Mi sueño hecho realidad, como Puta.

A mis 50 años tuve la oportunidad de tener una relación con un hermoso catalán de 60 años, de cuerpo voluminoso como una montaña llena de vegetación. Y me propone sea su prostituta y para ello me daría en alquiler con otros hombres de las mismas dimensiones. Relación aceptada.
Para esta narración de un pasaje en mi relación en pareja, cuando corrían mis 50 años, es importante mencionar que soy un Oso de 62 años, latino, corpulento, velludo, piel morena clara, ojos marrones, pelo negro y barba frondosa ahora platinada.

Había conocido a finales del pasado milenio a un hermoso catalán tipo oso, con un cuerpo voluminoso con mucho vello y contrastando su redondez de abdomen y tórax con unos genitales vigorosos, constituidos en una polla gruesa con venas saltadas de unas 18 pulgadas y su capullo simulando una redonda hermosa manzana. Nuestra amistad fue haciéndose cada vez mas frecuente e intima, hasta llegar al punto que nuestras vidas coincidieron por azares del destino a estar juntos y es como nos proponemos a ser una coalición socio sexual.  Ya conociendo mucho de nuestros gustos y conductas mi hermoso catalán, a quien así lo mencionare en la narrativa, me propone una relación en donde yo me convirtiera en una puta, ya que con el pasar de los años y siendo buenos amigos, esa idea morbosa se le había cruzado desde algún tiempo.

Me explica que había sido causa de masturbaciones ante la idea de ver como me poseían otros hombre y que fueran conseguidos por su deseo lascivo de follar con alguien que permitiera ser tratado como tal, pagando los favores sexuales, y exigidos por el cliente.

La idea me pareció interesante, ya que era una fantasía que siempre figuraba en mi mente y confesandoles que también era causa de muy deliciosas masturbaciones.

Es así; cómo decidimos llevar nuestra relación de esa manera y mi hermoso Catalán figuraba complaciente trayendo a casa a conocidos eventuales, viejos amigos  que tuvieran las características  físicas  similares a mis gustos y atractivos livinidosos.  Todo cursaba muy bien , pues yo debía ser complaciente, dócil y habilidoso como una buena trabajadora del sexo y al final recibía un pago representativo a la venta de mi cuerpo para placer.

Mi historia es de una noche de viernes, regresando a casa cada uno posterior a nuestras actividades laborales, Mi catalán me menciona que había dialogado con unos viejos amigos  sobre la venta de placer por parte mía. comentando los por menores de porque se llevaba a cabo. Y enfáticamente me dijo que no había tenido respuesta alguna, pero que había quedado en el ambiente el entendido que seria una maravillosa experiencia.

Tomábamos una copa de vino ambos, semidesnudos, con shorts solamente. Cuando llaman en el intercomunicador, y mi hermoso catalán contesta y se percata que era uno de los que había quedado con la inquietud. Dijo pasar cerca y decidió ver si estábamos en casa.

Al ingresar al piso, me observa y menciona, tu eres la pareja de mi amigo que desea vender su cuerpo, dando un salto me dice,- te parezco cumplir tus caprichos?

Inmediatamente que lo observo,  asombrosamente es un hermoso gordo fornido de 1.75 metros, con una barriga redonda y firme y un paquete enorme, resaltando un pecho descomunal con un par de tetas peludas, entonces me aproximo y le digo que si es lo que desearía para vender mi cuerpo.

El gordo 1, que así le denominare en la narración, inmediatamente me agarra las manos y me las lleva al paquete enorme y siento como ya tenia una polla dura y palpitante la cual procede a extraer luego de bajar la cremallera del pantalón y decirme – demuéstrame que eres una puta experta mamando pollas. Acto seguido me inclino y tomo en una mano esa hermosa polla digna de admirar por su redondez y unas gordas venas en su cuerpo que rebotaba al palparla, la lengüeteó y escucho como el gordo 1 hace gesticulaciones y sonidos como carne en asador, y decía repetidas veces – cometela puta, -mamala toda, -trágatela  y haciendo movimientos de quererla introducir hasta lo mas profundo, llegando a ocasionar que me atragantara de lo voluminoso que era ese capullo. Mientras mi hermoso Catalán se había sacado la polla y la acariciaba logrando una maravillosa erección, pero muy respetuoso del trato, no se acercaba, dejaba que mi comprador me disfrutara.

