Mi tío se dio cuenta de que me gusta y me encanta que me traten como a una mujer.

Un chico mientras visita a su tío en su finca, se emborracha, se desnuda imita a una cantante, camina actúa y habla como mujer, por o que su tío le come el culo, cosa que el chico al despertarse le agradece..
Mi tío se dio cuenta de que me gusta y me encanta que me traten como a una mujer.

Cuando llegaron mis vacaciones de la universidad, a mis padres le dio por ir a Tierra Santa, mandar a fumigar la casa, y que yo me fuera a pasar unos días a la finca de mi tío.

Apenas llegué mi tío me preguntó por los viejos, y le dije que estaban de viaje, él simplemente tomó asiento en una de las butacas de la sala, abrió una botella de ginebra o de vodka, la verdad es que no se mucho de bebidas alcohólicas, ya que para mí todas eran iguales en esos momentos.

Luego que sirvió dos tragos mi tío me dijo en un tono de voz muy solemne. “Sobrino, es de muy mala educación dejar que el anfitrión, beba solo.”

Yo la verdad, que ni idea tenía que eso fuera así, pero no fue hasta que mi tío, me dijo directamente. “No seas un mal educado, y agarra ese trago para que me acompañes.”

Desde luego, que hice lo que mi tío me dijo, de inmediato agarré el trago, y sin pensarlo mucho me lo bebí de un solo golpe.

La verdad es que no estoy acostumbrado a beber, pero a medida que mi tío continuó bebiendo, yo por no ser descortés, también seguí bebiendo.

A medida que seguí bebiendo, comencé a sentir algo mareado, pero aun y así seguí bebiendo, acompañando a mi tío.

Mientras charlábamos de un sinfín de tonterías, hasta que, en cierto momento, mi tío me preguntó, si quería algo de comer, y antes de que yo le respondiera que sí, se levantó fue a la cocina y al poco rato regresó con queso, jamón, y algo de pan.

Por lo que seguimos, bebe, que bebe, yo me sentía algo mareado, y cuando se lo dije a mi tío, él simplemente me dijo. “Sí ya me di cuenta, de que estás actuando algo raro, y además no quitas los ojos de mi verga.”

Yo haciéndome el tonto, comencé a reírme, pero al mismo tiempo me di cuenta de que era cierto lo que mi tío me decía, la verdad es que no podía dejar de dirigir mi vista a sus entre piernas.

Pero como vi que mi tío, pareció no importarle, yo tampoco se la di importancia.

Aunque ya había oscurecido, y se suponía que hiciera algo de fresco, quizás por lo mucho que había bebido, sentí un tremendo calor por todo mi cuerpo.

En ese momento se lo comenté a mi tío, quien de inmediato me dijo. “Sobrino eso es falta de confianza, sí tienes calor en confianza te puedes quitar toda la ropa, al fin y al cabo, solo estamos tú y yo en la finca, por lo que más nadie te va a ver, si decides quitártela.”

Así sin pensarlo me comencé a quitar toda mi ropa frente a mi tío, sin el más mínimo pudor de mi parte.

Quedándome únicamente con mis nalgas prácticamente al aire, ya que los pequeños y ajustados slip, que estaba usando se enterraron entre mis nalgas como si fueran una tanga.

De inmediato volví a tomar asiento al mismo tiempo que me daba otro trago, y seguimos hablando, de todo un poco hasta que yo comencé a hablar de lo mucho que me gustaba la cantante Shakira, a lo que mi tío me dijo que no sabía quién era.

Yo no podía creer, que mi tío no supiera quien era ella, por lo que de momento no sé qué me dio que me puse a imitarla.

Era como si me sintiera que estaba en un escenario, hasta me subí a la mesa de centro, mientras cantaba, movía mis nalgas tratando de imitarla, mi tío mientras tanto sin dejar de reírse, no les quitaba los ojos a mis nalgas.

Al terminar de imitar a Shakira, al bajarme de la mesa mi tío me dijo entre risas, que yo tenía un buen canto, al mismo tiempo que me ayudaba abajar de la mesa agarrándome las nalgas.

Mi tío al ver mis nalgas al aire, al mismo tiempo que me las agarró suavemente, me dijo. “Tienes unas hermosas nalguitas, bien redonditas”

Yo la verdad es que no sé qué me pasó, ya que, en lugar de mandarlo al carajo, me puse a reír como un verdadero pendejo.

Mi tío en ese instante dándome una ardiente nalgada, me dijo. “Muéstrame tus nalgas, camina como si fueras una modelo.”

Sin dejar de reírme, de inmediato le hice caso, y comencé a caminar por toda su sala moviendo mis caderas, tal y como su fuera una puta buscando cliente.

Al volver a tomar asiento a su lado en el sofá, de inmediato mi tío me pasó la botella, y en lugar de servirme otro trago, me lo di a pico de botella, en ese momento mi tío me dijo. “Te voy a decir algo, desde hace rato que me di cuenta de que te gusta mucho que te traten como a una mujer.”

Yo pensé decirle que se equivocaba, pero colocando su dedo índice sobre mis labios en señal de que hiciera silencio, continuó diciendo. “Para comenzar, a pesar del pantalón no has dejado de ver mi verga;

Prácticamente te has desnudado frente a mí, con el cuento de que sentías mucho calor;

Además, acabas de imitar a Shakira cantando, y bailando, y la verdad es que te quedó muy bien la imitación, sobre todo como movías las nalgas.”

