MALDITA TIENDA
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Mis papás me mandaron por cervezas por eso de las 10 de la noche, estábamos en una fiesta, y pues sabiendo que estaban cerradas las tiendas a esa hora, me mandaron a una tienda a casi veinte minutos de ahí, y me dijeron que no regresara hasta traer las cervezas. Así que como todos estaban borrachos (menos yo) tuve que ir solo.
La calle de la tienda es muy poco transitada, así que pude notar a simple vista que si estaba abierta, llegando a la tienda veo que hay cuatro señores tomando, era el dueño de la tienda (que era el mas grande, con una panza muy grande, moreno, chaparro, pero muy fuerte de brazos) y sus yernos (morenos todos, uno un poco mas alto que los demás, es decir algo comunes y de rostro vulgar).
Salude, y se me quedaron viendo, pero respondieron a mi saludo, les pregunte si tenían cervezas y me dijeron que sí, que tomara las que quisiera que estaban en el refrigerador al fondo de la tienda, yo o quería entrar porque no confiaba mucho, pero al no tener opción tuve que hacerlo, y en el momento de comenzar a sacar las cervezas, uno de los yernos se paro detrás de mi y me agarro mis nalgas, a lo que yo voltee muy enojado y le dije que que le pasaba y el solo me contesto que con ese pantalón que traía bien pegado, mis nalgas parecían de vieja, yo muy encabronado con lo que me dijo le solté un puñetazo en la cara y su familia al ver eso, se pararon y me agarraron entre todos (realmente eran muy fuertes) y me pusieron en el piso.
El mas alto de ellos corrió a ver si no había nadie en la calle y enseguida bajo la cortina de la tienda, yo en ese momento quería levantarme y pegarles a todos, pero no me dejaban, en eso al que golpee en la cara les dijo a los demás que se quería vengar del puñetazo que le había dado y que quería hacerme lo mismo, yo pensé que ya valía verga cuando el dueño de la tienda dijo que lo iba a pagar pero que la humillación y el tener la verga de cuatro hombres me iba a doler mas que un puñetazo en la jeta, yo proteste de muchas maneras pero ellos al ser más solo se limitaron a reír.
Me acomodaron los cuatro de tal forma que quede sentado en el piso, sin posibilidad de moverme, entonces me amarraron con un lazo las manos para que no pudiera hacer nada. entonces uno de los señores se desabrocho el pantalón y dejo ver su verga flácida, no muy grande (16 cm) pero si muy ancha y me dijo que se la chupara, y que si lo mordía me iba ir muy mal, así que con todo el asco del mundo se la comencé a chupar, al principio su sabor era muy fuerte a orina y a sudor, pero era muy desagradable, en fin, el solo gemía y los demás señores veían todo el espectáculo, diciendo comentarios muy leperos total que pasando unos 10 minutos empiezo a sentir unos chorros calientes en mi boca (muy salados) y un gemido de placer, mi mandíbula estaba adolorida y yo estaba muy encabronado.
Después de que se retiro siguió el dueño de la tienda el tenia una verga de unos 18 cm y gruesa, aunque su panza era inmensa, me la dejo ir toda hasta la garganta y se corrió muy rápido (apenas duro tres minutos en mi boca) cuando sentí un sabor muy agrio y amargo pero me obligo a tragarme los mecos, después siguió el golpeado, y vaya verga que tenía, media 20 cm muy gorda y cabezona, el muy hijo de puta tardo en venirse como 20 minutos y pues todos decían que era su puta y que me veía muy bonito con sus vergas en mi boca. Finalmente el último señor que quedaba saco su verga y si bien no era grande como la anterior era lo bastante gruesa como para tenerle miedo. El me dijo que tenia que complacerlo mejor que a los otros y en ese momento solo metió su verga en mi boca, y vaya que quería llorar, era muy injusto, pero una parte de mi comenzó a verle la parte buena de esto y pues ya le comenzaba a mamar la verga por mera inercia estuvo el cabrón como quince minutos en mi boca hasta que se corrió, su leche era de un sabor tan amargo y salado que me dieron ganas de vomitar.
Sabiendo que ya se las había chupado a todos, pensé que me soltarían, pero vaya error, lo siguiente que paso fue que me desamarraron las cuerdas y me pusieron de pie para colocarme en la barra donde atienden a sus clientes donde me amarraron las muñecas y me bajaron los pantalones y fue ahí donde comencé a llorar y suplicar que me dejaran ir, pero lo único que me dijeron fue que si ya se las había chupado, era momento de preñarme el culo blanco que tenía.
El primero que me la metió sin nada mas que mis babas fue el anciano, sufrí una sensación de escalofríos y de terror que no pude evitar gritar, afortunada o desafortunadamente el se corrió muy rápido, haciéndome sentir unos chorros calientes en mi virgen culo y mientras se corría y yo gritaba, me decía que tenía mucho que no estrenaba un culito tan bonito y virgen, a lo que yo solo pude decirle una maldición. Cuando saco su verga sentí un alivió que se vio opacado por la metida de una verga mas pequeña pero con mas leche que la anterior y el muy hijo de puta solo decía que tenia el culo más rico que su esposa, yo en ese momento comencé a llorar de impotencia.
El tercero que me metió su verga fue al que golpeé y vaya que me hizo sufrir, primero, llego mas profundo que los otros imbéciles, y en segundo lugar me toco una parte de mi ano en la cual en vez de seguir gritando, me provoco una sensación única y diferente, lo que hizo que por primera vez en la noche comenzara a gemir, fueron tan fuertes mis gemidos que todos se sorprendieron y me comenzaron a decir cosas como que era la puta de sus vidas, que se estaban divirtiendo conmigo más que con una mujer de verdad y me comenzaron a decir mamacita y cosas así, y el que me estaba cogiendo se excito mas por mis gemidos de placer que solo sentí como su verga creció un poco más en mi culo y explotó llenándome de mucho semen.
La verdad es que no se que me pasó, pero me gusto mucho esa sensación y me fascino, pero no les iba a demostrar que me había gustado esa sensación (mas de lo que ya lo había hecho) porque no sabía que podría pasar, Por último me metió la verga el hijo de puta con la verga más gruesa, y vaya que me asusto, porque pensé que esa cosa no cabría en mi culo, total que me dijo que ni con todo el semen que tenia me iba a servir para que mi culo quedara lubricado y que no iba a sufrir, y la verdad es que me hizo gritar y gemir más que el otro y una parte de mi deseaba que se corriera rápido, para que me dejara mi culito en paz, pero otra parte de mi deseaba que no se corriera, y que siguiera ahí por horas, Se corrió y me dejo mi culo todo rojo y escurriendo mecos, diciéndome que era la mejor cojida que habían tenido en años.
Descanse unos minutos y después me tomaron fotos de mi culo virgen y copiaron el número de mi novia en su celular, donde me amenazaban diciéndome que si los denunciaba con la policía, esas fotos iban a ser enviadas a mi novia y que se encargarían de publicar esas fotos a todos mis conocidos de mi celular, a lo que yo dije que nadie se iba a enterar de nada de lo que me habían hecho.
Me soltaron de las muñecas, me dieron mis cervezas y como "acto de generosidad" me regalaban las cervezas solo porque me vieron gemir y tragarme sus mecos, abrieron la cortina de la tienda y me dejaron ir, no sin antes darme una nalgada cada uno en mi culo adolorido.
Yo prometí vengarme de ellos y lo hice, pero eso lo contare después…
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