Se empieza a quitar la ropa este hermoso gordo, dejando libre un cuerpo digno de un oso salvaje, enorme de todos lados; hombros, pecho, abdomen, piernas, manos, pies y muy velludo todo. y me dice – vine par que me demuestres eres una puta única y excepcional, -hazme gozar y serás bien recompensada.

Mientras lo sodomisaba todo, lo besaba y lamia sintiendo un sabor entre acido y salado por el sudor que su cuerpo ya emanaba, contrastando con un olor propio de macho con un toque de colonia; habiendo transcurrido unos minutos donde el conocía mi cuerpo y yo le demostraba el deseo que tenia por ser poseído por un comprador, suena de nuevo el intercomunicados y era otro de los que había contactado mi hermoso catalán, y venia acompañado de dos hermosos osos robustos, que al verlos entrar ya que venían al mismo servicio ofertado, era realmente increíble pensar que me estuviera sucediendo algo que solo en mis pensamientos y sueños ocurría. Literalmente, se me estaba acumulando la faena.

Mi hermoso catalán los convida y les indica que yo, ya tenia un cliente y que si deseaban esperar, y si querían turnos alternos, a lo cual indicaron que si él cliente, estaba de acuerdo preferían interactuar de inmediato, ya que al ver lo que hacíamos con el gordo 1 empezaron a acariciarse las pollas a través de sus pantalones y se observaba que portaban una herramienta digna de satisfacerlas.

me levanto del sofá donde estaba sobre el cuerpo del gordo 1 y me aproximo a los tres quienes empezaron a tocar mi cuerpo y a mordisquear, besar y lamer cara, brazos, hombros, tetas, espalda y abdomen;  yo sentía un extasís indescriptible porque nunca había sido sodomisado por varias manos. cuerpos y bocas a la vez.

siento las pollas de los tres, mientras el gordo 1 se masturbaba esa robusta polla toda humedad entre sudor y saliva. y me aproximo a bajar la cremallera de un gordito muy redondo de estatura baja pero bien proporcionado con una barba recortada color negra, quizás el era el más joven, por allí de los 35 años. A quien denominaremos el gordito joven;  le extraigo un miembro enormemente gordo y largo que tenia un tanto angulación a su lado derecho, lo cual me daba un morbo poderla introducir en mi boca. Acto que inmediatamente consume y oí gemidos de placer mientras se desnudaba y yo prestamente le ayudaba a retirar todas sus prendas.

Los otros dos me seguían sodomisando y yo, ya estaba sumergido en un extasis y frenesí que ya no podía parar. sentía cómo las gotas de sudor caían de diferente partes de mi cuerpo hacia otras y me enloquecía tratando de tomar cada polla en ese momento. De pronto siento al desnudo las pollas de los otros dos, de donde aproximan a la polla del gordito joven, y describo una polla en promedio unas 12 pulgadas, pero sumamente gruesa con un vello frondoso castaño claro en su base. emanaba un precum que era pegajoso y delicioso al sentirlo en los labios.  El sera el gordito de la polla más pequeña de los cuatro allí en su hora clientelal que había que complacerlos. El denominado el gordito de la polla promedio. Luego la otra era gruesa con muchas venas y presentaba un anillo metálico, en su base lo cual le daba una robustez firme. Larga de un poco más de las 18 pulgadas, bien escondida entre el gordo púbico de una barriga redonda bien firme y lampiño. De quien será el gordo del anillo.

Mi hermoso Catalán solamente observaba sin haberse quitado el short y se mantenía a distancia y de vez en cuando solamente ayudaba a cambiar de posición a los cuatro clientes.

Mi hermoso catalán, les indica, si desean pueden llevarme a la recamara donde se sentirán más a gusto, donde teniendo una cama extra king cabíamos cinco voluminosos cuerpos y aun había espacio para un par de cuerpos similares, por aquello de otra visita.

sentí como el gordo 1 me levanto y cada uno de ellos al igual, me tomaron un brazos y piernas y mi cuerpo quedo flotando tal cual chico jugando en una orilla de la alberca, prestos para introducirme a la cama que esperaba esos cuerpos ya todos húmedos y vigorosamente deseando más.

me reposan boca arriba y apostándose en diferentes puntos. el gordo 1 me dice. – No me dejes con las bolas llenas puta, -sigue lo que empezaste. y Me introdujo esa manzana enorme hasta lo más profundo de la garganta. sentía como el gordito joven me jugueteaba el agujero haciendo ritmos de digitación, sentía uno, dos, tres y varios dedos dentro de mi agujero húmedo y caliente, no era necesario lubricar con tanta humedad proporcionada por el sudor de todos.

