The Futa Baby _ 03

Tras una larga travesía y una noche de pasión, la hermosa familia de rubios pervertidos llega a otro hotel a encontrarse con sus primos y sus sobrinos, más una trabajadora ávida de sexo, hay incesto, orgías y defloración no hay futanaris por ahora..

Pasan las horas de sexo sin control en este hotel desconocido, los cachondos amantes filiales se despiertan agradeciendo al día su voluntad de seguir aquí, se cambian rápidamente para proseguir con la ruta señalada, la mujer ordena a su hija a ponerse un vestido que se abre de lado mientras los varones se apresuran a conseguir todo lo necesario para el viaje, incluyendo el hermano mayor, caminan madre e hija hacia la recepción, el muchacho adormilado las recibe y abre los ojos sobremanera al ver a la hembra con su joven hija, la primera con un polo que resalta las enormes tetas y la menor con un vestido-toalla que si pasa un huracán seguro destroza. Pide la madura al chico su dispositivo último modelo, él accede y le entrega lo pedido, la mamá se encierra con la niña en un cuarto secreto, pasan cuatro minutos y salen, el muchacho mira estupefacto cómo la madre le entrega lo pedido, la niña saca la lengua algo sexy, el chico tiene una repentina erección que sabe de algún modo no podrá satisfacer con las carnes de dichas señoritas, madre e hija se retiran y llaman a sus familiares que salen corriendo y les dan el encuentro, un papá y sus dos hijos, apareció el mayor. El chico mira su aparato y ve un mensaje dejado desde un dispositivo encriptado, abre la carpeta, le piden crear una contraseña, él lo hace, ahora mira su interior, se escandaliza, se excita, eran fotos antiguas de una niña menor a la hija, con una enorme verga en su vagina, el chico no puede creer lo que está mirando, corrobora que no está siendo recordado por los dispositivos del edificio y mira un par de páginas más, una foto claramente reciente de una mujer y su joven hija abriendo sus ropas y mostrando una las tetas masivas y la otra todo su cuerpo en crecimiento ante la cámara. Agradece el chico el pago del mejor pack alguna vez hecho, mira de nuevo lo consumido por esta familia en una noche y llega a la conclusión que sería excesivo si lo hubiese pagado por la prostituta que estudiaba con él en el colegio y que vendía sus fotos con el director y con el supervisor, pero ahora que lo ve bien, no habían consumido comidas, ni bebidas, ni cosas de cargo, solo unos tragos simples en la piscina pero nada más, era pagable, nada que no pudiera desarrollar con trabajo duro y esfuerzo sobrehumano.

VIVIANE. Recuerden que tienen que apresurarse, sus tíos llegarán al punto en cualquier momento y no podemos hacerles un desplante mayor, ya lo hicimos por culpa de cierta personita la vez pasada.

RAMONCÍN. Yo no tengo la culpa, tenía cuatro años, yo no sabía que había que hacer ciertas cosas, yo solo quería ir al baño.

LUIS. Tranquilo hijo, todos ya sabemos que no fue tu culpa, pero ahora sí tenemos que apurarnos.

JAQUELINE. ¿Y por qué él recién llega? ¿Dónde estaba?

VIVIANE. Verdad, hijo, dónde estabas?

RENATO. Yo estaba ocupado, pero aquí vine, ¿no?

LUIS. ¿Mucha actividad por tu lado hijo?

RENATO. Sí, mucha, papá, mamá, creo que los haré abuelos.

VIVIANE. ¿Otra vez?

LUIS. Ese es mi hijo, ¿cuántos años tiene?

RENATO. Los suficientes para poder tener hijos de esta verga.

JAQUELINE. Guárdatela, no te voy a chupar hoy día, tonto.

VIVIANE. Hijo, todos te chuparíamos ese güevo pero ahorita tenemos que manejar, por favor, no nos distraigas.

RENATO. Sí, ya sé ma voy a ser más “responsable”.

VIVIANE. Gracias, te amo.

LUIS. Los amamos hijos, ahora cuidado que voy a acelerar.

