UN INTERCAMBIO EN FAMILIA 2
Tal como les narré en la parte uno de mi relato desde ese primer día que disfrutamos del sexo en familia en la casa de campo, viviendo momentos inolvidables gracias a la creatividad de todos, hasta allí llego mi historia en ese momento.
Tal como les narré en la parte uno de mi relato desde ese primer día que disfrutamos del sexo en familia en la casa de campo, viviendo momentos inolvidables gracias a la creatividad de todos, hasta allí llego mi historia en ese momento, pero como les prometí, si había algo nuevo que valiera la pena continuaría contándoles las novedades que fueran de interés que pudieran acontecer.
Pues bien, creo que les puede interesar lo sucedido recientemente cuando fue preciso ir a la casa de campo a que efectuaran unos reparaciones urgentes en la piscina y como mi padre no pudo ir por razones de trabajo, mi madre me pidió el favor que la acompañara. En principio iríamos a revisar la obra y regresaríamos a la capital en la noche.
El día comenzó normal fuimos a la casa de campo se hicieron los acuerdos con la persona que adelantaría la obra y en la tarde regresaríamos. Al llegar el medio día fuimos al pueblo a almorzar y estando allí sentados esperando que nos atendieran llego una pareja de amigos de mi mis padres, Simón y Camila, que venían de un paseo y se detuvieron también a almorzar. Al vernos se acercaron a saludar y mi madre los invito a sentarse con nosotros. Ellos mostraron mucho agrado por el encuentro en especial Simón que no paraba de adular a mi madre y en medio de la conversación inicial el pregunto si ya habíamos hecho el pedido, les contamos que apenas habíamos llegado y estábamos esperando al joven que nos atendiera. Simón dijo… Si me permiten esta ocasión es muy especial y llamando al mesero le pidió traer cuatro copas y una botella de vino.
Apenas llego el pedido comenzamos a beber y a conversar cosas triviales pero siempre con muy buen humor riendo todo el tiempo. Bebimos toda la botella, apenas fueron dos copas para cada uno, pero lo necesario para animar la reunión. Después vino el pedido de la comida y Simón solicito otra botella de vino para acompañar el almuerzo.
Todo era normal hasta que por un descuido se me cayó al piso el tenedor y al agacharme a recogerlo me impacto ver como Simón tenía su mano en la pierna de mi madre y aprovechando que ella tenía falda su mano ya estaba bastante más arriba de la rodilla de ella. Mi movimiento fue tan sorpresivo que ninguno de los dos hizo nada por separarse. En ese momento comprendí porque tanta adulación de Simón hacia mi madre, pero al mismo tiempo no vi ningún disgusto de parte de Camila así que mientras mi madre y Simón estaban en lo suyo yo me dedique a prestar toda mi atención a la esposa de Simón.
Una copa trajo otra y así se fue la tarde y llego la noche y el ambiente del lugar se fue animando con personas que llegaban a divertirse, había música y en una improvisada pista y la gente salía a bailar y dada la oportunidad Simón invito a mi madre a bailar y yo me quede con Camila.
Al llegar la noche mi madre le dijo a Simón que no era prudente después de beber tanto licor que tomaran carretera hasta la capital, mejor se quedaban en la casa de campo y viajaban al otro día y la aceptación no se hizo esperar.
Pero la fiesta no terminaría tan pronto, al llegar a la casa mi madre estaba tan alegre que saco una botella de vino y se la entrego a Simón para que la destapara y ella se fue a la cocina a traer las copas. Yo me quede sentado con Camila conversando y vi que Simón se fue también a la cocina y creí que iba por algo para cumplir su misión de destapar la botella, pero pasaron los minutos y ninguno de los dos regresaba e ingenuamente le propuse a Camila enseñarle la casa de campo y cuando íbamos por el pasillo escuche unos leves gemidos y al acercarnos a la habitación de huéspedes, que estaba entreabierta, vi que mi madre estaba acostada en la cama con las piernas separadas y sobre ella se encontraba Simón besando a mi madre apasionadamente. No supe que hacer por lo cual Camila también vio la escena y llevándose la mano a los labios, esgrimió una pequeña sonrisa y elevo los hombros como diciendo… Uphh que sorpresa, pero comprendí enseguida con ese gesto, que esto no era nada nuevo para ella y lo aceptaba.
