Padre e hijo, un romance prohibido, capítulo 03

Mi hijo y yo, cada vez más cerca y yo, cada vez más seguro de lo queria hacer….
Hola, Buenos días, buenas tardes y buenas noches dependiendo de la hora en la que me leen,

( Continuación del capítulo anterior )

Ya habían pasado algunos días desde la última interacción caliente con mi hijo, mi lado paterno me hacia sentía hasta cierto punto un poco culpable por pensar en mi hijo de una manera muy sexual y tan pecaminosa, pero aún así mi lado masculino me alentaba a seguir adelante con mis deseos más carnales, mis fantasias más morbosas y mis morbos más pervertido. Ya cansado de las constantes discusiones con mi mujer me era totalmente imposible no dejar de pensar en mi hijo, como hombre me era muy difícil no fijarme en las grandes diferencias que había entre mi hijo y mi mujer, mientras que mi esposa ya estaba vieja, usada, gorda, demacrada, arrugada y amargada, mi hijo era todo lo contrario, joven, delgado, lleno de juventud, atento, cariñoso y lo más importante para uno como hombre, mi hijo era carne fresca, virgen y sin usar. Eso como hombre me hacía despertar aun más mi instinto masculino y dejar a un lado el lado paterno.

Una noche y de madrugada, completamente harto de mi horrible situación marital, decidí levantarme de mi cama, salir de mi habitación, caminar por el pasillo y bajar al primer piso para dirigirme a la cocina por un baso de agua, todo normal hasta ahi, en ese momento recordé que tenía que alistar mis camisas del trabajo por qué en ese punto la puta vaga con la que estaba casado no era capaz de rendir ni como mujer, ni tampoco como esposa y mucho menos como ama de casa.

Sinceramente una situación complicada para un hombre como yo, no entiendo porque me tenía que hacer cargo de ese tipo de cosas, lavar y planchar la ropa es un tema de mujeres, pero bueno, me desplace hasta el área de limpieza en dónde está el lavadero de mi casa y empecé a buscar mis camisas del trabajo en una cesta de ropa sucia, mientras buscaba mis camisas… Oh sorpresa, el regalito tan lindo que me encuentro, me encontré un calzoncillito de mi hijo, un calzoncito pequeño, de tela suave y de color color azul pastel, sinceramente me fue totalmente imposible no agarrar el calzoncillito de mi niño para acercarlo a mi cara y empezar a olerlo mientras me sobaba la entre pierna por encima de mi pantaloneta de pijama…

Uffff, ese olor, ese rico olor a nenito virgen que tenían esos calzoncitos bien lindos de mi hijito precioso. Humm, rico, rico, mientras metía mi mano entre mi entrepierna para agarrarme la verga y empezar a masturbarte empece a recordar lo lindo y hermoso que me parecía mi hijo, su olorcito tan dulce, su cabello suave, su cintura pequeña, su cuerpo delgado y delicado, sus manos tersas, esas labios tan provocativos y ese buen par de nalgas que tenia, uffffff…

Sin pensar en nada más que en el placer que me causaba ese momento subí rápidamente por las escaleras pero en silencio al segundo piso de mi casa para dirigirme hacia el cuarto de mi hijo David, el generalmente duerme con la puerta entre cerrada, entre a su habitación para verlo dormidito en su cama, ahí estaba el, dormido en su camita, abrazo a su osito de peluche y acurrucado entre las cobijas, al verlo así mi instinto paternal no pudo evitar sentir ternura, pero luego de recordar que tenía su ropa interior en las manos mi instinto masculino fue mucho más fuerte que cualquier otra cosa, me acerque a su cama y me pase su ropa interior por mi entrepierna y luego dejé caer los calzoncillos de mi hijo al suelo, luego lentamente levante lijeramente las cobijas de la cama para comenzar a entrar en la cama con el, y uffffff.

Solamente con sentir su aroma, su olor, su presencia y su cuerpo tan pequeño ahí, justo al lado de mi no pude evitar tener una gran erección, mi pene estaba totalmente erecto y completamente duro. Cómo buen hombre agarre a mi hijo de la cintura y baje hasta sus caderas, me pegue hacia el, posando mi enorme bulto duro sobre sus nalgas y empecé a restregarle mi hombria a mi propio hijo, estaba más caliente que nunca, me pegue más hacia el para oler su cabello, besar su cuello y empezar a besar sus orejas mientras mi manos subían por su cuerpo para deslizarme entre su ropa para acariciar su bello, delgado, delicado y tierno cuerpo en mis manos, uffffff… ( Todo estaba bien hasta que escuché la voz de mi hijo preguntando )

-Papi ? Papi que haces ?

( En ese preciso momento me detuve, su voz tierna, suave y delicada me hizo volver a mis cabales )

-No es nada hijo, tu tranquilo, continua durmiendo, dentro de poco va a amanecer y debes de ir a estudiar al colegio, aprovecha el tiempo y duerme un poco más.

( Le dije deslizando suavemente mis manos afuera de su ropita )

-Humm, pero… Papi que haces aquí ? No deberías de estar con mami en su habitación ?

( Suspiré y recordé la mala relación con mi mujer )

-Bueno hijo, es que aveces mamá y papá no están muy a gusto juntos…

( Observé el cielo más claro al mirar la poca luz que entraba por las cortinas de la habitación de mi hijo. )

-Pero míra… Ya está por amanecer, ven mi niño, te voy llevar al baño para que empieces a bañarte y puedas estar listo a tiempo para el colegio.

