La familia del pueblo
Esto paso cuando fuimos a visitar a la familia que papá tiene en dónde nació .
Cuando éramos pequeños siempre íbamos a visitar a la familia que mi papá tenia en dónde nació, nunca me aprendí bien los estados pero mis hermanos y yo le decíamos rancho, que íbamos a ir al rancho y así.
Nos gustaba mucho ir ya que la familia de mi papá siempre nos trataba muy bien y nos hacía sentir queridos, había una tía en especial a la que queria mucho, siempre que íbamos a su casa ella preguntaba por mi y me recibía con abrazos y besos, ella me quería mucho. No habíamos ido en un tiempo debido a los trabajos de mis papás y porque mis hermanos y yo estudiábamos; pero en unas vacaciones de julio papá decidio pasar las vacaciones en el rancho.
Mientras íbamos de camino platicábamos de lo que recordabamos y de quién nos acordabamos, de chiquito no había puesto mucha atención por mi nulo interés pero recordaba que esa tía que me quería mucho, tenía un cuerpo muy bonito, ella siempre llevaba un tipo de vestido y regaso encima, pero eso no era suficiente para esconder la perfecta silueta de sus caderas y pechos grandes.
Cuando llegamos allá primero llegamos a la casa de los papás de mi papá, saludamos como de costumbre y nos recibieron bien, lo típico, platicar de cuanto habíamos crecido que hace mucho que no íbamos, lo típico cuando visitas familia después de mucho.
Después de saludar ahí, fuimos a la casa de mi tía, mi papá había dicho que desde que aviso que íbamos a ir al rancho mi tía decía y decía que quería verme. Al llegar a su casa había más familia, no solo ella, si no una hermana de mi papá y los compadres padrinos de mi hermana, llegamos saludando a todos, y en el comedor se encontraba sentada mi tía, como la sala no era muy grande íbamos saludando como en fila hasta llegar con ella, la saludé y ella se quedó sentada, desde ahí me dió un abrazo, pero, al abrazarme de la cintura y pegarme hacia ella, sus dos pechos enormes y suaves quedaron justo en mi zona baja, ella me tuvo abrazo al menos 2 minutos mientras todos seguían saludandose y me dijo, ya estás bien grande ya has crecido mucho, y vaya que has crecido, decía mientras una erección descansaba en sus pechos, se dió cuenta por eso había hecho ese comentario, pero no me soltó solo seguía abrazandome y moviendo sus pechos contra mi pene, ella rápidamente me dijo que me sentada a su lado, me salvó de que todos me vieran erecto.
Recordaba muy poco a las hijas de mi tía, tenía dos, ya eran de la edad de mi hermano y yo, las saludamos pero no les di mucha importancia, comimos algo y mi papá dijo que íbamos a ir otra vez a la casa de mis abuelos para acomodar y decidir dónde nos íbamos a quedar a dormir, mi tía rápidamente dijo que me dejarán ahí, que yo podía dormir ahí, al principio mis papás no quisieron pero ante la insistencia de mi tía para no ser irrespetuosos aceptaron que me quedara, bajaron mis cosas del carro y se fueron, mi tía mando a sus hijas a comprar unas cosas mientras a mi me indicaba dónde me iba a dormir, solo había dos cuartos, el de ella y el de sus hijas así que me dijo que eligiera dónde quería dormir.
Yo le dije que no era necesario que podía dormir en un sillón o en el suelo, pero ella solo sonrió y me abrazó nuevamente, me pidió disculpas por lo de hace rato, creí que lo iba a ignorar pero al parecer no, yo le dije que no tenía porque disculparse que la culpa era mía, ella solo sonrió y me preguntó que si eso me había pasado por ella, respondí que si y ella dijo con una voz más sumisa
«Ay pero, como te va a poner así el cuerpo de una mujer vieja como yo, yo ya no soy lo que era antes, de seguro te debe dar asco»
Yo le dije que para nada, que no tenía nada de malo, ella levantó lentamente su regazo por encima de sus hombros dejando al descubierto sus enormes pechos que solo eran cubiertos por el vestido que llevaba puesto, yo no le quitaba los ojos de encima al pedazo de cuerpo que tenía mi tía, para ser una mujer mayor tenía un cuerpo súper sensual, tenía una cintura algo delgada pero se veía así por sus anchas caderas y muslos, además de su gordo trasero, y unos pechos enormes, podía notar como sus pezones se marcaban de manera sutil por debajo de ese vestido.
