Su mujer lo domina y yo domino a ambos ese es nuestro juego
La vida te lleva por lugares insospechados, tengo 37 años divorciado hace mas de dos años, nunca he sido ni soy un «mujeriego» soy un hombre normal, con una vida que he llevado normal, y que nunca esperé ni soñé con llevar una vida sexual digamos no muy normal, sin embargo ahora, siento un gran placer un inmenso placer, sexualmente, llevando la vida que llevo.
No fue de golpe ni un contacto, todo se fue fraguando poco a poco, sin esperarlo sin saberlo, mi compañero de trabajo tiene actualmente 49 años, no diré en que trabajamos, nos conocemos hace 6 años y aún yo casado ambas parejas habiamos compartido muchas salidas de fiesta e incluso fines de semanas de viajes juntos siempre claro sin nada sexual en medio.
Mi compañero a pesar de todo siempre tuvo conversaciones de sexo conmigo, pero guardando una cierta distancia claro.
Tras mi divorcio, nuestra relación se hizo mas asidua mas intima, siendo ambos un apoyo para mi, ella su mujer, la llamaré Eli, es una mujer alta como yo, rubia algo «rellenita», todo empezó casi sin darme cuenta, su marido, poco a poco y cada vez mas asiduamente en el trabajo ambos horas y horas solos tocaba mas y mas el tema sexual, sobretodo haciendome preguntas de porque no buscaba otra o si tenia algún «plan», a ir pasando a temas más intimos, asi lentamente mes tras mes, hasta que empezó a hablarme de los club de intercambios, que habían ido dos veces, pero solo para ver como era, por curiosidad, a la vez que me propuso ir la proxima vez con ellos y ver como era aquel ambiente, simplemente tomar una copa como en un bar y marcharnos cuando quisieramos como habian hecho ellos ambas veces.
Acepté, era un jueves ambos estabamos libre el viernes y sábado, era el mes de mayo, efectivamente fuimos y era como entrar en un pub, las instalaciones eran distintas claro pero esa parte era como un pub, allí nos sentamos esta casi desierto, apenas tres parejas más, todas de edad mayor que nosotros, era temprano apenas las nueve de la noche, Eli iba con un vestido bastante «apretado», su escote apenas podía retener sus tetas, algo que er poco usual vistiera ella así, fue lo primero que me llamó la atención cuando me recogieron en su coche, sus muslo sobresalian el vestido mas corto de normal, a veces le veía el final de la medía, me excita verlo, nos sentamos el tema fue declinando en el sexo, cada vez mas y mas hasta ser el unico tema, sin yo saberlo habian escogido bien el lugar, realmente estaba excitado, por otra parte la clientela no subió, todo siguió semidesierto sin ambiente ese día, cuando tras bebernos la primera copa, me propusieron bañarnos en el yacuzzi, accedí, fuimos y quedamos desnudos los tres, por primera vez vi desnuda a Eli, tal como habia imaginado era toda una «jaca», grandes tetas, gran culo y unos labios gruesos, apenas la vi, rapidamente se metió en el yacuzzy frente a mi, su marido tras ella no pude evitar mirar su polla, estaba pequeña muy pequeña, yo no soy super dotado, me mide 19 muy gruesa, claro que en esos momentos no estaba empalmado pero la tenia eso si morcillona y cuando la vi a ella bajo el agua mi polla reaccionó aunque lo disimulaba y no pensaba que ocurriera nada con ella claro esta.
En el yacuzzy todo cambió incluso la conversación, pero sobretodo como ella empezó poco a poco a dirigirse a mi compañero, cada vez mas mandona, mas dominante y como este se plegaba a sus ordenes, empecé a darme cuenta que era como «un juego» sexual, la risa de ella pero él no reia, pero todo se iba disimulando incluso yo que parecia no darme por aludido no verlo, hasta que conversando él le dijo.
– A ti lo que te gustaría es una buena polla
Quedé interiormente paralizado, como pensando se había pasado cierto «limite» una linea roja, ella le contestó.
– Y tu ser un buen cornudo sumiso, sigues siendo muy desobediente
Pero lo importante fue lo que siguió, era como si yo no estuviera en ese momento como si no existiera, ella a su lado se volvió y ante mi, lo hizo para que lo viera perfectamente, le dió a mi compañero a su marido una hostia que resonó en el pequeño y solitario recinto, mi impresión instantanea era se habia acabado todo nos ibamos de allí pero sin pausa ella se levantó, lo agarró del pelo y le dio una segunda hostia aun mas fuerte y certera a la vez que le dijo.
