Su mami me dió permiso
Cuando piensas que las cosas van bien y de repente se ponen mejor..
Por ahí a principios de 2020 salimos al cine con la banda de oficina, los amigos y amigas, incluida la protagonista de esta historia, Karla. Ella llego a la empresa buscando verga, pues uno de los compañeros en el desmadre ya había dicho que se la cogió en una peda de un cumpleaños, y se veía que le coqueteaba a un gerente de por ahí, bueno, mi oportunidad fue esa ida al cine, ella y yo tomábamos la misma ruta a casa, y en el camino cambiábamos información resultando tanta la confianza que ambos ya teníamos mas de un mes sin coger.
Karla sedienta de verga, me preguntó si quería ir con ella a sacudir la verga, le agarré una pierna y le dije que estábamos cerca de un motel, que nos bajáramos ahí, ella me dijo que su casa estaba disponible y acepté con la idea de ahorrarme lo del pago del motel.
En efecto, su departamento estaba disponible, pero no solo, en la recamara estaba la pequeña Arely, una niña de 10 años dormidita, la muchacha que la cuidaba se iba en cuanto Karla llegaba, pero ya eran como las 12 de la noche, la pequeña ya estaba dormida. Yo pensé que me la cogería en el sofá, cuál fue mi sorpresa cuando mientras nos besábamos me iba dirigiendo a la cama donde estaba la niña…
Yo: Karla no mames, se va a despertar la niña.
Karla: No se despierta, tiene el sueño bien pesado, mira:
En efecto, Karla sacudía a su hija, la movía de aquí para allá en la cama y la niña no despertaba, hasta le puso una canción de banda a todo volumen en el altavoz del celular y la niña en el séptimo sueño.
Hace falta describir a Karla, una señora joven, unos 28 años, era delgada sin llegar a flaca, pelo lacio y con lentes de estrella porno, buena pechuga con culito deseable, la cara muy bonita y de piel blanca, madre soltera por poco tiempo porque según sus historias tenía un galán en USA que estaba juntando dólares para que ella se fuera con el, ella siempre risueña con voz agradable, un poco de confianza con ella y lograbas notar que le gustaba coger con quien se dejara.
Su hija Arely, siempre que la vi, fue dormida, muy parecida a su madre, tenia el pelo muy largo a media espalda, pero lo mas resaltante para mi es su hermosa carita angelical y unos pequeños pies hermosos.
Karla se fue desnudando, la verdad estaba muy deseable, la ropa no dejaba imaginar el bonito cuerpo que tenía, ella me desnudó a mí, solo estaba encendida una lampara de media luz, estábamos en penumbras, no podía creer que íbamos a coger en la misma cama donde dormía su nena, ella no tenia nada de cuidado, se movía mucho, hablaba en voz alta, gemía cuando se la metía y su hija no despertaba, en efecto tenía el sueño más pesado del mundo, y así, después de recordar que ella ya se había operado para no tener mas hijos, le llené su panocha de leche, ella me dijo que le mamara sus tetas mientas se masturbaba, y así ella llegó a un orgasmo, pidiéndome rápidamente que le diera un poco más por su vagina.
Terminamos, la niña solo se movió una vez para cambiar de posición al dormir, mientras paso eso solo nos quedamos inmóviles, y nos reímos.
Así cogimos casualmente muchas noches, ya le había probado todos sus orificios a Karlita, ya era una adicta a mi verga, cuando nos cruzábamos en los pasillos del trabajo y no había nadie me agarraba la verga, si no yo le agarraba el culo, por ahí de abril ella me preguntó algo un día que nos quedamos solos a la hora de la comida.
Karla: Josué, ¿te cogería a una niña?
Claro que mi respuesta ya la saben, pero no podía ser tan directo.
Yo: hahahaa ¿Por qué preguntas?
Karla: Miras mucho a Arely cuando cogemos.
La verdad fue un descuido mío, si la veía mucho según yo cuidando que no me viera Karla, a veces la niña dormía bien abiertita y no podía dejar de ver entre sus piernas, imaginando a través de su ropa interior su panochita y su culito.
