sabor agridulce
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por joferyflor.
Separada recientemente de una relación, conocí a mi actual pareja a través de la red.
Para poneros en antecedentes, y ser amena os diré que todo empezó con un rastro del Messenger. vi. una conversación de mi pareja con otro tío haciendo referencias a un perro, esto me llevo a tirar un poco del hilo y se confirmaron mis sospechas sobre la bisexualidad y las fantasías que hasta ahora no conocía de él.
Tengo que decir que la mentira me dolió, pero había algo que me llamaba la atención poder vivir una experiencia de este tipo. Preparar una dulce venganza.
Llegaba el día de mi cumpleaños y con bastante tiempo fui preparando mi especial regalo. ..
Los días previos fueron como un autentico torbellino. Paginas sadomasoquista, zoofilia, compras por Internet. Todo cuanto estaba en mi mano, fue poco para dar rienda suelta a mi imaginación. Y logre adquirir lo suficiente como para montar algo novedoso en nuestra relación.
Dos días antes, en su móvil recibió un mensaje. Hay una habitación en el hotel x a las 9 habitación 207. Alguien te espera… y recuerda ponte lo que encuentres sobre la cama. . .
Llego el día, y el muy estúpido contó la bola del siglo para decirme que iba a llegar tarde ese día. Yo imaginaros no supe que contestar. Creo que el sabia que detrás de todo aquello estaba yo, pero por si acaso prefirió curarse en salud. Y yo le seguí la corriente.
El hecho de poder humillarle y sentirme por encima de él, era tanto un escarmiento, como una experiencia increíble para mi-
Todo estaba cuidadosamente preparado, al entrar en la habitación sólo se veía la cama entre destellos de la vela. Y sobre ella, una careta de verdugo que solo disponía de una cremallera en la parte de la boca.
Se puso la capucha, y se sentó sobre la cama. Yo estaba grabando todo desde una cámara bien camuflada. Recuerdo para la posteridad. Se sentó sobre la cama .espectante a lo que pudiera suceder. A los diez minutos la llave de la puerta se abrió de nuevo, dejando entrever una silueta de lo más sugerente. Apareció una morena de 1.90 con una tetas de impresión y cuerpo de escalofrío. la chica ya estaba instruida y sabia lo que tenia que hacer. en todo momento. Yo había concertado la cita una semana antes. Despues de ataviarle con algunas cadenas que estaban preparadas ,una vez estuvo desnudo. A partir de ese momento no era más que un perro de mierda que debería obedecer, le digo . Así lo hizo , terminando postrándose de rodillas en el suelo gracias a la fuerza de la chica que tiro de la correa de su cuello, obligándole a quedarse en esta situación.
Yo continuaba grabando desde el baño, con unas botas de tacón de 15 cm y un uniforme preparado con sumo cuidado. Notaba como aquella escena de la sumisión de mi pareja frente a una persona desconocida me excitaba cada vez más. Pero continúe aletargada.
La chica se sentó encima de él, manteniendo su postura de cuatro patas. Le volvió a tirar de la correa obligándole a levantar la cara hacia ella y le susurro al oído. Te has portado mal y lo sabes puta asquerosa, y ese momento le arreo tremendo azote en el culo, dejándole sus grandes dedos marcados. El dejo salir un quejido de su boca, cosa que molesto poderosamente a su ama. Se saco las tangas que tenia dejándolas caer en el suelo, al lado de el. Por las piernas le corría un liquido que intuí era una gran meada que empapaba toda la tela. En ese momento vi. Como el cabrón empezaba a excitarse.. La polla se veía dura y grande. Te gusta eh?… digo ella.
La señora recogió las bragas con la punta de su zapato y se la dejo caer encima de la cabeza, dejando que el liquido le cayera por la cabeza. El, saco su lengua para saborear aquel mangar. Acto seguido la señora le arreo una ostia en la cara que le dio la vuelta. Quien te ha dicho que te lo bebas?.- pulgoso. Empuño las bragas empapadas y se las metió enteras en la boca hasta que no quedo fuera de sus labios ni un ápice de tela. Trágatelas enteras no las quería. Le sacudió una especie de arcada. Y ella aprovecho para amordazarlo con cinta americana que estaba en un maletín que yo había llevado.
Ya no se le oía nada mas que pequeños ruidos que salían de su garganta. ¡! Bastante mas dócil se le notaba la actitud!!. Saco del mismo maletín una pequeña paleta con pinchos, y empezó a darle azotes, primero mas suaves hasta que incluso en la oscuridad yo podía ver el morado de su trasero. Por sucio, por rastrero le repetía ella.
Mírate como te ves cerdo, amordazado comiéndote la meada de una travesti, vergüenza te debería de dar lo miserablemente que te ves ahora.- le digo la chica. Si así era una travesti era el regalo que tenia preparado para él, un ama travesti que me ayudara en mi dulce venganza.
De pronto se hizo un silencio y vi como María (la llamare así), miraba hacia el baño. En este momento salí de mi escondite, era hora de probar yo también.