Aparte de que cuando te pedí que me mostraras tus nalgas como si fueras una modelo, tú movías tus lindas nalgas para llamar mi atención, tanto que me provocó besarte.”

Asustado por las palabras de mi tío, pensé hasta en salir corriendo, pero al mismo tiempo no sé qué idea loca se me metió en la cabeza, que me preguntaba a mí mismo, como me sentiría si mi tío me llegase a besar.

De momento que mi tío me toma entre sus fuertes brazos y sentí sus labios, chocando con los mío, y su lengua enterrándose dentro de mi boca.

Al principio me quedé paralizado sin saber que hacer, ni cómo actuar, pero al mismo tiempo a medida que su lengua la fue introduciendo dentro de mi boca, y sus manos acariciaban mis desnudas nalgas, honradamente les digo que desee que continuase haciéndolo.

Por lo que yo mismo, a pesar de mi borrachera, comencé a ir quitándome mis pequeños interiores, casi de inmediato, mi tío se dedicó a besar, lamer, y chupar mis pequeños pezones de mi plano pecho.

Así por un rato, mi tío me estuvo chupando, mis pezones de manera bien rica, cuando no se si por accidente, o con toda intención, derramó la bebida de su copa, sobre mi pequeño miembro.

Yo comencé a reírme, y lo único que se me ocurrió decirle, a mi tío, fue. “Ahora me dirás que, que eso es magnífico, para tener una buena verga.”

Mi tío riéndose, me dijo. “Tú lo dirás en broma, pero es la pura verdad, y sin perder tiempo dirigió su cara directo sobre mi pequeño miembro, y separándome las piernas, se puso a mamarlo.”

Imagínense ustedes, si cuando mi tío me chupo y lamió mis pezones, casi me vuelvo loco por el placer que me hizo sentir.

Cuando sentí su boca, chupando mi pequeño miembro, casi me desmayo, pero del placer que sentí, al tener su boca contacto con todo mi pene.

Hasta el punto de que yo se lo restregaba en la cara a mi tío, al tiempo que ni cuenta me di, que sus dedos los fue enterrando dentro de mi apretado culito.

Al principio uno, luego dos y posteriormente el resto, hasta que sin darme cuenta tenía casi toda su mano dentro de mi culo.

A medida que siguió besándome, y acariciándome por todas partes, me fue diciendo que yo tenía una cara bien linda, tanto que parecía una chica, en lugar de un chico.

En medio de mi borrachera, en lugar de seguir hablando de manera normal, instintivamente comencé a imitar la voz de una chica, diciéndole lo fuerte que él era.

Casi de inmediato me levantó en el aire, y como si yo fuera una muñeca de papel, me colocó sobre el sofá, separando mis piernas, y sin llegar a sacar sus dedos de mi culo.

En medio de todo yo estaba algo asustado, pero cuando él extrajo sus dedos y de inmediato comenzó a presionar la cabeza de su verga, contra mi esfínter.

A mí se me salieron las lágrimas, en esos momentos llorando le pedí que me lo sacara, pero al poco rato, creo que yo iba a llorar más fuerte si me sacaba su verga de mi apretado culo.

En mi vida nunca había pensado que mi tío me llegase a penetrar tal y como lo estaba haciendo en ese instante, pero a medida que su verga se fue abriendo paso dentro de mi cuerpo, yo comencé a sentir un no sé qué, que me volvió loco.

Era una especie de sabroso dolor, que recorría todo mi cuerpo, y en consecuencia yo movía mis nalgas con más fuerza, restregándoselas contra su peludo cuerpo, pidiéndole que me diera más y más duro.

Esa noche mi tío, hizo conmigo lo que le dio gusto y gana, ya que, además de tratarme como si yo fuera toda una puta.

Al darme sabrosamente por el culo en infinidad de veces, me puso de lado, me puso de cabeza contra el piso, y a medida que me seguía penetrando, me agarraba por mi largo cabello, y me apretaba contra su cuerpo.

También me tomó por los tobillos separó mis piernas, y vi con bastante claridad como su sabrosa verga entraba y salía de mi culo, un sin número de veces.

No contento con eso, me puso a mamar su verga, hasta que en algunos momentos cuando el acababa dentro de mi boca, y garganta, me obligaba a tragar toda su leche.

Cuando a la mañana siguiente, me vine despertando, yo estaba algo más que confundido, y es que hasta esa noche yo nunca me había acostado con ningún hombre, y para serles sincero tampoco con ninguna mujer.

Me dolía la cabeza por lo mucho que había bebido, y hasta culo por lo mucho que mi tío me dio por él.

Pero después de darme un buen baño, y expulsar gran parte de su semen, al regresar al cuarto donde me desperté, encontré sobre la cama un lindo vestidito de nena, así como algunas prendas íntimas, que sin pensarlo mucho me las puse.

El reto del tiempo que pasé en la finca de mi tío, él me trató como si yo fuera su mujer, cosa que, aunque no me lo crean se lo agradezco en el alma, ya que me permitió descubrir mi verdadero yo.

Por lo que estoy bien deseoso, que lleguen mis próximas vacaciones de la universidad, para irme a pasar unos días en su finca.