Pequeñita descubri el placer con mi primo 1

Maria me cuenta como desde niña comenzo a disfrutar el sexo a lado de su primo mayor. .
Mi nombre es Andrés, me gustan mucho los relatos eróticos, me gusta escucharlos de viva voz, me gusta preguntar detalles mientras me platican, este gusto comenzó en prisión ya que estuve un tiempo guardado después de que salí comencé un negocio donde se me facilita aún más escuchar relatos ya que convivo mucho con mujeres y hombres de la vida galante, viajo por el país visitado cantinas, table dance y tuburios de mala muerte(esto es porque es mi trabajo no porque soy alcohólico). Me an contado infinidad de historias y algunas las e dejado en esta página.

Contaré la historia de María, una mujer de cincuenta y tantos dueña de una cantina en Jalisco.

 

María comienza a platicarme me dice:

 

Fíjate Andy, cuando yo tenía como 6 años me quedé huérfana a causa de un accidente, quedé al cuidado de mi abuela materna, ahí vivía mi tía con su esposo y 2 hijos. Cuando cumplí 9 yo dormía con mi abuela en su cuarto, una noche me levanto al baño y al pasar por el cuarto de mis tíos los escucho gimiendo, me asomo a su puerta y estaban cogiedo, era la primera vez que veía algo así, me quedé atónita, aunque estaba oscuras con la claridad que entraba por la ventana podía apreciar lo que hacían, se me hizo costumbre espiarlos, en las noches me levantaba para ver si lo hacían, claro no era a diario, aveces ya habían terminado otras yo no despertaba, pero cuando me tocaba la suerte ahí estaba yo espiándolos me gustaba ver como mi tía se la chupaba a su esposo. Un día estaba jugado en la sala y entra Pedro el hijo mayor de mi tía, él tenía 17 años, me dice.

 

Pedro- Mari, y mi abuela?.

Mari- no esta, fueron ella y tu mamá con mi tía Petra.

Pedro- y David? (Era su hermano más chico 15 años)

María- tampoco está, fue a la plaza.

 

Pedro se fue al cuarto dejándome ahí y luego me grita de allá que valla, yo de mala gana voy y lo encuentro sentado en su cama.

 

Pedro- Mari así que te gusta espiar a mi padres cuando cogen?

 

Yo me quedé helada sin saber qué decir.

 

Pedro- no te hagas te visto en las noches espiándolos, creo que le diere a la abuela.

 

Mari- no Pedro no lo hagas por favor, hago lo que quieras, te limpio el cuarto te doy mis domingos lo que quieras. Le dije yo de inocente.

 

Pedro- a bueno entonces haz lo que yo quiero ven para acá.

 

Se paró se bajó el pantalón y calzón y a mi vista salió una verga ya parada grande casi como la de mi tío.

 

Pedro- chúpamela como lo hace mi madre.

Mari- no Pedro por favor mejor otra cosa.

Pedro- es esto o le digo a la abuela.

 

No me quedo otra más que comenzar a chupar al principio me daba asco sabía agrio después él me dijo como porque pues yo no sabía era la primera vez, y desde ahí se me hizo vicio jaja, mientras chupaba recordaba como mi tía lo hacía y comenzó a gustarme jajaja, estaba ya agarrado el ritmo cuando escuchamos un ruido y rápido me fui de su cuarto, mi tía había llegado.

Al día siguiente el pinche Pedro me dice.

 

Pedro- Mari cuando todos estén dormidos vas a mi cuarto, si estoy dormido me despiertas.

 

Me dijo el muy cínico, aparte que se la iba a chupar quería que lo despertara. Pero a mí me había gustado así que ese día en la madrugada me desperté y fui a su cuarto, entré y me susurra.

 

Pedro- te estaba esperado Mari, ven.

 

Me subí ágatas a la cama y él estaba desnudo con la verga parada así que a lo que iba me la metí en la boca, ahora no estaba agrio estaba recién bañado, dure ratito chupándosela hasta que siento el chorro de leche en mi boca, ya casi me vomitaba escupí todo mientras le seguían saliendo chorros de leche y caían en las sábanas de la cama, sin decir nada me fui al baño de momento pese que eran orines pero ya en el baño miré lo que era ya que traía embarrado en los cachetes, me limpié y me fui a la cama.

Pasaron días no recuerdo cuantos, pero no hubo nada porque yo no despertaba.

Una tarde estaba yo jugado y llega Pedro y me dice.

 

Pedro- Mari, ahorita que me valla espera un momento y vas y te asomas con cuidado a la ventana de la Lupe, me va a hacer lo mismo que tú y quiero que veas como lo hace.

 

Yo me quedé muda, Lupe era una vecina, estaba casada tenía un hijo como de 5 años.

Después de un rato fui a donde Pedro me dijo y me asomé, y ahí estaba Lupe ágatas desnuda y Pedro atrás metiéndosela, Lupe como estaba gordita tenía unas chichonas y se le movían para delante y para atrás yo embobada nunca había visto coger a alguien en el día, podía apreciar cada detalle, Pedro se dio cuenta que ya estaba ahí y solo me sonrío para comenzar a darle más duro, la Lupe casi gritaba, después de un momento Pedro la jala del pelo. Y se lo mete en la boca para que ella se la chupe, de pronto vi como se estaba viniendo Pedro en la boca de ella y ella con gusto tragaba todo y después con la lengua le limpio todo, eso es lo que Pedro quería que viera, me fui a la casa y andaba caliente, fui al baño y me toque mi raja y sentí bonito pero no seguí porque llegó mi abuela.

