su novia, quien se levanto la falda para apretar entre sus piernas el duro miembro de William y asi, con el culo al aire, empezo la leccion a correazos.
¿Quien eres tu? ¡Suas! Un golpe en una nalga
Soy su esclavo, Mi señorita Angelica.
¿Para que viniste a esta casa? ¡Suaz! otro correazo en la siguiente nalga.
Para servirlas y obedecerlas, Mi señorita Angelica.
Y asi, uno a uno, los correazos marcaron las nalgas del cautivo mientras que al caer el golpe, su miembro se contraia entre las piernas de Maria Clara quien al borde de la excitacion, se masturbaba mirando su sollozante novio.
Al tomar la correa Dulce Maria, los sollozos de William se estaban convirtiendo en autenticos chillidos y sus suplicas no hacian mas que terminar de excitar a la chiquilla que se esmeraba cuidadosamente en recorrer cada centimetro de sus piernas, de sus gluteos dejando la espalda para la jefa de la familia.
Pero Maria Victoria no quiso marcarlo mas…solo sus gluteos enrojecidas, sus piernas marcadas con gruesos cardenales serian suficientes por ahora. Mañana seria su casamiento y bastante dificil seria disimular los ardores debajo de la ropa.
Con mucho pesar para Maria Clara y Dulce Maria, termino la leccion de William….pero la chiquilla hablo en privado con su madre suplicandole que le permitiera alguna ociosidad.
Se puso de acuerdo con su hermana Maria Clara, voltearon a William que aun lloraba como un chiquillo, pero que tenia su miembro milagrosamente mas alargado y completamente mojado, lo acostaron en el suelo y mientras su novia lo masturbaba furiosamente, Dulce Maria puso su pequeña y depilada gruta sobre la boca del cautivo mientras, agarrandolo una vez mas por el pelo le ordenaba:
"Chupame primero todos esos jugos que me has provocado con tu perverso miembro, meteme la lengua cuidadosamente en el culito y limpiamelo, luego me haces tener un orgasmo ya mismo o te acabo a bofetadas!"
Se subio la corta faldita, se hizo a un lado el tanga y puso alternativamente el culito y la cuca al alcance de la lengua entrenada de William, que chupo y limpio golosamente como si en ello le fuera la vida. Dulce Maria estaba transformada: su inocente carita ahora semejaba una pequeña perra en celo, sus mejillas sonrosadas, su mirada brillante y sus gritos de alegria y excitacion, dominaron la escena que sus hermanas y su madre contemplaban con satisfaccion enorme.
Maria Clara hubiera querido clavarse ese miembro entre sus piernas, pero ya sabia que su madre seria la primera, y que ella lo prepararia. Asi que se limito a masturbarlo, a llevar la cadencia de su hermana, a no dejar que eyaculara tempranamente sin haberlas satisfecho, hasta que sintio el grito de la pequeña Dulce Maria, sus oleadas de extasis y sus jugos mojaron la enrojecida cara del futuro esposo.
Una vez mas, la entrenada lengua de William seria su defensa…Dulce Maria subio al zenit de la satisfaccion, saboreo minuto a minuto su primero y autentico orgasmo y como premio a la labor de su juguete provisional, se acomodo sobre su boca y dandole una cachetada mas le ordeno:
"Ahora, abre la boca, bien abierta, para eso sirves bien…seras mi orinal. No quiero que dejes de tomarte ni un poco de mi dorado liquido…agradeceme por dartelo: quiero escuchar como agradeces mi regalo… ¡anda ya!"
Otra cachetada y William entendio lo que venia.
Gracias por su precioso liquido, Mi señorita Dulce Maria…
Dulce Maria solto entonces su precioso chorro mientras su hermana, maniobrando aun el miembro de su novio, pidio a su madre un frasco para medirle el semen. Ella, que sabia que podria suceder, lo tenia a la mano y rapidamente lo puso en las manos de su hija.
Apuro esta sus movimientos y mientras la boca de William era llenada por el caliente liquido de la chiquilla, su miembro exploto en un orgasmo contenido desde hace pocos dias, que sorprendio a su novia por la enorme cantidad, algo que nunca habia conocido….acercandole bien el frasco comprobo que habia superado con creces cualquier otra ordeñada manual a la que lo habia sometido.