– Vas a estar callado y obediente a partir de ahora.
No se escuchaba nada durante segundos yo estaba sorprendido inquieto, incluso me parecia que no eran ellos, a su vez ella se volvio a agachar y así se acercó hasta quedar a mi lado, no sabía que hacer que decir, ella junto a mi mi hombro rosando el mio, en mi lateral, me dijo pero mirando hacia él.
– ¿Te gusta ver a tu amigo?, asi es en realidad, ves obediente sumiso, esta deseando que un «macho» de verdad se le imponga lo domine, se haga «dueño» de todo lo suyo, es su sueño.
Para mi era como que allí no estaba mi compañero y su mujer, eran otras personas, no se explicarlo, pero no negaré, que la polla se me puso durisima, aunque no sabía que hacer que decir, como reaccionar seguia alli quieto observando callado pero simplemente porque no sabia que decir, pero ella siguió llevando la voz cantante y ahora sin titubear sin yo verla bajo el agua llevó su mano a mi verga la agarró al verla dura a la vez vi que eso la hizo aún estar mas segura, uuufff que sensación sentir su mano simplemente tenia cogida mi verga mas bien fuerte que suave, nada mas sin mover la mano, a la vez que le dijo a él.
– Levantate nos vamos de aquí busca una buena habitación.
Se giró y buscó mis labiós la besé, la besé con ansias, sentí sus tetas pegarse a mi pecho, me la hubiera follado allí mismo pero ella no buscaba eso aún, tras el largo beso, se levantó me invitó a levantarme fuimos al vestuarió, volvió a vestirse como ya habia hecho su marido, los imité, ella me cogió de la mano él delante salimos de allí, él buscó una habitación la cama enorme espejos en la pared y techo, entramos ella esta vez quedó con la lencería yo desnudo él tambien fui a besarla ella lo hizo pero suavemente, me apartó y me dijo
– No seas impaciente quiero que antes veas algo.
Le amarró las manos a mi compañero con su propio slip ella en bragas sujetador lo puso inclinado de pie sobre la cama, empezó a azotarlo con su mano las nalgas, con todas sus fuerzas mi compañero gruñia de dolor sus nalgas iban enrojeciendose, desde atras le cogió su sexo incluido los huevos tiraba de ellos, el gritaba con la otra mano le pegaba en la nalga, le decía que lo iba por fin a hacer un cabrón, lo hizo levantarse, ahora si tiró de mi mano me levanté de la unica silla que habia en la habitación me puso junto a él, se arrodilló y agarró con su boca mi polla empezó a chuparla ante él, yo iba a explotar de placer, pero paró rapidamente, se levantó cogió con su mano la polla de su marido antes miré vi su polla estaba empalmada pero era pequeña bastante pequeña, ella tiró cada vez con mas fuerza, a la vez que le decía
– un perro cornudo como tu no tiene que empalmarse solo cuando yo te lo diga, al fin vas a ser un buen perro cabrón que rica esta la verga de tu amigo
El gritaba de dolor a mi me habia indicado me sentara de nuevo lo hizo estaba que iba a reventar jamas me habia planteado nada ni parecido en el sexo y sin embargo esto me tenía que realmente tenia hasta ganas de masturbarme al ella no terminar el trabajo pues iba a reventar sentia mis sudor, me excitaba ver a mi compañero asi de esa manera, pero ella parecia no querer que terminara aquel momento, lo abofeteó de nuevo lo hizo tirarse al suelo lo pisoteó le dó patadas en su culo, siempre humillandolo de palabra, hasta que cogió mis slip, con sus manos lo olió, fue hacia mi y mas que perdirme me ordenó.
