Los Tordos – Parte VI – Leche de Burro
Un niño de 10 toma la decisión entrar a trabajar con su tío, sin saber que terminara como depósito de leche….
Caminamos hacia el jardín central, los 6 desnudos, mire hacia atrás y vi a mis tíos desnudos caminando con sus vergas semi duras aun, la imagen era muy tentadora, como para detenernos y chuparselas hasta que me dieran su leche caliente de nuevo.
-Vamos niños, ya se saben las reglas el ultimo en llegar se deja coger por los demás.- El “Camello”, nos dijo a todos.
Mis tios caminaron hacia el jardín junto al conejo y el camello, y empezaron a buscar su ropa mientras el Burro me llevaba al kiosco.
-¿Dónde escondiste su ropa…?- Me pregunto el “Burro”, mientras nos sentabamos en el escalon mas alto viéndolos buscar desnudos entre las jardineras.
-Las playeras en las jardineras de las esquinas, las trusas en las ramas de los arboles de esas jardineras, y los shorts en la entrada de la presidencia.- Le respondí mordiéndome el labio para no reirme.
El me vio y sin decir nada me beso, podía sentir su bigote naciente raspando mi cara, su lengua entro en mi boca, su mano jugaba con mi pezón presionándolo, lo que me hizo gemir en su boca, se separo de mi boca y me ayudo a sentarme en sus piernas y continuo besándome, tomo mis nalgas en sus manos, uno de sus dedos, empezó a jugar con mi culito mientas seguía besandome, bajando lentamente, por mi cuello, su dedo logro entrar en mi haciendo cirulos mientras entraba.
Al llegar a mi pezón, jugo con el y con cada mordisco, mi verguita se ponía dura, mordí mi labio para evitar hacer ruido. Lentamente nos giramos hasta dejarme recostado en el frio piso de cemento, mientras el seguía besando y lamiendo mi piel hasta llegar a mi verguita, se la metio en la boca y jugo con su lengua sobre ella, yo solo gemia y arqueaba mi espalda sintiendo su lengua jugar con mi verguita y sus manos jugando con mis pezones, sin aviso, dejo uno de mis pesones y uso su mano para meterse mis huevitos en su boca, sentir todo dentro de su boca me hizo dejarle mi primer carga de “leche” en su boca.
Mi respiración era agitada, mis piernas se sentían débiles como gelatina, volvió a besarme en la boca y se acostó a mi lado jugando con mi pezón de nuevo.
-¿Te gusto perrito?- El “burro” me sonrio.
-Eso se sintió muy bien, ¿asi se siente siempre?- Pregunte mientras sobaba mis pezones adoloridos.
-Pues no tengo mucha experiencia, pero me encantaría ver como lo haces tu…-El “burro” toco su verga sobre su short.
-Pues cuando gustes… -Sonrei travieso mientras me acostaba de lado para verlo de frente.
El solo se rio y se saco la verga, era morena, con una mata de pelos chinos era grande y gorda, parecía un platano macho maduro. –Asi como la ves, aun esta dormida, asi que para que puedas probarla vamos a tener que esperar, si te la meto en la boca voy a tener que metertela en el culito, ni tus tios me la aguantan, asi que sin presiones…
Asenti nervioso, no recordaba que fuera tan grande, pero creo que estar amarrado en el árbol, con miedo que nos vieran no me dejo apreciar bien el tamaño de su verga.
-Vamos, veamos porque se tardan tanto.- Nos levantamos y vimos que los cuatro nos miraban desnudos con sus camisetas en la mano, pasmadas de agua.
-Por nosotros no se detengan… podemos esperar para que nos digan donde esta el resto de nuestra ropa, y porque están mojadas si las jardineras están mas secas que la arena de la terminal… -El “conejo” levanto su playera mojada.
Yo solo agache mi cabeza y mirando al suelo, baje del kiosco.-Me sente en la fuente y se me callo en el agua, asi que la saque y la escondi asi…
-¿Y donde dejaste el resto…? – Mi tio Valente pregunto exprimiendo su playera.
-Busquenlas… ese es el fin de esto…- El “burro” les contesto- Tienen toda la noche, o si se rinden, puedo intentar metérsela a los 4 a ver quien me la aguanta al fin…
Los cuatro se vieron y regresaron a buscar su ropa, el “burro” me guiño un ojo y caminamos hacia la terminal. Cuando llegamos subimos al camión, el busco en su maleta y saco un par de revistas como las que mi tio compro en la mañana. –¿Has leído estos cuentos alguna vez?
Negue con la cabeza.
-Estos sirven para ayudarme sacar mi leche, no he encontrado a alguien que me ayude a sacarla…
-¿Cuándo podremos intentarlo…?- Pregunte viéndolo nervioso.
El me miro y moviendo la cabeza, me hizo señas de ir con el. Bajamos del camión y entramos a un cuarto debajo de las escaleras, donde había una colchoneta.
-Ponte en y déjame ver ese culito…
Me puse en cuatro y sentí su boca besarlo y meter su lengua, lentamente metia y sacaba su lengua, mientras tocaba mi verguita.
-Aquí vamos… si duele demasiado dime y parare.- Senti como uno de sus dedos intentba abrirse paso dentro de mi.- Tengo que estirarte primero, no se cuanto tardemos…
-Solo hazlo… quiero agradecerte lo que hiciste conmigo hace rato…
El beso mis nalguitas mientras metia y sacaba su dedo dentro de mi, haciendo círculos, en cada entrada y salida, sentía como si fuera a hacer del baño, lo que hacia que contrajera mi hoyito.