Saque del maletín, unas esposas de manos y unas tobilleras, unas pinzas con dos pesos y un látigo largo. María le hizo levantase y echarse en la cama. Con su ayuda pude atarle a la cama y colocarle de tal manera que estaba inmóvil. Colocando sobre el las pinzas en sus pezones. Bien apretaditas para que sufriera el maricón de mierda.
Ella empezó a pasarle lentamente la paleta que llevaba por su cuerpo hasta que llegar a sus genitales. Le golpeo suavemente, indicándome que trajera la vela que había en la mesilla. Por un lado le acariciaba, y por el otro me indicaba como tirarle la cera en la punta de su polla. Durante unos minutos pude ver como se iba retorciendo en la cama. Me cambio la vela, por la paleta y coloco la vela encendida junto a sus pies, el calor debía de ser intenso pq sus pies se encogían
.
Esto te pasa por cerdo, sufre como haces sufrir. Al oír aquella palabra creo que algo se desato en mí. Y el dolor que yo había sufrido antes tenia ganas de devolverlo. Recogí el látigo y le propine un latigazo en su estomago. Mientras intentaba retorcerse le di en los huevos con los pinchos de la otra. Era como un efecto rebote. Doy en el estomago te intentas encoger pues toma carbón de mierda para que vuelvas a tu posición original.
Creo que hasta este momento que no pronuncie palabra, el no fue consciente de que yo estaba allí. Y ese fue el momento que mas me excito cuando descubrió que su princesita también podría participar en sus fantasías. Me sentí superior dominándolo de aquella manera .
Me senté en su cara, aprisionándole bien para que sintiera quien dominaba en ese momento. Mientras que las dos nos fumábamos un cigarro, haciendo referencia a la situación, riéndonos como locas de aquello.
El seguía inmóvil. Enganche una cadena desde su cuello a sus huevos presionándoles su cara se estremecía y yo me excitaba cada vez. Tenia mi coño empapadísimo. Hice que se colocara de rodillas frente a mi, y metí un tacón en boca, sin mediar mas palabra. Chupa… hasta adentro y le clave el tacón lo mas profundamente en su garganta que pude.
Le tire de su collar hacia arriba y cuando estuvo a la altura de mi coño, me mee en su cara haciéndole tragar todo el líquido amarillo. Te gusta verdad bébetelo todo, llevo todo el día guardándolo para ti. Y así lo hizo sin resistir hasta la última gota. De vez en cuando intentaba levantar la cabeza como queriendo decir algo, pero no le dejaba la cabeza gacha mientras que lo mande. Asintió con la cabeza.
Mientras María, ya estaba manos a la obra. Mientras el seguía bebiendo y chupando mi coño como un autentico poseso, ella había sacado del maletín un artilugio que le metió por el culo del tirón. El grito fue espeluznante, apretó una especie de pinzas y pude ver como le abría el culo. Metiéndole la parte de atrás de la vela, a este perro quiero verle la colita colgando. Jejejejejej se río María.- Tiene el rabito de los perrillos acojonados. La vela estaba encendía y la cera que vertía, le caía chorreándole los huevos. Mientras seguía lamiéndole el clítoris como nunca lo había echo, así llegue a mi primer orgasmo. María también se dio cuenta y digo.- Así dale placeres y satisdaciones a tu señora. No lo olvides solo estarás para darla placer.
María apago la vela del culo, pero la dejo dentro y acto seguido me tendió la mano. Con sumo cuidado y delicadeza me sentó frente a la cama y se volvió para dirigirse a él. Le quito la mascara que llevaba. Y le digo aprende a tratar a una dama. Les diré que nunca nadie me acaricio ni me beso como aquella persona. Parecía dar estar dando una clase de modales, de estética y de cariño. Me acaricio, lamió y beso mis los pechos, lentamente mientras me acariciaba mi coño todavía húmedo de mi corrida. Me masturbo con un dedo primero y luego prácticamente con la mano entera, yo miraba a mi pareja , por un momento pensé que podría hacerle daño verme en aquella situación, nada más lejos de la realidad , se le veía disfrutar y así llegue a correrme. Retorciéndome y dando gritos como una autentica posesa.
Mi pareja seguía mirando la escena, sus ojos eran de sorpresa y admiración. Nunca me había oído gritar así, mientras el me follaba.
Me quede tendida sobre la cama, sólo unos minutos mientras ella me acariciaba el pelo y me susurro al oído, no princesa aquí no acaba esto y me puso a 4 patas. Se coloco detrás de mí y me ofreció su tremenda polla. Empezó a acariciarme con ella suavemente hasta que me la metió hasta lo mas hondo de mi. Los movimientos pasaran de ser lentos y suaves a ser salvajes, ardientes de deseo, hasta que las dos llegamos al orgasmo. María llamo a su perro y le agarro de la cabeza para que limpiara toda su corrida. Y lamió hasta que quedo limpia.
Yo continúe en la cama tendida estaba extenuada, de placer. Recuerdo que recogió sus cosas y me digo desde la puerta. Ahí te lo dejo cuando consideres que ha cumplido su castigo follale su asqueroso culo, para que no olvide a quien debe adorar.
Pero esta parte será en la dulce venganza dos.
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