Mi compañero de cuarto estuvo recibiendo una tras otra verga tanto por su culo como por su boca.

Un estudiante universitario, lo invitan a una fiesta, aunque le advierten que no beba mucho, se emborracha, y cuando pierde el sentido le comen el culo y lo ponen a mamar verga..
Mi compañero de habitación en la residencia estudiantil, recién había llegado a la Universidad, y apenas conociéndonos lo invité a una fiesta, que un conocido daba en su apartamento.
Como él no tenía más nada que hacer, aceptó la invitación, además, como no conocía a más nadie, y quería salir a divertirse, no le quedo otra opción que acompañarme.
Cuando llegamos, ya había varios de los chicos estaban borrachos, pero apenas entramos, nos dieron una cerveza, y si más ni más enseguida nos pusimos a beber, fue cuando él me comentó que se dio cuenta, de que uno de los chicos, le estaba mamando su verga a otro.
Al ver lo sorprendido que él estaba, le dije. “No te preocupes, es que ese tipo cuando se emborracha le da por dejarse dar por el culo, o ponerse a mamar vergas, y siempre hay quien lo complazca”.
Mi compañero de cuarto, algo confundido me dijo que eso a él le pareció raro, pero como el que estaba mamando, parecía gustarle lo que estaba haciendo, mi compañero dirigiendo su mirada hacia otro sitio, me comentó que ese no era problema de él.
Por lo que siguió bebiendo, sin ponerle atención a lo que aquel chico hacía, o se dejaba hacer, pero después de un buen rato de estar bebiendo, uno de los chicos se sentó al lado del, y tras darle otra botella de cerveza, comenzó a charlar con mi acompañante, preguntándole que le parecía lo que, al chico ese, le gustase mamar vergas, él solo le respondió diciéndole. “Ese no es problema mío, si a él le gustaba, por mi está bien”.
Y siguió bebiendo, por lo que, al poco rato, me di cuenta de que él actuaba como si estuviera borracho.
Tanto que, de momento, el chico con quien estaba charlando, le dijo. “Sabes se ve que tienes un culito sabroso”, yo al escucharlo me puse a reír, pero me acerqué a mi compañero, y le dije que mejor dejara de beber, que, si se dormía, seguramente le comerían el culo.
Él comenzó a reírse, quizás pensando que se trataba de una broma, pero al poco rato, quizás por lo mucho que él había bebido, se quedó dormido, aunque yo le advertí lo que le podía pasar, él había tomado tanto, que su cuerpo no le respondía.
Fue cuando un chico, nos dijo a los de más. “Ya este perdió el sentido, quizás le pusieron mucha droga en la cerveza.” Mi compañero, trato de hablar, pero estaba tan borracho, o drogado que las palabras no le salían, trato de ver ponerse de pie, pero inmediatamente cayó al piso, en ese momento uno de los chicos presentes le comenzó a quitar los pantalones, hasta dejarlo completamente desnudo de la cintura para abajo.
En medio de su borrachera, seguía tratando de hablar, pero en el estado en que él estaba, le era completamente imposible, el evitar que continuasen quitándole la ropa, o pedir que se detuviera.
De momento, al yo ver su estado, separé sus piernas, y sin él poderlo evitar, comencé a penetrar su culo, con mi verga, el muy pendejo estaba tan borracho, que ni le dolió, y si le llegó a doler, no se quejó.
Pero si comenzó a sentir mi cuerpo sobre el del, al tiempo que mi verga, entraba y salía de su culo, sin que él pudiera hacer nada para evitarlo.
Pero a medida que yo continuaba penetrándolo ante la vista de los demás, él escuchaba como nos reíamos, y como yo les decía a los otros, que su culito era bien sabroso.
Mientras que él sin poder hacer nada, permanecía acostado boca abajo, dejando que yo siguiera dándole por el culo, como me daba gusto y ganas.
Al rato comenzó a despertar, pero ya tenía toda mi verga dentro de sus nalgas, y él sentía como se la enterraba una y otra vez, hasta que, al poco rato, cuando la saqué, y terminé de venirme entre sus nalgas, sin que él pudiera evitarlo.
Yo había terminado, cuando el chico que nos recibió en la puerta, estando completamente desnudo, le dio la vuelta al cuerpo, colocándolo boca arriba.
Tras limpiar sus piernas y nalgas, ante la mirada de todos nosotros, también comenzó a penétralo por el culo, pero de manera mucho más salvaje, pero mi compañero de cuarto comenzó menear sus nalgas, con fuerza y a pedir que le dieran más y más duro.
Yo no lo podía creer, pero a pesar de la gran borrachera, él tenía, en medio de todo, cada vez que le enterraba toda su verga, mi compañero disfrutaba intensamente, todo lo que le hacían.
Así después de un buen rato, que él le siguió dando por el culo, una vez que se vino, al poco rato, otro de los chicos lo penetró, de forma más suave, pero de igual manera, aunque no se podía poner de pie, si continuó moviendo con fuerza sus nalgas, cada vez que la verga, de ese tercer chico entraba y salía, una y otra vez de su culo.
Así estuvo, el resto de la noche, recibiendo una tras otra verga, ya había oscurecido, cuando lo puse a mamar mi verga.
Finalmente, se pudo poner de pie, y dando tumbos y sin decir nada, fue al baño, tras expulsar toda la leche, que le habíamos dejado, y lavarse lo mejor que pudo, regresó a la sala, al verlo le dije. “Te lo advertí que, si te dormías, te iban a comer el culo”.
No dijo nada en lo absoluto, pero sonriéndose se dirigió a recoger sus pantalones, cuando otro de los presentes en la fiesta, agarrándole las nalgas, le dijo. “Si quieres podemos seguir”, yo pienso que por lo borracho que estaba en esos momentos, en lugar de ponerse su ropa, y marcharse, lo que hizo, de manera gustosa se recostó en el sofá, y con sus manos abriendo sus nalgas se las ofreció.
Por lo que ya de manera, un poco más consciente disfrutó nuevamente de que le comieran el culo, y lo pusieran a mamar.