Pablo y un Orgasmo Diferente Parte 1
Continuando con las anécdotas que pase con mis vecino voyerista, en esta ocasión les contare como conoci a Pablo y lo que me enseño….
Continuando con las anécdotas que pase con mi vecino, tiempo después que me llevo a esa casa para q me cogieran, el me dijo q quería q trabajara en una campaña política, aprovechando q estaba de vacaciones para q ganara un dinero, el trabajo era en logística y acompañando a los expositores en sus charlas.
Allí me llevo con Daniela, una amiga q pronto entrará en mis historias, cuando llegamos a la sede, me llevo solo y me presento a Gilberto diciendo esta es el culito del q te hable, pero ya sabes q es lo q pido, el era un sr mayor no se los describiré xq nunca tuve nada con el, a lo q Gilberto echándome su brazo me dijo, tranquilo no hare nada q no quieras.
Efectivamente asi fue, lo acompañe a varias reuniones y aunque me insinuó varias cosas nunca le acepte, sin embargo, eso hizo q Pablo otro de los directivos de la campaña, un hombre de 30 años, de buen cuerpo, no fornido, pero se notaba que cuidaba su figura, era abogado que siempre andaba bn vestido, de traje y corbata, se interesara en mi, y en la primera oportunidad q estuvimos solos en su oficina, donde quedaba la fotocopiadora, se paro frente a mi bloqueándome la puerta, me dijo:
«Asi q Gilberto no ha podido nada contigo» decía mientras metía su mano al bolsillo y acomodaba su pene q se veía que estaba erecto bajo el pantalón. «No lo culpo, a los jovencitos como tu hay mostrarles el camino sin preguntar» decía mientras se desabrochaba el cinturón del pantalón y se acomodaba la verga frente a mi, para luego volver a quedar bn vestido…
Yo quede pálido sin saber como actuar, estaba aprendiendo q esa era la forma q como me gustaba q me trataran los hombres. El era muy bien hablado, sin embargo, cuando podía, que estuviéramos solos, me empezó a hablar de forma tosca cosas como » ya la viste, apuesto q te la quieres comer» «me gusta educar a los putitos como tu». Al día siguiente me comenzó a llevar tambien como auxiliar con 2 chicas ya universitarias a las cuales el les gustaba, sin embargo, el me decía después q si bien de vez en cuando se las llevaba era mas difícil conseguir jovencitos como yo. En fin, retomando, tras terminar una reunión de fin de semana, y haber ellos tomado un poco, nos regresamos en el automóvil de Pablo y le dijo a Gilberto q condujera que el se iba atrás conmigo, mientras me decía al oído «de hoy no pasas, quiero clavarte mi verga, quiero oír tus gemidos de putita caliente» y me abrió la puerta..
Mi corazón latía muy rápido de los nervios, por una parte me excitaba, por otra parte no me gustaba q se diera a conocer mis gustos a todo el mundo, a lo q Gilberto comento al verme por el espejo «tranquilo lo q pase esta noche quedara entre nosotros», No obstante Pablo comento, «Ni creas q te daré de probar este pollito, será solo mío, yo te di la oportunidad y no lograste hacerle nada».
De los nervios no había visto q el se había desabrochado el pantalón y había sacado su pene y testículo, el la acariciaba mientras me miraba y me decía: «¿Te gusta la verga que tengo? Ya veras cuando te la meta por ese culito tan rico que tienes, te voy a hacer retorcer y gemir de gusto»
Paso su mano por detrás de mi cabeza y me decía «Sabes q la quieres probar… mira como me tienes» decía mientras pasaba 2 dedos por su glande para luego meterlos en mi boca «si ves, sabes q lo quieres probar» tras mirar a gilberto, el cual sonreía por el retrovisor, procedí a acariciar su bolas, se veían grandes y bien cargadas, estaba bien depilado, subía mi mano y agarraba su pene, el cual estaba caliente y lo comencé a masturbar suavemente para provocarlo mas, bajaba mi mano de vez en cuando a su bolas nuevamente, lo cual me calentaba mas aun..
Tras un rato, llegamos a una casa q resulto ser de Gilberto, el salió a abrir el parqueadero e ingresar el auto, el se acomodo el pantalón y salimos del auto dirigiéndonos a la sala, Gilberto, prendió una luz tenue q iluminaba la zona, y pablo se acomodo frente a mi y me ordenó «arrodíllate, crees q me puedes calentar asi no mas» el se quito el cinturón y lo tiro a una silla y se desabrocho el pantalón y bajo un poco el bóxer, de tal manera que q cayeron ambos en sus tobillos, movió los pies para quitarse los zapatos y se acerco a mi, q ya me encontraba de rodillas… su pene se vía mas grande y fuerte q hace un momento..
Puso su pene en mi cara y me restregaba sus bolas, mientras me decía:»¡Mira mariconcito, mira como me tienes! Quiero restregarte la polla en el culo para que sientas lo dura e hinchada que la tengo» procedió a darme golpecitos con su pene en mi rostro.
» Quiero sentir tu húmeda… y caliente boca… chupala… eso así, así, abre bien la boquita y chúpala toda, quiero cogerte esa boquita, quiero alimentarte con mi leche».
Lo decía mientras movía su cadera y metía y sacaba, su pene dentro de mi boca suavemente. Su pene no era muy grande lo cual hacia que no me ahogara por completo durante ese movimiento.
De vez en cuando la sacaba para dejarme respirar un poco mejor y me golpeaba con su pene en mi cara, y me decía cosas q me hacia prender cada vez mas, yo solo tenia mis manos en sus piernas la cual apretaba de vez en cuando, ya sea por la excitación o para pedir un poco de tiempo
«Quería ser mas delicado contigo x ser la primera vez, pero como disfrutabas calentándome y no hiciste caso, te tratare como la puta q eres» decía mientras se masturbaba con mi cara pegada su verga «puedes olerlo cierto, huele a leche espesa y calientita, saca la lengua mariconcito, q no quiero se desperdicie nada» cuando lo hice, el puso su pene en mi lengua y tomando mi cabeza me jalo para meterla toda en mi boca, pegando mi cara a su cuerpo, y entre jadeos y gemidos me decía «traga putito»….se le entre cortaba la voz «siente como late en tu garganta»… «sácame hasta la ultima gota»… «q no se desperdicie nada, asi q chúpala y lamela, límpiala bien»
Por mi parte solo pude sentir como algo espeso llegaba a mi garganta y yo bebía cada espasmo q inundaba mi boca, esa succión, parecía volverlo loco, por las palabras tan calientes q decía, a medida q terminaba fue sacándola de mi boca para q la lamiera y la limpiara mientras seguía tragando…
Bueno dejo por aca la primera parte…
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