La familia incestuosa se retira del lugar y procede a realizar su viaje hasta el segundo punto de este amplio trayecto, los niños duermen las horas que les faltan tras toda la noche de cansancio, tras la orgía de los cuatro y la noche de pasión del mayor de los hermanos ahora se hacía necesario entender cómo es que iban a pagar la siguiente estancia, tendrían que hacer alguna maniobra parecida, ofrecerse o tal vez jugar algunos juegos divertidos con los muchachos hambrientos y deseosos de sexo que aparezcan por allí, hay suficientes, hay varios. La mujer mira hacia atrás y corrobora que sus hijos descansan, así es mejor, se mira un poco en el espejo del auto, se encuentra hermosa como siempre, ella era realmente bellísima, se sonríe, es guapísima y sin duda va a impresionar a todos aquellos con los que se encuentre ya sean familiares o sean los desconocidos amantes que se encuentren por el camino, piensa un poco en su actuar y se ríe, mira a su hija con vestido extraño que atrajo la mirada de bobo del chico recepcionista que haría lo necesario por tener un poco de amor hetero en su historial de conquistas pasionales y verificables. Revisa mientras tanto el muchachito todas las fotos recibidas y goza, saca su marmota y se pone a acariciarla viendo las carnes de madre e hija, ve aquí las fotos de una niña morena entre las multitudes, fotos de fiestas romanas con gente de diferentes edades y niveles educativos, ¿eso existía?, qué carajo, no le importaba y ya quería volver a encontrarse con una familia así, ya esperaba el momento para poder encontrarse con ellos de nuevo, poder gozar de esa manera, disfrutar de este material que guardaría con gran preocupación, tendría que cambiar la clave, tal vez retirarlas a otro dispositivo que no sea el del trabajo, se deleita y mueve la pinga, ahora los días serán más divertidos con este extraño material. Mientras tanto padres e hijos se embarcan en un viaje sin igual hacia su nuevo lugar, manejan toda la tarde y llegan hasta el siguiente punto en el mapa, los adultos ven a sus hijos, el mayor descansa y los otros duermen, una película fue suficiente para dejarlos noqueados, era impresionante, quién sabe si tendrán energías para los de esa noche, seguro las tendrían, son chicos, tendrían todas las ganas de follar con aquellos agujeros que se presentasen en el camino, serían épicos, de hecho se aguantarían el cansancio para actuar de inmediato. Aparcan el auto, uno extra estaba allí, reconocen de quién se trataba, era el tío de amplio mástil y eyaculaciones fuertes, Viviane se emociona, tendrá ese pervertido tipo el tiempo suficiente para atenderla a ella y no solo a su hijita, cómo saberlo, era un loquito, ansioso de follar agujeros jóvenes, tal vez esta madura rica ya no lo impresione lo suficiente, tendría que intentar alguna estrategia diferente, tal vez hacerlo primero eyacular sobre su útero antes que sobre la cara de su hija, eso podría funcionar. Se bajan los adultos a corroborar, sí era el auto, chico, probablemente ellos dos con sus dos hijos y las maletas, él y su esposa tenían una pareja, macho y hembra, tal vez estén por allí. El esposo marca a su primo y espera su confirmación, el degenerado debe estar por allí, ya lo debe atender más tarde, ingresan los padres, Viviane avanza, busca a su hermana entre toda la maroma, no hay recepcionista, qué raro, solo una chica molesta diciendo que adentro se encuentra la encargada, ¿dentro, dónde?, no importa, ella pide el nombre de la persona que están buscando y Viviane se lo da, la muchachita histérica mira el nombre y mira algo enojada o furiosa a la madre de familia, le indica dónde se encuentra “esa” familia.

VIVIANE. Yo me quedo, tú los buscas.

LUIS. Se ve muy molesta, creo que mejor tú buscas a los primos.

