Las aventuras de Karim 4

Cómo probé por primera vez no sólo a ser pasivo sino también algún «aditivo» que me volaron la cabeza.
Saludos gente! Acá continúo con los relatos de mis experiencias! Para los que requieran los links a los relatos anteriores, allí se los dejo!

1. https://sexosintabues30.com/relatos-eroticos/dominacion-hombres/las-aventuras-de-karim/
2. https://sexosintabues30.com/relatos-eroticos/dominacion-hombres/las-aventuras-de-karim-2/
3. https://sexosintabues30.com/relatos-eroticos/dominacion-hombres/las-aventuras-de-karim-3/

Aprovecho para mencionarles que si alguno tiene inconvenientes con los «aditivos» o «sustancias», mejor eviten este relato!

A pesar de que lo del proyecto había resultado divertido y que aunque había terminado mi relación con Clarissa, todavía seguía cogiendo con Jaime cada vez que podía.

Sin embargo mi curiosidad aún no había Sido satisfecha totalmente… En primer lugar siempre estaba caliente así que quería conocer más chicos y chicas con los que poder satisfacer esa calentura continua y además, me estaba comenzando a dar mucha curiosidad el hecho de que Jaime eyaculaba múltiples veces mientras yo lo penetraba, eso sin tomar en cuenta las caras y gemidos de placer que ponía durante el proceso.

Comencé a buscar información y aprendí que el punto de mayor excitación del hombre se encontraba en el ano, así que decidí que finalmente había llegado el momento de ser pasivo y de buscar alguien que me desvirgara…

En un principio pensé en Ricardo pero luego recordé lo gorda de su verga y entendí que no era una buena idea. Jaime por su parte a pesar de que me había dicho alguna vez que quería desvirgarme y de tener una verga que sería pequeña y por tanto ideal para desvirgarme, no me llamaba la atención ya que lo veía más como mi sumiso pasivo.

La respuesta llegó unos días después sin yo mismo buscarla ya que Rafael, el hijo de mi padrastro se quedó a pasar unos días en casa. El tenía 19 años ya y luego de aquellas conversaciones cuando éramos tan chicos nunca más se habló de ningún tema. De hecho, casi no había tenido contacto con él y se quedaría unos días en casa porque su madre lo echó por dejar embarazada a su novia de 17. El primer día durante la noche nos pusimos a charlar de toda la situación que fue por un condón roto, que estaba muy asustado y que de paso fue estando no muy consciente porque él ya no la quería. Cuando le pregunté que si había Sido borracho sólo me respondió «no exactamente»…

Sabía que si preguntaba iba a obtener algo más que una respuesta pero la curiosidad pudo más que yo. «¿Qué te habías metido entonces?» Y obtuve mi respuesta cuando sacó una bolsita y de inmediato se abalanzó sobre mi y me tomó del cuello diciéndome que si le llegaba a decir a alguien de eso, iba a tener problemas. Lo traté de tranquilizar y le dije que yo tenía amigos que usaban también (aunque era mentira). En ese momento me preguntó «¿quieres probar?» Separó un poco, lo inhaló y comenzó a amasarse la verga. Separó un poco más y me dijo «dale, prueba un poco». No sé si fue el susto, la curiosidad, o la calentura pero probé.

En ese momento Sentí un subidón extraño y la calentura se me incrementó de una forma increíble. Lo más sorprendente fue que además de erectarme casi de inmediato, sentí como mi ano también se calentó y se dilató, lo que me hizo necesitar ir al baño.