Tanto el gordo de polla promedio como el del anillo se apostaron a los lados dándome una amasada de tetas increíbles, donde sentía como crujían las coyunturas de sus dedos y me succionaban los pezones de tal forma que me hacían gemir y sollozar de placer. Fueron alternando sus posiciones en donde deleite por varios minutos las pollas de cada uno; que recuerdo perfectamente el orden de cada una de ellas y lograba tener dos de ellas al intercambio de posiciones. Mientras me proferían frases obscenas como: – que deliciosa estas puta. – disfruta Puta,- danos más puta, – gime de placer puta, – Trágatela, -Gime más, – pide más Puta. entre otras.

Ufffff, ishhhhhhh, ahhhhhjjjjjj, Ostias tios, -Joder de Puta.

Mi hermoso catalán se aproxima y aún con short pero jugando suavemente su deliciosa polla que todavía no la deleitaba en ese servicio; ya que estaba complaciendo a los clientes. Les dice: – prueben ese agujero, saboreenlo y veréis porque el precio que tiene mi puta… dándome vuelta… y poniéndome en una posición de cuatro en la orilla de la cama, donde se respetaban las posiciones y empezaron uno a uno a rotar, dándome unas chupadas de culo que nunca había tenido, entre lengüetazos, succiones y mordidas que hacían estremecerme y contornearme, mientras recibía dos pollas alternantes en la boca que cuando empezaba a gemir con sollozos me la introducían más, tratando de mitigar el sonido, lo cual lograban, me estrujaban los pezones y me succionaban las tetas, mi placer era tal que no sabia diferenciar cual me hacia llegar al punto de locura, pero al final era la conjunción de todas las aciones de estos clientes insaciables, que demostraban que en su vida cotidiana les hacia falta dar escape a esta lujuria.

De pronto él  Gordito Joven dice – Joder, yo ya estoy a punto de correrme. Y le dice a mi hermoso catalán: -ya no aguanto las bolas,- déjame follarme a tu puta!.  A lo cual mi hermoso catalán le respondió: -Al cliente lo que desea.

Y mientras me comía las otras tres pollas y seguía desvaneciéndome de placer por la sodomia a mis tetas.. el gordito joven me levanta las piernas las abre y coloca su capullo en mi agujero totalmente húmedo y de un solo golpe se introduce hasta donde pudo llegando a topar sus bolas en mis nalgas, sentí cual era la cualidad de esa polla angulada, , mientras salía y entraba mis esfínteres se estimulaban con esa angulación….ambos gritamos de placer, mientras el grito de él fue más largo, el mío se vio entrecortado por la enorme polla con anillo llegando a sentir el anillo en mis dientes…. sentía como ambos entraban y salían por ambos orificios, cual tubo interconectado, como bombeando un pozo por ambos extremos; gemidos de placer, de todos, sollozos míos y entrecortados, sentía que el gordo de polla promedio me sostenía las piernas y el gordo 1 me comía las tetas con tal ímpetu… sentía como que era un canibalismo con sumo placer, no había dolor de sufrimiento, era un dolor de placer que me hacia moverme, contornearme y llegar hasta titiritar de tanto gusto.

Las palabras que se oían eran de complacencia. ante el dueño amo y señor de la puta allí ofrecida.

-Ostias que buena esta tu puta, – Muévete puta, – Grita Puta,  y más…

Fui sintiendo como mi agujero cedió al dolor inicial y se convertía en una cloaca de placer y entre gritos de lujuriosa pasión al gordito joven empieza a palpitarle la polla, sintiendo como expulsaba su leche que era cálida y yo le premiaba con contracciones voluntarias de mis esfínteres a lo cual el exclamaba:- así puta . así- eso- aprieta más… y exclamo – esta puta es más perra que las perras,- que ordeñada más deliciosa!-

Así quedo hasta que instantes posteriores,  sintió que la polla empezaba a perder erección, y es cuando el gordo del anillo dice, -ostias, dejadme tener a esta puta que ya no aguanto más.