Yo: ¡¡Ora!! ¡Qué va! Imaginaciones tuyas, solo volteo de vez en cuando a verla para asegurarme que no se ha despertado.
Karla se me quedo viendo muy seria, pensé que se habían terminado mis días de coger con ella.
Karla: ¿Te gustaría tocarla?
Solo me quedaba ser sincero…
Yo: Tu niña esta muy linda, si no fuera contra la ley cualquier hombre desearía tocarla.
Karla: Y si te dejo tocarla ¿Lo harías?
Yo: Bajo tu consentimiento sí.
Karla: Al rato vamos a mi casa y te digo las condiciones, llega a las 11 y vemos.
No lo podía creer, rápidamente se me hacia agua la verga imaginando que tallaría mi verga en la panochita o culito de Arely, no pensé que ella me dejaría penetrarla.
Ya en su casa de noche, Karla había preparado todo, acostó a la niña desnuda, le dijo después de bañarla que se habían llevado su ropa para lavarla y debía dormir desnuda, Arely esta de ladito y Karla me dijo:
Karla: Te voy a cumplir una fantasía por que has sido muy bueno conmigo y me has ayudado mucho, pronto me marchare de la ciudad, ¿Cuándo?, no lo sé, pero será pronto. Puedes tocar a Arely donde quieras con tus manos, no le toques sus genitales con tu verga, no le puedes meter los dedos en la vagina, por su colita si quieres meterle un dedo adelante, si te quieres masturbar sobre ella y empaparla de semen también puedes hacerlo, puedes besarla y lamerle lo que quieras, si en el acto se despierta yo le tapare los ojos, tu sales del cuarto y yo veo que le invento, ¿de acuerdo?
Acepte inmediatamente, Karla sentaba al lado de Arely, la pequeña sin pelos en su panocha, la giré quedo boca arriba, le abrí sus piernas y estaba deseoso de mamar esa panochita, era increíble que la niña no despertara, me canse de mamar su panochita y besaba su boca muy despacio, sentía su respiración, a pesar de que su mami me dijo que no la tocara con la verga, le puse la verga en la boca y se la froté en los labios, la volví a poner de ladita y mi dedo índice con ayuda de salivita pudo entrar en su culito, era hermoso toda ella y la situación.
Con el dedo en su culito, con mi manos izquierda empecé a masturbarme, el morbo me provoco un orgasmo con mucha leche, la cual descargue en su cadera, saque mi dedo y embarre toda mi leche en sus nalgas y el área de su panochita, de ahí solo me dedique a acariciar su cabecita hasta que mi verga quedó flácida.
Pude disfrutar a la niña sin penetrarla, eso era nuevo para mí.
Así cogimos varias veces mas con Karla, la regla era que para poder manosear a Arely primero debía cogerme bien a Karlita, hacerla tener su orgasmo para acceder a la pequeña Arely, nada difícil, fueron como 6 noches que pude cogerme a la mami y manosear a la niña.
Me encantaba poner a la niña de ladito, llenar mi verga de lubricante, meter mi verga entre sus piernas sin penetrarla y ver como por enfrente se asomaba mi verga y por ese lado estaba Karla esperando mi leche, hacia mete y saca en el cuerpecito de Arely quien a pesar de todo el movimiento no despertaba y la verdad a esa altura ya no me preocupaba tanto por eso.
Así, haciendo fricción de mi verga entre las piernas de la niña, le decía a Karla cuando me iba a venir, ella del otro lado metía la cabeza de mi verga en su boca y ahí soltaba la leche, sin duda de las mejores noches de mi vida.
Karla y Arely, partieron a mediados de año, yo las acompañé al aeropuerto y les ayudé con sus cosas, fue cuando vi a Arely despierta y sonriente, una hermosura de niña que siempre tendré en mi mente con su carita llena de mi leche y dormida.
orale que rica experiencia me gujsdtó
Alguna de las ventajas inesperadas de las mamitas solteras amigo, 100% recomendables.
Qué rico relato!