Le dije a Rafa que guardara la bolsa que iría al baño y en ese momento traté de recordar los consejos que en su momento Jaime me había dado. Fingí darme una ducha y me hice un enema por primera vez lo mejor que pude, Además de ensalivarme y estimularme mi ano que sentía palpitar pidiendo a gritos un trozo de carne. Cuando volví de la ducha, noté que Rafa estaba empalmado tocándose, probablemente haciéndose una paja y le dije que si usábamos un poco más. Lo hicimos y está vez separó en tres partes. Una para él, una para mí y una tercera que se puso en un dedo y que cuando me disuse a tomar la mía apuntó directamente a mi culo, que lógicamente sintió mojado de la saliva que me había puesto previamente…

En ese momento me agarró del cuello y me bajó hasta su verga tiesa… 19×6 aproximadamente, muy derecha y con la que ni bien acerqué mi boca intentó enviar al fondo. No pude tragarla y me ahogué un poco, allí puso un poco de polvo en la punta de su verga y volvió a insistir… Así fue haciendo hasta que se me adormeció toda la garganta y me pudo coger la boca a gusto. Estaba dispuesto a tragarme toda su leche cuando me dijo «te quiero coger». Le dije que nunca me habían penetrado y me respondió que con el polvillo mágico no habría problema. Me mojó el culo con saliva y comenzó a poner poco a poco de aquella sustancia que aunque ardía, me iba dilatando cada vez más y más a medida que metía uno, dos y luego tres dedos… En ese momento me puse en cuatro y le pedí desesperadamente que se pusiera un condón y me la metiera. Comenzó a apoyar esa cabeza dura en las paredes de mi culito y con la calentura aunque estaba a pelo, no pude hacer más que ceder. Me dolía un poco cuando metió toda la cabeza pero luego de ésto, la mandó al fondo y allí ví las estrellas y no justamente de placer, El dolor fue inigualable. Me sentí roto en dos y en ese momento Rafa la sacó completamente y pude notar que tenía algo de sangre. En lugar de hacerlo sentir incómodo o mal, se puso aún más sátiro y luego de usar más de aquellos polvos, y de mandármela a la garganta hasta que quedara limpia la volvió a mandar al fondo de una. Esta vez no me tomó por sorpresa y el dolor fue menor, además mezclado con el placer de sentirme entregado a un machito hetero y que de paso era como mi hermano.

Ahora el dolor se convertía en placer, mientras Rafa bruscamente la metía y la sacaba como quería mientras me sujetaba fuerte por la cintura… Unas pocas embestidas después trató de quedarse quieto y noté que estaba por eyacular por lo que ahora yo comencé a clavarme en su verga logrando que en pocos segundos me llenara de leche. Me sentí por primera vez lleno del jugo de un macho, me sentí invadido, sumiso, Un simple instrumento o juguete para el placer de la hombría de mi hermanastro… y me encantó!

Rafael sacó su verga aún morcillona de mi culo y se acostó boca arriba exhausto de la cogida y yo perseguí esa verga jugosa con mi boca y me dediqué a limpiarla con esmero pasando mi lengua y volviendo a ponerla dura. Me dijo que ya parara que estaba cansado pero no le hice caso… Me senté sobre esa verga dura y comencé a chupar su cuello y sus tetillas mientras subía y bajaba cada vez más rápido y más fuerte a sentarme y cabalgarlo. Quise en un momento rotar un poco y justo allí me agarró por las piernas, me levantó y me puso patas arriba y comenzó otra vez a embestirme! Me mostraba su verga llena de la espuma batida de su propia leche y me tentaba diciéndome que si la quería mientras yo desesperado la pedía en la boca y el culo. Tras un rato del mete y saca anunció que iba a acabar de vuelta y la puso afuera en el borde de mi anito. Tras largar el primer chorro la mandó de vuelta al fondo y me volvió a preñar en lo profundo mientras yo también comenzaba a eyacular sin ni siquiera tocarme y con tal presión que llegó hasta nuestras caras.

Nos reímos cómplices del placer y nos dijimos mutuamente que ni una palabra de ésto a nadie. Para mí fortuna, Rafa es un hijo de puta mentiroso jejejeje aunque eso ya es historia de un próximo relato.

Espero lo disfruten a pesar de que hay algunas cosas medio fuertes para algunos!

Saludos chicos!

Karim