Mi primera vez con un niño
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por nicasexoso.
Hola a todos, mi nombre es Joaquín, tengo 23 años, soy alto mido 1.85, recio y moreno.
Siempre me he identificado como una persona muy caliente, inicié mi sexualidad a los 18, y desde ahí no he parado.
Lo hago con chicos y chicas, en esta ocasión quiero contarles una de mis ultimas parejas sexuales, un niño de 14 años llamado Moises.
Lo conocí en facebook, él me envió una solicitud de amistad, acepté y empezamos a hablar, vivía a unos 15 minutos de donde vivo, en un barrio vecino, no sabía que era menor, hablamos por un largo tiempo y me dijo que nunca había estado con un hombre, luego me reveló su edad.
Mis esperanzas se perdieron totalmente pues prefería alejarme de los menores, por temor a caer en prisión.
Moises siguió chateandome, e insistiendo que quería estar conmigo.
Yo lo evitaba pero enviaba unas fotos divinas de su rico trasero, no podía evitar pensar en caer en la tentación pero la razón siempre ganaba.
Después de un mes sin nada de sexo yo andaba a reventar por liberarme, y es cuando me decidí a citar un domingo a medio día a Moises en el pequeño apartamento que alquilo.
Tome todas las medidas para que nadie lo viera entrando e hice prometerlo no gritar cuando lo estuviéramos haciendo.
Entró al apartamento y era bajo en comparación mía, medía unos 1.65 metros, era blanco y delgado.
Tenía una voz aún de niño.
Nos saludamos y entramos en confianza, no sabía como proceder, entonces lo inicié a besar era tan pequeño y frágil me excitó pensar en como lo dominaría, inicié a besarlo con mas fuerza y a masajear su trasero, bajé el pantalón que andaba y mis dedos iniciaron a jugar en su entrada, estaba apretado, caliente.
Lo cargué hasta mi cama y nos desnudamos, seguíamos besándonos y ordené a que me mamara mi pene, que mide unos 17cm gruesa, era algo torpe mamando, pero ver a ese niño de 14 mamandomela me ponía a mil, tomé lubricante y lo puse en mis dedos para luego introducir en su pequeña entrada un dedo, el se quejaba mientras aún me la mamaba, evitaba hacerle algún tipo de daño, o hacerlo gritar muy fuerte, para evitar cualquier sospecha de los vecinos.
Luego de meterle el dedo por un tiempo, decidí que era tipo de penetrarlo, hacerlo mío, lo tomé y lo puse a la orilla de la cama en 4 patas, jugué un rato en su entrada y advertí que le dolería, que no gritara.
Me costó entrar, hasta que por fin metí la cabeza, el niño no soportaba el dolor y parecía a punto de gritar, usé mucho lubricante y decidí meterla toda, pero lo tomé por la boca para que sus gritos quedaran ahogados, fue el cielo sentir su culo muy apretado, se la metí entera y el niño lloraba de dolor y gritaba mientras yo lo bombeaba con algo de fuerza, Ahora ese niño me pertenecía, fui parando para que el niño parara de llorar, así fue dejó de llorar pero yo aún la tenía adentro.
Le dije que cambaríamos de posición, él no quería por que sentía mucho dolor, pero lo convencí y lo puse pies al hombro, era la gloria ver el rostro de ese niño mientras lo penetraba, luego de un tiempo de bombearlo, no me aguante y lo llené hasta el fondo con mi leche,el niño estaba exhausto pero aún tenía yo mi pene dentro, seguía bombeando, batiendo mi leche, ese niño era mi putita y estaba decidido a cogérmelo seguido.
Ya después del acto, que tardó como dos horas le pregunté si le dolía y me dijo que si, pero que ya se iba a ir acostumbrando a tenerme adentro.
Estaba decidido a no ser la única vez, se fue a su casa y seguimos en contacto.
Diganme que les pareció mi relato, y así publicaré la otras veces que lo hice mío en el auto y en el parque.
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