Por la noche yo seguía pensado en eso, cuando me bañe me volví a tocar y sentía placer, en la madrugada me levanté y mis tíos estaba cogiedo pero no hice caso me fui al cuarto de Pedro, estaba dormido me puse a lado de su cama y me agaché para bajar su trusa y descubrir su verga, en eso el despierta pero no dijo nada solo se quitó la trusa por completo para que yo pudiera chupársela. Siento como pone su mano en mi rodilla y va subiéndola por mi pierna yo traía un camisón para dormir, luego la sube a mi rajita y sentí maravillas, baja un poco mi calzón y comienza a sobarme con sus dedos, recuerdo que sentí tan rico que con más ganas se la chupaba, siento como comenzaba a meter la punta de su dedo y yo me movía restregándole mi raja en su mano, de repente me susurra.

 

Pedro- cómetelos todos Mari como la Lupe.

Mari- ujummm

 

No acaba de decir ujummm cuado siento los chorros de leche en mi boca, comencé a pasarlos así sin saborearlos hasta que termino y todos me los tragué.

Pedro se sienta en la cama y yo parada, me desabrocha el camisón de enfrente y descubre mis chichitas que en ese tiempo ya se me notaban ya rondaba casi los 11 años, comenzó a chupármelas luego me besa en la boca mientras con su dedo sigue sobando mi rajita, yo estaba en la gloria me sentía ya una mujer grande ya me habían besado y chupado las chichis, en eso penden la luz del corredor, rápido nos acomodamos yo me fui a la puerta y era mi tía que había ido al baño, aproveché y me fui a la cama.

Al día siguiente en la comida Pedro fue a la tienda y lo acompañé, y sin pelos le dije.

 

Mari- Pedro cuado me vas a hacer los que le hiciste a la Lupe.

Pedro- jaja ya quieres que te la meta. Estás muy chiquita, mejor te la chupo.

Mari- como?

Pedro- pues te la chupo como tú a mi, ¿sentiste rico cuando te toque con los dedos?

Mari- si me gustó mucho.

Pedro- pues imagínate lo que sentirás cuando te toque con mi lengua.

 

Me quedé pensado en eso, y todo ese día y al día siguiente pensé en eso que me dijo, quería que se llegara el día, pero para mí mala suerte no todas lo noches despertaba y pues en ese tiempo no había alarmas ni nada de eso jajaj.

Un sábado temprano Pedro y su hermano anunciaron que irían al río a sacar camarones, yo me les quise pegar y la abuela no me dejaba pero Pedro le dijo que estaba bien que iría Beto y llevaría a su hermana a que se bañaran, total me fui con ellos, éramos nosotros 3, Beto era un muchacho de la edad de Pedro y muy parecidos solo que Beto era más moreno, él llevaba a sus 3 hermanos menores, 2 mujeres y un hombre. En el río llegamos a un charco donde había más gente conocidos y ahí nos pusimos a bañarnos en eso veo a Pedro que se retira y le pregunté a donde iba me contesto que río arriba a buscar camarones y pues me le pego, le dije que yo quería aprender a sacar camarones, pero en realidad lo que quería era sacar leche jajajaja.

Caminamos un rato sin decir nada hasta que llegamos a un charco que tenía una piedra grande en medio, Pedro se metió y me dijo que fuera pero yo no sabía nadar el me subió en su espalda y me llevó a rodear la piedra ahí había otra piedra más pequeña me sentó ahí y el dentro del agua me quitó el short me recostó en la piedra y me abrió las piernas para comenzar a chupar mi raja, no pues yo estaba que no cabía de caliente, me retorcía del placer recuerdo que masajeaba su cabello y el con una mano busco mi chichitas y me pellizcaba el pezon, yo sentía mil y un cosas que no puedo explicarte pero fue lo más maravilloso que me an echo, bajo su mano y comenzó a meterme un dedo mientras yo tome el lugar de su mano y solita me pellizcaba los pezones, sentía clarito su dedo penetrándome pero no me dolía al contraria me gustaba mucho, de pronto siento como cosquilleos y calambres y pumm mi primer orgasmo yo pienso que grite o no sé no recuerdo pero lo que sí te digo es que Pedro me decía cállate cállate, descanse un momento y me senté y él se subió a la piedra se paró a mi lado y su verga me quedaba a la altura de mi cara, bajé su short y saltó el animal para después llevármelo a la boca, lo chupe un momento luego se acostó y me dice.

 

Pedro – quieres que te lo meta.

María- me va a doler.

Pedro- puede ser pero no tanto y solo al principio.

María- está bien.

Pedro- súbete y vas bajado para que entre si te duele te paras.

 

Obedecí las órdenes y me senté sobre el, podía ver su verga llena de pelos en la entrada de mi vaginita lampiña, me la acomodo en la entrada y comenzó a entrar la punta cuando entró la cabeza el me dio el metíon fuerte y me abrazó, eso fue tan doloroso que hasta lloré, pero el me decía .

 

Pedro- ya Mari ya, ya pasó no te muevas ahorita se te pasa.

 

Duramos un rato así abrazados pero yo sentía su verga adentro de mi, luego me fue aflojado y comenzó a moverse, el dolor iba disminuyendo pero me quedaba como un ardor, comenzó a moverse y yo comencé a disfrutar, ya no había dolor y si había ni lo sentía por el placer jajaja, él me besaba y me chupaba mis chichitas ahí tuve otro orgasmo y lo disfruté más, de repente me dice.

 

Pedro- ya te llegó tu regla.

Mari- no aún no.

Pedro- a qué bueno aaaaaaaagggggg

 

Pego un pujido y siento calientito adentro de mi, me estaba llenado de leche, recuerdo que nos quedamos un ratononon así acostados yo arriba de él con la verga andetro, luego se bajó al agua y me dice que me meta con el, ya dentro comenzó a lavarme mi raijita.

 

En otro relato les cuento lo que sigue porque se está haciendo muy largo.