Yo, con voz temblorosa y viendo hacia un lado por la pena le pregunté
«No le molesta que la vea así?»
«Para nada» de hecho, me alaga saber que te gusta verme, dijo mientras cruzaba los brazos por debajo de sus pechos levantandolos sutilmente mientras miraba hacia el lado contrario al que yo veía, no podía dejar de ver sus pezones así que le pregunté, yo ya estaba muy exitado así que me atreví.
Yo:»Oiga tía, y no…no lleva…no lleva nada abajo de su vestido?»
Tía: «Ayy pues n…no mijo no porque suelo taparme con el regaso y pues aparte porque no me dió mucho tiempo para arreglarme antes de que vinieran»
Yo: «O ya entiendo»
Tía: «Po..porque mijo? Te molesta que ande sin nada?»
Yo:» No no tía no es eso solo que, preguntaba porque, esque»
Tía: «Que mijo dime, puedes tener confianza conmigo »
Yo: » Esque, no puedo dejar de mirarselas y se le ve…se me marcan sus…sus…se le marcan un poco sus pezones»
Tía: «Ay mijo perdón esque, pues…el clima y…y la situación pues»
Yo: «No no sé preocupe, de hecho, me encanta como se le marcan, se ve muy erótica y sensual con ese vestido»
Tía: «Ay mijo que cosas dices»
Yo: «Tía, usted me…me dejaría….me dejaría tocarlas»
Tía: «Ay mijo apoco quieres tocar los pechos de una vieja como yo… seguro que no te da asco una mujer vieja como yo?»
Me preguntaba mientras se sonrojaba un poco y volteaba a verme a los ojos
Yo: «Claro que no tía no me da asco, si cuerpo, usted, es hermosa y muy sensual, por favor déjeme tocarla»
Tía: «Bueno mijo está bien, antes de que regresen estás muchachas »
Comencé a tocar las enormes tetas de mi tía, eran enormes y suaves y solo estaban cubiertas por un vestido de una tela muy suave delgada y de un color azul profundo, podía escuchar como mi tía se aguantaba apenas las ganas de gemir.
Se escuchó la puerta y mi tía rápidamente se tapo con el regazo con misa la aún en sus pechos y me dije viéndola directo a los ojos
«Tía ya me decidí, dormiré con usted en su cuarto»
Ella solo dijo que si en silencio mientras llegaban sus hijas. Ya en la noche estaba arreglando unas sabanas en el piso para acostarme pero mi tía entro en la habitación y me dijo
Tía: «No mijo, el…el piso está muy incómodo mejor…mejor acuéstate conmigo en la cama…para que no te valla a doler la espalda y duermas cómodo»
No me la pensé dos veces y acepte, iba a tener la oportunidad de acostarme junto a ella, apenas me levanté y mi tía se paró frente a mí
Tía: «Creo que estás muchachas ya se durmieron, no quieres…no quieres seguir apagando a ti tía como hace rato?»
Apenas termino la pregunta y comencé a estrujar sus enormes tetas otra vez
Tía: «Espera mijo, habías dicho que querías verlas o algo así no?, dame un momento»
Y comenzó a desabrochar su vestido por la parte de atrás y lo dejo caer al suelo, y efectivamente, esas enormes tetas eran suaves pero bien firmes, la forma que tenian era la misma que con el vestido encima, no llevaba sostén puesto, solo un calzon de mujer ya mayor. Casi se me salían los ojos, no podía creer que ella hubiera decidido que darse desnuda frente a mí
No perdí el tiempo y comencé a apretar, lamber, chupar, morder y estrujar esas enormes tetas que se cargaba, sentí como si mano se deslizaba hacia entre mis piernas
Tía: «Mijo no es justo que solo yo pase pena de estar desnuda frente a ti»
Rápidamente me saque la playera y me baje el pantalón y el boxer, quedé completamente desnudo frente a ella, la punta de mi pene ya estaba que se mojaba y yo continuaba manoseando esas enormes tetas mientras besaba su cuello.