Al verlos como ellos se iban excitando mutuamente, Camila y yo que no somos de piedra comenzamos a experimentar una sensación que sin decirnos ni una palabra empezamos con caricias terminando en un beso apasionado. Mientras esto sucedía entre nosotros al interior de la habitación Simón y mi madre se fueron desnudando y pronto empezaron a disfrutar del sexo oral y en este punto mi excitación era tanta que invite a Camila al altillo y allí nos fuimos denudando poco a poco hasta llegar a disfrutar del sexo oral tal como sucedía en el primer piso y luego vino la penetración de su concha rosada y los besos en los senos que la fueron excitando tanto a ella como a mí. Pero lo que más me motivo fueron los gemidos de mi madre que venían del primer piso y que fueron subiendo de tono al igual que algunas palabras sueltas como Vamos Simón dame, dame, mas fuerte, eso, eso, así, uhmmm que rico… y así sucesivamente. Por momentos ella bajaba el tono, pero luego regresaba con más energía. Esto hizo que sintiera una excitación enorme y deseos de explotar dentro de Camila pero tuve que aguantar hasta que percibí que ella había alcanzado su orgasmo y en ese momento deje toda mi carga dentro de ella quedándonos pegados por varios minutos hasta que mi verga flácida salió de su vagina.
Para ese momento en el primer piso todo estaba en calma, no supe cuando terminaron, el punto es que cuando baje con Camila ellos estaban en la cocina sirviendo el vino y cada uno tomo dos copas entregándonos a Camila y a mí una de ellas.
Comprendí en ese momento cuanta excitación me producía ver a mi madre follando con otro hombre y me propuse a que esa noche ella se acostara con Simón y yo con Camila y no fue difícil lograrlo, a la media noche ya habíamos consumido tanto licor que Simón tomando de la mano a mi madre nos dijo… nos vemos en la mañana y se fueron a la habitación. Esta vez los gemidos no se hicieron esperar motivando a Camila y a mí a disfrutar del sexo, comenzando allí mismo en la sala una vez baje la intensidad de la iluminación.
Camila como una diosa me dio una felación que falto poco para que explotara dentro de su boca, teniendo que detenerla y cambiar de posición para yo hacerle lo mismo a ella y empezar a escuchar sus gemidos que delataban su excitación.
Esta vez, no sé si mi madre y Simón por las copas que se habían tomado o porque tomaron confianza con nosotros sabiendo que estaríamos en lo mismo, los gemidos de mi madre y la expresiones de Simón no tenían control. Ella en medio de sus gemidos le decía… Que verga más grande tienes, pero me gusta y tú que concha mas deliciosa, me fascina y a continuación mas gemidos y exhalaciones. Cuando escuche a Simón decirle a mi madre… Date vuelta entendí que le follarìa el culo y el sonido de la cama algo llegaba hasta nosotros, y creo que Camila disfrutaba escuchar a su esposo follar con otra porque su excitación creció por momentos hasta que me dijo… vámonos a la habitación porque después que alcance el orgasmo voy a quedar fundida. Subimos a la habitación, ya desnudos, y ella se acostó, separo las piernas y me dijo… Soy tuya, hazme lo que quieras y de inmediato me subí sobre ella y con mucha facilidad la penetre gracias a su lubricada vagina y empezamos un mete y saca fabuloso que con las contracciones que ella hacía con los músculos de su sexo pronto alcanzamos un orgasmo y una corrida fenomenal.
Después de esto, tal y como dijo Camila quedamos fundidos desnudos hasta la mañana siguiente. Cuando desperté Camila no estaba y al bajar a la cocina y encontrarme con mi madre no vi a nadie más que ella y le pregunte… Y los invitados? Se fueron muy temprano tenían algo importante que hacer en la capital.
Me pegue a la espalda de mi madre y desnudo como estaba le puse mi verga en medio de sus nalgas y le pregunte… Y como te fue con Simón? Ella me dijo muy bien. Y agregue, te escuche decir en medio de tu excitación que Simón tiene una verga muy grande es cierto? Si es enorme jamás vi antes otra igual, me hizo disfrutar al límite. Qué bien, eso a mí me excito mucho, escucharte gemir y disfrutar del sexo con otro hombre fue lo máximo. Lo volverías a hacer? No sé, quien sabe si a tu padre le guste abrir el círculo de amigos que visitan mi vagina… y soltó una sentida carcajada. Le dije… él no se tiene que enterar, recuerda que yo soy tu cómplice para lo que quieras, si lo deseas dímelo y yo te ayudo a lograrlo. Ya veremos. Después de esto desayunamos y más tarde nos bañamos juntos disfrutando de besos y caricias que terminaron en su orgasmo y mi corrida en su culo. Espero le haya excitado mi relato tanto como mi nueva experiencia.
Estuvo excelente tu relato mr trajo a la memoria como intercambiamos pareja con mis suegros al año de yo casarme con su hija…ojala sigas subiendo mas relatos