Neverland 17. Gemelos fantásticos.
Dos pares de hermanos..
Ya pasa del medio día del domingo. Mi sobrino David no ha salido de la habitación donde ha dormido desde ayer. Mi hermano Lalo y su suegro, Oscar, lo han estado vigilando, pues la faena de ayer por la tarde noche lo dejó completamente OUT. Mi sobrino se entregó por completo. Un grupo de unos 5 hombres y mi hermano lo usaron a su antojo, y cómo no!? Si con ese disfraz de Robin se veía tan hermoso que por un momento pensé en unirme para deleitarme con el culito de Robin.
– Porqué no ha bajado mi primo David, papá? – escuchó decir a mi hermoso hijo Ramón mientras juega con mi verga entre sus manos. Mi cuerpo está recostado por completo en el camastro, bajo una sombrilla que nos oculta del candente sol. Mis piernas están abiertas pues en medio está mi pequeño. Mientras que su hermano está dentro de la alberca jugueteando con un padre joven, delgado que a su vez cuida a su bebé de cuatro años dentro del chapoteadero. Lo está penetrando bajo el agua, desde donde estoy lo veo todo y lo vigilo.
– Es porque aun sigue dormido el cabroncito – un chupete hace inaudible la contestación de mi ramoncito. – Que dices amor? – lo retiro de su faena mamadora para escucharlo mejor. – Mi tío Lalo lo quiere mucho si deja que otros hombres lo cojan, verdad? – y de nueva cuenta vuelve a tragarse su verga paterna.
– Si mi amor, lo quiere mucho… Lo quiere mucho – se lo digo mientras veo que su hermano gemelo Raúl sale de la alberca completamente desnudo y se dirige hacia nosotros. – Tú también nos quieres? – me lo dice mi otro bebé a la par que me da un beso de pico y seguido le arrebata a su hermano mi verga para tragársela de una. – Aaaaaaaah – gimoteo pues sus dientes rosan en mi glande -con cuidado bebé, eres muy brusco – lo regaño pero dejo que continúe mamando.
Ahí están mis dos hermosos hijos compartiendo la verga de papá. Soy tan afortunado.
– Vaya uds si que son un buen equipo – escucho decir a mi hermano Lalo que viene acompañado de su suegro. Ambos desnudos. Se acercan a nosotros y toman asiento en los camastros de cada lado. – Como está mi sobrino David? – mientras mis hijos ponen atención y ambos deslizan sus lenguas por la verga de papá. – mejor, ya lo vio el médico y solo le ha puesto suero intravenoso para que descanse. Al parecer fue un poco excesiva la faena de ayer por la noche y solo se deshidrató – mi hermano me lo decía pero sus ojos estaban puestos en la carne de Raulito, mi nene quien le devolvía la mirada con un dejo de puteria.
Mi nene Raúl se levanta, se dirige hacia donde está su tio y ambos se funden en un beso casi obsceno. Ambas bocas se abren grandes para tragarse, sus cuerpos se unen para acariciarse mutuamente. Mientras mi otro bebé chupa mis bolas con su diestra lengua. No supe en qué momento el suegro de mi hermano se fue pero lo vi a lo lejos acompañando al hombre que hacía unos minutos había estado penetrando a mi hijo en la alberca acompañados de un nene moreno.
Mi hermano por su parte besa el cuello de mi hijo Raúl mientras que con sus manos abre las nalgas bronceadas de mi bebé y con su dedo medio penetra su culo rojizo. – Tío me quieres? – le pregunta mi hijo a mi hermano para lo cual mi hermano solo atina a responder con un sonido gutural afirmativo.
– papi me quieres? – me cuestiona ahora mi Ramón y para demostrárselo le indico con mi mano que se levante y guiando lo, lo pose sobre mi rostro y con ayuda de mis manos abro sus nalgas el se pone en cuclillas y mi lengua le muestra cuánto amor tengo para él. De reojo veo que mi otro bebé Raúl está de pie, con su torso ligeramente inclinado hacia adelante mientras mi hermano también le abre el culo con sus manos gruesas y su rostro está hundido en el.