-Relajate, o tardaremos mas…- Susurro mientras seguía jugando.- Me encanta como te comes mi dedo… tienes un culito tragon…
-No solo mi culito…- Gemi mordiendo mi labio.
El solo se rio y sentí como metió un segundo dedo haciendo círculos.-Pues eso veo, si consigo meterte tres, puede que si podamos hacer cosas esta noche…-Senti como besaba mis nalcuitas y las mordia suavemente.
Sin pensarlo me recargue en mi pecho dejando mi culito en alto mientras comenzaba a jugar con mis pezones, lo que me ayudo a sentirme las exitado, pasamos asi un rato, hasta que sentí que sacaba sus dedos, salir y entrar de nuevo.
-Oh por dios… ¿eso te duele?-El “burro” pregunto y pude oir incredulidad en su voz.
-No, no pares, cada que mueves los dedos tocas algo que se siente rico…
-Niño… tienes tres dedos en el culo… y se siente mas espacio… si aguantas mi verga, seras mi perrita de por vida… ¿Puedo metertela…?- Senti sus dedos salir de mi y sin esperar respuesta, sentí como acomodaba su verga en mi culito, y la metia lentamente en mi.
Senti como poco a poco me ardia el culito mientras recibia todo eso en mi. El la cavo al fondo- Dios… que apretada tienes la cola perrita…-Empezo a sacarla lentamente y antes de que terminar de salir, la volvió a meter de golpe, haciéndome gritar en cada estocada.
No se cuanto tiempo paso, pero el dolor poco a poco fue pasando y dio paso a la sensación de querer hacer del baño, mientras entraba y salía, comencé a tocarme mi verguita, mientras escuchaba y sentía sus huevos chocar con los mios.
-Oh si… dios… no puedo creer que te tenia tan cerca…- Senti como su respiración se cortaba con cada embestida.- Tanto tiempo queriendo cogerme a una vieja, y ninguna la aguanto, y resulto que un morrito meco de primaria, era el indicado para mis mecos…-Sus jadeos me hacían retocerme debajo de su peso. Senti como jalo mi cadera hacia el y metia sus brazos en mi abdomen, cargándome con su verga aun clavada en mi.- Vamos, salgamos de aquí, si voy a rellenarte de leche, quiero que sea fuera de este lugar.
Camino conmigo en sus brazos, salimos por la calle y vimos como mis tios y sus amigos, se asomaban desde el camión y nos veian con la boca abierta, el “burro” nos puso frente a ellos.- Dame tus manos, quiero intentar algo…- Extendi mis brazos hacia atrás y sentí como mi cuerpo bajaba hacia enfrente, coloque mis piernas lo mas que pude alrededor de las suyas.- Aquí vamos…
Comenzo a moverse rápido sujetando mis brazos, tocando una parte de mi que hacia mi verguita ponerse dura, y a sacar liquido, eran muchas sensaciones al mismo tiempo, sin pensarlo comencé a gemir, viendo como los cuatro bajaban del camión con sus vergas en la mano, era hipnotico verlos delante de mi y sintiendo al “burro” entrar y salir de mi, rápido, sonando sus huevos contra los mios.
Cerre los ojos y me deje llevar, cada golpesito me hacia sentir lo que la boca del burro hacia unos minutos, horas, nos e hace cuanto.-Oh si…- Senti como dejaba su verga dentro de mi rellenando mi culito de leche con varios disparos, me bajo lentamente sobre la arena del piso,y cuando crei que saldría de mi, sentí como seguía moviéndose lentamente haciendo cirulos dentro de mi. Lo que me hiso gemir de nuevo al sentir sus movimientos danto toques dentro de mi, y mis pezones rozándose con la fría arena.
Saco su verga de mi y sentí como el vacio que dejaba en mi, dejaba pasar el aire frio a mi culito.
-Si te cortas el pito, te hago mi esposa… – El burro se levanto y subio al camión por papel para limpiarse.
Me sentía tan cansado que no supe que paso después, cuando abri los ojos, era de dia, y estaba cubierto con una cobija, aun desnudo, sentía mi culito arder, mire alrededor, y estaba en una cama en un cuarto ajeno.
-Miren quien despertó… – Un hombre joven, con ojos verdes y barba tupida, me veía desde la puerta, vestia una pantalón de pijama y una camiseta sin mangas que dejaba ver sus brazos y axilas peludas.
-¿Donde estoy…? ¿Quién eres…?- Pregunte nervioso.
-Me llamo Ruben, pero me dicen “El gato”…-Señalo sus ojos- Apodo ingenioso… Tus tios están trabajando, viene por ti mas tarde, ¿tienes hambre?
Asenti avergozado.
-Bueno, ven,comamos algo, casi son las 10 de la mañana… después de desayunar puedes darte un baño… tomate las pastillas que están en el buro, son para el dolor muscular… -Me miro fijamente y salio del cuarto.
Mire al lado de la cama y había un vaso con jugo de naranja y dos pastillas, las tome y me baje de la cama, sobre esta había una toalla, la tome y me la coloque en la cintura y sali del cuarto.
Como sigue??
Excelente relato… Como sigue??
Uufff.. que rico… Menudo calentón me has provocado mientras me hacia una paja 🫦
Me encanta esta historia, no sabes como la disfruto siempre que subes un capitulo 😋
Que gran relato, es una delicia tu forma de escribir. Estoy ansioso porque subas otra parte.
Uufff… Esta historia me vuelve loco, me encanta tu forma de escribir 🫦 estoy deseando que subas otra parte
Como sigue? Necesito mas.
Uufff… Esta historia me da la vida 🔥🔥 menuda paja me he hecho 💧😋