Acepta Viviane de mala gana y va, busca el número de la habitación y no tiene que ser adivina para entender el motivo del enojo de la chica, ella no había sido invitada al festín que se daba en dicha habitación, era una locura, habían cinco seres que bambolean sus carnes, sin preocuparse por ser vistos o escuchados, gozan sin algún control de otros, ajenos a que eran vistos y oídos por la madre de familia, para comenzar se puede ir contando que dos jóvenes penetran a la mujer del grupo, una mujer madura gordita y redondeada, esta recibe dos pollas, una por la boca y la otra estaba alternándose entre el ano y la vagina de la tipa, según quiera el joven follador, total libertad para los menores de edad. La polla más chica era recibida por la boca por la mujer adulta, amplias caderas y tetas masivas tras dar de mamar a tantos niños ahora se movían por la intensidad de la sesión, posiblemente algún despistado diría que uno de ellos era su sobrino y el otro su hijo, el que penetra anal o el que folla por la boca, cómo saberlo, si alguien viera de casualidad la escena, sin saber lo previo, puede decir que ambos sean hijos de otra madre o que sea esta la que los parió a ambos, cómo saberlo, quién tendría idea de los detalles exactos de estas personas y sus costumbres “raras”, a no ser que no estén actualizados con la genealogía de esta complicada gigante familia incestuosa. Al costado hay otras gentes, una pareja hermosa, una adolescente y un adulto, su propio padre, realizan las actividades normales de esta familia, la niña intenta aguantar la enorme polla del sujeto, es monstruosa, penetra hasta el fondo, le es complicado, ni siquiera un tercio puede ingresar pero el hombre hace todos los intentos posibles, empuja, blanqueando los ojos ante la intensa presión que su vagina realiza, no va a aguantar demasiado. Bufa, es intenso, el hombre ve a su hijita echada boca arriba en el piso, con las piernas completamente abiertas, mostrando su sexo estirado en forma antinatural ante semejante barra de carne, los gritos de los más jóvenes penetrando a la mujer madura convencen a las otra pareja de seguir con el folleteo. Agarra más fuerte las caderas de su hija, empala el miembro mientras ella suelta una lágrima en su mejilla, era demasiado grande, el tipo quería introducirla sin haberle lamido apropiadamente el sexo, a veces pasaba la lengua sobre un clítoris cada vez más hinchado, a veces la besaba asfixiándola, quitándole el aire que tiene que respirar, pero ahora no era el caso. Su papá había intentado penetrarla de frente, la chica no iba a resistir demasiado, escucha el sonido de la garganta de la madura gordita siendo llenada épicamente por dos niños, bueno, por su propio hijo adolescente y un niño de otra persona, al menos ellos no son tan bruscos, ella voltea y mira a su papá, no parece él, es otra persona, se ha convertido de un año a otro en un vil ser incestuoso que solo quiere follar con su chiquita. Ahora lo sabe, su papá es un enfermo, nada que ver con aquellos conservadores que habitan en otra de las casas de este pueblo insignificante, no, él se había obsesionado con su hija, le pedía que le chupara el miembro a cada momento, la acosaba para que ella bebiera su esperma como si de un vaso de leche se tratara, la perseguía, la hacía acercarse hacia él a cada momento, su esposa había perdido importancia, ella tenía al adolescente y a los otros niños para ella sola o tal vez para otros más, la jovencita se había vuelto la favorita de este hombre, este padre de familia enfermo.

Ahora no solo eran los jóvenes con la mujer madura, o el padre con su hija, al otro lado estaba otra persona, una adulta con muchas ganas de hacer sus labores, una mujer ansiosa por unirse a la fiesta y preguntarle a su familiar hombre quién era esa señora y ese niño y qué tenían que ver con la muchacha que afuera está condenada a desviar a aquellos que quieren usar las instalaciones de este respetable establecimiento. No importa, Viviane quería volver con sus hijos, hacer algo divertido, en todo caso tenía ganas de hacer las cosas que fueran necesarias para entrar, tal vez desnudarse y unirse a la fiesta, esta mujer de $^ años quería tener sexo duro, sí, esa podría ser una interesante opción, envía un mensaje a su esposo para que se presente cuando él quisiera, que ya sabía dónde es que iban a pasar esta segunda noche de viaje, allí los cinco más los uno, dos, no importa, una orgía sería entonces esta linda noche. Disfruta de lo visto y cierra a medias la puerta, comenzando a sacarse toda la ropa, es paciente, quiere algo de atención, no es que no la tenga siempre tiene algo de esto, pero en estas vacaciones de sexo sin control todos los días tenía que dedicarse y hacer algo con respecto a su calentura monumental, algo debía hacer para divertirse según los mejores estándares, había decidido unirse a esta pequeña fiesta casera en la habitación de un hotel. Siguen con lo suyo los amigos por allá, ella se quita toda la ropa y se coloca detrás de los hombres penetradores, el adulto y el adolescente, los jovencitos siguen follando con la madura, el papá sigue intentando partir las paredes vaginales de su pequeñita, Viviane se pellizca los pezones, ahora sí completamente desnuda, el olor de su sexo se siente en el ambiente el primo nota las tetas de su familiar, voltea distrayéndose momentáneamente de su nena, saluda a la prima y le pregunta dónde está su marido, ella le dice que ya llega y él se deleita mirando con determinación el cuerpo desnudo y llamativo de la mujer madura. Ella mira el enorme falo de su primo y entiende bien los gritos de la niña, se estaba intentando acostumbrar a una polla monstruosa, descomunal, una gigantesca bestia que le habría hecho daño a una chica normal, pero a una de esta familia con la follada diaria que se mandan los pedófilos incestuosos, mojando los sillones, los pisos, las mayólicas, las alfombras, los cojines, sillones, sábanas, muebles, colchones, cubiertos, platos, mesas y sillas, no, ella está bien. Gran esfuerzo debían hacer los varones, pues sus pesados huevos se habían acostumbrado a la constante jodienda, siempre estaban soltando esperma en todas partes de sus respectivas casas, era una actividad fuerte y necesaria, era una actividad diaria, sea hecha en las habitaciones o en las áreas comunes de estas casas, la unión de los cuerpos en estos hogares llenos de pecado era una actividad constante, nadie se salvaba de estas actividades insanas, dedicando parte de la energía diaria para practicar las antiguas artes del placer, produciendo fluidos sexuales de forma constante y sudor a cada vez menor ritmo. Las damas también debían estar acostumbradas al sexo, habían varios varones en la casa y alguna de ellas sería elegida para ser la compañera por lo menos durante ese día de un varón, cualquiera sea su edad, o de una mujer, seguramente de las mayores que quería experimentar con la lengua joven de una recién bañada en abundante, espeso y sabroso esperma que alguno de los varones le otorgó copiosamente hace poco tiempo.