– Mea aqui mea tu slip
Aquello simplemente lo hice no tenia ganas de mear pero me esforcé salio un pequeño y potente chorro justo a su mano y a mi slip, terminé en un segundo dos a lo sumo un simple chorro, ella levantó su mojada mano y ante mi se la lamio, fue hacia su marido arrodillado le hizo lamer su mano para despues meterle en la boca mi pequeño y meado slip, para ella fue como el sumum me levantó yo estaba excitadisimo pero mi cerebo a su vez me decia si ella intentaba pegarme como a su marido como reaccionaria, me equivoqué, ella a su vez se subió a la cama seguía en bragas en sujetador, se puso a cuatro patas volvio su cara mirandome me dijjo
– Pegame en el culo pegame fuerte
Empecé a azotar sus grandes nalgas claro que no le daba con fuerza pero ella empezó a exigirmelo
– Mas fuerte cariño por favor
Le daba mas fuerte pero ella seguia pidiendo mas
– Mas fuerte cariño no tengas miedo me gusta fuerte bien fuerte lo mas que puedas
Me inhibí, la combinación de todo terminó por yo quedar fuera de si,empecé a pegarle on todas mis fuerzas ella agritar de dolor pero a su vez a decir si si asi, hasta que ya solo gritaba de dolor, le bajé las bragas, hasta quitarselas ante mi sus nalgas totalmente desnudas rojas aun asi segui pegandole hasta que paré de golpe mis manos se aferraron a sus caderas meti mi polla lo mas rapidamente posible ella a su vez gritaba empecé a bombear con fuerza con salvajismo ella gritaba y gritaba su coño se empapaba chorreaba yo grñia apenas duré dos tres minutos pero fueron todo de gritos de placer, al fin me vacie en su coño pero mi polla apenas, bajo, estaba excitadisimo, ella igual se habia corrido con un salvajismo que jamas crei existiera en una mujer, mi polla la saqué pero ella lo que hizo fue revolverse yo estaba de pie en el suelo tal como la habia follado ella se sentó al borde cogió mi polla grande gruesa pero ahora caida la agarró pringosa con su mano se levantó sin soltarla hasta colocarla junto a la cara de su marido la paseo mi polla por su cara una y otra vez, lñe quitó el slip de a boca y ante mi sorpresa no protesté cuando le metió mi polla a mi compañero en su boca este a su vez la chupó y lo hizo sin asco con ansias, con ganas, a la vez ella empezó a decir.
– Asi cabrón comete la polla que se a follado a tu mujer, te gusta eh comerla chuparla tras haber estado en el coño de tu mujer siente el sabor e mi coño eh en su polla seguro que quieres hacerte una pajita con esa mierda de polla que tienes.
Mi polla se endurecia veia a mi compañero su cabeza su boca llena con mi polla chupandola con enormes ganas, empecé a quitarle el sujetador a ella a mi lado a comer sus tetas con mi boca, a chupar sus gordos pezones ella retiro la polla se arrodillo al lado del marido y me la comio justo a su lado, hasta que la retiré la puse en la cama y la hice montarse en mi, yo debajo comenzo cabalgando despació pero pronto, se desbocó, pronto comoenzo de nuevo a gritar, sin parar senti su coño contraerse dilatarse correrse en mi polla, apenas habia terminado de correrse cuando de nuevo empezó sin apenas segundos de descanso a gritar, yo a sentir de nuevo su coño suss contracciones,ella gritaba y gritaba, moviendose a un ritmo impresionante, aguante de nuevo sus embites, esta vez ella quedo sobre mi cara empezó a besarme en la boca yo sin sacarle la polla, la toque estaba mis huevos y alrededores lleno del jugo de su coño, ella se quitó, se puso tras su marido lo desató él seguia de rodillas sin hablar, ella le dijo.
– Te lo has ganado perro cabrón te vamos a dejarte hacer una pajita
Tiró de mi, hasta ella quedar a 4 patas en el suelo yo de rodillas tras ella y él viendonos a medio metro, me dijo la volviera a azotar, lo hice esta vez fuerte espaciado, tras ella su marido se tocaba su pequeña polla sin menearsela le pegué espaciado pero muy fuerte hasta que me agarré mi polla la paseé por el coño de ella a su vez ella dijo
– No me la metas aún quiero que el perro cabron vea como tu polla pasea por mi coño
El marido se puso a mi lado yo me puse algo de lado para que él viera bien como mi verga paseaba por el coño de su mujer ella a su vez se abrió mas de piernas y levantó su culo para que se viera mejor todo, ella suspiraba de plaer al pasar mi verga una y otra vez por su raja abriendoa pero sin metersela él se relamia sin dejar de mirar se la meneaba, le dí ante él un par de espaciados fuertes azotes ue la hizo gritar de dolor removerse y volver a levantar su culo para que se viera bien su raja, hasta que se la metí de un golpe en su mojadismo coño, ella grito ahora de gusto él comenzo a menearsela ritmicamente ya y yo a darle a ella, el perro se corrió echando su leche en su propia mano, apenas un minuto despues, de todo, ella empezó a gritar a menear su culo en mi polla, sentí como se corria y esta vez me dejé llevar me iba a correr tras haberse corrido ella empecé a jadear ella de un golpe se apartó y ante mi sorpresa me vi su boca en mi polla en instantes, chupando y chupando su mano agarando mi verga empecé a gritar a correrme ella a recibir en su boca mi leche, hasta que cayó la ultima gota entre mis gritos, se la bebió toda.