Esto le dio para pensar que quizas a William muchas cosas mas fuertes y atrevidas pudieran hacerlo superar el limite y para ello contaria con la insuperable ayuda de su hermanita, con su atrevimiento e imaginacion. Incluso, podrian hacer concursos entre el, su padre y su hermano, guardando las proporciones y castigarlos o premiarlos de acuerdo a su produccion.
Podrian competir cada una con su candidato, por algun excitante premio, y para ello deberia tendria que entrenarlo con mayor dedicacion y con la decidida ayuda de Dulce Maria…
Asi, Angelica y su hermanito y su madre Maria Victoria con su padre podrian competir luego de un riguroso entrenamiento por tener el mas productivo de los miembros, la mas cuantiosa cantidad de leche, y tal vez, el ganador podria ser llevado a competir contra algunas de sus amigas y sus sirvientes. Se lo comentaria a su madre y no dudaba que el proyecto contaria con su aprobacion.
Cuando Dulce Maria termino de descargar sus liquidos sobre la boca de William, sus sollozos aun pugnaban por salir, pero eran contenidos por el torrente amarillo y caliente de la niña…
"Que sensacion…que descubrimiento…mas para ella que para nadie…" Agradecio a su hermanita el haber traido este extraordinario juguete a sus vidas y le prometio ayudarla en cualquier cosa que la solicitara.
Por su parte,William, hubo de tragar sin piedad todo lo que pudo, dejando perder algunas gotas, y temiendo una respuesta de esta chiquilla que tan facilmente lo habia doblegado y ante quien se sentia completamente amilanado. Pero no hubo mas castigo. Al dia siguiente seria el matrimonio y el futuro esposo tendria que estar presentable.
No obstante, fue bañado cuidadosamente entre una alberca del patio por las tres hermanas, y al terminar, llevado a la que seria su habitacion, compartida por los otros siervos de la casa: Victor y Esteban, el padre.
Estos se encontraban desnudos, cada uno en un camastro metalico, sin cobijas , sin pertenencias de ninguna clase, a excepcion de cepillos dentales, jabon y sus pequeños delantales. Al llegar a su camastro, le fue servida por el chico una pequeña cena, mientras era observado por los dos…ya acostumbrados a esta vida de esclavitud y dependencia.
William apuro todo lo que pudo y sin mediar mas explicaciones, se quedo dormido, pensando en el dia de mañana, en su futuro en esta casa, en las tres lindas chicas y su madre, en el dolor de sus nalgas, en su bella novia ahora un poco distante y compartida, en la linda chiquilla que habia hecho de el un pelele y habia empezado a descubrirle sentimientos ignorados, escondidos, excitantes, diferentes que nunca penso siquiera que existieran. El mundo que habia conocido anteriormente habia terminado. Su nueva vida, entre el yugo del dolor, del placer, de la humillacion , del sometimiento riguroso empezaria junto con su vida de casado.
¿Casado con Maria Clara?. Bien dificil…
Empezo a vislumbrar que su matrimonio habia sido cuidadosamente programado por las habiles muchachas secundadas por su madre. Que Maria Clara no lo amaba como el a ella..que lo utilizarian las cuatro y asi se lo habian hecho saber, que su voluntad de hombre terminaba con el comienzo del matrimonio y que nunca estaria seguro de gozar debidamente de su esposa al menos que fuera la voluntad de todas…. Sueños liquidos mezclados con pesadillas, gritos con gemidos excitantes, cuerpos sudorosos con latigos en el aire, y en este collage, las miradas, los gestos, los encantos, las redondeces de sus propietarias, el deseo hacia su novia, la confusion y excitacion ante la violencia sosegada, femenina y sorprendente de la mas debil de las cuatro en apariencia,…la que no podia dejar de visualizar con sus pecas, su pelo travieso, su mirada de autoridad autentica, sin nada de afectacion ni estudiada premeditacion…
No podria decirse que hubiera descansado cuando los gallos en el amanecer aun oscuro , le hicieron despertar acercandolo a una perspectiva que habia pensado solo eran sus sueños…
A veces, los mejores sueños amenazan con volverse realidad….
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