Papá maduro y joven twink: La aventura del vecino II

Parte 2. Sigo disfrutando con mi vecino en su departamento, un pequeño accidente ocurre y él me hace una inesperada invitación..

La aventura del vecino II

Durante la semana, me quedé unos días más de los pensados en el departamento de mi papá, con la excusa de poder cuidarlo, limpiarlo y regar las plantas. Pero en realidad pasaba en el departamento del Josué tirando todos los días y a cada rato. El sexo con él era muy rico, él era bastante morboso y eso me encantaba, siempre me daba la lecha en la boca o en el culo, además siguió entrenando mi culo para recibir su puño, era algo que me asustaba bastante, pero que igual me gustaba mucho y me daba morbo. Siempre que lo hacía luego me mostraba por el espejo lo abierto y rotito que quedaba mi hoyito.

Un día estaba con el Josué en su depa, yo estaba acostadito con las piernas levantadas y él me estaba comiendo el hoyito, cuando en eso me llama mi papá, le digo al Josué que pare para poder contestar, él me dice que no, que le conteste mientras me come el culo, igual me dió morbo así que lo hice.

– hola papá, cómo andas?

– hola hijo, bien gracias, extrañándote

Ahí el pesao del Josué empezó a meterme dedos, para que empezara gemir.

– ay, yo también papá.

– que estás haciendo?

– nada papito, no te preocupes.

Ahí seguimos hablando un rato mientras intentaba aguantar los gemidos por los dedos y la lengua del Josué. Al cortar el Josué se sube a la cama y se pone al lado mío, me da un beso y me dice que le gusta mucho estar conmigo. Se baja el boxer y me muestra su pico que ya estaba bastante duro y grueso, yo me agacho y me pongo a mamar, me lo metía todo a la boca, aunque era bastante grueso y me ahogaba bastante, tenía que aguantarlo y comérmelo todo. Por su cabeza empezó a salir una gotita, me encantaba sentir el sabor en mi boquita. El pene del Josué estaba bien mojado por mi saliva, ahí me dice que me acueste y levante las piernas, él se levanta y me pone lubricante en  el hoyo y se dispone a meterme el pico. Sin avisarme me lo mete toda de una, yo gemí muy fuerte, el Josué empezó a meter y a sacarlo con mucha fuerza, yo seguía gimiendo y pidiéndole que lo hiciera más despacio.

– más despacito quiere mi bebé?

– si porfa, un poquito.

– pero si ese culito es aguantador, ya me lo ha demostrado.

Ahí siguió metiéndolo con mucha fuerza y más seguido, yo no podía parar de gemir, el Josué me agarraba la cara con su mano y me pegaba, yo sentía que me iba a venir, le dije al Josué y él me agarra mi pico y me empieza a pajear, si bien no lo tenía duro, sentía que iba a acabar, era una sensación muy extraña que nunca había sentido.

– siento que me voy a mear, para un poquito?

– uhh mi bebé se va a mear, que rico mi putito.

Ahí sentí una especie de escalofríos y empecé a orinar, era una sensación muy rica, de mucho placer, el Josué me dijo que era normal, debido a la excitación y a la estimulación de mi hoyito. Seguí orinando como por un minuto, mi abdomen estaba mojado por mi orina. No me dió asco ni nada, el Josué se detuvo un rato y fue a buscar algo para secarme, me limpié y el Josué se acercó a mí y me puso su pico en la cara y yo se lo seguí mamando hasta que se vino en mi boca y me tragué su moco.

– que rico mi bebé, si así disfrutaste conmigo, ni me imagino como disfrutarías con dos picos.

– invita a un amigo pu jaja – le dije en tono de broma.

– apañariai?

– me hablas en serio? jsjd

– tengo un amigo con el que solíamos hacer tríos cuando éramos más jóvenes, el estaba en pareja y terminó hace un tiempo. Y qué mejor que darle la bienvenida a su soltería usando tu culito entre los dos.

– igual me gustaría Josué, pero me da miedo.

– tranqui bebé, voy a estar yo y nada malo te va a pasar. Te voy a mostrar una foto de él.

El Josué se levanta y trae su teléfono, se mete a Instagram y me muestra un hombre de unos 25 años, muy alto, más o menos flaco, pero igual se le notaban los brazos marcados, era muy moreno, un tono de piel muy lindo.

– es chileno? – la verdad la nacionalidad no me importaba, pero sus facciones y su tono de piel me hacía pensar que era extranjero.

– nop, es colombiano.

– estás loco? Quieres compartir mi culito con un negro colombiano? Voy a quedar roto.

El Josué se ríe y responde.

– pero si ese culito es aguantador, el loco es bien dotado, tengo que advertirte, pero es buena onda, morboso y le encantaría estar con un flaquito como tu.

Me quedé pensando, iba a estar con el Josué y su amigo se veía bastante rico igual. Pero ya iban a ser dos picos que me iba a comer sin que mi papá supiera, nunca me había puesto a pensar en eso, a mi papá no lo veía de otra forma que mi papá, el cual me culeaba, me daba morbo y me gustaba, pero yo igual tenía el derecho de experimentar y vivir otras cosas.

– dale, hagámoslo.

– de verdad – me respondió emocionado el Josué – voy a coordinar con mi amigo y te aviso bebé, prepara ese hoyito.

Se rió y me pegó una palmada en los cachetes, me mandó el perfil de Instagram de su amigo el cual se llamaba Flavio. Ese día tenía que devolverme a mi casa, cuando iba en el Uber empecé a ver el perfil de Instagram del Flavio, tenía varias fotos en el gym y otras en la playa sin polera, tenía unos pocos tatuajes y aunque era más flaco que el Josué se le marcaba rico el abdomen, se notaba que tenía un buen trabajo, ya que tenía fotos de viajes a Colombia y a Brasil. Cuando estaba llegando a mi casa me llega un mensaje del Flavio.

– buenaa, cómo estás? que lindo eres, ojalá coordinemos pronto.

Nuevamente me sentí nervioso y emocionado, nunca había estado con un extranjero y este se veía bastante dotado.