Así era en este lugar, un sitio lleno de perversión donde los más pequeños estaban imbuidos en el sexo, podría decirse que es muy semejante a lo que cuentan algunos que se jactan de actividades que no suelen hacer, pero estos pervertidos, eran únicos, hacían de las suyas y no perdían oportunidad para hacer prácticas nuevas y positivas para su placer carnal depravado. Se divierten, Viviane se coloca detrás de su sobrino y besa su cuello, el chico siente las tetas gigantes presionando su espalda y pone una mano en el culo de la madura gordita y otro en las caderas de la mujer que acaba de llegar, tiene las dos manos ocupadas, arquea el cuello permitiendo a Viviane besarlo a gusto e impulsar las caderas de su sobrino que no pierde el tiempo e incrementa la velocidad de la follada, era como si la madura penetrara a la gordita a través del adolescente de pelo claro, la madura robusta grita ante la potente invasión de carne. La recién llegada mira al niño que penetra a su gordita, es el hijo de alguien, tal vez de esta nueva señora, se deleita sintiendo su mediano penecito entrando y saliendo de la boca de su propia madre, mirando las impresionantes tetas de la rubia que muerde el cuello del chico y agarra como si fuera un hombre las gordas nalgas de la señora de piel un poco más oscura. Impulsa el abnegado padre su miembro dentro de la inocente panocha de su chiquita, en su hogar no había intentado hacer algo tan impulsivo pese a que también es un lugar de placeres carnales de diferentes gustos y orientaciones, pero aquí en este hotel, viendo a la encargada follar con su familiar y con su hijo adolescente sentía la necesidad de penetrar cada vez más fuerte y dilatar la chochita de su pequeña hijita, la niña más linda de su salón, ahora víctima de un pene extremo que sería capaz de partirla por la mitad, una bestialidad que el padre guardaba para su boca ahora invade su interior como si ella fuera una adolescente más madura. No tiene sentido, esta extraña actitud de su padre, la diferencia del trato con ella respecto previas folladas era distinto, ahora el sujeto había perdido la cabeza, intentaba meter algo más de diez centímetros dentro de la vagina de la niña que comienza a gritar cada vez que él intenta meter una pulgada extra dentro de su interior, boqueaba ante la bestialidad, se sujetaba a sus manos que tocaban su cuerpecito, gritaba ahogando los gemidos de la gordita que era atendida por su hijo, un cliente y una señora que acaba de venir de improviso. Todos follaban en este lugar, la casa de la lujuria y la perdición, era un todos contra todos brutal, ella sabía por buena fuente que su mamá y su tía habían sido penetradas desde muy jóvenes por las gruesas morcillas de sus padres, sabía en parte que este momento vendría sí o sí, pero el que sucediera ahorita era algo impresionante para ella, se aferraba a las manazos de su progenitor que tocaba morbosamente el cuerpo en amplio crecimiento de su hijita. La bestia seguía introduciéndose, dilatando las paredes de su vagina, si seguía así quedaría como la amiguita de su hermano que terminó con el ano completamente dilatado una vez que el niño le clavó sus 20 centímetros cuando la morena era solo una niñita, eran movimientos espectaculares, todavía recuerda a la pequeña caminando y quejándose de la bestialidad de su amigo, un muchachito de baja estatura y gigantesca morcilla. Ahora ella tendría dificultades para caminar, sentarse, pararse, tendría que acostumbrarse a la follada continua ahora no solo por su boca, sino también por la vagina que su progenitor ahora iba a estrenar, se aguanta, la morcilla abre sus paredes, no puede hacer otra cosa que gritar y dar alaridos quejándose antes de todo el placer que iba a recibir, una vez que logre hacerse con la mala costumbre de tener semejante boa dentro de su inocente panocha desprovista de pelos y ansiosa de sexo.

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