– aaaaay papi. Aaaaay tiooo. Mmmm que rico, maaaaas papi, maaaaas tío – escucho que mis hijos vociferan francés que se supone no debería de decir y menos mientras su papá y su tío los están estimulando sexualmente. Pero al parecer para mis hijos es una competencia para ver quién siente más placer, a quién es al que quieren más!?
– Ayyyyyy tioooooo – escucho casi a la lejanía a mi hijo Raúl y de reojo veo que mi hermano le está ayudando a sentarse sobre su verga hinchada, con una mano puesta en su hombro derecho y la otra en la cintura de mi hijo. Al ver eso, su hermano se siente en desventaja y sin esperar una orden se mueve hasta donde está la verga de papá y dirigiendo la se va clavando por si sólo. Mis ojos están atentos a lo que sucede, mi propio bebé se traga cada centímetro de papá. Su interior está que arde y mi verga se desliza suavemente hacia sus entrañas.
– Aaaaaaaj – se escapa de mi garganta al sentir toda la calidez de mi bebé envolviendome por completo, sus nalgas posadas en mi velludo pubis. Plas, plas, plas plas, plas… Se comienza a escuchar entre la penetracion de mi hermano a su sobrinito de 10 años y la cadenciosa y sonora penetracion de mi hacia su hermano gemelo. Ambos hijos míos están entregados al placer, a sentirse amados como su primo ayer por la noche.
Fueron minutos extenuantes y salvajes en los cuales 2 pares de hermanos se entregaron al placer del incesto. Mi nené Ramón se levanta de una y me saca de mi trance extasico. Veo como camina hacia donde está su hermano Raúl y su tío, mientras su culo se va cerrando de a poco. Su hermano lo ve y como si se comunicaran con alguna clase de idioma que solo los gemelos conocen o por medio de telepatía, se quita la verga de su tío y camina ahora hacia su padre. Mi hermano y yo nos miramos con pensamientos lentos tratando de adivinar que harían estos chiquillos y fueron ellos quienes tomaron las riendas.
Raul se acomoda en cuatro sobre el camastro y escupiendo en su mano, lubrica la entrada de su culo, me mira y yo reaccionando lento me posó detrás de él escupiendo otra buena cantidad de saliva en su culo y de una sola estocada lo penetro. El aullido que escucho es de placer más que de dolor. Por su parte veo como mi otro hijo, Ramón, acuesta a su tío Lalo en el camastro, toma la verga de su tío con su mano derecha y la guía hacia su interior. Mi hermano lo agarra de las piernas y también, de una sola estocada, penetra a su sobrino. Ambos hijos míos están locos de placer. Nuestros cuerpos sudan chorros de agua salitrosa. Mientras a la lejanía otros hombres juegan con nenes en la alberca, los columpios o cerca de nosotros, posados en los camastros.
– Uuuuy cabrón, uyyyyyy cabrón, ahí te van tus primos – y apenas volteo hacia donde está mi hermano, que en un convulsionante y salvaje orgasmo deposita dentro de su sobrino la leche caliente del día. Al ver eso mis webos no pudieron detener el avasallante orgasmo que al sacar mi verga de las entrañas de mi hijo, mojó su cabello, espalda y nalgas, en una abundante y lechosa entrega.
Padre, tío y sobrinos no podíamos estar más que satisfechos que sin proponer nos lo nos besamos todos juntos, Ramón a su tío Lalo, Raúl a mi, su padre. Ambos hijos míos se besaron y hasta yo y mi hermano nos dimos un beso fraterno y lleno de placer.
Gran relato… como sigue?
Que delicia… así da gusto masturbándome. Estoy enganchado a esta historia y me encanta que hayas subido el episodio tan rápido.
Muy buen relatoo.. me encanta como escribes, estaba deseando que subieras otra parte.
Como sigue? Necesito mas 🤤💦
Uufff…que gustazo es leer esta historia, menuda excitación y menuda paja me he hecho.. Espero ansioso la próxima parte 😋
Como sigue?
Uufff… Que rico.. es un gusto leer tus relatos😋 casa vez que subes uno corro a leerlo.
Como sigue??
Excelente relato…. Como sigue???