-Humm, no papi, aún es muy temprano.

( Dijo mi hijo aferrándose a su osito de peluche. )

-No es nada, ya es tiempo de levantarse, nada de pucheros bebé.

( Agarre el osito de peluche de mi hijo y lo puse en mi entre pierna para tratar de ocultar mi gran erección, disimuladamente le di una pequeña pasada a los calzoncillitos de que mi hijo que había dejado caer al suelo para que quedarán ocultos debajo de la cama, a mi hijo y lo cargue entre mis brazos, salí de la habitación con el y lentamente camine por el pasillo y volví a bajar por las escaleras para llevarlo hasta el baño del primer piso, al llegar al baño abrí la puerta y encendi la luz y en la puerta del baño lo solte y deje a mi hijo de pie junto a la puerta del baño. )

-Ya está David, entra y báñate.

( Dije entregándole a mi hijo su osito de peluche y dándome la vuelta ocultando mi bulto bien erecto. )

-Pero papi, aún es muy temprano.

( Dijo mi hijo abrazando su oso de peluche. )

-Basta David, ya amaneció, y debes de estar listo para poder llevarte al colegio, por favor apúrate que tú madre no demora en bajar para prepararte el desayuno.

( Mi hijo hizo una pequeña mueca y entro al baño )

-David deja la puerta entre abierta para que tú madre y yo podamos estar al pendiente de ti.

( Le dije a mi hijo dándole la espalda mientras simulaba que hacía algo en la cocina. )

-Hummm, si señor…

( En ese momento mi hijo entro al baño y dejo la puerta entre abierta, luego de unos pocos segundos me acerque lentamente a la puerta del baño y me asome muy discretamente para poder observar a mí hijo, el cual había dejado su osito de peluche encima de la tapa de la taza del baño y recién estaba empezando a desnudarse. )

Ufffffffffff, verlo desnudarse lenta y delicadamente hizo que mi verga dura y erecta empezará a palpitar de la emoción, mi hijo se había quitado la parte de arriba de su pijama dejando al descubierto su delicada espalda y su pecho, desde la puerta entre abierta podia ver sus pezones redondos, rosados y delicados a la vista, para luego empezar a quitarse el pantalón de la pijama y seguido de eso, empezar a bajar sus calzoncitos lentamente por sus piernas hasta dejarlos caer al suelo… Ahí fue cuando pude ver a mi hijo totalmente desnudo, su cintura pequeña, su espalda baja, sus caderas lijeramente anchas para su corta edad y su trasero, sus nalgas redondas, paradas y rosadas… Ufffff, dios mío, que culo más provocativo, en mi opinión un par de nalgas así de voluminosas y vírgenes, son una clara y obvia invitación para todo hombre que sepa darse a respetar como un verdadero macho.

Luego de ver a mi hijo en esa posición, tan vulnerable y estando el totalmente desnudo y además empezando a entrar a la tina del baño para meterse a bañar me fue totalmente imposible no meterme la mano entre mi boxer para agarrar mi verga para empezar a masturbarme sin dejar de mirar a mi hijo, el cual estaba llenando la tina con agua y jabón para empezar a hacer burbujas, su delicado y delgado cuerpo hacia que mi corazón se acelerara, la tensión sexual del momento no me dejaba hacer más que pajearme la verga en la mano de una forma rápida y acelerada.

En ese momento empecé a escuchar los pasos de mi de mujer, caminando y bajando del segundo piso hasta llegar al primer piso, yo, tragando saliva y muy excitado por la situación tuve que sacarme la mano del pantalón, el boxer y la entrepierna cuando mi esposa estaba apunto de encontrarme mirando a mi hijo desde la puerta del baño.

-Carlos buenos días.

( Decía mi esposa. )

-Que preguntas son esas mujer ? No ves que llevo toda la mañana prestandole atención al niño ? Tu ya no eres capaz de hacer nisiquiera eso verdad ? Yo me tengo que ocupar de todo. Ya mejor ponte a preparar el desayuno porque David no demora en salirse de bañar, yo ya tengo que alistarme para ir a trabajar.

( Dije en tono grabé y sin demasiada importancia mientras me rascaba los huevos y me acomodaba la verga por encima del pantalón de mi pijama, luego sin decir más me di media vuelta para subir por las escaleras hacia el segundo piso. )

Se suponía que debía entrar a mi habitación para bañarme, alistarme y luego irme al trabajo pero en ese momento no pude hacerlo, en lugar de eso me desvíe hacia la habitación de mi hijo, me tumbe en su camita y estire mi brazo por debajo de la cama para volver a agarrar los lindos calzoncitos de mi hijo que había lanzado debajo de la cama previamente. Y ahí con los calzones de mi hijo en la mano los acerque a mí cara para olerlos y sentir el aroma dulce del culo de mi hijo, volví a meterme la otra mano entre el boxer para volver a agarrar mi verga y terminar de pajearme con los calzoncitos de mi hijo restregandome la cara mientras yo pensaba…

( Que rico está mi hijito, se ve que tiene un culito bien delicioso y apretado, lo quiero desvirgar, quiero ser el primer hombre en toda su vida, muy pronto voy a montar ese culo y mi hijo, además de ser mi hijo, se convertirá también en mi amante, en mi mujer. ) y así, en eso pensaba hasta que me corrí en mi ropa interior, eyaculando a chorros por todo mi boxer …