Nos vestimos, Aun no era ni la una de la mañana, tras ducharnos allí volvimos al pub, yo iba como en un sueño como si todo lo ocurrido no hubiera sido real, de nuevo nos sentamos, ahora solo habia otra pareja lejana y nosotros tres, esta vez sentados en un lugar mas oscuro tras pedir las copas, de nuevo ella tomo la voz cantante y al escucharla fue como confirmar que todo habia sido real no un sueño.
– Te a gustado eh, a mi me a gustado muchisimo mas aun de lo que esperaba.
– Si la verdad a sido increible
Ella parecia esperar mi respuesta para hacer eso el ofrecimiento asi directa sin tapujos
– Pues si quieres nos lo podemos montar los tres,él – dirigiendose a mi compañero – sera nuestro esclavo nuestro perro y a la vez yo sere tu perrita solo me tendras tu, el cabrón no me follará nunca si tu quieres, este chochito si quieres sera solo para ti y él cabron esta de acuerdo, es lo que quiere obedecer, siempre me has gustado y me encanta tu polla me gusta pensar que mi chochito pertenece a tu polla, quieres este juego.
– Si
Bebimos la copa volvimos arriba volvio a azotar a su marido y esta vez yo tambien le di algunos azotes, empecé a aprender a humillarlo, la puse a chuparme la polla justo en la cara de su marido, hasta que me la puso dura le hice que con sus dedos abriera el coño de su esposa para yo meterle mi polla, él tenia prohibido hablar, solo obedecer, me la folle de nuevo esta vez un polvo largo que hizo que su esposa se corriese dos veces, la hice montarse encima mia dandome la espalda y él junto a nosotros de rodilla le hice colocar su mano en la base de mi verga mientras su esposa se movia motiendose mi verga su mano tocaba sus nalgas cuando bajaba y veia bien como mi verga estaba metida en el coño de su mujer, volvi a hacerla comer mi polla a la vez que él le acariciaba la cara mientras ella comia mi polla le indiqué por primera vez que se pajeara y se corriera mientras me follaba a su esposa a su lado, obedeciendo, hasta que finalmente me corrí en la cara de los dos.
Quedé solo en casa avanzada bastante la madrugada, incapaz de dormir a pesar de estar muy cansado por un lado me excitaba por otro me sentia culpable, como si hubiera hecho algo que etaba prohibido, me parecia que al otro dia nos llamariamos y como si nada hubiera pasado o me dirian que todo fue un error o yo a ellos, no se no era normal, hacer esto.
Me levanté temprano, estaba tan nervioso como me acosté, ahora en frio imaginaba a mi compañero comiendome la verga y era como si quisiera no hubiera ocurrido aunque me gustó pero tenia un enorme complejo de culpabilidad, a las once recibí un wasap de él preguntando si estaba despierto contesté que sí, me llamó pero era ella Eli quien me habló
– Hola guapo, quieres que comamos fuera los tres
Acepté, cuando los esperaba me recogieran estaba muy nervioso incluso mas que la noche, no se como reaccionarian no se que me esperaba, ellos llegaron como si no hubiera ocurrido nada, yo terminé por hacer igual, pero eso si solo en las miradas al sentarnos en el bar eso delataba como ella me miraba o yo a ella, terminamos la comida el postre la charla como siempre de los mismos temas, hasta que nos fuimos al coche, alli sin yo decir nada vi que todo cambió de nuevo, ella se sentaba detras conmigo en el coche y él hacia de chofer para nosotros por orden de ella, fuimos a un pueblo a merendar fuera de la ciudad a unos 40 kilometros, alli ante mi sorpresa al principio ella se mostraba como si yo fuera su marido y él el invitado ella me besaba en el bar me cogia de la mano o me tocaba mientras que él simplemente obedecia, finalemnte terminamos en mi apartamento, de nuevo follando como leones, asi hemos seguido esta historia hasta hoy, claro que mas depurada con los meses, donde yo he ido aprendiendo a dominar al perro a saberlo satisfacer como a dominar a la perra y satisfacerla siendo él el perro de ambos y ella mi perra privada, solo yo la monto, solo yo tengo los derechos sobre ella, ese es nuestro juego.
Si quereis puedo relataros alguna aventura que hemos vivido los tres si os a gustado este, gracias
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!