Nuevamente rotan, quedando con mis piernas el gordo 1, para asistir al gordo con el anillo, que me poseería a manos libre, literalmente;  el gordo de polla promedio pasa a follarme boca y garganta, y el gordito joven me acariciaba las tetas y lamia los pezones.

El gordo del anillo se coloca y me arremete de un solo empujón ayudado por todos esos kilos de su voluminoso cuerpo hasta que sentí el anillo tocar la entrada de mi agujero, llegue a sentir como que me partía en dos la cadera, ya que la polla la tenia muy robusta y enjurgitada de sangre con esas venas que parecían de un músculo ejercitado. fueron exactamente tres arremetidas con gritos de placer cuando sentí como salía un líquido caliente que poco a poco fui sintiendo escurrir por mis nalgas. Yo gritaba pero se ahogaban los placeres por la polla del gordo con polla promedio, a quien le toco su turno haciendolo precipitadamente, porque sentí como se retiro en varias oportunidades, diciéndome – despacio puta que la leche la voy a depositar en tus entrañas. Finalmente estaba allí, sentí como tomo mis piernas fuertemente, me lengüeteó el agujero emanando los jugos de sus antecesores, exclamando que estaba delicioso. y de pronto siento como poco a poco deslizo su polla que se miraba promedio, pero dentro la sentía como que me introdujera un tubo de artillería pesada y que con sus movimientos laterales, sentía como me dilataba cada vez más el agujero y como si emulsificando mantequilla con la leche allí depositada se oía un sonido propio de la fabricación de mantequilla que me hacia estremecerme más y de nuevo mis gritos eran frenados por la polla del gordo 1.

Ya mi cuerpo sentía las manos, los labios, lenguas y todo mi placer estaba en la complacencia de mis clientes fornidos y robustos y que a cada quien le brinde las contracciones de mis esfínteres, que los hacia jadear y gritar de lo complacidos, mientras aportaban más leche en mí.

Finalmente la euforia cedía al ir cada uno depositando sus jugos dentro de mis entrañas. Y mi hermoso catalán solamente me acariciaba y besaba tiernamente en algunas oportunidades y me miraba sutilmente como diciendo estoy acompañándote.

Cuando los cuatro clientes habían saciado su sed de emanar sus jugos dentro de mí, entrando en un relajamiento, mi hermoso catalán, ya habiéndose quitado el short y teniendo su polla muy vigorosa, siendo enormemente gruesa y con un capullo impresionable, me empieza a besar y lamer el sudor… y me da su polla a mamar muy apaciblemente, poco a poco la fue metiendo hasta profundamente de mi garganta. Me acariciaba y me decía – has sido una buen puta, – me complace tu trabajo. – creo subiremos tu tarifa. – eres una puta espectacular.-

Sacando su polla y yo totalmente postrado en la cama con las piernas fuera de la misma; él se aproxima en rodillas, levanta mis piernas y me dice: – ahora sentirás a tu dueño, y me introduce su capullo el cual ya entraba con facilidad y se fue metiendo para que sintiera todo su esplendor estando totalmente dentro, percibiendo como topaba en la entrada de mi agujero, me dice.- déjame sentir tus contracciones amor mío. y es así como contraigo los esfínteres, y me dice – Eso mi Puta consentida, -eres la mejor.- eres mía. Luego de unos cuantos segundos empieza a gemir y se retira rápidamente y vi como se aproxima sobre mi sentándose en mi pecho introduciéndome en la boca ese gran capullo y luego toda esa hermosa y frondosa polla que desde el inicio empezó a expulsar una leche deliciosamente calentita y con un sabor saladito. Era tal la cantidad de esa deliciosa leche que empezó a rebalsar de mi boca; es donde los cuarto clientes estando acariciando mi cuerpo suavemente, empiezan a lengüetear lo que emanaba de mi boca y a pasarlo uno a otro degustándola con mucho placer y erotismo,  poco a poco se fueron retirando, no sin antes de pasar a la ducha y liberar el sudor, calor y aromas propios como ajenos, iban a sus vestimentas, y traian billetes de diferentes denominaciones y culminaron pagando mis servicios de placer, brindados a cada uno de ellos.

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