Ella tomo mi pene con su mano y comenzó a masturbarme y yo por la excitación empujaba mi pena contra sus enormes muslos
Tía: «Mijo yo no sé cómo les gusta hacer estás cosas a ustedes los chavos ahora pero…pues te voy a tratar de hacer sentir placer de la manera que yo sé»
Comenzó a masturbarme más lento y yo podía sentir como la punta de mi pene mojaba su muslo, luego ella bajo a mis huevos y los tomo ambos con una sola mano y los jalo, despacio pero firmemente hacia abajo, solté un gemido de dolor y después se dirigió hacia su cama jalandome de los huevos
Se sentó en la cama y siguió masturbandome con su mano mientras con la otra con la palma abierta hacia círculos en la punta de mi glande, luego me acerco a sus pechos y comenzó a masturbarme con sus tetas.
Tía: «Si tienes ganas déjalo salir cuando quieras mijo»
Sus enormes tetas se empezaban a mojar con el líquido preseminal que salia como fuga de mi glande, siguió y siguió así asta que ya no aguantaba me dije que lo metiera en su boca, no lo pensó dos veces y metió la punta de mi pene en su boca mientras con sus manos seguía masturbando el cuerpo de mi pene y sus tetas se aplastaban contra mis muslos, sentir todo eso a la vez me llevo a tener una de las eyaculaciones más intensas que e tenido en mi vida.
Comencé a eyacular en su boca y ella seguía succionando la punta de mi pene y masturbando el cuerpo, cuando termine de eyacular volteo a dónde mi y me mostró su lengua llena de mi semen momentos antes de tragarselo todo.
La eyaculación fue tan intensa que caí sobre ella pero mi pene aún estába erecto y comencé a penetrar sus muslos por la excitación que aún tenía, ella tenía sus piernas juntas y yo metía mi pene hayas donde podía entre sus muslos, luego le pedí que se subiera en mi para hacer lo mismo pero con ella arriba.
Accedió y en un momento ella ya estaba sobre mi, con esos enormes muslos cerrados al rededor de mi pene mientras se movía de arriba hacia abajo dejando que penetratara esos muslos, sus pechos se aplastaban sobre mi pecho y su cara a solo centímetros de mi, no aguante las ganas y comencé a besarla.
Sentir sus enormes tetas sobre mi y sus muslos masturbarme, no pude aguantar más y comencé a eyacular una segunda vez, comenzaron a salir chorros de semen entre sus muslos y apresar de darse cuenta y ver mis expresiones de placer ella no paro de moverse y siguió masturbandome con sus muslos hasta que deje de sacar leche.
Tía: «Hay mijo me llenaste todas las piernas y las nalgas, que malo que eres, como te atreves a ensuciar así a una mujer»
Decía de manera juguetona mientras se levantaba, ella iba a tomar una ducha en el baño de su cuarto y me dijo que me fuera a bañar en el baño de la casa, yo trataba de agarrar fuerzas para levantarme cuando senti una firme palmada en mis expuestos huevos, cerré las piernas de golpe, mi tía me sonrió y me beso la boca, me abrió las piernas, se quitó el calzon y se sentó sobre mi pene y mis bolas dejando caer el peso de su cuerpo y comenzó a mover sus enormes nalgas por toda mi área, sentía que me aplastaba los huevos pero me exitaba demasiado sentir sus enormes nalgas.
Luego se levantó en dirección a su baño y me dijo que me fuera a bañar para que regresara a la cama a dormir con ella.
Camine en dirección al baño concretamente desnudo creyendo que más chicas ya estarían dormidas, todos estaba oscuro pero por debajo de la puerta del baño podía ver luz, creí que tal vez habían olvidado apagar la luz y fue suerte para mí ya que fue más fácil guiarme en la oscuridad de la casa, grande fue mi sorpresa al abrir la puerta y ver frente a mí desnuda a una de las chicas que se prepara para tomar un baño.
Pero eso es para el siguiente relato, ojalá y les guste, comenten si le gustan y les interesan más de mis relatos para seguir publicandolos. Gracias.
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