La saga de Alvarito y su precoz inicio en el sexo (2)

En plena tarde del sábado, mientras los pibes jugaban al fútbol en la cancha del barrio, en una cancha chica el padrastro jugaba su propio partido metiendo goles en el culo de Alvarito….
En la cancha del barrio, algunos preguntaban por dónde andaba Luis, ya que nunca se perdía el fútbol de los sábados, sin saber que en ese momento estaba disputando un partido especial, jugando como delantero se encontraba rompiendo el arco contrario, o mejor dicho el culito de 11 años de su hijastro Alvarito, que por cierto no paraba un solo instante de gritar y llorar.

«Que rico suena tu grito cada vez que te clavo»… Y cuando lloras tan fuerte así como ahora y mi pija que te hace quebrar la voz ufff y tu carita toda desfigurada… seguí así que mis huevos te van a premiar con un desborde de esperma, no entiendo por qué pero el dolor hace que largue mucho más, pero eso es lo último…pero que tal ahora? Está bien así o ya es muy fuerte?…Quiero que ahora me respondas ¿Querés que te coja más despacio o más fuerte? Es tu momento… «Mmm-aaa-ss des-pa-ciooo por-favor me-duele mu-choo»… «Fuerza mi campeón Alvarito, ya es tu tercera clavada»… «Anotá esta fecha y recordá siempre que hoy fue la primera vez que te cogieron en la posición más rica, bien empinado de cuatro… Que hijo más putito me saliste…Cómo quiero que mis cuates vean la cara que ponés cuando te la clavo por la colita… ¿Así está bien mi bb? Si querés más suave y despacito, pedime nomás…con voz de nenita pedime «papi más despacio por favor… papi dame más suave por favor»… «Eeesooo siii muy bien que puta te salió… repetí conmigo papi quiero más lento tu pija es grande me duele»…

Alvarito escúchame, está bien tu pedido pero no por ahora…ahora aflojame el culo todo lo que puedas para que sientas mi modo recargado, que mis embestidas te hagan gritar auxilio mamá, papá o a quien sea y que lo hagas sin parar hasta que la única ayuda que llegue sea mi eyaculación en tu cavidad anal…
Y montando al pobre muchacho, empezó a repartirle pijazos de forma despiadada, se puso de cucillas y con su peso se impulsaba y lo clavaba entera hasta meter entera sus 20 centímetros a toda máquina y a veces le dejaba quieto adentro hasta escuchar el llanto de Alvarito y al escuchar cada pedido como «pará ya», «me duele sacaaa ya» «Me vas a romper todo» y así tener la pija inflada al tope…»Esto es lo que hace un hombre de verdad»… «Ufff aguanta bebé mi pija es muy grande no puedo hacer nada»… «Uffffff seguí pidiendo auxilio que a mis huevos les encanta»… «De cuatro es la forma más rica de recibir poronga»… «Ayy Alvarito me estoy por venir… Y acercándose al oído, le pregunta ¿Me dejás largarte dentro de tu culo? Ufff se viene mucha leche ¿Querés que te largue adentro? Respondemeee yaaa ¿Puedo? «Si podés…» Obviamente, era una pregunta capciosa…a sus 11 años y con el culo empinado, las posibilidades de que el niño decidiera donde recibir esperma eran iguales a cero…

Y con unos gruesos gritos, el papá postizo largó una descomunal cantidad de lechita hasta vaciarse; miró fijamente al nene que acababa de comer por tercera vez y, con su mano, secó las lágrimas de su mejilla… «Por las pijas no se lloran, Alvarito…y menos vos que tenés uno que me aguanta toda…y por eso acabaste de recibir tu tercer tiro de leche…que putito que sos»… «Eso sí, ponete de 4 de nuevo y ya sabés… o me sacás la leche o te doy más pija para que me llores»… Y poco después, para alegría del pijón, de ese culito en cuatro empezó a brotar leche sin parar y así el padrastro Luis explotó en morbo al observar como se escurría esa mezcla que salía de ese culo después de clavarlo por la pared, boca abajo, sentado encima suyo y reventandolo de cuatro…y por la emoción, empezó a embadurnarle la cola y hasta la cara al pequeño joven de 11 añitos al que, varias horas y tres tiros después, quedó con un nuevo tamaño en el agujero del culito, obra de ese morochon pijon que, después de casi un año de darle biberón por la garganta del nene, decidió que su pija sea la primera en probar ese culito y llenarlo en leche.
Ya en la noche, luego de 3 horas de la última cogida, ambos cenaron sin mucho de que hablar. Luisito fue a su pieza y, desnudo abajo y con una remera así como le gustaba dormir, se puso de costado en la cama para pensar en lo que pasó desde esa mañana. Si bien el sabía que le gustaba la pija, no tenía pensado hacerlo a los 11 años y que la primera sea la del novio de su mamá…Aunque es importante aclarar que esta historia, la crónica de un anal anunciado, empezó un año atrás, específicamente una noche cuando un caliente Luis sentado en el sofá mirando al nene, de una le preguntó ¿Te gustan los hombres? Y, aunque no le respondió, volvió a preguntar ¿A vos lo que te gusta es una pija, verdad? Y al instante, con su mano derecha aquel macho mete y saca del interior de ese azul short del Chelsea para así mostrar una enorme, erecta, larga, gruesa, venosa y hermosa poronga que, hipnotizado, Alvarito no dejaba de mirar en silencio hasta que un ¿Te gusta? acompañado de una sacudida a su feroz pija en el aire, para luego sentenciar la suerte del peque con un…
«¿Y qué? ¿Vas a mirar nomás? Mejor vení y probá que se te nota en la cara que querés»… Y luego de pensar, el joven Alvarito finalmente respondió «Papá, no sé si está bien, creo que a mis 11 soy muy chico todavía para esto»… «Aaaah mirá, al menos no negás que te gusta lo que ves, vamos bien che»… «Y me da miedo tu cosota»… «Tenés razón al decirle cosota, ¿Mi pene es muy grande, verdad? Todos los hombres quieren tener una así como la mía…Bueno, bien tu mamá y muchas mujeres saben lo mío son las conchitas, así como a vos lo que te gusta son las porongas…y aunque está mal, yo no te voy a juzgar y hasta te puedo guardar el secreto pero con una condición… Vas a probar del mío para darte biberón…como tu mamá me quiere chupar la pija y yo no quiero gastar más en putas, voy a usar tu boquita que me lustres el glande y 100% secreto, estamos? Y así ni tu mama ni nadie va a saber que vos sos un putito… «Pero nunca hice esto, papi»… «Sí, ya sé, pero ahora vas a debutar…abrime la boca y cuidado de contarle a alguien que te va a ir mal, entendido?»…
Y así, el recuerdo terminó con aquella tarde y por un largo rato recibiendo su primera clase en sexo oral… Primeramente sentió al glande pasar por sus labios y darle suaves golpecitos después… Y asi fue realmente la primera vez que Alvarito conoció esa pija, entre chupadas y una paja hasta acabar cuando el padrastro apuntó la cabeza de su pija a su carita y, desde la punta de su glande, depositar toda la chele por su cara…y luego le llevó al espejo para que conozca el resultado de una largada por la cara y antes de empavonarle toda, con una ración en sus bocas sellaron el inicio de aquel lujurioso pacto… «Desde ahora vos me abrís la boca para que yo te ponga pija con leche»…

Todo era recuerdos de aquellos petes hasta que una caliente barra de carne lo hizo volver a la dura realidad…